Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

⋆02⋆

Me doy una última mirada en espejo quedando conforme por como lucía. Sencilla, sexy y pudorosa. El vestido negro se ajustaba perfectamente a las curvas de mi silueta sólo mostrando lo necesario. Combinado con mis zapatos de tacón a juego con mis pendientes y una pequeña bolsa.

¡Magnifica!

La voz de mi madre hizo eco en mi cabeza logrando que en mi rostro se colara una expresión nostálgica durante unos segundos. Sacudí mi cabeza olvidando esos pensamientos, ya era la hora. Me despido de mi mascota dejándole la comida suficiente y parto a buscar a mi amiga.

Al verla hago un chiflido, de esos que hacen los hombres babosos al ver a una mujer hermosa pasar por la calle.

—¿Qué hace una mujer tan linda sola a estas horas? ¿Estás buscando novio? —Dije bromeando causando sus risas.

—¿Ahora lees la mente? Estaba por preguntarte eso yo a ti —Se ríe mientras se monta en el lado del copiloto. —Entonces preciosa, ¿sales conmigo? —utiliza un tono se seducción aunque me doy cuenta de que retiene su risa, tratando de interpretar bien su papel.

—Lástima, no me van las vaginas —golpea mi hombro sin verdadera fuerza. —¡Oye! Encina que te llevo, desagradecida. —fingí indignación.

Entre algunas bromas como esas, riendo como desquiciadas y hablando sobre lo que habíamos con música se fondo puse en marcha mi auto, muy animadas.

—Mira T/n, tu canción. —Acababa de comenzar la canción Sour Candy de un grupo de chicas muy popular en esos días junto a una cantante americana.

.
.
.

Tras aparcar el auto poniéndole el seguro y la alarma, porque ni loca dejo a mi bebé sin seguridad, me costó mucho tener ese coche; y samparnos una fila de los mil demonios logramos entrar al lugar, el club-disco BS&T. Enseguida el ambiente del establecimiento nos atrapó. Lo primero que hicimos mi amiga y yo fue pedir un trago de Tequila que nos acabamos en un segundo para calentar el cuerpo. Minutos después ya nos encontrábamos en bailando en la pista dándolo todo, moviendo nuestro cuerpo al ritmo de las canciones, dando el perreo intenso como mejor sabíamos.

Mis tacones eran como agujas magnéticas atrayendo la atención masculina hacia mí mayormente. Tal como una diosa licándropa cautiva a los lobos de su manada. Llamábamos mucho la atención, algunas  mujeres nos miraban con envidia por acaparar la todas las miradas y otras curiosamente nos miraron con lujuria como casi todos los hombres que estaban esa noche allí.

Era fascinante... la música... la gente bailando sin un mañana... el alcohol... las luces... Simplemente la diversión que estaba buscando... y quizás pasarla muy bien y portarme muy mal en los brazos de algún caballero... quizás. Ya sedientas nos dirigimos a la barra volviendo a pedir dos tragos más.

—Estas van por la casa —Dijo el atractivo barman guiñándonos un ojo descaradamente.

Sin tomarle importancia y aprovechando el trago gratis Jisoo y yo brindamos por mi logro laboral alzando los tragos al aire haciendo sonar el cristal. Todo perfecto hasta que un chico muy apuesto se nos acerca a nosotras mirando precisamente a mi amiga peli-morada.

—¿Te vienes a bailar conmigo, nena?

Ella me mira pidiendo permiso, tal como si yo fuera su madre o algo. Sin pensarlo le guiñé un ojo con complicidad diciéndole que se vaya con el hombre apuesto. Sé lo que ha sufrido, la pobre, después de su ruptura con el cabrón de Namjoon. Cuando la pierdo de vista me giro terminando mi trago está vez pidiendo una sangría. Me limito bastante debido a que tengo que conducir al regreso.

—¡Oh, pero que tenemos aquí! —una voz desconocida hace acto de presencia. Me giro un poco confundida y sí, era conmigo. Un hombre terriblemente apuesto estaba mirando a mi dirección.

—Disculpe, creo que se ha confundido de persona. —Le respondo al desconocido amablemente creyendo que se había confundido de persona.

—No nena, es imposible confundirte, una mujer como tú no hay por aquí. — dice sin quitarle la mirada, encima le da un trago a su bebida, vacilándome.

Yo, atónita con lo que me dijo me giré para pedirle al barman otro trago, pero el bombón que tengo a mi lado me interrumpe hablando por mí:

—Un vodka para la señorita por favor. —el barman asiente y se marcha a preparar el trago.

—¿Pero qué dices? No te lo pedí, así que no lo voy a beber. — le digo con un tono neutral, casi como si me molestara lo que hacía, que en el fondo no era así, pero no soy una cualquiera que con solo un trago y palabras bonitas ya la tienes en tu cama.

El barman termina de preparar el trago y lo deja frente a mí.

>>—Te he dicho que no lo voy a beber. No bebo con extraños, mucho menos alguien como tú. —reacalqué molesta. No soy una chica del todo buena pero no me van los playboys.

