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02

Jackson y Jihyo se ofrecieron a hacer el primer turno de vigilancia. Los demás fueron a descansar, repartiéndose entre los dormitorios, el salón y la sala de música.

Eunha entró en la habitación de los padres de los Park acompañada por Hoseok. Namjoon agarró a su mejor amigo antes de que cruzase la puerta.

—¿Podemos hablar?— preguntó en un tono sosegado.

El pelirrojo le miró sorprendido pero también dubitativo. La muchacha notó el largo e incómodo silencio que se hizo entre ellos.

—Me gustaría estar sola— le dijo al mayor —¿Puedes darme unos minutos?

Hoseok no supo qué contestar para escaquearse de la conversación. Ninguna de las excusas que se le ocurrían parecían coherentes.

—De acuerdo— respondió antes de cerrar la puerta por ella.

La luz de la vela era tenue pero suficientemente clara para permitirle a Namjoon estudiar cada una de las expresiones del pelirrojo.

—¿Me vas a decir qué pasó en el búnker?

Hoseok se apoyó resignado contra la pared. El chico no le miró a los ojos, tampoco alzó la vista del suelo. Sabía a ciencia cierta que Namjoon iría directo al grano y aunque había intentado crear una excusa perfecta con anterioridad, los nervios le impedían acordarse de ella.

—Hobi, nos conocemos de toda la vida— se acercó un poco —¿De verdad no vas a decírmelo?

—No hay nada que decir— murmuró —Creía que íbamos a morir y reaccioné sin pensar— Hoseok fue subiendo la vista por su torso paulatinamente. Cuando se encontró con su mirada penetrante, sintió un fuerte vuelco en el corazón. El joven no pudo sostenerla más de unos pocos segundos —Fue un error... Quise darte un beso en la mejilla y calculé mal. Me pudo la tensión... Estaba realmente asustado.

—¿Más asustado que ahora?

—¿C-Cómo?— mostró una sonrisa forzada —Ahora no estoy asustado.

Namjoon se aproximó tanto, que Hoseok se apretó aún más contra la pared.

—Me metiste la lengua, eso no se hace sin querer.

El mayor bajó la cabeza avergonzado.

—Dime la verdad— Namjoon le tomó de la barbilla, haciéndole alzar el rostro. Hoseok no pudo aguantar esa cercanía, los nervios le impedían mirarle a los ojos —Te conozco Hobi y sé cuando estás mintiendo.

—¿Me conoces?— repitió con voz temblorosa —¿En serio?— alzó la vista un poco dolido —¿Entonces por qué no te has dado cuenta? ¿Por qué no lo has visto en todos estos años?

—¿Años?— expresó con puro desconcierto —¿Desde cuándo...?

Hoseok le apartó la mano bruscamente; Namjoon se sorprendió por ese repentino cambio de actitud.

—Eunha me está esperando— dijo cortante.

—No hagas esto— pidió agitado —Vamos a hablarlo.

—Seungho hyung acaba de morir. No deberíamos estar hablando de... Deberíamos estar con ella— le miró disgustado —Hay cosas más importantes que tú y yo.

Namjoon no insistió, no después de oír esas palabras. El menor se quedó en el pasillo, observando conturbado cómo su mejor amigo desaparecía por la puerta.

Un fuerte sonido a su espalda lo sobresaltó de sobremanera.

—Lo siento, no quería asustarte— dijo Jimin entre la oscuridad —He ido a por un vaso de agua y se me ha apagado la vela.

Namjoon resopló aliviado. Su pulso se había disparado.

—¿Has venido hasta aquí a oscuras?— el mayor encendió la mecha de la vela del rubio con la suya —¿Eres un gato?

—No es complicado— sonrió —Conozco mi casa.

Ambos se miraron en silencio.

—Deberíamos dormir— sugirió Namjoon —Va a ser un viaje muy largo.

—Tienes razón— Jimin se dio la vuelta pero a los pocos pasos se detuvo —Hyung— se giró —También importa lo que sientes tú.

—Lo has oído, eh— metió la mano en un bolsillo —Es algo complicado.

—¿Más complicado que nuestro repentino parentesco?— su sonrisa se volvió traviesa —Entiendo a Hoseok hyung, yo también he estado en sus zapatos— Jimin alzó la vela con la intención de verle mejor —El miedo puede paralizarte.

—¿Y qué sugieres?— frunció el ceño —Porque estás a punto de darme un consejo, ¿verdad?

—¿Yo? ¿A ti? No, hyung— negó con la cabeza —Aunque si insistes, te diría que deberías averiguar qué sientes tú por él y si es lo mismo, dar el primer paso.

