Un inicio algo diferente.

— Sabía que esto era un error — Un viejo con un frondoso bigote miraba con rabia a esa chica primeriza que a simple vista seguía nerviosa.

— Lo juro un error mio, Luis no tiene nada que ver — La pobre miraba a todas partes y claramente aún temblaba de miedo —

— Dime que tanto viste — El viejo se levantó bajó las persianas de su oficina.

— Yo lo juro, no vi nada — La chica estaba claramente asustada.

— Escuchame si entregas a Luis no solo te vas a deshacer de ese molesto compañero tuyo, además podrías recibir hasta un ascenso y creeme yo personalmente firmare esa recomendación — El viejo miró desafiante a la nerviosa chica — Solo debes decir lo que viste, se nuestro testigo y enviaremos a ese oficial corrupto directo a la cárcel —

— Yo no sé nada, créame que es un error — La joven se veía muy nerviosa.

— Escúchame es tu última oportunidad, eres joven y según tu expediente aunque algo torpe pareces prometer — El viejo miró con ternura a su subordinada — Dime es tan importante que te calles lo que claramente todos sabemos —

— Yo, señor ... —la joven no aguantó más y comenzó a dejar caer algunas lágrimas — No puede detener a Luis él tiene familia y su madre depende del el —

— A si que lo haces por su familia — El viejo sacó una botella de whisky y sirvió un de vaso — O algo mas te detiene —

— En realidad si — La joven estaba aún bastante nerviosa — investigue y podrían relacionarlo a usted y yo no podía permitirlo, no puedo usted es como un padre para mi, cuando llegue a la estación de policía fue el único que me tendió la mano mientras los demás se portaban tan mal conmigo — La chica terminó su confesión entre lágrimas.

— Pequeña no llores, vamos dejare de molestarte con tanta tontería — El viejo solo revolvió su cabello.

— Lealtad algo raro de ver estos días — El viejo comento — y se ve que además descubriste todo, los chicos se han vuelto muy descuidados.

— Por favor no lo entregue yo no diré nada — La joven policía comentaba aun triste.

— hey tranquila debes levantar ese ánimo, todo se solucionara, además que diran los demas si te ven triste — El viejo comentó — Sabes que mejor tomate el dia, piensa las cosas llama a tus padres y mañana ya veremos, te parece no puedo dejar que la chica mas alegre, cordial y amable de esta comisaría se desanime—

— En Serio, o de verdad gracias — La chica se levantó y abrazó al viejo — olvidemos esto y seguiré con mi ronda en la ciudad — La chica estaba por retirarse cuando su jefe la detuvo.

— Espera, Erizo.. no olvides tu arma — El viejo comentó.

— Ay señor estoy demasiado distraída y claro no olvide me llamo Erika, ustedes son muy malos ya dejen de decirme Erizo — La joven policía salió de la oficina, suspiro se puso su gorra y festejó ante la sorpresa de todos —

El joven se despidió con una enorme sonrisa y salió del lugar para seguir con sus rondines en la patrulla.

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La joven aún con una tonada alegre llegó hasta el muelle , esta sección era muy solitaria pero ella insistía que era un buen lugar para apreciar tan bella vista, ella siempre venía cuando cuando se sentía mal o algo le aquejaba todos sus compañeros ya sabia de ese pequeño hábito suyo.

Un poco antes de llegar al muelle entró a una bodega, se bajó de la patrulla y se empezó a quitar el uniforme cambiandolo por un pants y una sudadera, se quitó el excesivo maquillaje, sus lentes de contacto, las pestañas postizas, e incluso se quitó las extensiones que usaba en las orejas, estaban realmente firmes y se veían tan idénticas.

Para finalizar se colocó unos guantes para sacar ese pequeño pedido especial.

En un contenedor estaba un refrigerador, cuando lo abrió encontrarlo que parecía el cadáver de una chica que se le parecía e incluso su pelaje era tan oscuro como el suyo, era una copia al carbón, no tardo demasiado y le coloco el uniforme que tenía puesto, la colocó en el asiento del piloto.

— Es una pena, era una chica prometedora y demasiado bondadosa para este mundo tan cruel— Expresó Erizo.

Unos pasos alertaron a la joven pero no era más que su cómplice.

— debes dejar de hacer eso pude dispararte — Erizo recrimino a su socio.

— Desde esta distancia lo dudo, seras muy buena investigadora y una agente buena infiltrandote pero la puntería, sin tus lentes dudo que me des — El chico se burló.

— Puedes dejar de recordármelo — Erizo reclamo — Y que pasa con estos muñecos son demasiado realistas, dan hasta escalofríos —

— Casi realistas, estos no estuvieron vivos — El joven se jacto — Pero si esta relleno de organos reales, claro de gente muerta en la morgue sobran —

— Eso no deja de ser asqueroso — Erizo reclamo.

— oye quieres un señuelo realista debes usar buenos materiales incluso los registros dentales fueron duplicados — El socio aclaró.

— No pudimos solo mentir con el forense — Erizo mencionó.

— Ellos tienen a uno y está involucrado así que esta muerte debe ser muy real — El joven mencionó.

