Sirius Black llevaba alrededor de veinte minutos despierto, y nunca en su vida se imagino que podría estar tan excitado y acojonado por el mismo motivo al mismo tiempo, su Bellus, su numen, su más grande fantasía encarnada dormía plácidamente sobre su pecho.

¿Lo excitante? Severus se había dormido en su bata de baño y en algún momento de la noche se había abierto y corrido hacia abajo dejando al descubierto sus hombros, de hecho el pocionista estaba prácticamente desnudo sobre él, y como era de imaginarse, ni en sueños había podido resistirse al deseo de tocarlo y estrecharlo entre sus brazos por debajo de la tela.

¿Lo acojonante? Era más de medio día y si su Bellus no se despertaba por sí mismo el alboroto que estaban armando abajo lo haría.

Severus se movió entre sueños y subió una de sus piernas desnudas sobre las del animago, Sirius le rogó a todos los dioses en los que no creía que su Bellus no subiera mas la pierna, ya que si lo hacia se toparía con su orgullo erguido, pero los dioses decidieron ensañarse un poco, porque esa suave pierna subió y lo acaricio y tuvo que morderse el puño para evitar gemir, pero no conformes con eso lo dioses decidieron jugar un poco mas con él, Sirius estaba seguro de que lo odiaban cuando sintió a su Bellus deslizar suavemente su mano sobre su pecho desnudo y suspiro contra su piel mientras se acurrucaba como un gatito en busca de calor.

El animago no pudo con la tentación y deslizo una de sus manos por la espalda del menor hasta llegar a su cadera, el suspiro satisfecho del pocionista lo hizo tragar en seco y olvidarse de las voces que se escuchaban escaleras abajo, y con todo el valor y la osadía que caracteriza al único Black de Gryffindor, Sirius deslizo su mano lentamente hasta acariciar una de las suaves nalgas del menor.

Estaba a punto de sucumbir a sus instintos y saltar sobre el dormido pocionista cuando la puerta se abrió dando un sonoro portazo y un tipo alto de cabello gris, al que Sirius nunca había visto, se metió a su habitación como Pedro por su casa, Severus se sobresalto tanto con el ruido que cayó al otro lado de la cama y aun medio dormido se levanto de golpe ajeno a su parcial desnudez.

Sirius se levanto como una exhalación plantándose frente al pocionista para cubrirlo y antes de que este pudiera reaccionar o entender lo que hacia el animago, Sirius ya había acomodado y cerrado la bata de baño que usaba, y aunque el pocionista acababa de despertar y no procesaba bien lo que pasaba, sabía que eso significaba que había estado desnudo en la cama junto al merodeador, decir que se había sonrojado seria poco.

Al voltear a la puerta, ambos magos pudieron comprobar que el moreno de cabello gris no era el único que había entrado sin permiso, Roy, Lily y Regulus también estaban ahí. Justo entonces Barty y James se peleaban para poder ver porque todos se habían quedado parador mientras Peter y Remus miraban exasperados al par de idiotas que se empujaban como si fueran niños chiquitos, entonces Regulus desvió la mirada dolido y salió de ahí tan pronto como le respondieron las piernas empujando al par de magos que estorbaban en la puerta.

- Mierda- el pocionista y el animago no perdieron tiempo en seguir al menor de los Black- ¡Reg, espera!

-¡Regy! ¡Vuelve!

El pocionista tuvo que corre escaleras abajo para alcanzar al más joven de los Black, que en ese momento estaba frente a la puerta, y aunque Severus se le colgó del brazo intentando detenerlo para explicarle lo sucedido, el alto pelinegro se soltó con facilidad.

- Espera Reg, no es lo que parece.

