Eran las 6:00 de la mañana, Ron despertaba en ese día lunes siempre tan odiado, ya había sobrevivido la primera semana en los Estados Unidos, ahora le faltaban... 86 años para terminar su ciclo de vida y comenzar otro en esta jaula a la que llamamos "existencia". Pero al parecer no era el único despierto, parece que Bebe también se despertó temprano porque estaba riendo.

— Hermanito, hoy voy a regresar tarde, el amor es más fuerte que la puntualidad- Dijo Bebe

— ¿En serio?, ¿Una semana y ya sientes "amor" por ese chico?- Dijo Ron.

— Ay bueno doctor amor, ¿Tu qué has conseguido?- Dijo Bebe.

— Tirarle el sándwich a una chica en la cara, soy tremendo, ¿no?- Dijo Ron irónicamente.

— Ay Ronnie, luego te preguntas porque ninguna chica se te acerca- Dijo Bebe

— Nunca me lo he preguntado- Dijo Ron.

Ron se vistió con su ropa de siempre, el poleron morado, pantalones azules, zapatillas negras y su mochila con libros y la ropa de educación física. Subió al auto y se embarcó con su mamá y hermana al colegio. El día se mostraba lindo, nada fuera de lo común, aunque no había visto a Linka aún, acababa de llegar, seguro estaba en la sala de clases.

Dejó parte de sus cosas en su casillero correspondiente, solo tomo los cuadernos y libros de matemáticas y química. Al cerrar esperó ver algo, pero no había nada, es como si algo faltará ahí, no sabía que era pero sentía que su día estaba incompleto y eso que no eran ni las 12:00.

Llegó a la sala de clases, observando así a Linka y Clydia conversando sobre cosas, se sentó en su respectivo puesto sin dejar de ponerle el ojo. Ron estaba extraño, nunca había sentido eso por una chica, no le interesaban mucho las relaciones ni el amor, pero el latino no dejaba de verla, era un sentimiento extraño.

Pasó la hora de química y matemáticas, Ron y Linka no parecían divertirse, pero al parecer la siguiente hora, después del almuerzo, sería algo más genial. Linka estaba con su grupo de amigas, Clydia, Zoey, Lina y Ruth, un grupo de chicas frikis y que generaron sus propias amistades, mientras Ron almorzaba solo en una mesa alejada, viendo a Linka desde lejos.

— (¿Que es lo que me pasa?, ¿Por qué no puedo dejar de verla?, ¿Es posible que su pelo tenga tintes hipnóticos?)- Dijo mientras masticaba su sandwich.

Los sentimientos hacia ella estaban desbaratados, no sabía que estaba sintiendo, pero era algo nuevo para el, pero en eso no podía pensar ahora, habían tocado el timbre para Educación Física, esta vez no iban a ser quemados, sinó un deporte que en Estados Unidos es casi de nicho. Fútbol o Soccer como se le dice en las localidades.

La entrenadora Pacowski y el quinto grado fue hasta la cancha del colegio, una gran cancha de pasto natural en el que habían rayas dibujadas representando una cancha.

— Bien, todos los chicos de la clase, ustedes van a jugar un partido de fútbol amistoso con el séptimo grado- Dijo la entrenadora, esta vez era un partido contra secundaria.

— ¿Y nosotras que haremos entrenadora?- Preguntó Clydia.

— A menos que quieran jugar fútbol con los de secundaria, ustedes van a hacer atletismo y flexiones- Dijo la entrenadora.

— ¡Ahora vamos!- Dijeron las chicas y fueron a los puestos de atletismo a entrenar.

Eran los chicos de quinto, que no eran pocos, con los de séptimo, Ron había oído hablar de un chico, era una leyenda del colegio, el mejor en todos los deportes, incluyendo los que el mismo inventó, capitán de todos los equipos del colegio, ese alguien era Lynn Loud, un chico castaño de 13 años que siempre utilizaba la casaca 10, parecía rudo, pero Ron no le tenía miedo.