—Uff.. Pero que carácter belleza. No pareces el bombón divertido que bailaba tan sensualmente en la pista. —Me molesta ese aire de confianza y superioridad que tiene a su alrededor.

¿Me estuvo vigilando?¿Acaso es un acosador? No le voy a soportar una más al chamaco este.

Sin más me giro y me dispongo a irme de ahí pero una acción de su parte me lo impide; su mano me detuvo en un rápido movimiento acorralándome  contra la barra y se acerca peligrosamente a mí, tan cerca que podía sentir el aroma de su perfume.

Mm.. que delicioso... tan varonil que...

¿¡Oh dios, qué hago!? O más bien ¡¿Qué hace él!? ¡Deja de pensar esas cosas T/n! Concéntrate. Tienes a un hombre guapo muy cerca de ti pero recuerda que te molesta. —Me repetía mentalmente.

Le miré con una expresión específica y clara en mi rostro "O te apartas y me dejas tranquila o un golpe en tu zona baja será el mejor trato que puedas recibir" y qué me importa si se queda sin hijos, será él, no yo. Él parece entender pero sólo ríe de lado socarronamente y vuelve a hablar:

—Venga nena te la pondré fácil, si. ¿Cuánto quieres por acostarte conmigo?

¡¿Qué-!?

¡¿Pero qué de ha creído este cabrón!? Tks no.. se va a enterar este malnacido. Con todas mis fuerzas empujo su gran cuerpo, sólo pude lograr que se apartará unos pasos de mí, pero algo es algo.

—Mira imbécil yo no soy una puta ni mucho menos otra de tu harem—porque si era obvio que tenía a medio club babeando dispuestas a todo —Tampoco me ando ofreciendo por ahí para que me vengas a decir eso —Le grité sin importante los demás —¡¿Pero quién demonios te crees, eh?!

—Yo soy...-

—¡Me importa una verga quien eres seas! ¡Para mi solo eres un capullo asqueroso que se cree que todas tenemos que rendirles a los pies y ve a la mujer como un objeto sexual! ¿¡Por que no mejor te compras una muñeca inflable?! —dije con sarcasmo y vidente enojo.

>>—Mi cuerpo y yo somos demasiado valiosos como para entregárselo a cualquier idiota en la calle. Por cierto delicioso el vodka  —Dije alzando el recipiente vacío del líquido antes mencionado para dejarlo en la barra con desprecio. —Linda noche —sin más me voy a buscar a mi amiga recobrando la compostura que perdí ante el imbécil de hace unos segundos.

Tks.. ¡Que mortificada me tiene aquello! Hombres como él no merecen a nadie en sus vidas que los quieran. Eso me hace preguntarme ¿Tratarán así a sus madres? Respiré profundo tranquilizándome un poco. ¡Vaya suerte la mía! Vengo a despejar mi mente y me metí en una peleíta con un playboy. Si mi madre me viera.. ash...

Cuando logro visualizar a mi amiga ella está cada vez más cerca de los labios del chico apuesto que le pidió bailar antes; no dispuesta a arruinar su momento, me dirigí al baño, un poco de agua en el rostro no me vendría mal. Tras entrar me miro en el gran espejo, mis mejillas tenían un ligero tono rosáceo debido al enojo de antes, tomé un poco de agua con mis manos humedeciendo un poco mi rostro sin arruinar mi maquillaje, claro. Hice una mueca de incomodidad al sentir de nuevo que mi sujetador me estaba molestando de nuevo, es nuevo y al parecer la etiqueta me irrita la piel, paso demasiado trabajo para encontrar la una talla correcta y encima esto.

Entretenida tratando de solucionar mi pequeño pero molesto problema siento un ruido proveniente del último cubículo, alarmada miro el espejo frente a mi encontrando el reflejo sonriente del playboy de antes.

—¡¡Ahhh!! — grité atónita y me repongo el vestido enseguida. Él maldito solo rió a carcajadas —¿Tú y la rubia aquí...? —lo único que fui capaz de pronunciar al ver a una mujer rubia salir toda desarreglada de cubículo encaminándose a la salida cuando notó lo tenso que se había puesto el ambiente.

Él solo asiente divertido como si esto fuera una comedia barata

Hijo de la gran puta —pienso enfadada o tal vez susurré muy bajo.

—Preciosa, parece que no todas las féminas concuerdan con tu absurdo concepto de: "Oh no, yo valgo mucho" —se burla de mí siguiendo con su ataque de risa.

—¿¡Cómo pudiste?! —grito haciendo una mueca de asco, cada vez más enfadada.

—¿Qué cosa? ¿Follármela? —pregunta con fingida inocencia —Pues te cuento, tenía tremendas ganas de ti, osea ti cuerpo, y hacértelo muy rico en un hotel, pero tú no quisiste y entonces apareció ella que se ofreció solita, así que no me quedó de otra que hacerlo con la rubia, obvio que pensando en tí. ¿Linda, no estás ya muy grandecita para tener que decirte como funciona? —dice demasiado relajado y eso solo me saca de mis casillas.

