MACKENZIE

No supe qué hora era cuando volví a la cabaña, estaba segura que era tarde o técnicamente temprano porque el sol estaba a nada de salir. De lo que sí tenía certeza era que estaba cansada, tan cansada que podría dormir hasta después de la ceremonia sin problemas, aunque sí con arrepentimiento porque asistir a esa renovación de votos era a todo lo que aspiraba esos días.

Me quité los zapatos en la entrada dando saltos porque mi zapatilla no quería salir de su lugar y finalmente me adentré a la oscuridad de la habitación. Me arrastré sobre mi lado de la cama hasta que mi cabeza quedó presionada contra las almohadas y gemí bajito al sentir la disminución de la presión en mi espalda.

Había actuado de colorista esa noche y había teñido el cabello de Genesis y de algunas de sus amigas, las más valientes y con el cabello más claro. A la loca novia se le había ocurrido pintar las puntas en un rosa pastel y sus amigas de la universidad la siguieron, pero como no teníamos un peluquero dispuesto a ayudar, yo hice el trabajo. En el internado había ganado dinero perforando las orejas de mis compañeras y tiñendo sus cabellos por lo cual era la que más experiencia tenía y les permití aprovecharse de mi bondad.

ꟷ¿Kenzie?

ꟷSí, lo lamento ꟷsusurréꟷ. Vuelve a dormir.

Por supuesto, decirle a Theo Johnson con voz de agotamiento que vuelva a dormir no era un buen plan ya que no nunca saldría de la manera adecuada. Mi novio estiró su mano para encender el velador y luego me miró con somnolencia.

ꟷ¿Estás bien, amor?

ꟷSí, solo cansada.

ꟷ¿Te divertiste mucho con Genesis y el resto de las chicas?

ꟷSep, fue divertido. Te doy un adelanto de lo que verás mañana... ꟷAhogué un bostezo contra la almohadaꟷ. La novia y algunas damas de honor tendrán el cabello rosado.

Sus lindos ojos azules se abrieron con sorpresa y reí bajito al notar su expresión.

ꟷ¿Todo el cabello?

ꟷNo, solo las puntas. No la dejaría hacer una locura tan grande antes de su segunda boda, con la primera ya tiene suficiente.

Sonrió al escucharme y estiró una de sus manos para atrapar un mechón de mi cabello para luego rizarlo en su dedo con delicadeza. No pude evitar cerrar los ojos ante el suave contacto y solté un sonidito de placer que lo hizo reír.

ꟷMe duele todo, no te burles.

ꟷ¿Quieres un masaje?

ꟷ¿Tengo que moverme?

ꟷNo.

ꟷ¿Tengo que darte algo a cambio?

Otra risa ronca que puso cada una de mis terminaciones nerviosas en alerta. ¿Era normal que su risa me pareciera tan excitante incluso cuando estaba agotada?

ꟷClaro que no, Kenzie.

ꟷEntonces sí, quiero un masaje.

Me mantuve con los ojos cerrados rezando para poder dormirme; sin embargo, estaba consciente de que en tanto Theo pusiera un dedo sobre mí, me despertaría como si me hubiesen dado un shock de adrenalina y cafeína a la vez. Lo escuché salir de su lado de la cama y luego sentarse sobre las mantas a mi lado. Tal como había sospechado, cuando corrió mi cabellera de mis hombros, mis ojos se abrieron de golpe de manera involuntaria.

ꟷIntenta relajarte.

Por todas las galletas de avena del mundo, ¿debía decir eso con su voz ronca mañanera justo cuando sus dedos comenzaban a presionar sobre mi piel?

Con la fuerza justa, masajeó mis adoloridos hombros haciéndome ver estrellas y aumentando la temperatura de mi cuerpo. Continúo con mi cuello, rozando sus dedos contra el borde del nacimiento de mi pelo, y luego bajó lentamente por mi columna vertebral. Para el momento en que llegó a la parte baja de mi espalda, yo tenía las piernas apretadas con la finalidad de disminuir, o al menos ignorar, el dolorcito en mi entrepierna que subía hasta mi vientre.

Era una pervertida, me daba cuenta de eso.

ꟷ¿Te duele aquí?

Presionó sus dedos en círculos en el lugar donde mi espalda comenzaba a curvarse y no pude contener el gemido que se escapó de mis labios.

ꟷ¿Acabas de gemir de alivio? ꟷpreguntó burlón.

ꟷClaro.

Su risa baja bragas fue todo lo que necesité para voltear hasta quedar boca arriba en el colchón. Busqué su mirada y noté la diversión en ella; no obstante, estaba mezclada con algo más, algo que me provocaba escalofríos porque lo conocía a la perfección.

