Aquella brisa nocturna veraniega agitaba las cortinas, que acariciaban la piel de mis brazos, como si el viento me abrazase con su frescor.
Asomada a la ventana, las millones de estrellas brillaban frente a mi me parecieron lo más puro y hermoso de aquel mundo. Diminutas ante mis ojos pero con más energía de la que podrías medir. Quiza las miraba porque me recordaban que todos tenemos una pequeña estrella en nuestro interior. O quizá solo por lo preciosas que me parecían.
Ese, era mi momento favorito del día. En esos minutos el teléfono nunca sonaba, las tareas no importaban, los problemas desaparecían. Sólo yo y aquello que nos guía cuando es de noche, o por lo menos lo hacía cuando éramos navegantes, cuando no existía el GPS.
Más de una vez el sueño me había vencido y había dormido allí, sola, bajo mis amigas las estrellas. Cuando me despertaba con el amanecer, las veía desaparecer poco a poco. Entonces volvía a la cruda realidad, soñando despierta en mi encuentro con mis amigas otra vez, esta noche.
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Hola, este es el primer reto que hago del libro retos a pinzaladas. Espero que os guste.
Reto info: Aparece las palabras, cortina, teléfono y ventana. Máximo 350 palabras.
Eso es todo, Nessy Sáez.