Tengo los nudillos blancos y la marca de mis uñas en la palma de mi mano de tanto apretar mis manos reteniendo la ira que corre por mis venas, pero ya no me contuve dejando fluir a la bestia dentro de mí.

—¡¡Me importa tres vergas a quien te tires!! ¡¿Por qué entraste al baño!? ¡¿Que no ves que es un lugar público y solo se permiten personas no animales, hijo de puta!? No espera.. tu madre no tiene la culpa... ¿¡Por qué no te largaste con ella a un hotel del quinta?!

—¿Por que lo haría? Estaba hermoso el espectáculo, además tú tienes mejor cuerpo que la zorra con la que acabo de estar, aún si es operado sigue estando mejor.

¡Lo mato! ¡¡Ahora si que lo mato!! Pero decidí perdonarle la vida, no quiero ir a la cárcel siendo tan joven. Así que con todas mis fuerzas le suelto una bofetada que tal vez le arregle la nariz sin necesidad de cirugía, debería agradecerme. Lo miré con una mueca desagradable en mi rostro.

—¿Acaso nunca te han visto desnuda o qué? ¡No me digas! ¿Eres virgen? Vaya.. quién lo diría —dijo con ¿burla?

¡¡Zass!!

Le suelto otro sin pensarlo siquiera. Quizás no debí hacer eso. Tragué grueso sin que él lo notara, ya me estaba comenzando a dar miedo, pues estoy sola y encerrada en el baño con un completo desconocido que no sé qué puede hacerme, además yo le he pegado.. ¡Dos veces!... Tengo miedo, mucho miedo. Su mirada se volvió oscura más la esquina de su labio levantada, no sé qué pensar.

Me acorrala contra el lavabo y cuando espero una ofensa o un golpe de su parte lo único que hace es mirarme fijamente a los ojos haciéndome pasar saliva. Esos ojos tan hipnotizantes, no podía apartar la mirada de ellos aunque quiera, claro que no demuestro miedo en mi mirada, no puedo. Él se aprovecha de eso.

—Me tienes demasiado excitado nena —susurra peligrosamente en mi oído antes de tomar mis labios en un posesivo beso atrapando mis manos para que ni pudiera escapar.

Cuando logro despejar mi mente de la bruma de confusión y coordinar mis movimientos, sin otra opción, le doy una fuerte patada en los testículos, no me importa que ahí esté alguno de sus futuros hijos. Aproveché ese momento de debilidad en el odioso desconocido y salgo corriendo de ahí, sin importarme haber dejado mi sujetador allí.

Rápidamente entre el mar de personas busco a mi mejor amiga, quién aún sigue con el apuesto hombre que parece un príncipe, sin querer interrumpirla, tiro de su mano, yo nerviosa por lo que pueda ocurrir, ya no solo por el hombre de hace unos minutos. Jisoo cuando se enoja puede ser un verdadero mar de ira.

—¡Jisoo, vámonos! —grito alterada, jalándola, ella sin entender nada me réplica:

—Pero-....

—¡¡Vámonos te dije!! —la interrumpo y ella accede. Sabe que no lo digo por gusto, no soy así normalmente.

Salimos corriendo hasta el donde estaba aparcado mi auto, subimos y rápidamente acelero saliendo de ahí apresurada.

Ya lejos del club, en la seguridad de mi auto, suspiro de alivio y ya muy cansada, le expliqué la situación a Jisoo que no entendía nada. ¡Vaya locura! Ella me escuchó atenta y sorprendida, como si le estuviesen contando una peli de terror-comedia que no pudo ver. Ha sido una noche demasiado intensa.. y la verdad es que he pasado un sustito que casi me mata de un paró cardíaco.

—¡Venga que tienes unos huevos más grandes que él mismo! T/n ¡¿Cómo se te ocurre pegarle?! —escuchaba sus comentarios y su risa.

—Es que ya me tenía hasta, dioss.. que noche. Sólo espero que no se quede sin hijos por mi culpa. —me hice la arrepentida, cosa que no era así así que reímos por eso.

>>— Oye ¿pero cómo te fue con ese príncipe que te conseguiste en la fiesta? —la miró sugerente utilizando el mismo tono de voz.

—¡¡De maravilla!! Es un bombón, puedes creer que me pidió mi número y todo —responde la peli-morada entusiasmada.

—¡¡¡Uy!!! Resultó ser un verdadero príncipe despues de todo Jichuu unnie~ —dije juguetona, hubiera hecho algún gesto con mis manos, como abanicarme o algo, pero estoy conduciendo.

—¡Se llama Kim Seok Jin! ¡Y trabaja para ShinWa!

—¿¡En serio!? Wow, que coincidencia.

—Pues sí.

Hablamos un rato hasta llegar a mi casa donde nos quedamos en un tipo de pijamada, en la cual nos quedamos dormidas, cosa que no importaba, ambas estábamos agotadas. Después de todo mi loca preferida logró bajar mis humos de los mil demonios, ahh por eso la quiero tanto, la mejor, mejor amiga que pude desear.

.
.
.

︾︾︾︾︾︾︾︾︾

Nos leemos en el próximo :3

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro