Narra la Tn oscura

Tras haber despertado, solo podia pensar en los asesinatos. Me gustaba ver la sangre escurriendo por mis manos, pero por una extraña razón, no podía matar más que a villanos.

A Kuro lo habia enviado a buscar alguna guarida en donde se escondieran villanos, ya que comenzaba a aburrirme de los que aqui se encontraban.

-pf, que estupidez - bufé observando la extraña nota que tenia el villano asesinado en su bolsillo - solo un estúpido escribiría la ubicación de su escondite en una hoja de papel - dije haciendolo añicos para encaminarme a ese lugar - ojala hayan buenas presas - dije desapareciendo en la oscuridad de la noche.

(...)

Narra la Tn blanca

- No! Sueltame! - gritaba histérica, ya que me habian dicho que Bakugou habia sido secuestrado por los villanos.

- Tn! - me grito mi padre, haciendome parar de golpe para mirarlo con una mirada de tristeza total.

- es mi culpa - dije comenzando a hipar por el llanto - si tan solo hubiera estado con él - dije comenzando a llorar, por lo que papá me abrazo en consuelo al ver lo que sentía.

- No fue tu culpa - comenzó a decirme con voz calma - ahora solo confía en nosotros, lo traeremos de vuelta - me dijo con una pequeña sonrisa, a lo que lo mire decidida.

- los ayudaré.

(...)

- ¿dices que uno de tus espíritus está con él? - me pregunto All Might con emoción, a lo que asenti un poco nerviosa ante lo que les iba a decir.

- Si, suelo enviar a mis fantasmas con la gente más cercana a mi, ya que en caso de que algo asi pasara, yo podría rastrearlo o en el peor de los casos, mi fantasma impediria su muerte - dije haciéndolos sobresaltar un poco.

- más tarde hablaremos de eso, ahora tenemos que decirle esto al director, no podemos permitir que el joven Bakugou sea lastimado.

- Si! - grite decidida, pero no me esperaba encontrar con Yaoyorozu en la puerta, al parecer tenía algo que decirnos.

- verán... - comenzó a decir

(...)

- Fuiu - silvé al encontrar el escondite de los villanos, por lo que sonreí y me adentré como si nada estuviera por pasar.

- Quien eres!? - gritó un villano observandome con recelo, a lo que le sonreí con descaro.

- La última imagen que veras, antes de que se acabe tu vida - dije sin darle tiempo a reaccionar, cuando ya estaba muerto en el suelo - pf, aburrido~ - dije adentrándome más en el edificio, pero el sonido de un forcejeo me hizo parar en seco.

- Sueltenme! - grito alguien con una voz que se me hacia familiar - cabrones, los matare a todos! - dijo haciéndo que me doliera la cabeza con intensidad, ¿quien era ese chico?

- Al final, traerte aqui solo fue una perdida de tiempo - dijo una voz más madura- terminaré contigo ahora - dijo haciéndome reaccionar por inercia, ocasionando que la sala se llenara de sombras - pero que?! - grito al verse envuelto en ellas, por lo que rapidamente fui a desatar al rubio, el cuál no me quitaba la mirada de encima.

- vete - dije observándolo con autoridad, mientras el campo de sombras se desvanecía - vete ahora! - grite furiosa, pero antes de poder reaccionar, la misma sensación de antes me invadió, haciéndome perder el control de mis habilidades y en consecuencia, los villanos se vieron libres para actuar en mi contra.

- pero miren nada más, es la asesina de villanos - dijo el tipo de cabellos color cloro, mientras se acercaba amenazadoramente hacia mi - esta oportunidad no volverá a repetirse, yo me encargare de que no vuelvas a interferir en nuestros planes - dijo acercando su mano peligrosamente hacia mi, pero...

 - Alguien pidió una pizza? - pregunto una voz a través de la puerta, haciéndola volar en mil pedazos e interrumpiendo lo que aquel villano iba a hacerme.

- All Might...- nombró aquel hombre causándome un mayor dolor en mi cabeza, hasta que este ya se volvió insoportable.

- AH!!- grite al sentir un dolor tan horrible que no me permitía pensar con claridad, pero no tarde en sentir unos brazos cargándome, viendo como última imagen, a un rubio que me observaba con preocupación.

(...)

- (Bakugou) - resonó en mi cabeza mientras varias imágenes comenzaban a pasar frente a mis ojos - Bakugou...- murmure despertando en una habitación que no conocía, por lo que no tardé en reaccionar acorde a la situación - ¿Donde mierda estoy?

- ¿Con esa boca comes? - me pregunto una chica que se me hacia ridículamente familiar.

- No tengo otra - dije para fastidiarla, pero el sonido de la puerta abriéndose me hizo centrar mi atención en el chico que ingresaba, el cual era el mismo que me había tomado en brazos antes de marchar. No sabia por qué, pero desde aquel hecho, la misma palabra se me quedaba trabada en la lengua al verlo, por lo que inconscientemente lo dije sin pensar en las consecuencias.

- Musulmán - dije sin darme cuenta de la significativa palabra que había empleado, generando la sorpresa en el rubio, quien se me acerco sin importarle nada más que no fuera yo.

- Dime, ¿De verdad no recuerdas nada? Tn... - dijo observándome casi con desesperación, pero con solo escuchar aquel nombre saliendo de sus labios, las mismas imágenes que había visto en mi sueño, aparecieron más nítidas en mi mente.

- Por supuesto terrorista, no podría olvidarme de una bomba andante tan fácilmente  - dije para molestarlo, pero sabia que me faltaba algo, me sentía....distinta, incompleta y en ese momento entendí, quien era la otra chica.

- Tn/Tn - dijimos al mismo tiempo, mirándonos con la mayor calma posible.

- Espero no haber causado muchos problemas - dije sonriendo con honestidad -  mi lado oscuro nunca desaparecerá, pero puede ser controlado con buenas emociones. Recuerdenlo - les dije antes de ser absorbida por el cuerpo de mi otra yo, regresando a ser la de antes, pero con claras diferencias. El bicolor me había dejado, pero no me dolió tanto como creí. Mis habilidades se habían incrementado  junto a mi conocimiento, por lo que ahora estaba en equilibrio.

- estúpida - soltó el rubio cenizo abrazándome - no vuelvas a asustarme así - dijo afianzando su agarre, por lo que temblorosa devolví su gesto y algunas lagrimas se me escaparon - Deja de llorar! - grito el chico explosivo sin saber que hacer, pero yo solo pude sonreir mientras las lagrimas seguian recorriendo mi rostro.

- Gracias - dije intentando detener en vano mis lagrimas - gracias por aceptarme - dije teniendo en claro lo dificil que era para el rubio expresarse.

- Tú me aceptaste a mi - susurro casi inaudiblemente, por lo que sonriente, lo abracé más contra mí.

- Bienvenida a casa - dijo el rubio con voz suave, haciéndome sentir acogida.

- Estoy de vuelta.

Notas de la autora

Tn por fín volvió a la normalidad, ¿pero que consecuencias le traerán los recuerdos de sus personalidades?

Nos leemos pronto :3