— Bien, es hora del show — Erizo comentó mientras sacaba su teléfono y marcó al jefe de policía de ese sector, un viejo amable con ese frondoso bigote, solo espero que le contestara y con un tono diferente y otro acento sólo confirmó — Esta hecho, esa tal Erika no será un problema—

— Entiendo, yo entiendo .. maldita sea por que tenía que involucrarse — El viejo sonó molesto — dile a los demás que el asunto está resuelto solo hazme ese último favor —

— Sí jefe, yo me encargo que todos finjan sorpresa lo podemos atribuir fácilmente a una guerra de pandillas — Erizo con su voz fingida sonaba de lo más natural — Una barbacoa como siempre? —

— Si prefiero velar un montón de cenizas que recordar ese inocente rostro — El viejo comentó descaradamente mientras colgaba.

Erizo sonrió mientras veía a su amigo quien levantaba el pulgar — Tenemos una excelente confesión —

— Y las camaras, dime que grabaron todo — Erizo mencionó emocionada — Fue difícil instalarlas en su oficina—

— con una excelente resolución — El joven mencionó con esa sonrisa mientras recogía todo lo necesario.

Erizo sacó un arma y disparó desde la ventana a ese realista muñeco volandole la cabeza y prosiguió a rociar gasolina en abundante cantidad a la patrulla iniciando ese incendio en el lugar.

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Mes más tarde

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En una pantalla de televicion se podia observar como ese mismo viejo, jefe de policia era arrestado, inculpado con el asesinato de una joven policia, trafico de armas y droga en la region.

— Es raro deberias de estar festejando, lograste infiltrarse, obtuviste pruebas, confesiones y al final arrestaron al viejo — EL joven asistente comentó con curiosidad a su jefa.

— Es muy complicado de explicar, conocí a ese sujeto durante meses me gané su confianza parecía buen sujeto y a la primera oportunidad me mandó matar era solo un peón reemplazable en su jugada — Erizo comento algo inquieta — Me da un mal presentimiento, ese sujeto —

— Jefa, tenemos pruebas de sobra ese viejo estará en la cárcel el resto de su vida y con lo que le espera facil delatara al resto un hermoso efecto dominó — El joven asistente señaló

— Bien tendré que levantar varios reportes para que no le quiten el ojo — Erzo afirmó orgullosa.

— Jefa no de nuevo — El joven detuvo su avance — Ya tienes al malo, te van a promover al puesto de detective que tanto buscabas, te dejaran investigar libremente tu caso no lo arruines —

— El de los campistas — Erizo suspiro — Bien solo por eso no enviaré más reportes—

— Jefa lo he escuchado pero por qué tanto interés en investigar ese caso tan viejo— El joven estaba curioso.

— Bien solo porque estoy de buenas — Erizo se sentó y cerró los ojos tratando de recordar — Una bola de mocosos desaparecieron y fin—

— Ammm se escucha más interesante en el expediente, vamos jefa se que debes tenes algo personal con el caso, este ha sido más estudiado que ningún otro, algunos ya lo consideran un caso sobrenatural o incluso de un rapto alien — El joven hacía señas de miedo.

— Ninguno solo que es un gran reto, imagínate ser la detective que logró descubrir que paso con los campistas realmente, un culto, un asesino serial las posibilidades son infinitas — Erizo comentó emocionada — Y si fracaso no perderé nada, es más el jefe lo considera más como el uso de todas las vacaciones que no he tomado.

— Amm si sacamos cuentas desde que ingresaste a la agencia— El joven sumo con los dedos — pues es un chingo de meses y más el periodo de investigación más de un año —

— No por nada fui la mejor en la academia y en la agencia en los últimos años — Erizo comentó orgullosa tanto que su joven asistente casi veía como le crecía la nariz.

— Y con tan solo veinte años — El joven pensó pero miro algo curiosa de su jefa — jefa no exageres no es para que estés llorando —

— de qué hablas? — Erizo se tocó el rostro— ¿qué es esto? lagrimas —

El joven se puso en alerta cuando su jefa Erizo comenzó a hiperventilar — Jefa?... jefa? —

— Llama a ... emergencias.. pulso elevado .. dificultad ... para respirar .. . lagrimeo involuntario ... dolor de cabeza — Erizo colapso.

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— Jefa?, jefa?, enfermera está reaccionando — El joven salió corriendo.

Erizo quería hablar pero estaba entubada, cuando se percató ella entró en pánico, para su fortuna un grupo de enfermeras lograron aplicar varios calmantes y retirar los tubos que tenia dentro de su boca, fue una experiencia dolorosa y desagradable.

El doctor la revisó minuciosamente y parecía estar bien, tenía que reportarlo de inmediato.

Erizo solo miro a su joven asistente quien se veía algo descuidado, más ojeroso de lo normal y con un ridículo bigote.

— Agua, traeme — Erizo hablo con dificultad aún afectada por los calmantes.

Después de tomarse algo de tiempo Erizo miró su entorno y miro como su joven amigo había crecido un poco — Que paso?, un ataque químico, un infarto o un virus? —

— Todos descartados jefa, solo te desvaneciste y paso ya .... casi un año — El joven comentó.

Erizo busco algo con que verse y para su alivio se veía casi igual — Creo que no estoy tan mal —

— La agencia se encargó de todo incluyendo terapia de movimiento para que no se atrofian tanto tu cuerpo pero debes tomarte un tiempo, ya mandaron un informe desde que despertaste, tus vacaciones aún están pendientes — El joven sonrió con gusto era algo visible en ese rostro cansado.