El joven Slytherin hizo oídos sordos al llamado del pocionista y abrió la puerta, pero apenas dio un paso fuera sintió como era estrangulado por su propia camisa, su hermano mayor lo había pescado del cuello de la prenda y lo jalo al interior del departamento sin miramientos. Regulus lo maldijo mientras intentaba zafarse pero el merodeador era más fuerte y lo llevo a rastras hasta el cuarto del pocionista y por supuesto Severus los siguió cerrando la puerta tras ellos.

***

- Te dije que estaba bien.

- Mejor me hubieras dicho que se vino azucararle el churro a la wiza.

- ¿Me viste cara de bruja? No sabía que andaba jarioso o que el pijo bonito juera la wiza del gatito.

Lily escupió el té que bebía al escuchar lo que el par de vándalos suburbanos decía de Severus, pues aunque ella no frecuentaba a los amigos del pelinegro algo de ese dialecto había aprendido, los leones se le quedaron mirando con una ceja alzada, mientras Barty apoyaba la frente en la mesa y la golpeaba con el puño haciendo todo lo posible por no destornillarse de la risa.

- ¿Qué sucede?- Peter miro confundido a los dos magos, pues él no había entendido lo que dijeron el moreno y el pecoso- ¿Qué fue lo que dijeron?

Barty se irguió en su asiento con una sonrisa de oreja a oreja que le dio mala espina a los leones y se movió un puesto para estar junto a Peter y poder hablarle al oído, y con cada palabra que el Slytherin susurraba, el pequeño Gryffindor se sonrojaba mas y mas. Remus y James se morían de ganas por pedir la traducción pero la sonrojada cara de su amigo y las carcajadas descontroladas de la leona y de los gamberros los disuadieron.

***

Regulus estaba sentado en el diván con la cabeza gacha rehusándose a hacer contacto visual con su hermano mayor mientras Severus se cambiaba tras el biombo apresuradamente.

- Reg...

Sirius se acuclillo frente a su hermano intentando llamar su atención, al animago se le había encogido el corazón al ver la reacción de su hermano menor, el estaba decidido a conquistar a Severus y así se lo había dicho, Regulus le había asegurado que no tenia problema con eso siempre que fuera sincero y no hiriera al pocionista, y aunque había querido creerlo ahora se daba cuenta que no había forma de ganarse el corazón de su Bellus sin romper el de su hermano pequeño en el proceso.

Severus contemplo a los hermanos Black por un momento antes de recordarles que estaba ahí, lo que estaba a punto de hacer iba contra su naturaleza pero era necesario, Regulus podía ser un Black pero no era soberbio como sus primas, o pretencioso como sus padres y le faltaba la inmensa seguridad que caracterizaba a su hermano, pero era gentil y considerado y esas eran características que Severus valoraba más que cualquier otra, sin mencionar el pequeño detalle de que se le había confesado y aunque no le correspondía si le tenía un gran aprecio, así que con un suspiro resignado y gesto abochornado alzo su varita.

- Regulus.

La voz de Severus fue tan clara y serena que los herederos de la familia Black se olvidaron de sus penas por un segundo y alzaron la mirada hacia el pocionista, pero una intensa luz azul inundo la habitación antes de que pudieran ver el rostro del pálido mago y ante sus ojos apareció la habitación del animago...

Sirius estaba en la cama intentando incorporarse mientras miraba al pocionista sentado a un lado suyo. Las voces de ambos magos llegaron hasta Regulus como un eco distante, Severus acababa de pedirle al animago que no intentara protegerlo de nuevo y este se había negado dejándolo sin habla por un momento.

-Estúpido Gryffindor con complejo de héroe- estaba claro que para el pocionista no había otra explicación para el comportamiento del animago, Sirius sonrió de lado con cansancio, había estado a punto de confesarse, incluso se había delatado un poco, pero Severus desestimo sus palabras achacándolo al golpe que recibió en la cabeza, además estaba demasiado cansado como para intentar interpretar el natural dramatismo del león- no te sientas tan orgulloso, casi le das un infarto a Reg.

- Lo siento, No lo pensé.

