Los traumas son aquellos miedos que desde niños aprendemos a arrastrar y mientras más pasa el tiempo es más difícil deshacernos de ellos.

— Hola Oscar — Erizo saludo muy casualmente.

La médico de seres mágicos Erizo, la bruja prodigio en escala de importancia en la comunidad mágica como la Máxima autoridad del lugar, conocida por todos por ser la única capaz de derrotar a la poderosa Mildred.

Pero por ahora no era más que una madre preocupada.

— Pero, ¿cómo? si eres tu Erizo? — No solo su actitud era diferente, a perspectiva ella se veía como una joven de 18 años, muy diferente a un demacrado Oscar, cuyas ojeras eran algo visibles y cuyo físico no estaba tan conservado.

— ¿Mi apariencia? no por nada soy la que fabrica las medicinas de este lugar — Erizo comentó arrogantemente, a sabiendas que ya había tomado la poción de inmortalidad hace años.

— Es bueno verte — Oscar saludo cordialmente.

— Menos platica, mas caminata — Erizo repitió.

— Claro — Oscar avanzó sin dudar con la pequeña Jimjim atrás de ellos.

— Primero que todo dirígete hacia mi como jefa —Erizo comentó monótonamente — Erizo, ese nombre ya no debe existir—

— Entendido jefa — Oscar respondió —Pero aun puedo hablar con mi amiga? —

— Solo si veo a la niña feliz — Erizo sonrió sutilmente. — Una actividad una pregunta—

Oscar volteo a ver a la pequeña — Definitivamente eres hija de Erizo, presiento que tu organizaste todo —

— Y veo que ahora eres más inteligente — Erizo comento tranquilamente.

— Eri... digo jefa por que no me dijiste que eras tu desde ese primer dia? — Oscar preguntó.

— Sigue las reglas — Erizo comentó tranquila.

— Pero... — Oscar no pudo continuar sin ser interrumpido.

— Escuchame, esa niña que conociste hace años no existe más, así que cállate y obedece — Erizo continuó caminando.

— Mamá se ve genial, no lo crees — Jimjim miró con gusto, esta salio corriendo colina arriba — Primer reto carrera hasta el complejo —

Oscar miró incrédulo y volvió a ver a Erizo quien solo sonreía maquiavélicamente.

Mientras este par se alejaban y no estaba nadie a la vista Erizo se derrumbó, estaba realmente abochornada, llena de pena y vergüenza — a de pensar que estoy loca — Erizo se quejaba.

Erizo desabrocho la bata y en su brazo colocó varios parches y sin demasiada reserva tomó el contenido de un par de viales — Esto será suficiente para suprimir mis emociones por el resto del día — La respiración de Erizo era agitada y aun temblaba por la emoción — Vamos Erizo, recuerdalo como era, recuerda y visualiza — Con los segundos esta se calmaba mas y mas hasta tener a raya sus emociones.

Esta se incorporó y volvió a mostrar el mismo semblante, serio y profesional que emanaba respeto e infundía miedo con solo su mirada.

Para Erizo este dia no era nada sencillo, pero tenía que hacerlo por su pequeña, ella nunca había estado tan ilusionada desde hace años, desde que descubrió su escondite y sus viejas cosas, así como su diario ella supo toda la verdad y envés de estar triste ella se lleno de ilusiones — Tal vez le contagie mi admiración por Oscar — Erizo se compuso y se estiró, decidió usar su magia para llegar al complejo, sus débiles piernas no estaban hechas para el ejercicio.

Erizo en sus últimas ideas negativas pensó que tal vez a la larga ella no era tan buena madre como ella creía y solo era una tímida ratón de biblioteca que aspira a cosas más grandes pero su hija estaba rompiendo todas las expectativas y tenía que hacer lo que sea por apoyarla.

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Susie regresó a casa, estaba tan molesta con su hermana que al entrar y ver que Betsy estaba leyendo un libro está se fue a recostar a su regazo.

