Betsy se había calmado tras esa terrible confesión, no se sentía cómoda hablando de ello, pero no podía ver como sus mejores amigas se peleaban por sus egoístas actos.

Susie y Alice estaban discutiendo en otra habitación analizando con un poco más de calma, ambas le habían prometido calmarse y ella les explicaría todo.

Betsy se miraba las manos fijamente y veía como aun temblaban por el estrés del momento, ella recordaba cómo podía actuar antes con tanta, "libertad" creativa no había dudas ni pena, ni arrepentimientos esa parte de Mildred le daba esa confianza que ella no tenía.

— Tal vez por eso nunca sintió remordimiento — Betsy estaba auto analizandose.

— pero quien tomaba las decisiones o es que así era en realidad — Betsy se sentía demasiado abrumada — Acaso ella era la malvada que no le importaba sacrificar a otros —

— Ejem, Betsy todo bien — Susie entró junto con Alice que aun estaba molesta.

— Quedamos que Alice te preguntara lo que quiera que al final ella quedó fuera de todo — Susie hablo resignada — además que le guardamos ese secreto—

Betsy después de esperar un poco comenzo — Yo primero que todo obligue a Susie a que no contara nada, la versión oficial es que fue un accidente mágico que provocó Mildred tratando de solucionar el problema de la magia —

— Y que fue eso que no existías, yo estaba feliz de volver a verlas pero comenzaste con eso que Betsy solo era una farsa para llegar al cristal — Alice cuestionó.

Betsy tomo un poco más de valor y comenzó a relatar cómo su experimento había fracasado, como encontró a Mildred que es la hermana de Susie dentro del cristal, como la liberó por pura casualidad y suerte pero finalmente cómo quedó su cuerpo atrapado y que si no hubiera sido por el sacrificio de Mildred ella habría muerto esa noche.

Alice, estaba casi al borde de las lágrimas — Eres una tonta — Alice la abrazó con fuerza a su amiga.

— Lo sé — Betsy comentó en voz baja.

— Dime, nunca pudiste liberar tu cuerpo antes? — Alice comentó.

— Cada noche durante los últimos 14 años intente una y otra vez — Betsy confesó.

— Por qué no nos dijiste nada — Susie al fin habló reclamando a Betsy.

— No tenía el valor de verlas sufrir, prefería que me odiaran por años o décadas a ver como cada noche sufren por la misma frustración que pase por esos cinco años que intente liberar mi cuerpo — Betsy apenas y podía terminar de contar.

— Si eres una tonta — Alice terminó dándole unas palmaditas en la cabeza a Betsy.

— Lo siento — Betsy estaba realmente decaída.

Alice le dio otra palmadita con más fuerza — deja de lloriquear, si estoy furiosa y si tardare años en perdonarte pero tengo más curiosidad cómo es que obligaste a Mildred, ella es perversa y Susie lo sabe es literal obra de ella pero insistes en que tu la obligaste —

— Según comprendí, cuando me dejo poseer su cuerpo nuestras mentes se conectaron de alguna manera, yo tenía las ideas ella me dio la confianza para ejecutarlas y terminaba haciéndolo— Betsy explico lo más concreto posible.

— Asi que ella no decidió nada o tuvo algo más que ver — Alice le cuestiono.

— Ella creía estar en control pero todo eran mis acciones, ella solo era ese empuje — Betsy mencionó como difícilmente llego a esa conclusión.

— Espera no tiene sentido — Susie interrumpió conozco a mi hermana ella siempre actuó como mi hermana es o bueno era ella — Susie estaba confundida.

— Al final yo estaba en posesión de su cuerpo — Betsy afirmó — Ella seguía portándose de la misma manera pero ya no está bajo mi influencia, yo no tomaré sus decisiones—

— Eso se oye perverso — Alice comentó sorprendida.

— Si aun no puedo creer lo que hicimos o bueno yo hice — Betsy quería continuar hasta que Susie la detuvo.

— Espera un momento entonces tu... — Susie no se sentía tan abochornada desde hace siglos.

— Espera de que están hablando — Alice estaba confundida.

Betsy decidió refugiarse bajo la sábana de su cama.

—Me pueden explicar que pasó entre ustedes — Alice estaba realmente confundida.

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Mildred se sentía fatal y quería maltratar a Erizo pero muy muy en el fondo sabe que se lo había ganado.