Sirius se paso la mano por la cara con gesto cansado e hizo un gesto de dolor al dejarse caer en la almohada, Severus no pregunto esta vez, simplemente puso su mano en la frente del animago dejando fluir su magia, el ex Gryffindor soltó un suspiro de alivio al sentir la frescura de esa mano y la magia cosquilleando bajo la piel, y después de un par de minutos el león cayo dormido, el pocionista lo cubrió con una sabana y cabeceó soñoliento un par de veces.

Todo se volvió borroso y oscuro ante los hermanos Black y la habitación de Severus resurgió a su alrededor, Regulus se froto los ojos y miro a su hermano a su lado, Sirius aparto la mirada ligeramente sonrojado, estaba claro que el pocionista había mostrado eso para aclarar el malentendido, pero sin saberlo le había dado demasiada información a su pequeño Regy.

- Eso es todo lo que recuerdo...

Severus desvío la mirada, eso de andar dando explicaciones no era lo suyo, incluso estaba seguro que si Barty o Lucius le hubieran pedido una, los habría mandado a tomar viento, porque él no tenía que darle explicaciones a nadie, pero Reg era diferente y aunque no le estaba exigiendo cuentas, Severus no podía dejar que se fuera con semejante mal entendido metido en la cabeza.

Regulus conocía bien a Severus y sabia que si se había tomado la molestia de darle una explicación, que encima él no había pedido, era porque si bien no correspondía sus sentimientos, si lo valoraba y eso resultaba sumamente agridulce para él.

- Sev... ¿Podrías dejarme a solas con mi hermano por un momento?

La petición de Regulus desconcertó un poco al pocionista, y al voltear a ver al merodeador sentado en el suelo este evadió descaradamente su mirada, lo que extraño aun más a Severus pero la suave sonrisa que le regalo Regulus al final lo disuadieron, así que simplemente asintió y salió de la habitación para darles privacidad.

Sirius alcanzo a escuchar como su Bellus le gritaba a un tal "Choto" que bajara los pies de la mesa aun con la puerta cerrada y dejo escapar un suspiro sintiéndose patético. Regulus se le quedo mirando por un momento sin saber cómo empezar, Sirius había demostrado en el callejón que lo que sentía por el pocionista no era solo atracción y con lo que acababa de ver estaba seguro que el idiota de su hermano pensaba que Severus lo había rechazado sin darle la mas mínima oportunidad, cuando la realidad era que el pocionista no había tenido cabeza para ver un tras fondo en sus palabras.

- Eres patético.

- No seas cruel Regy, es la primera vez que me rechazan.

- Y además idiota- Regulus le dio una sonrisa condescendiente a su hermano mayor y le acaricio la cabeza como si fuera un perro- Severus no te rechazo, simplemente no te entendió.

Sirius guardo silencio por unos minutos con la mirada baja claramente desanimado, aun si su Bellus no había entendido sus palabras ya debería de hacerse una idea de lo que siente por él con todo lo que ha hecho, pero el merodeador estaba más triste por la perspectiva de lastimar a su hermano si lograba algo con el pocionista, que por sus escasos avances.

- ¿Por qué intentas animarme Regy? A ti aun te gusta Severus...

- Y nunca dejara de gustarme, pero no puedo obligarlo a que me quiera.

- El te quiere.

- No de la misma forma en que yo lo quiero- Regulus sonrió cabizbajo y soltó un suspiro triste- Realmente no me di cuenta cuando pase de la admiración a la atracción- Sirius miro a su hermano con curiosidad mientras este se acostaba en el diván- Supongo que me deslumbro desde el principio.

-¿Cómo fue?

- Es muy talentoso y hábil... como tú, la primera vez que lo note fue el segundo día de clases de mi primer año. El estaba leyendo en la sala común y un idiota de sexto le quito el libro y le dijo que no tenía derecho a estar ahí por ser mestizo- Sirius chasqueo la lengua molesto, no se esperaba que el pocionista fuera molestado por sus propios compañeros de casa, pero Regulus sonrío con una mezcla de orgullo y nostalgia- Fue genial, Severus le arrojo un maleficio que lo dejo calvo y lo pego a la pared de cabeza toda la tarde.

