Si no tienes un villano, créalo.

Jim estaba realmente afectada, no pudo defender a su padre cuando estaba indefenso, decepcionó a su madre tanto que no la había visto tan molesta, a ella nunca la había visto molesta.

Jim nunca antes se había sentido tan lastimada, las palabras de su madre eran ciertas, ella es una bruja de alto nivel pudo y sabía cómo acabar con esa amenaza incluso desde que se percató del ataque, pero en el momento de la verdad no supo qué hacer.

Jim tuvo una idea.

Desde hace años ella ya tenía la vision, la noción de su traje de bruja, siempre le han gustado los videojuegos, ella quería verse como esas poderosas brujas de fantasia asi que tomando eso encuenta ella ya había preparado un diseño, tal vez sería el momento de usarlo y demostrar que ella es realmente una bruja.

Jim estaba sola en casa, — Si aun puedo solucionarlo, madre estará orgullosa — Jim buscaba ese traje mientras se convencía a sí misma que era lo correcto.

Jim sacó el traje, las calcetas largas, y ese sombrero quería probarlo, ella sabía que este traje era parte de la identidad de una bruja, pero ella no era cualquier bruja, Jim sabía que estaba destinada a lograr grandes cambios, su madre se lo repetía todo el tiempo.

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Lem aun estaba huyendo tan rápido como sus habilidades de lobo le permitían, pero estaba siendo alcanzada por ese grupo de gigantes, gorilas llenos de músculos y rabia, barrían con todo a su paso, árboles, piedras, autos e incluso colinas era una estampida de demolición frenética.

Algunos gigantes le cerraban el paso con facilidad y Lem sabía que si era atrapada, sería todo.

Al fin miro una pequeña oportunidad, un hueco en una de las laderas, solo necesitaba perderse entre la maleza y escabullirse entre los árboles.

Fue difícil, pero logró esconderse dentro de esa cueva, Lem había decidido adentrarse a la misma para alejarse de esos salvajes.

Después de unos momento cuando el suelo dejó de temblar por culpa de los gigantes ella saco de una pulsera una última pastilla, esta le ayudará volver a la normalidad y suprimir su licantropía.

Solo era cuestión de esperar unos minutos y nadie sospecharía de ella, podría escapar y había podido vengar a su hermana o eso creía.

— Lem, se que estas aqui — Alexa susurro bajo para no llamar la atención de los demás.

Lem solo vio a la que decía ser su hermana, preocupada y con esa cara de angustia.

— Estás bien, Lem, solo escucha tenemos que sacarte de aquí — Alexa le estaba rogando a su hermana.

La pastilla aun no hacia efecto así que Le comento — Parece un buen momento para cerrar ciclos —

Sin decir más, Lem se lanzó directo hacia a esta impostora con la mandíbula abierta, sería un trabajo fácil.

Alexa solo miró decepcionada como su hermanita la estaba atacando, sólo interpuso su brazo para interceptar su mordida y con suerte evitar lastimarla.

Lem como en cada ataque sintió la piel y trato de cerrar la mandíbula para desgarra la mayor parte de tejidos, pero era como masticar una piedra, mas y mas fuerte Lem no dejaba de presionar contra el brazo de esta falsa hermana.

Las las fauces trataban de enterarse lo más que pudiera pero era casi inutil, con mas y mas fuerza, hasta que sintió el sabor ferroso de la sangre.

Cuando Lem levantó la mirada solo miro a su hermana con esa expresión de decepción, seguido de un fuerte golpe en la cabeza haciendo que Lem perdiera la noción por unos momentos.

Cuando Lem se enderezo ese inconfundible sabor a sangre corría por su boca y con una sonrisa sabía que la herida pudo ser profunda.

Alexa quien tenía una sudadera noto como esta estaba desgarrada por las fauces de su hermana, esta se la quitó revelando un físico marcado y con una complexión robusta.

https://youtu.be/8RWxJ0ZsGZs

Y su brazo, ese que Lem estaba seguro de haber desgarrado estaba intacto, sin un rasguño.

Cuando Lem trató de inspeccionar se percató que esa sangre, era de ella, sus encías estaban dañadas, ella sola se lastimó tratando de morder el brazo de Alexa.

— Soy una gigante hermanita, una enorme gigante compactada en un poderoso cuerpo — Alexa no desaprovecho para posar su físico dejando a Lem confundida.

— Solo hablemos ¿quieres? — Alexa le ofreció la mano para ayudarla.

