Capítulo 8 🗝️: Que empiece el juego
Cuando poco a poco comienzas a tener una que otra experiencia que no esperabas, además tener que pensar con cierto doble sentido para saber si en algún momento te afectará o te hará daño lo que está sucediendo, se va desapareciendo esa inocencia que teníamos cuando éramos niños.
Ahora así es la vida, quienes menos esperamos serán las personas encargadas en hacer aún más daño, no puedes rendirte tan fácilmente porque no quiere decir que toda tu vida se derrumbe contigo, sin contar que hay personas destinadas a hacer el ejemplo de muchos, entonces si cometes al más mínimo error serás crucificado.
Terminó de aparcar el vehículo en el estacionamiento privado que tiene la casa, Selene y Agnes están en la entrada con Jayden, reviso por los espejos retrovisores si quedó estacionado de la manera correcta, sí, sí quedó bien.
Apagó el auto, tomó el bolso y la mochila, acomodándola en mi hombro, salgo del Audi y le activo el seguro, después guardó las llaves en el bolso, ingreso a la casa por la puerta del estacionamiento con la cocina, dejó las cosas sobre uno de los muebles de la sala.
La tranquilidad que transmite está casa, es uno de los motivos que acepté que esté sería nuestro hogar, camino hacia la puerta principal y le abro a mis hermanas, ambas entran y detrás de ellas lo hace Jayden, ahora me dirijo hacia la cocina y buscó en los gabinetes un vaso de vidrio, cuando lo hayo me sirvo agua.
—¡Niña Rose! —comentan a mis espaldas.
Así que saltó del susto, por poco riego el agua que estaba tomando, ubico el vaso encima de una de las barras de la cocina y me acerco hacia la dama de llaves que reconozco, para darle un abrazo.
—Por fin llega la dueña de la casa. —dice María contenta. —No me agrada la señorita Davis.
Davis. Davis ¿Esa no es la novia "actual" de Ian? Frunzo el ceño y con los gestos de María, me confirma mis sospechas.
—¿Ella ha venido aquí? —le pregunto.
—No señora, el señor Chase. —me explica. —Y el señor Jacob no permite que ella esté en esta casa, sin mencionar que al señor Ian le dolió cuando usted lo abandonó y no ha estado en esta casa, desde hace mucho pero mucho tiempo atrás...
Sonrió de medio lado y siento un alivio al saber que no haya pisado está casa, puede hacer todo lo que quiera en las otras propiedades, pero The Blue and Green, al igual está casa en el bosque y mi apartamento, ni siquiera se le ocurra pisar un solo pie en alguna de las tres propiedades mencionadas anteriormente.
—De acuerdo Mari, —le contestó y ella saluda a mis hermanas, además les ofrece algo de tomar.
—Mari ¿Ha llegado algunas cajas de Londres? — vuelvo a preguntar.
—Si mi niña, están en el cuarto que el señor Harvey había solicitado para las... ¿Niñas? —dice y asiento.
—Mari tengo dos hijas y ellas estarán pronto acá en la ciudad, sin mencionar que este es su hogar. —digo. —entonces no me gustaría que la señorita Adele Davis, llegué a estar en esta casa, después te daré una lista de las personas que puedan ingresar, por seguridad.
—Bueno señora. —contesta de inmediato.
Se aleja con unas toallas en las manos, ahora observó a mis hermanas y tienen cierto semblante apagado, aclaro mi garganta.
—Necesito hablar con ambas.
Al mencionarlo se miran mutuamente, prefiero hablarlo en privado y dejar las cosas claras de una vez, recojo la mochila y el bolso para después empezar a descender las escaleras en forma de espiral que conllevan a la segunda planta mis hermanas me siguen como lo esperaba.
Todo en la casa sigue tal como lo había recordado, cuando llegamos al pasillo hay varias fotografías en dónde aparezco con mi esposo de los diferentes momentos que llegamos a compartir, también aparece la boda.