Namjoon bajó la mirada pensativo.

—Hoseok hyung me gusta mucho y sé que a ti también.

El mayor lo agarró de la nuca y le dio un abrazo muy fuerte.

—Tú decides qué quieres que sea para ti— Jimin apartó la vela lo mejor que pudo y se dejó achuchar —Pero no tardes o te lo quitarán. Recuerda que Sooyoung, Jihyo y Yerim están solteras y Hoseok hyung es un partidazo.

—Vete a dormir, primo— le despeinó suavemente —Tienes que descansar.

El rubio hizo caso y caminó hacia la habitación de su hermano.

—Te quiero— dijo segundos antes de desaparecer por la puerta.

Namjoon no tuvo tiempo de responder; el menor lo dejó con la palabra en la boca.

—Yo también te quiero— murmuró desde el pasillo.

En cuanto Jimin entró en el dormitorio, vio a Yoongi, Jungkook y Mellie durmiendo sobre la cama. Taehyung se encontraba al lado de la ventana, contemplando el cielo.

—¿Se han quedado dormidos?— susurró el mayor.

—Están agotados— contestó en voz baja —A mí en cambio me cuesta conciliar el sueño con todo lo que está pasando.

—Te entiendo— Jimin le ofreció su agua y Taehyung tomó un trago —Yo no dejo de darle vueltas a lo que dijo mi padre.

—¿Qué cosa?

—Que podía crear una cura— su mirada se desvió hacia la luna llena —No le creí pero, ¿y si era cierto? ¿Y si la hubiera podido crear de verdad?

Taehyung dejó el vaso sobre la cómoda. Su pulso se aceleró al recordar lo que vio en el laboratorio.

—En el hipotético caso de que hubiera logrado crear una cura, ¿para cuánta gente habría sido?— el menor miró a su mejor amigo —Piénsalo. El mundo que conocíamos ya no existe. No puedes llamar por teléfono para que te traigan suministros. Aunque tu padre hubiera logrado crear una cura, no habría forma de hacer tanta cantidad como para sanar a una ciudad o un país entero.

—Tiene sentido— se apoyó contra el cristal.

—Por ese mismo motivo no pudieron crear más vacunas— añadió —Además, Jongsuk no estaba tratando de encontrar una cura para ayudar a la humanidad, estaba buscando una manera de revertir la transformación de su esposa. ¿Y qué logró en todos estos meses? Nada— apretó el puño —No nos engañemos, MinMin. Si hubiera encontrado la fórmula, solo la habría usado en ella.

—Es verdad— su mirada se perdió por un instante —Ahora ya no tiene sentido darle vueltas. Habrá muerto en el búnker, como todos los demás.

Taehyung deslizó el brazo por la cintura de su amigo y lo apretó contra su cuerpo. El menor sabía que Jimin se sentía culpable por las vidas que había tomado su padre. La culpa le carcomía, de eso estaba seguro. Su actitud le recordaba a sí mismo, cuando creía ser el responsable de la muerte de sus padres.

«Si supieras lo que hacía en aquel laboratorio... Ese monstruo te habría diseccionado como hizo con su mejor amigo. Habría matado a cualquiera con tal de lograr su propósito» pensó asqueado.

—Toda la mierda que te ha pasado va a ser difícil de superar y no espero de ti que lo hagas en un par de días— le dijo al oído —Solo quiero que sepas que puedes contar conmigo. No estás solo. Si necesitas hablar, soy tu hombre.

—Gracias— Jimin le miró genuinamente —No voy a dejarme arrastrar por esto. No te preocupes. Voy a ser fuerte.

—Ya lo eres— bufó enérgicamente —De hecho, creo que mi hermano y yo estamos saliendo con el puto Indiana Jones.

—¿Cómo?— el mayor frunció el ceño.

—Pues porque tú sabes montar a caballo y disparar armas de fuego mientras que Jungkook tiene conocimientos de navegación y se convierte en Bruce Lee cuando le tocan los huevos. Bueno, menos cuando se los toco yo, ya me entiendes— matizó rápidamente.

—Eres muy exagerado— Jimin se tuvo que tapar la boca con la mano. No quería despertar a los demás con su risa.

—¿Tú crees?— arqueó una ceja —Porque yo pienso que vosotros dos sois una caja de sorpresas— le miró de arriba a abajo —¿Escondes algo más?— le tocó el pecho varias veces —¿Eh? ¿Eh?

Jimin negó con la cabeza. La gran expresividad de su amigo le estaba causando gracia.