Lem no podía creer semejante monstruo frente a ella, era imponente, pero trataba de ser gentil, era difícil de creer, podría ser una trampa.

La chica lobo sentía como poco a poco sus rasgos de lobo se estaban retrayendo muy lentamente y eso no le dejaba mucho para uir, retrocediendo trataba de dejar espacio entre su supuesta hermana no podía confiar en eso.

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Jim estaba lista, su traje estaba listo y ella demostraría de lo que era capaz y con intereses.

La chica se miró al espejo y puso el gesto más amenazante que podía hacer — que me estás mirando bestia sarnosa — Jim gritó amenazante a su reflejo, contenta se convenció a sí misma, ella estaba lista.

Tomó su vieja escoba de práctica, ella conocía los hechizos de localización, usó un poco de sangre de Oscar, sangre de que se había secado en su ropa — Te encontre — Jim susurró, abrió nuevamente un viejo libro de apuntes y revisó ese hechizo ofensivo.

En su escoba solo fueron varios minutos y pudo percatarse de esa bestia, estaba saliendo de esa cueva.

— No quedarán ni sus huesos — Jim preparó el hechizo — Un fuego especial que te consuma — Jim resistió por convicción, no estaba acostumbrada asi que este hechizo le estaba provocando quemaduras pero la flama ya estaba lista, solo sonrio y desde las alturas lanzó la bola ardiente de ese fuego tan concentrado que se veía oscuro.

Estaba a una muy buena distancia pero al caer esa esfera se noto esa explocion lanzando humo y escombros por todas partes, Jim observó asombrada que casi nada se veía en la entrada de la cueva, esa cosa estaba acabada, Jim se habria quedado pero las quemaduras en su mano derecha le estaba doliendo demasiado, debía ir por algún ungüento de inmediato.

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Momentos antes.

Lem retrocedía tratando de alejarse, ya estaba afuera de la cueva cuando se percató que su hermana se abalanzó como un loco sobre ella.

Lem solo se trató de proteger pero la tacleada de su hermana fue poderosa, a nada de ser derribada, una fuerte explocion la dejó aturdida y golpeada.

Al poco tiempo cuando reaccion, su hermana Alexa estaba cubriendola, esa explocion barrio con el lugar — Me, me protegiste —

Alexa solo se quejó un poco — Por supuesto eres mi hermanita — Esta se recompuso y cargo a su pequeña hermana en sus brazos — Vamos a casa quieres, tenemos que hablar —

Lem no se podía mover, estaba muy golpeada y aturdida, y en los brazos de su hermana perdió lo que le restaba de licantropía, así se sentía indefensa pero tal vez, solo tal vez se equivocara.

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Lem estaba jubilosa, había saldado su error, ese perro sarnoso estaba acabado.

La bruja llena de júbilo llegó al laboratorio de su madre, sabía donde estaban los bálsamos curativos, el ardor de la mano era difícil de soportar, su piel ardía e incluso el pelaje estaba quemado.

Cuando al fin encontró el ungüento está aliviada noto como el daño desapareció, y el pelaje se recuperaba, solo era comezón lo que quedaba, ahora debería buscar a su madre para darle las buenas nuevas.

Jim decidió usar nuevamente ese hechizo localizador, ya tenía un amuleto que su madre le hizo, el hechizo era simple, y la llevaría no muy lejos de su madre.

un poof fue suficiente para desaparecer, pero cuando el humo se disipó ella estaba en una sección del laboratorio que no conocía, estaba oscura y llena de cilindros.

Sin más Jim escuchó a su madre maldiciendo, momentos después ella desaprecio de nuevo en un puf.

— Madre... — Jim no alcanzó a su madre.

Ella estaba por retirarse cuando le pareció notar algo en esos cilindros de vidrio, se acercó a uno de ellos y noto algo que le helo la sangre.

Esas cilindros, esas peceras gigantes estaban llenas de niños. Jim no lo podía creer era demasiado grotesco, comenzó a revisar diferentes tubos y en cada una había otros niños unos incompletos, a algunos les faltaban extremidades, a uno de ellos no tenía nada en su estómago.

— Que es este lugar— Jim sentía que se estaba hiperventilando mientras veía a otros chicos diferentes, algunos deformes.

Solo había uno diferente, un tubo vacío y roto, se noto que hace años había sido dañado.

En la base del cilindro noto una placa con una clave JIM-005x, no sabia por que pero no podía dejar de llorar.