— ¿Pasó algo malo? — Betsy comentó tranquila mientras jugueteaba con el cabello de Susie.

— Mi hermana, no la entiendo, tengo trabajando años para que todos se olviden de ella y lo que hizo — Susie comento molesta.

— Y que hizo exactamente esta vez — Betsy comentó casualmente.

— Amenazó a toda la comunidad — Susie comentó.

— Y porque haría algo tan terrible — Betsy comento sorprendida.

— Bueno ella no quería que hablaran mal de mí — Susie confesó con reserva.

— Quien se atreve a hacer tal cosa, eres literalmente la heroína de este lugar, todo mundo te respeta y ama — Betsy comento ahora mas enfatica.

— Bueno, es que creo que me gusta... cierta persona — Susie hablaba con algo de timidez — Y me incomoda que hablen mal de esa persona—

— ¿Y cómo es? — Betsy comentó en un tono relajado.

— Es adorable, inteligente y — Susie sintió un escalofrío cuando el dedo de Betsy comenzó juguetear en su espalda — Y... Tiene unos extraños hábitos que adoro —

— Eso se puede solucionar — Betsy usando su magia invoco a un elfo que le encanta el chisme que podría ser de ayuda— ¿Por que está cristalizada? —

Sin tardar nada Betsy rompió esa pequeña atadura mágica, dejando a la pequeña elfa algo aturdida — que bueno que despiertas, veras quiero que le digas a todo mundo que Betsy y Susie son pareja y que si alguien no le parece yo misma le arrancaré cada bello de la cara uno por uno y cuando termine haré que crezca de nuevo y volveré a hacerlo—

La pequeña elfa estaba aterrada, pero asintió el mensaje y salió corriendo del lugar.

— Vez asunto resuelto — Betsy solo le dio un besito mimoso en la mejilla a una aterrada pero emocionada Susie.

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La última vez que Oscar había llegado a este lugar no pudo llegar hasta los complejos médicos, por cierta hermana furiosa, aunque si lo pensaba más detenidamente tendría que lidiar con ella más tarde, pero lo mejor por ahora por su propio bien era tomar distancia.

Después de que Oscar intentara ganarle a la niña en esa pequeña carrera subiendo la colina se dio cuenta que su condición física estaba del asco, por poco y sufre de una insolación o era un desmayo por falta de aire, definitivamente le tomaron algunos minutos recuperar el aliento.

El supuesto complejo médico era más bien un complejo turístico, una edificación incrustada en la montaña, su pequeño lago particular, muchas pero muchas instalaciones y nada de gente, el lugar estaba solitario a excepto de unos cuantos individuos que limpiaban.

— ¿Esto es un spa o algo así? — Oscar pensó confundido — Cuando observo la alberca techada dentro del lugar — Definitivamente es un spa —

— Llegas tarde y perdiste — Jimjim comentó en tono de superioridad — Esta no cuenta, siguiente evento vamos de pesca —

— Pesca? — Oscar no tuvo mucha oportunidad de quejarse pues la niña ya estaba corriendo al lago y este no tuvo más remedio que seguirla — veo que tienes una afición interesante, espero que atrapemos algo enorme para comerlo —

La chica miró emocionada — Es la primera vez que intento pescar, pero si algo he aprendido de las series es que esta es una actividad obligatoria de padres e hijos —

Oscar aún se sentía incómodo con esa afirmación y cada vez que miraba el entusiasmo de la chica le daba escalofríos pensar en que era cierto.

A la distancia Erizo estaba tomando fotos y saludando a su niña, Oscar definitivamente reconoció ese entusiasmo.

— Me pregunto qué estará haciendo Mildred en estos momentos — Óscar pensaba mientras trataba de lanzar su anzuelo sin que este termine lastimando a alguien.

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Nota: Mas dibujos de Jimjim en proceso.... y me regalaron uno  =) lo aprovechare e incluire en la trama, trabajare para ver si salen hoy esos capitulos