— Oscar? que haces en el cuarto de una dama — Esta comento aun aturdida.

— Tenías razón y gracias por recibir esa bala por mi — Oscar comentó seriamente.

— Psss, ya sabes... debemos ayudarnos.. unidos en la adversid.. si. eso — Mildred aun estaba muy afectada.

— He estado pensando, a qué clase de grupo criminal pertenecemos, el lugar es raro, todo el pueblo está involucrado en todo— Oscar se cuestionó.

— Jajaja, acaso crees que por estoy medio drogada te contare algo que tu debes averiguar chi -chico malo, haaa!! ahora largo y ve por comida china de repente tengo hambre y tu invitas — Mildred se miraba las manos algo perdida — Si es mi recompensa de heroína.

Oscar no tenía opción, por un lado vivía con esa constante preocupación, era más que evidente que este trabajo era extraño, sobre todo cuando han pasado varios dias y aun no llega nisiquiera a su propia oficina.

— Naa, son vacaciones — Óscar pensó muy resignado.

Cuando Oscar se dirige al local de comida se topó con el clima mas extraño de todos, habia neblina, pero no una neblina cualquiera, era literalmente caminar con un humidificador en la cara no se veía absolutamente nada, incluso noto que algunos o los pocos automovilistas que se había encontraron se habían estacionado, uno que otro salía a leer un libro simplemente estirarse cerca de su auto, esto era literalmente más común de lo que Oscar había esperado.

Con muchas dificultades había logrado llegar al restaurante.

— Wow esta neblina es extrema — Oscar le contó al anciano que atendió el lugar.

— Y es más común de lo que crees, algunos lo llaman la nube de los lamentos otros clima de mierda quede atrapado de nuevo — El anciano comentó casualmente — Y que vas a querer.

— Un poco de todo — Comentó Oscar sin titubear — Tengo un hambre fatal —

El anciano miró fijamente al joven — Tú no eres de por aquí cierto —

— No recientemente me mude, soy el nuevo encargado del complejo de paqueterías— Oscar presume sin dudar.

— Es bueno ver que después de tantos años el anterior encargado ya se jubiló — El anciano siguió sirviendo la comida.

— se jubilo por viejo — Oscar preguntó.

— Viejo, lo dudo el simplemente se aburrio y salio al mundo — El anciano afirmó entregando su orden — Y por cierto acepta como extra un postre y las bebidas —

— Vaya que generoso — Oscar agradeció.

— para nada solo que por el color de tu iris veo que te visito la doctora de la isla — El anciano rió — Esa chica será muy buena en su trabajo pero tiene ese hábito de poner drogas en todas partes.

Oscar fue a ver un espejo a toda prisa y lo que vio era algo peculiar su iris estaba pigmentada y no se sentía exactamente bien.

— Maldición, esa loca también me drogo — Oscar tomó sus cosas pago.

— Hijo tómalo con calma, toma muchos líquidos y reposa el resto del día, ve un programa el día pasara rápido— El anciano se despidió.

Para fortuna de Oscar la neblina ya se había despejado y llegar a su casa fue cuestión de minutos.

Se siente somnoliento, trató como pudo llegar a su sofá o a la cama, su vista se pone borrosa y el cansancio era más que obvio.

Para su fortuna su sillón fue un buen lugar para descansar.

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El día estaba amaneciendo y Oscar estaba realmente agusto en su descanso, juraba que no había dormido tan bien y profundamente en años.

Pero al despertar y abrir los ojos miro a alguien que hizo que apretara las nalgas.

Susie frente a él mirándolo con desprecio y nuevamente armada — Dame una sola razón para no arrancarte las bolas pequeño casanova — Susie levantó su arma y apuntó directo a su cara.

— Susie que mierda estas haciendo — Mildred comento molesta.

— Que no vez que este bastardo invadio tu cama y por favor ponte algo de ropa — Susie comento molesta — y tú ni te atrevas a voltear.

Sin mucho que esperar Mildred le lanzó su almohada — Puedes callarte, esa estúpida doctora nos drogó a ambos— Mildred se quejo del dolor de cabeza — Ve a traerme unas pastillas para el dolor de cabeza y revisa la cocina apuesto que metio mas drogas en la comida—

Susie solo rio un poco — Esa ñoña — Susie solo salió del lugar más sonriente — Te lo mereces y tu Oscar después de que despierten tienes un encargo especial solo para ti —