—¿Sabes?— Taehyung se apoyó contra el cristal —Desde que encontré los documentos de la isla no dejo de pensar... El búnker no era un mal sitio, realmente podríamos haber vivido allí unos años. Si hubiera estado gobernado por personas decentes, habría sido un gran refugio, pero la isla es diferente.

—Estaríamos aislados del mundo. Si la diseñaron para sobrevivir al virus podría ser un hogar permanente.

—Exacto. Y en el caso de que esté deshabitada seguiríamos estando a salvo— le apretó el hombro —Podríamos crear nuestra propia tribu, vestir con taparrabos y vivir de la naturaleza. Tampoco es mal plan, ¿no?

—¿Lo dices en serio?

—Tienes razón, mejor sin taparrabos— sonrió descaradamente —Me has convencido, cuñado.

Jimin le dio un leve golpe en la mejilla y ambos se rieron.

—En serio— Taehyung se emocionó —Puede que no tengamos grandes lujos, quizá hasta tengamos que vivir en una cueva y comer insectos, pero estaríamos todos a salvo.

—No creo que lo vayamos a lograr todos— la expresión del rubio cambió —Somos doce personas y tenemos que atravesar una ciudad plagada de infectados. No quiero ser pesimista...

—Solo eres realista— Yoongi se les acercó desde la cama —El viaje va a ser duro y tenéis que mentalizaros desde ya a que alguien podría morir.

La actitud de los menores se volvió más seria.

—Nos guste o no, Corea es un punto muerto. La frontera con el norte estará colapsada y sin barco o avión no hay forma de ir a otro país. Esa isla es nuestra mayor esperanza.

—¿Te hemos despertado?— preguntó Jimin.

—No— le acarició la cabeza —Es difícil dormir con el bosque en llamas.

Taehyung notó la mirada de preocupación que intercambiaron ambos.

—También podría tratarse de la isla donde cerraron el proyecto Nilo— apuntó Jungkook desde la cama —En los documentos solo pone las coordenadas pero es una posibilidad que no debemos descartar.

—¿Qué hacemos si nos reciben de forma hostil?

La pregunta de Jimin causó un breve silencio en la habitación.

—Haremos lo que haga falta— contestó el maknae con contundencia.

La respuesta a sus palabras fue unánime; todos estaban de acuerdo.

—Por cierto, ¿cómo habéis dado con esos documentos?— el rubio miró a su hermano.

—Los dos fuimos a ver a Jongsuk— se acercó a ellos —Tae los encontró rebuscando en el laboratorio.

Jimin arqueó una ceja extrañado. Su padre jamás le habría permitido a Taehyung examinar su laboratorio, de eso estaba seguro.

—¿Lo has matado?— el joven preguntó lo primero que se le vino a la mente —Dime la verdad, Jungkook. ¿Lo has matado?

El menor contempló la mirada de su hermano, luego desvió la vista hacia los Min. Al igual que ellos, él también deseaba proteger a Jimin de la verdad, pero la fuerza que vio en los ojos del rubio le indicó, que no merecía vivir engañado.

—Maté a mamá— confesó para sorpresa de Yoongi y Jimin —No podía dejarla allí encerrada, no quería dejarla así— tomó la mano de su hermano —Ella lo mordió y él se convirtió— dijo sin apartar la mirada —Lo encerré en el mismo cubículo donde la tenía a ella... Luego se derrumbó todo. No sé si seguirá allí o si las piedras lo han matado... Pero después de todo lo que hizo...

—Está bien— Jimin lo abrazó al notar su dolor —Hiciste lo que tenías que hacer— lo apretó con fuerza —No te preocupes.

—¿No estás disgustado?

—No, Jungkook— le acarició la cabeza —Ahora mamá descansa en paz y es gracias a ti.

Jongsuk sigue vivo— la voz de Seokjin sobresaltó a Yoongi —Está parcialmente enterrado y no puede mover más allá de los brazos, pero sigue consciente.

—¿En serio?— se sorprendió —¿Acaso puedes ver todo lo que sucede en la tierra?

Solo lo que está relacionado contigo.

—No sé si me gusta eso...

¿Y ahora a qué viene ese comentario?— se ofendió.

—Nada, solo espero que tengas sentido común y respetes mis momentos de intimidad.

No me interesa verte cagando o follando— Seokjin puso cara de repulsión —¡Qué asco!

Los menores le miraron extrañados.

—Hyung, ¿qué haces otra vez hablando solo?— preguntó Taehyung preocupado —¿Estás bien?

—Eh... Yo...

Cuéntales la verdad. Lo nuestro no tiene que ser un secreto.

Las palabras del mayor aplacaron sus dudas.

—Chicos, tengo algo muy importante que deciros— señaló hacia la cama —Es mejor que os sentéis.