— Bien hijos míos, hora de enseñarles como se juega al fútbol al estilo del ganador, osea yo- Dijo Lynn.

Alineación de 4-5-1 contra una alineación de 4-4-2, Ron estaba usando la casaca número 5, en su posición de defensa central, mientras Lynn usaba su clásica camiseta 10 en su posición de centrodelantero. El partido comenzó, patada inicial para el séptimo grado, la primera jugada era en los 6 minutos de partido, va Lynn Loud pasándose al defensa derecho, a punto de tirar a puerta...

Pero Ron Santiago bloquea el disparo con una intervención que manda la pelota al corner, hubo un cruce de miradas entre esos dos, lo que significaba para Ron que pasar sobre el no iba a ser nada fácil, y para Lynn que comenzó la demostración de por qué es el mejor y que meterse con él, es una sentencia de muerte.

Minuto 23, Lynn se luce con un pase elevado a su compañero con el número 19, este está apunto de pegarme pero Ron Santiago barre hacia la pelota evitando así el disparo del jugador, Lynn estaba comenzando a enfurecerse.

Dos tiempos de treinta minutos, comenzando el segundo tiempo, Lynn se hace la jugada personal, solo contra el arquero del quinto grado, pero de la nada, Ron barre y evita el primero, el marcador sigue 0-0.

Era el turno de Jordan niño para atacar, pase para Cooper, pase elevado para Brian en la banda izquierda, entonces Ron sube para el pase cruzado. Lynn marcaba a Ron, al castaño le parecía que era el mejor momento para jugar sucio, así aprovechó para darle un codazo a Ron y así el centro pasó de largo.

— ¡Entrenadora, falta!- Dijo Ron.

— Apenas te toqué chico nuevo- Dijo Lynn.

— ¡Me diste un codazo!- Dijo Ron dándole un empujón leve

— ¿Que?, ¿No te gusta jugar rudo?- Dijo Lynn.

— Yo te voy a dar tu juego rudo, pendejo- Dijo Ron enojado, hasta que la entrenadora los logró separar.

Linka veía por otro lado la escena puesta por su nuevo amigo y su hermano mayor, estaba preocupada por ambos, Lynn no era precisamente un chico que le gustara ser suave, lo que conocía de Ron era que es un chico rudo y no le tenía miedo a muchas cosas, combinarlos sería la mezcla de la destrucción. Menos mal todo quedó en meras provocaciones.

Lo que si, Linka tendría que conversar con ambos, no le gusta que su hermano se peleé con alguien, menos con alguien como Ron que acababa de llegar al país. El partido siguió con normalidad, Linka veía que Ron podía ser un buen rival para Lynn, bloquea los tiros y barre como si fuera un Carles Puyol o un John Terry, tal vez Ron tendría un lugar en el equipo del colegio.

El partido terminó en victoria para los de séptimo por 4-0, todos los goles fueron de Lynn Loud, mientras tanto Ron se sentía algo lesionado, su ahora rival había jugado dando codazos y una que otra patada. Fue a las duchas con sus compañeros y se vistió ahí con su ropa casual. Ya para el toque de ida, Ron fue hasta su casillero.

— Te ves desanimado- Dijo Linka apareciendo detrás de la puerta del casillero de Ron, haciendo que el latino se sobresaltara.

— Vaya, debemos dejar de encontrarnos así- Dijo Ron.

— Bueno... Te vi jugar contra el séptimo, te veías enojado con el chico de la camiseta 10- Dijo Linka.

— Un poco... Ese chico no sabe lo que es el juego limpio- Dijo Ron cerrando su casillero.

— Si, pero no lo culpes, puede que Lynn juegue demasiado brusco, pero no es un mal chico, solo muy competitivo- Dijo la peliblanca.

— ¿Lo conoces?- Dijo el latino yéndose con su amiga hacia la puerta del colegio.

— Si, es mi hermano mayor- Dijo Linka.

— Ah... Lo sospeché desde un principio, Loud no es un apellido que se escuche comúnmente- Dijo Ron.

