1.- El favor
- No
- Por favor
- No
- Por favor
- No
- Severus
-No
- ¡Sevy!
- ...
- Solo esta vez lo juro
Lili Evans llevaba aproximadamente 45 minutos intentando conseguir que su mejor amigo Severus Snape le hiciera un favor, sabia que lo que le pedía no era del agrado del pelinegro pero estaba desesperada así que recurriría a todas las artimañas que conocía; ojos de cachorrito y vocesita dulce y suplicante incluida, estaba a nada de arrodillarse pero conseguiría que Severus Snape le ayudara si o si
Severus sabia que terminaría rindiéndose y ayudaría a su amiga, pero lo que le pedía era tremendamente embarazosos
- Sevy pliiiiiis - Lili acompaño su ultima suplica con una lagrimilla melodramática y Severus no pudo mas
- Esta bien, esta bien...- suspirando miro a su amiga con resignación- ¿a que hora?
Lili sonrió con culpa y nerviosismo y bajo la mirada avergonzada...
- Bueno... sobre eso...
***
- Date prisa Padfoot no puedo llegar tarde a mi primera cita con Lili
El cuarteto de amigos caminaba apresurado por las calles de Londres muggle cargados de grandes cuadros y lo que parecían ser unas tablas de madera
- Prongs, no es una cita si nosotros y unas nueve personas mas también están incluidas
Remus y Peter se rieron por lo bajo ante la mirada ofendida de James mientras batallaban con sus respectivos bultos
- Vamos Padfoot, Prongs no queremos hacer esperar a Lili... y a las otras nueve personas
Y esta vez ni Sirius ni Peter pudieron contener las carcajadas ante el comentario de Remus
- Vale no es una cita, pero esta vez conseguiré que diga que si, estoy seguro que estuvo a punto de aceptar durante la graduación antes de que Snivellus apareciera
***
Lili Evans corría de un lado a otro arreglando cosas mientras Severus Snape acomodaba sin mucho esfuerzo un diván verde botella con acabados en plata al centro de la habitación
- ¿Lili estas segura que al centro? Creo que se vería mejor contra la ventana
Lili dejo su agitada carrerilla y lanzo una mirada valorativa a la posición del diván
- Tienes razón Sev, empujarlo hasta la ventana pero no demasiado cerca por favor
Severus empujo de nuevo el diván hacia la ventana, con la vana esperanza de que la luz que entraba por ella segara a las jóvenes que justo en ese momento comenzaban a llegar, por suerte Lili ya había terminado su carrerilla y se apresuro a entretenerlas
- Hola chicas llegan temprano...
***
Remus comprobó la dirección por segunda vez ante la impaciente mirada de James Potter
- Si... es aquí... Lili dijo que seria en la ultima planta...
-...
-...
- Siete pisos... Prongs... te juro que si no hay elevador vas a tener que llevar mis cosas
- Vamos Sirius te gustara, recuerda lo que te dije...
Por suerte si hubo elevador y los chicos entraron sin apuro a una amplia estancia donde un grupo de hermosas señoritas y algunos jóvenes de muy buen ver ya estaban posicionando sus cabestrillos y bancos, todos formando un semis circulo frente a un diván verde botella
- Hola chicos llegan justo a tiempo les reserve los mejores lugares
Antes de que cualquiera, incluso James, pudiera decir nada Sirius se les adelanto y sin el mas mínimo asomo de pena soltó a bocajarro
- Hola Evans, ¿A que hora empiezan los desnudos?
- ¿Khé?... ¡BLACK!- la pelirroja se sonrojo hasta el cuello de la vergüenza, pero el animago ni se inmuto por la llamada de atención
- James dijo que habría
- ¡Potter! Si viniste a eso ya te puedes ir largando, hoy no habrá desnudos
James Potter no hallaba donde meterse mientras Lili lo fulminaba con la mirada
- N-no es así Lili, te aseguro que vinimos a aprender Sirius solo esta bromeando ¿verdad, Sirius?
