El lugar equivocado

Me encontraba en una ferretería, para comprar algunas armellas, soy de esas personas que decoran su propio hogar, ya que me es imposible encontrar cosas que satisfagan mis excéntricos gustos, así que prefiero fabricarlas yo misma.

Una turba paso frente a la ferretería, como si de una corrida de toros se tratara, bueno eso no es algo para preocupar, en una ciudad tan grande como esta, varias cosas inusuales suelen pasar, luego un par de personas aparecieron lentamente tras de ellas, una estaba empapada de sangre, logre ver sus ojos vacíos y buscando una presa a la que cazar, entonces un frio me recorrió por la espalda mientras se acercaba a mi como si estuviera olfateando, retrocedí un par de pasos y caí, "debo correr" decía mi mente, me levante y comencé a correr hacia la calle, y seguí corriendo y seguí corriendo, no quería voltear.

Llegue a una plaza casi sin aliento, me pare un segundo y lo vi, el caos y la decadencia humana acababan de comenzar, personas corriendo sin rumbo solo para escapar, muerte del otro lado, autos en colisión, fuego y llamas alrededor, mis oídos no escuchaban nada, sentía miedo un pánico terrible que no me dejaba reaccionar, solo observaba, un hombre corrió hacia mi y me tumbo, sentí un golpe agudo, la sangre comenzaba a brotarme de la sien, todo se aclaro, escuche los ruidos, gritos, sentía como el corazón me latía como si fuera a estallar.

Corrí de nuevo, sin rumbo como todos los demás, no sabia donde ir, debo llamar, debo llamar a alguien, me metí en un hospital, una decisión muy estúpida considerando la situación, solo me escondí en un cuarto con suministros médicos, tranque la puerta mientras desesperadamente buscaba el jodido celular, llame a Leo, era mi único amigo, mi única familia, me temblaban las manos, apenas y conseguí marcar.

- Hola - Dije con voz temblorosa mientras mi respiración se agitaba.

- No...., no...., no.... - Repetía del otro lado de la línea .

- Leo, Leo estas ahí?...

- Ayúdame, ayúdame, por favor están aquí..-me decía con voz baja y su respiración entrecortada.

- Donde estas!- le pregunte desesperada.

Ruidos inentendibles se oían del otro lado, y luego:

- AYUDAME!!!!!- Gritó y luego el ruido se apagó, silencio.

- LEO!, LEO!, CONTESTAME- Dije casi llorando.

- Hay alguien ahí?- Pregunto una voz del otro lado de la puerta.

- HOLA?- repitió con voz mas fuerte.

Mi voz se quebró, y todo comenzó a darme vueltas, oí sus preguntas, pero no podía contestarlas, el teléfono cayo de mis manos y todo se desvaneció.

----------------------------------------------

La cabeza me dolía, la mirada borrosa, todo aún me daba vueltas, ¿Cuánto tiempo estuve desmayada?, horas? días?, no pueden ser mas de eso no?, pensaba, mientras me levantaba, no había ruidos, todo estaba demasiado tranquilo como para ser un hospital, tenia que decidir si salía o no?, que podía hacer?, el maldito celular se me había apagado por completo, debía salir a buscar ayuda o al menos un puto cargador, no parecía de noche, pero recordé que cuando me desmaye la luz estaba prendida, me acerque al interruptor e inevitablemente descubrí que energía eléctrica no funcionaba.

- Debo salir- Dije en voz alta para darme fuerza.

Retire el mueble de la puerta y salí cuidadosamente, observe el gran pasillo, una gran mancha roja se estiraba hacia la entrada, "ya se a donde no debo ir", camine para el otro lado del pasillo, tome un palo de una silla rota, voltee y vi la puerta del hospital estaba cerrada y trancada, pero a través de la puerta de vidrio se veía la desolación, vacío y silencio no son un buen augurio.

Continúe caminando cuidadosamente, intentando respirar lentamente, todo estaba inmaculado a diferencia de la entrada, ningún ruido más que mis propios pasos, las ventanas que daban a la calle, estaban tapadas y no se podía ver lo que había afuera.

Un ruido me puso alerta, no sabía si ir hacia el o no; camine por otro pasillo para alejarme de aquel ruido, fui hacia donde el letrero indicaba "departamento de investigación", desde la puerta, varios papeles tirados en el suelo llamaron mi atención, lucía más descuidado, gradillas con tubos de ensayos rotos, vidrios quebrados en el piso, batas tiradas y varias alacenas vacías.

Al entrar, del otro lado de un gran mesón, divisé un bulto, un olor putrefacto brotaba de ese lado, me acerque y lo vi, un muerto, su cara desfigurada ya no parecía humana, lo más grotesco que ví en mi vida, me tape la nariz para poder acercarme, me agache, para tomar el papel que aún sostenía en su mano, y un escorpión salió de su boca, un pequeño grito se me salió mientras retrocedía de horror, al cubrirme la boca mi nariz sintió ese horrible olor, que provocó en mi unas arcadas, me retiré del lugar, pero cuando me disponía a salir un ruido fuerte retumbó en mis oídos, unos fuertes ruidos venían en mi dirección, el piso temblaba mientras el sonido se acercaba, y en el pasillo apareció una cosa con forma humana, y luego más de ellos, con ropas harapientas y unos con sus ojos chorreantes, líquidos amarillos brotando de sus cuerpos, cerré la puerta de inmediato, arrastre cuanto objeto encontré hacia la puerta.

-----------------------------------

Fui al fondo de la habitación, y vi una pequeña puerta, era el vestidor, revise cada uno de los casilleros, los celulares estaban muertos, pero aunque estuvieran prendidos ¿A dónde demonios iba a llamar?, encontré una pequeña pistola electrica, la tomé y me encerré en el baño que estaba al lado de los casilleros.

Era el fin, tomé el papel que había arrugado para leer que decía:

"Informe de actividades

Lo hemos conseguido, hemos devuelto a la vida a un ser humano, la clave era el veneno de escorpión."

Entonces lo entendí, estaba en el ojo del huracán, los arañazos se oían cada vez más fuerte, no había salida, entonces busque algo para escribir en mi bolso, mientras las lágrimas comenzaban a brotar, encontré lo que buscaba y al reverso de aquel papel escribí:

"A quien corresponda:

Somos biodegradables, eventualmente esto pasará, ellos se pudieran y su cuerpo les fallará, la paz volverá, si estás leyendo ésto, es probable que estés en el lugar equivocado..."