ꟷ¿Qué hora es? ꟷdije de pronto.

Miró el reloj en la mesita de luz antes de responder.

ꟷCinco y veintitrés.

ꟷ¿A qué hora empieza la ceremonia?

ꟷA las doce, ¿por qué tantas preguntas?

ꟷTengo que ir al bungaló para arreglarme a eso de las diez, lo que significa que podría dormir unas tres horas.

ꟷ¿Tres horas? ꟷrepitióꟷ. Creo que las matemáticas no son lo tuyo, podrías dormir cerca de...

Me incorporé de pronto y presioné mi mano contra su boca para hacerlo callar, provocando que su ceño se frunciera con confusión.

ꟷBésame ꟷle ordené.

Le llevó dos segundos deshacerse de mi mano y seguir mi orden. Presionó sus suaves labios contra los míos y jadeé cuando comenzó a moverlos con necesidad. Me aferré a sus hombros y deslicé poco a poco mis manos sobre su piel desnuda hasta llegar a su nuca que era mi lugar favorito porque lo hacía estremecer.

Rozó con su lengua mi labio inferior pidiéndome permiso para profundizar el beso y no dudé en brindarle la respuesta que buscaba. Su lengua conectó con la mía y el calor entre mis muslos no hizo más que ir en aumento. Theo me enloquecía y mi cuerpo no hacía más que reaccionar a cada una de sus caricias.

Sus fuertes manos, que segundos antes habían estado rodeando mi cintura, bajaron hasta mis caderas y me presionó contra él.

Hola, hola, señor Johnson Jr.

ꟷTheo... ꟷsusurré contra sus labios.

Le llevó unos cuantos roces y caricias más brindarme una respuesta.

ꟷ¿Si?

ꟷEspera un segundo.

Se echó atrás de manera automática y levantó sus manos en señal de rendición. Cielos, era tan perfecto.

ꟷLo lamento, te extrañaba.

Y demonios si yo no lo extrañaba. Desde el comienzo del viaje no habíamos estado mucho tiempo juntos y menos a solas. La noche anterior habíamos llegado sin energías a la hora de dormir y caímos rendidos con facilidad.

ꟷLo sé, también te extrañaba.

ꟷ¿Te presioné mucho?

Tardé unos segundos en entender sus palabras y negué rápidamente con la cabeza.

ꟷDios, no. ꟷLas palabras me salieron llenas de horrorꟷ. Te juro que estaba más que a gusto con lo que estaba pasando.

ꟷ¿Y por qué nos detuvimos?

Quité una hebra de su rubio pelo de su frente y acuné su rostro con una de mis manos. Era tan apuesto, no tenía ni una imperfección en el rostro más que unas ojeras grisáceas bajo sus hermosos ojos, pero a mí me encantaban sus ojeras porque eran un recordatorio de lo mucho que él trabajaba y se esforzaba por sus sueños.

ꟷQuería decirte algo.

ꟷOh, entiendo.

Acaricié su mejilla y sonreí cuando cerró sus ojos por unos cortos segundos.

ꟷEl día que quise irme y discutimos, tú me dijiste que me amabas y yo no te respondí de la manera adecuada.

ꟷKenzie, no te preocupes, yo...

ꟷShhh... ꟷlo interrumpí y rocé sus labios con mi dedo pulgarꟷ. Es mi momento de hablar.

ꟷLo siento, continúa.

ꟷTendría que haberte dado una buena respuesta y no gritarte, no actúe bien y sé que hemos dejado el tema en el pasado para avanzar hacia nuestro genial futuro, pero no has vuelto a decirlo y sé que es mi culpa. Te conozco lo suficiente para saber que no me quieres presionar y te adoro por eso, solo que no me presionarías porque yo también te amo, Theo. Te amo muchísimo ꟷadmití sonriendoꟷ. Te amo tanto que cada vez que te veo el corazón me martillea con fuerzas y no quiero hacer más que abrazarte y besarte.

ꟷ¿Me amas?

Asentí con la cabeza, completamente segura de mis palabras.

ꟷ¿Me puedes pellizcar? Creo que estoy soñando.

Y aunque sabía que bromeaba, le pellizqué el brazo con fuerza moderada por haber arruinado el tierno momento.

ꟷ¡Auch!

ꟷPuedo amarte, pero eso no significa que dejaré que arruines los momentos.

ꟷ¡Puedes amarme sin violencia!

ꟷNo me digas cómo amarte o te pellizco.

Amenacé con llevar mi mano a su brazo y reí cuando me detuvo con rapidez.

ꟷYo también te amo, Kenzie. Estoy completa y locamente enamorado de ti y de toda tu locura.