El futuro auror miro a su amigo del alma con cara de "no te atrevas a cagarla" por lo cual el chico no tuvo de otra que tragarse sus quejas y asentir mientras ponía una de sus picaras sonrisas marca Black, Lili los miro aun con el ceño fruncido pero al final decidió dejarlo por la paz
- De acuerdo acomódense por allá les deje cuatro bancos justo de frente al diván
- Gracias Lili- Remus le dedico una sonrisa apenada pidiendo disculpas por sus amigos y se dirigió a uno de los puestos seguido por los demás los cuales de inmediato empezaron a colocar sus cabestrillos y cuadros
James y Sirius iniciaron una discusión en susurros mientras acomodaban sus cosas
- Tsk! Dijiste que habría desnudos
- Lili dijo que aveces pintaban desnudos
- Pero no te dijo que hoy fueran a pintar uno o si...-el animago miro acusadoramente a su amigo mientras empotraba su lienzo de forma horizontal
- Dijo que los martes pintaban desnudos por eso pensé que hoy habría uno- rebatía el de lentes mientras ponía su lienzo en vertical
- ¿Entonces porque no hay desnudo?
- Porque la modelo enfermo, hoy tendremos a alguien mas y al parecer no hace desnudos
Un chico de ojos verdes a la derecha de Sirius que había escuchado la discusión decidió aclarar la duda mientras acomodaba sus brochas y espátulas para pintar, Sirius suspiro fastidiado
- Que chasco
En ese momento Lili salia de la parte trasera de un biombo que estaba a la izquierda a unos metros del diván, en el cual ni Sirius ni James habían reparado
- Muy bien chicos estamos por comenzar, hoy tendremos un pequeño reto de color así que veremos el uso de los tonos obscuros e intentaremos que un tono no opaque al otro
***
Severus Snape no podría estar mas molesto y avergonzado, sabia que se arrepentiría de hacerle ese favor a Lili pero no sabia que lo haría tan pronto, no tuvo tiempo siquiera de cambiarse o cepillarse el cabello y después de ayudarle a la pelirroja a arreglar el salón había quedado hecho un desastre, su amiga le había asegurado que así le daría mejor efecto mientras se lo acomodaba hacia atrás y antes de regresar con la clase le dio un libro e indicaciones de que tenia que hacer; y ahora escuchando las tonterías improvisadas que la pelirroja le decía al grupo respiro profundo para tranquilizar sus nervios, por mucho que le repateara lo que tenia que hacer el no iba a fallarle a su amiga
***
Lili se acerco a los merodeadores para entregarles la pintura ya que al ser los últimos en llegar eran los únicos que aun no tenían así que aprovecho para hacerles una advertencia de ultimo minuto en voz baja
- Los cuatro escúchenme bien, como se les ocurra armar alboroto y arruinar mi clase me asegurare de hacerles miserable lo que les quede de vida entendido- la pelirroja acompaño su amenaza con una encantadora sonrisa que dejo a los chicos helados y antes de que pudieran reaccionar se retiro hasta llegar a un lado del biombo
- Ya estamos listos Sev, puedes salir
Y ante la desencajada mirada de los merodeadores Severus Snape salio del otro lado del biombo
James Potter había sufrido un golpe bajo a su ego al ver al ex Slytherin, y según él, adversario en el amor, estaba acostumbrado a verlo con las túnicas dos tallas mas grandes y burlarse de su enclenque figura de modo que nada lo habría preparado para lo que se mostraba frente a el...