- ¿Cómo es que nunca me entere de eso?

- Te enteraste, tú y tus amigos se enteraron el día siguiente cuando vieron el reloj de gemas y notaron que Slytherin había ganado veinte puntos fuera de horario, se quejaron por un mes entero.

- ¡Que! ¿Le dieron puntos por pelear con un compañero?

- Lucius le dio veinte puntos por "una perfecta ejecución de hechizos avanzados".

- Cierto... la serpiente desabrida siempre ha sido amigo de Severus.

- Escucha, no te atrevas a insultar a Malfoy frente a Severus- Regulus le mando una mirada dura a su hermano- no sé porque son tan buenos amigos, pero lo son y te tienes que aguantar, después de ese incidente nadie se atrevió a molestar a Sev porque Lucius así lo ordeno.

- Pero...

- Pero nada, estas interesado en Severus, si lo quieres tendrás que aceptar el paquete completo y eso no solo incluye a Barty y a Lily, también incluye a Lucius Malfoy.

- Mierda...

- Mira que si te acepta él tendrá que aceptar a Potter también.

- ¡Oye!

Regulus se cruzo de brazos y con reproche a su hermano mayor.

- No te hagas el ofendido, sabes muy bien que ustedes fueron todo un calvario para Severus durante siete años.

- No me recuerdes eso- Por un momento a Regulus se le figuro como si su hermano fuera un perrito regañado y se lo imagino con las orejas pegadas a la cabeza y la mirada triste.

- Tengo que... El hecho de que tu repentinamente te dieras cuenta de que estas coladito por él, no significa que él vaya a olvidar todo el pasado, Severus es una persona de naturaleza desconfiada y rencorosa, lo que hiciste anoche no será suficiente para que confíe en ti, pero al menos creo que estas cerca de que te perdone.

***

Cuando los hermanos Black salieron de la habitación del pocionista se encontraron con que casi todos estaban apiñados en la entrada de la cocina, Sirius se acerco inmediatamente para ver que hacían y se topo con que el moreno de cabello gris estaba cocinando crepas junto a su Bellus mientras entablaban lo que debía ser una entretenida conversación en algo que sonaba a italiano.

Sirius dedujo que el tipo hablaba un italiano parecido al español de Roy, inentendible, y entro a la cocina dispuesto a preguntar; quién era ese, porque se metió hasta su cuarto sin permiso y de paso por qué se paraba tan cerca de su Bellus, pero el moreno volteo en ese momento y al verlo clavo sus ojos azul zafiro en él mientras un amplia sonrisa se dibujo en su rostro.

- Tu wiza volvió, Black Prince- el comentario del moreno hizo sonrojar al pocionista hasta las orejas, y por un momento no le salieron las palabras pues el idiota del Choto no solo se había referido a Sirius como su novia sino que también había combinado sus apellidos, aunque eso último no fue intencional.

- ¡Ya te dije que él no es mi wiza!

- Si claro, y Roy no es mariquita- el moreno alzo una ceja y sonrió con cínica seguridad en un gesto que decía a las claras que no importaba cuanto lo negara él no le creería.

- A mí no me ensartes, que si de mariquitas hablamos, chiton te ves más machito.

Sirius se aclaro la garganta ruidosamente antes de que el pelirrojo y el moreno empezaran lo que seguramente sería una amigable pelea de bestias en su cocina, del tipo que él y James solían tener, pero antes de que le exigiera cuentas al moreno por haberse metido hasta su cuarto y cortarle "el momento", Severus intervino.

- Choto él es Sirius Black. Black este es Sebastián Ternera.