ꟷYo no estoy loca.

ꟷUn poquito.

En lugar de ofenderme, besé sus labios y sellé nuestras palabras para siempre. Nunca me había imaginado con un novio como él y tampoco había amado a alguien con la intensidad con la que lo amaba, aun así, podía decir que era un sentimiento hermoso y que tenerlo a mi lado era de las mejores cosas que me habían pasado en la vida.

ꟷ¿Podemos continuar lo de recién? ꟷsusurré entre besos.

Su respuesta no necesitó palabras, sino que me recostó con delicadeza contra el colchón y se colocó sobre mí para besarme con intensidad. Rodeé su cadera con mis piernas y lo aprisioné contra mí, quería sentirlo cerca y no dejarlo ir nunca.

Sus besos dejaron mis labios y bajaron lentamente por mi mandíbula hasta llegar a mi cuello. Con una mirada me preguntó si podía avanzar y asentí con la cabeza para hacerle saber que tenía completa libertad, era suya en ese momento para que hiciera lo que deseara. Mi camiseta fue la primera en salir de juego y luego mi sujetador que había estado comprimiendo mis pechos como un ajustado corsé. Le siguieron mis pantalones cortos y cuando mis bragas salieron del juego, estaba jadeando y temblorosa.

Besó la cara interna de mi muslo mientras me indicaba cómo colocar las piernas y subió lentamente torturándome con cada caricia de sus dedos y boca. Cuando sus labios llegaron finalmente al lugar que tanto deseaba, sentí un sonido extraño que me congeló en el lugar y no fui la única.

Theo tuvo los reflejos suficientes para cubrirme con la sábana en el momento exacto en que uno de sus mejores amigos ingresó a la habitación. Tyler detuvo su discurso a la mitad y arqueó una ceja con diversión.

ꟷ¿Interrumpo?

ꟷ¡Sí! ꟷcontestamos al unísono.

ꟷUna lástima. ꟷRióꟷ. Theo, necesito tu ayuda. Te he enviado mensajes por los últimos quince minutos y ahora entiendo qué te tenía tan ocupado.

ꟷ¡Sal de la habitación! ꟷme quejé.

ꟷEn un momento, Kenzie. ¿Vienes?

ꟷEstoy ocupado, dude.

ꟷEs Taylor ꟷaclaró rápidamente al notar que mi novio no tenía intenciones de moverseꟷ. Está a nada de una crisis nerviosa, algo sobre el regalo que le compró a G y la ceremonia. Calvin está intentando calmarlo, pero nos necesita a nosotros.

Theo me dedicó una mirada de disculpas y yo asentí con entendimiento. Taylor lo necesitaba y no era tan egoísta como para decirle que lo dejara resolver solo sus problemas, mucho menos considerando que su amigo me había sacado de grandes aprietos.

ꟷIntenta dormir un poco.

ꟷO intenta seguir sola ꟷagregó Tyler.

Lo ignoré, por supuesto.

ꟷAvísame si necesitan de mi ayuda.

ꟷGracias, Kenz.

Mi novio se apartó de mí con rapidez y tomó una camiseta y sus zapatillas antes de caminar hacia Tyler. Le dio un golpe por seguir dentro de la habitación y ambos se fueron discutiendo por haber arruinado el momento.

Solté un largo suspiro y miré la hora nuevamente. Tenía tres horas y medias para dormir, pero una ducha helada era justamente lo que necesitaba.

¡Hola, hola, habitantes de Rose Valley! ¿Cómo están? Espero que su semana haya sido genial, la mía más o menos.

Si no me equivoco, el próximo capítulo les va a gustar muchísimo (¿alguien dijo boda?) y estoy muy emocionada de compartirlo con ustedes.

Dado que prometí hacerlo y quedan muy pocos capítulos, aquí les dejo la tan esperada consigna. ¡Abrimos el juego de preguntas y respuestas! Espero poder subir las respuestas para el miércoles/viernes próximo, así que tienen hasta entonces para poner las preguntas y comentarios hacia los personajes que quieran.

Theo

Mackenzie

Taylor

Genesis

Tyler

Emma

Los J

Otros (indicar a quién, porfa)

¡Espero que disfruten de la dinámica tanto como yo!

Les agradezco de todo corazón por el apoyo que me están brindando y todo su cariño. ¡Las amo! Dedico este capítulo a ciprialiss por su efusividad, ternura y sus audios llenos de gritos. Te amamos, Cipris.

Nos leemos la próxima semana, les deseo un bello fin de semana. ¡Ah! Y manténganse al tanto de mi Instagram que he estado muy activa últimamente con cositas de la historia.

MUAK!