Enfundado en unos pantalones negros y una camisa azul media noche que se ajustaban a su cuerpo como un guante revelando su esbelta silueta Severus Snape caminaba con elegancia hasta el "escenario" sin molestarse en mirar a los presentes, sabia que si lo hacia los nervios no le permitirían continuar
Con una tranquilidad ceremoniosa se recostó en el diván y alzo el libro por encima de su cabeza como si lo estuviera leyendo; coloco una de sus piernas en el brazo del mueble y la otras la dejaba "caer" por el borde, el diván era lo suficientemente bajo como para que el pocionista no tuviera que doblar la pierna exageradamente, mas bien apoyaba el talón en el suelo dándole un mejor efecto y enmarcando mejor su postura
Una vez recuperado del impacto inicial Remus Lupin giro lentamente la cabeza para ver a sus amigos, Peter seguía con los ojos desorbitados y James estaba que echaba chispas por la forma en que Lili aflojaba la delgada corbata negra de Snape, el cual se había sonrojado visiblemente, y acomodaba un par de cojines cerca del pelinegro, sin duda la estaba pasando mal con la escena, pero si había alguien que lo pasaba peor ese era Sirius Black estaba pálido y con el semblante duro y Remus podría apostar que no había parpadeado desde que el chico salio de detrás del biombo
Sirius Black no podía sacarle la mirada de encima a Snivellus, no había vuelto a ver al pocionista desde antes de la graduación y no porque no hubiese tenido oportunidades, de hecho las tuvo y de sobra, la realidad fue que lo evito como si tuviera la peste y es que el recuerdo de su ultima semana de clase aun quemaba en su memoria como fuego
**Flashback**
Era la ultima semana de clase, James estaba intentando sacarle un "si" a la pelirroja en la sala común mientras Remus y Peter hacían apuestas discretamente y Sirius revisaba el mapa del merodeador aburrido
Desde hacia un tiempo que estaba sin ánimos y no sabia muy bien porque, no le preocupaba el fin del colegio y separarse de sus amigos de hecho lo esperaba con ansias porque se había asegurado de que no se separaría de ellos, hacia ya dos meces que compro un departamento para los cuatro de modo que no se explicaba su decaído animo, entonces algo llamo su atención en el mapa... Snivellus... alguien a quien estaba seguro no volvería a ver aunque no sabia muy bien de como se sentía por eso
Con discreción se fue alejando de sus amigos y subió a la habitación que compartían por la capa invisible de James, lo había decidido le haría una broma de despedida a Snape
Tomo el mapa nuevamente y busco al pocionista no fue difícil encontrarlo, la mayoría de los alumnos estaban en sus salas comunes, lo ubico en el quinto piso a unos metros de "Boris el Desconcertado"
- El baño de prefectos ¡perfecto!
Mas rápido de lo que se cabria esperar y usando todos los atajos que se sabia Sirius Black estaba parado frente al baño de prefectos, estaba ansioso y agitado por la carrera, decidió ignorar el hecho de que no había pensado en que hacerle al Slytherin mientras recuperaba la respiración lanzaba un hechizo silenciador a la puerta ya improvisaría algo en cuanto lo viera
Susurro la contraseña y entro lo mas silenciosamente posible, en un principio no vio nada, estaba por revisar el mapa cuando Severus Snape salio de golpe del agua en medio de la piscina
Los delgados dedos del pocionista se paseaban entre sus cabellos peinandolos hacia atrás y el agua escurría por su delicada figura ante la mirada absorta del animago, Sirius Black siempre imagino que Snivellus seria un saco de huesos bajo sus exageradamente grandes túnicas pero se había equivocado y en algún lugar de su nublada mente se insinuó la idea de que seria un buen buscador
Mientras sus ojos recorrían el pecho húmedo de Snape este se acercaba lentamente al borde dejando un poco mas de su anatomía al descubierto para el deleite del Gryffindor y entonces el ojigris descubrió algo que debería ser considerado un pecado en tan perfecta piel... un lunar... un lunar pequeño y bien pigmentado, justo al lado derecho inferior del ombligo mas hermoso que había visto en su puta vida; y a su corta edad Sirius Black había visto muchos
Severus se detuvo junto al borde y abrió uno de los grifos para tomar algo de un shampoo perfumado, entonces se giro para seguir lavándose tranquilamente y solo eso basto para que Sirius Black regresara a la realidad y perdiera el aliento horrorizado... marcas...