— (Créeme, lo vas a escuchar más seguido en una semana)- Pensó Linka pero recordó que debía hacer algo.

— Oye Ron... Ten- Dijo Linka dándole un papelito con números.

— ¿Es un código para una caja fuerte?- Preguntó Ron.

— No tontito, es mi número- Dijo Linka riendo un poco.

— Oh...- Dijo Ron levemente sonrojado.

— Puedes escribirme cuando quieras- Dijo Linka.

— Claro- Dijo Ron sin ocultar mucho su leve sonrojo.

— Ya me voy, nos vemos mañana Ron- Dijo Linka subiendo a Vanzilla.

Ron regresó a casa legítimamente sorprendido, solo salió con ella una vez y le dio su número, ni siquiera había sido una cita, sino una invitación a jugar videojuegos en el arcade, logró hacer una amiga en su primera semana en Estados Unidos y eso se sentía... bien. Tal vez si debía escribirle.

Mientras tanto en la casa Loud, Linka fue decidida al cuarto de su hermano mayor que compartía con su hermano menor, nunca se había sentido así de decidida para regañar a sus hermanos, ¿Le afectó que Ron terminara lesionado en el partido?.

— Lynn- Dijo Linka.

— Hola tonta, ¿Que necesitas?- Dijo Lynn dándole ese apodo "cariñoso".

— Vengo a hablar contigo- Dijo Linka.

— ¿Que hice ahora?- Dijo Lynn.

— Vi el partido contra mi clase, lo hiciste bien, pero agradecería que por una vez, dejaras de ser tan competitivo, vi como le hacías faltas a Ron- Dijo Linka.

— ¿Ron?, ¿Hablas del chico moreno?, Ah, por favor, es fútbol, es un deporte que se sufre- Dijo Lynn.

— Si, pero no se pelea de esa manera, la buena noticia es que logré hablar con él y no parecía tener rencores- Dijo Linka.

— Más le valía... ¡Un momento!, ¿¡Cómo conoces su nombre!?- Dijo Lynn.

— Y-yo... s-soy su compañera de clase, lo sé por la lista de la clase... Además, habló con el algunas veces- Dijo Linka nerviosa.

— ¿Fue él quien te tiró el sándwich?- Dijo Lynn.

— Bueno... S-si, pero se disculpó... No le hagas daño- Dijo Linka protegiendo a su amigo mexicano.

— ... Bien... Pero a la primera que te lastime, voy a hacerlo sufrir diez infiernos- Dijo Lynn golpeando su mano.

Linka sentía que había puesto a Ron en la mira de Lynn, como si lo hubiera puesto de carnada, se sentía mal, no quería una pelea entre esos dos, sin embargo tampoco podía estar tan preocupada, Lynn va en secundaria y Ron en primaria, están un tanto alejados entre sí.

— Hola familia- Dijo Loki.

— Hola Loki, ¿Cómo te fué en tu cita?- Dijo Lynn Sr.

— Básicamente bien... ¡TENGO NOVIA!- Dijo el rubio levantando los brazos

— ¡AAAAAAAHHHHHHH, ME MUERO!- Dijo Linka dándole un abrazo a su hermano

— Y no solo eso, también la besé- Dijo Loki.

— Uuuuu- Dijeron los hermanos para molestarlo, a lo que Linka respondió con golpes en la cabeza.

— En algún momento de la semana conocerán a mi novia, pero quiero que sea sorpesa- Dijo Loki saltando emocionado.

— ¡YO QUIERO SER LA MADRINA DE BODAS!- Gritó Linka emocionada.

Era un ambiente cursi para algunos, precioso para otros, pero Loki tenía novia y eso no podía negarse, Linka se fue a su habitación a gritar de alegría por su hermano, pero después se preocupó por como reaccionaria Clydia, osea, está enamorada de él, por lo cual le rompería el corazón el saber que su amor imposible tiene una novia.

Pero dejo de pensar en eso cuando en su teléfono apareció un mensaje.

Desconocido: Hola

Perdón por tardar ^^"