- Órale... siento que mi jefa me acaba de presentar a su nuevo matador, y hasta se llama Black- el moreno sonrió con picardía y paso un brazo sobre los hombros del pocionista, definitivamente el Choto hablaba mejor que Roy pero eso no hacía que fuera más fácil entenderle- bueno, ya tienes el titulo solo hay que ponerlo en papel.

En ese momento Regulus se abrió paso hasta la cocina, alcanzando a sujetar a su hermano del brazo, pues con lo impulsivo que era, estaba seguro que en cualquier momento iría y separaría al moreno de Severus, como el niño posesivo y egoísta que era. Esto por su puesto paso desapercibido para Severus, que en ese momento se masajeaba el puente de la nariz sumamente sonrojado.

- Choto, el que acaba de llega es Regulus Black.

- Pa' nombrecitos que tienen ustedes- el moreno miro de arriba abajo al menor de los Black y sonrió ampliamente- me gusta tu look de niña gótica.

- Me gusta tu apodo- la voz de Regulus destilaba veneno, como se atrevía ese muggle a decir que se vestía como niña, el estaba usando una muy costosa y elegante túnica de mago- ¿te lo pusieron por tu apellido o tienes el pene arrugado?

Las múltiples reacciones que obtuvo ese comentario eran dignas de ser retratadas, Lily se había sonrojado y se cubrió la boca con ambas manos, los merodeadores incluido su hermano se le quedaron viendo con las quijadas colgando, Barty tenía una tensa sonrisa en la cara, no es que le preocupara la reacción del muggle simplemente estaba conteniendo la risa y Roy y Severus abrieron tanto los ojos que les dolieron.

Es justo decir que a Sebastián "el Choto" Ternera nunca nadie le había hablado de esa forma en sus veintidós años de vida, ni siquiera el miserable de su padre o el impertinente de Roy. Por un momento nadie supo cómo reaccionar, entonces el Choto sonrió con chulería y le hecho una segunda mirada al menor de los Black.

- ¿Quieres que te lo muestre dulzura?

Sirius se interpuso entre su hermano menor y el alto ojiazul y el gruñido que soltó a punto estuvo de ser ladrido, pero lo que tomo por sorpresa a Sebastián fue Severus, quien lo tomo de la oreja y lo obligo a agacharse a su nivel, porque el condenado moreno era incluso más alto que Black.

- Ni se te ocurra fastidiarlo o la próxima vez que te den un tiro te dejo la bala dentro.

- ¡Vale! ¡Vale! Era broma, es que esta majo el chaval- Severus chasqueo la lengua y libero la oreja del moreno- venga no te enojes, mejor celebremos que al fin tienes wiza.

- ¡Que no es mi wiza!

El enfurruñado pocionista no tuvo tiempo de seguir quejándose ya que Black lo tomo por sorpresa del brazo y tiro de él, de modo que el pocionista quedo entre los hermanos Black. Sirius llevaba un rato intrigado con ese tema, así que acerco su cabeza a la de Severus como si fuera a contarle un secreto de modo que Regulus también se acerco para escuchar, de hecho todos lo hicieron, pero el animago hablo en tono normal.

- ¿Qué es eso de wiza?

Severus se sonrojo mucho y se cubrió el rostro con las manos, no pensaba responder eso, pero no hacía falta, Roy y Sebastián se rieron de la cara de memos intrigados que habían puesto todos, así que por primera vez Roy hizo de traductor.

- Pos que eres su wizard, ya sabes, su bruja - eso les helo la sangre a los magos. ¡¡¡Esos muggles sabían del secreto mágico!!! ¡¡¡Severus se había ido de la lengua y les dijo el secreto!!! Regulus y Lily abrazaron al pocionista y lo miraron con pánico mientras las mentes de Sirius y Barty hacia planes para escapar del país sin ser descubiertos por el ministerio, la declaración de Roy los había dejado libidos pero en definitiva sus últimas palabras cayeron como bomba- su novia pues.