***fin del flashback***
-¿Podrías quitarte la camisa?- la pregunta de una atrevida rubia regreso al mago al presente y no necesito recordar a quien se lo pedía para saber cual seria la respuesta
- No
- Chicas ya les había aclarado que Severus no hace desnudos, ni totales ni parciales- la pelirroja intervino antes de que alguien insistiera y la rubia resoplo indignada pero antes de que armara un berrinche el ojiverde junto a Sirius le robo la palabra
- ¿Y que tal si se desabrocha el pantalón? No tiene que quitárselo ni nada seria solo para pintarlo abierto
Lili se tenso por un momento pensando en la propuesta de su estudiante y entonces se acerco a Severus para discutir el tema pero antes de que llegara a su lado el ex Slytherin se desabrocho el pantalón con un movimiento rápido de sus finos dedos blancos
Sirius solo quería salir corriendo, porque Morgana lo torturaba obligandolo a ver esos finos dedos en acción, justo cuando el mago estaba recuperando la respiración y Lili se quitaba del medio para iniciar la clase la misma chica rubia volvió a interrumpir
- ¿Que tal si levantas un poco tu camisa? Quiero pintar tu ombligo
El ex Gryffindor miro con rabia a la rubia y gruño por lo bajo, quien se creía que era para pedirle al pocionista que mostrase su pecaminoso ombligo, ese pensamiento hizo que un sutil sonrojo cubriera las mejillas del ojigris y eso solo hizo que se cabreara mas, estaba apunto de gritarle a esa muggle que dejara de joder de una vez porque Snivellus no le mostraría nada, pero se mordió la lengua, a el no tenia porque importarle, entonces escucho al pocionista responder a la rubia con un sutil tono de tedio y arrastrando ligeramente las palabras como si hablara con alguien especialmente inepto
- El objetivo de la clase de hoy, por si no pusiste atención, es el uso de los tonos obscuros; si dejo al descubierto la piel de mi abdomen estaría dibujando una linea de separación entre mi pantalón y mi camisa y el objetivo se perdería
Un rumor de risitas burlonas se extendió por la clase mientras la chica se enfurruñaba en un silencio ofendido y se ensañaba con su lienzo como si en lugar de pintar en el quisiera apuñalarlo
Llevaban cerca de cuarenta minutos cuando el chico de ojos verdes junto a Sirius llamo la atención de la pelirroja, que en esos momentos ayudaba a otra chica para mezclar el tono correcto de azul
- Disculpe que interrumpa Señorita Evans, pero ya pasaron mas de cuarenta minutos
La pelirroja se sobresalto y consulto su reloj de muñeca alarmada, se giro hacia su amigo de la infancia con la pena pintada en la cara y se acerco a el
- Severus ya paso casi la mitad de la clase ¿quieres tomar un descanso?
- ¿Descanso de que Lili? Estoy acostado leyendo en un diván ¿De que tendría que descansar?
Y solo hasta entonces la mayoría de la clase se dio cuenta de que en efecto el libro no se veía igual que al principio, solo unos pocos, tres en concreto, habían notado el sutil movimiento de sus dedos del pelinegro al cambiar de pagina; Sirius Black, Remus Lupin y Derek Rüsher el de ojos verdes
- Deberías estirarte un poco Snape, tu espalda te lo agradecerá- la amigable sugerencia de Remus se vio opacada por el repentino y violento movimiento del ex Slytherin, quien se puso en pie tan rápido que mas de uno se sobresalto, Remus reconoció, incomodo, el pánico en los movimientos del pelinegro
- ¿¡Lupin!?- Severus clavo su penetrante y desconfiada mirada onix en el licantropo antes de dar una mirada alrededor con todos los sentidos alerta al descubrir al resto de los merodeadores, entonces frunció el ceño molesto y sus ojos se dirigieron a la pelirroja
Lili trago grueso y se acerco a su amigo, sabia que no se agradaban pero no dejaría que iniciaran una pelea, sin embargo antes de que ella diera siquiera tres pasos el pelinegro se giro bruscamente y fue a largas zancadas hacia el biombo, reapareció menos de un segundo después con una chaqueta de cuero negro en la mano y sin mediar palabra se dirigió a paso firme a la salida
- ¡Espera, Severus! - la pelirroja corrió tras su amigo hasta alcanzarlo en el pasillo fuera del salón, pero la distancia no impidió que todos los presentes escucharan la discusión que tuvieron- ¡Severus por favor detente!
- ¡Es por eso que me sugeriste que no los mirara verdad!- reclamo airadamente el pocionista
- ¡Llevan aquí casi una hora y no te han hecho nada!
- ¡Por supuesto que no, esas bestias no harían nada frente a tantos testigos!¡Él no haría nada frente a ti!
- ¡Severus eso ya quedo atrás solo eran niñerías!
- ¿¡Niñerías!? ¡Llamas niñerías a que me mandaran a la enfermería cada semana con huesos rotos!- la voz cargada de indignación y resentimiento del pelinegro llego clara como el cristal al grupo de chicos y chicas que escuchaban anonadados en el salón- ¡Aguante a esos imbéciles por ti durante siete años no pienso soportarlos un minuto mas!
- ¡Ellos ya maduraron!
- ¿¡Y eso de que me sirve ahora!?
Un tenso y pesado silencio se instalo en el salón mientras la pelirroja y el pocionista se alejaban siguiendo su discusión por el pasillo mientras un par de miradas inquisidoras se posaron sobre los merodeadores
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