—¿Qué sucede?— Jimin se alarmó inmediatamente.

—No sé cómo contaros esto— murmuró mientras veía cómo tomaban asiento —Puede que os parezca una locura pero...

—¡Oh mierda!— Taehyung se alteró abruptamente —¡Estás preñado!

—¡Oh mierda!— Yoongi le golpeó —¡Estás tonto!

—¡Hyung!— el castaño se llevó las manos a la cabeza —¡No tienes sentido del humor!— se quejó dramáticamente.

Jungkook sonrió por la mueca que puso su pareja. Jimin agradeció ver a ambos bromeando con tanta soltura.

—A ver— Yoongi resopló, ignorando la mirada asesina de su hermano —No voy a andarme con rodeos. Jin está aquí.

¿Jin? ¡Serás traidor!— se escandalizó —¿Dónde quedó el hyung?

Los tres le miraron como si hubiese dicho un disparate. Mellie en cambio se estiró y saltó de la cama, sentándose justo al lado de Seokjin. 

—No lo estoy diciendo como algo simbólico, él está aquí con nosotros— señaló el cuarto —En este mismo instante.

—Muy bien— Jungkook se levantó —Hemos pasado por muchas cosas y creo que deberías descansar...

—¡No estoy loco!— se apartó del maknae —¿Quién creéis que os guió hasta el bosque? ¿El Doctor Strange?

—¿Lo dices en serio?— preguntó Taehyung agitado —¿Jin hyung está realmente aquí?

—Tae, no le sigas el juego— pidió su novio —¿No ves que eso no es posible? Tu hermano está cansado.

—¿Pero cómo?— Jimin tomó a Yoongi del brazo —¿Puedes hablar con él?

—¿Tú también?— Jungkook alzó las manos desesperado —¿Cómo puedes creerte algo así?

—Porque Yoongi es tan incrédulo como tú. Cuando le dije que Yongsun noona me habló en un sueño no me creyó, así que si ahora dice que Seokjin hyung está aquí, entonces es porque está aquí.

—Venga ya, no puedes pensar que...— el menor se calló al sentir un soplo de aire caliente contra su nuca. El chico se giró lentamente; a pocos centímetros de él vio el candelabro flotando —¡Oh, mierda!— Jungkook dio un respingo y corrió a esconderse detrás de su novio.

Jimin y Taehyung observaban el fenómeno estupefactos.

—Eres tan dramático— Yoongi puso los ojos en blanco.

Y tú tan quejica— replicó con burla —Anda, empáñame el cristal. Haz algo por tu hyung.

—Hazlo tú— se cruzó de brazos —¿No eres PolterJin?

Gracias por nada, vagoYoon.

Jimin no podía estar más desconcertado viendo a Yoongi discutiendo solo. El maknae seguía detrás de su novio, agarrándole de los hombros mientras miraba la extraña escena. Taehyung parecía el menos sorprendido de los tres pero sí el más afectado. La sola idea de que Seokjin pudiera encontrarse allí con ellos, le tenía muy alterado.

—Mirad hacia la ventana— Yoongi se apoyó contra la cómoda.

El vidrio se fue empañando lentamente. Taehyung dio varios pasos al frente, obligando a Jungkook a moverse con él. Jimin se quedó atrás, esperando a que su mejor amigo compartiese lo que aparecía en el cristal.

—¿Qué le dice un plátano a otro plátano?— el castaño hizo una breve pausa —Nadie nos pela.

—Es él— afirmó Jimin asombrado —Ese chiste solo puede salir de él.

—Es Seokjin hyung— Jungkook apenas pudo susurrarlo; estaba alucinando.

—Sí— respondió Taehyung con lágrimas en los ojos. Su novio lo abrazó estrechamente por la espalda —Es Jin hyung— sonrió mirando a su hermano —De verdad es nuestro Jin hyung.

Yoongi asintió en silencio. No quería perpetrar la enorme felicidad que vio en cada uno de ellos. 

El primer intento por hablar con Hoseok no ha ido del todo bien, pero al menos ya han dado un paso. ¿Qué siente Namjoon realmente por su amigo? ¿Tomará en cuenta el consejo de su primo? 🤔

¡Llegó el momento! ¡Yoongi ha desvelado que Seokjin está con ellos! ¿Os lo esperabais o creíais que tardaría más en contarlo? ¿Cómo se lo tomarán Jimin, Taehyung y Jungkook? ¿Y qué preguntas tendrán para él? En el próximo capítulo quizá encontréis algunas respuestas... 👀

Que tengáis una feliz semana. I purple you~ 💜

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