Sigue caminando necesito estar en el despacho de Ian, queda al frente del cuarto donde quedó la biblioteca que me hizo, en el instante que estoy al frente de la puerta de su oficina abro la puerta con una mano, ingresó el bolso y la mochila los dejo encima del escritorio de madera.
Me siento en la silla que hay detrás de él, mis hermanas lo hacen en las que están libres, en uno de los gabinetes trato de encontrar el iPad donde controló todo lo que tenga que ver con dinero que me pertenece.
—Mañana tendré una reunión con los accionistas de las empresas Williams. —explico ya que lo solicite, por lo que sucedió hace unos minutos con mis padres. —, hay una gran posibilidad que renuncié a mi lugar en las empresas...
—Rose no lo puedes hacer. —me interrumpe Selene. —sabes muy bien los motivos, al igual si llegas a renunciar, esa decisión debes tomarla en conjunto con tu actual esposo.
—Rose no lo hagas. —súplica Agnes. —Son nuestras empresas, nuestra dinastía una que, aunque odiemos a Gabriel él la formó por nosotras, sin mencionar que nosotras tres la hemos sostenido, no podemos dejar que caiga de la nada.
Al parecer ahora último en mi vida, no puedo tomar ninguna decisión porque siempre traerá daños colaterales.
—Trata de razonar. —vuelve a hablar Selene. —por el amor de Dios, eres una abogada, políglota, inversionista, accionista, empresaria, tienes tantos títulos que has ido adquiriendo, demostrando que puedes con todo lo que te propongas, eso significa que habrá una solución, pero no seas impulsiva.
—Por favor no me presionen... —les contestó. —Mañana tomaré una decisión, ahora otro tema importante.
Hago una pausa y enciendo el iPad, en ella abro los distintos informes de las empresas que tengo al poder.
—Con lo que sucedió hoy, puede que Gabriel deje de cubrir sus estudios. —me miran directamente. —en especial el de Agnes, porque todavía falta tiempo para que termines tu carrera de psicología.
—Yo...—trata de hablar ella.
—Lo pagaré. —digo y el rostro de mi hermana menor se ilumina. —cubriré todo lo que llegues a necesitar, —las miro a ambas. —pueden quedarse aquí todo el tiempo que deseen, sé que no habrá problema con ello.
—Rose ¿Puedo trabajar en House Evans? —me pregunta Selene.
Mi hermana, Selene siempre me ha demostrado que a ella no le gusta depender de absolutamente nadie, hace algunos años atrás estudiaba dos carreras—administración de empresas y finanzas— al mismo tiempo, sin contar que trabajaba.
—Tendré que hablar con Ian. —le respondo. —Pero claro que podrás trabajar en House Evans y si no se logra, te ayudaré a encontrar una opción.
Me sonríe.
—Ahora les enseñaré sus habitaciones. —vuelvo a hablar.
Me levanto de la silla con el iPad en la mano, salimos del despacho y nos dirigimos nuevamente por el largo pasillo que conlleva a diferentes habitaciones está casa tiene siete habitaciones, sin contar la biblioteca, el despacho y el cuarto donde está el espacio de Ian para pintar, adicional hay uno que otro lienzo hecho por él.
Pasamos por el cuarto que compartía con él, también por la habitación que le iba a pertenecer a Noah, uno de los cuartos para huéspedes queda para Agnes mientras en el otro para Selene están de seguidos, ellas se quedan desempacando sus pertenencias mientras yo quedó en la habitación donde estarán las mellizas, cómo María había mencionado las cajas traídas de Londres se encuentran en el.
Realizó el pago de los estudios de Hazel y Grace por medio del iPad, después comienzo a desempacar todos sus juguetes, libros infantiles, peluches, ubicándolos en las repisas blancas que hay en las paredes, luego su distinta ropa de marca en los cajones que hay al otro lado de la habitación, uno el iPhone con el iPad para estar pendiente de la llamada de las niñas.
Al instante que conecto los dispositivos tecnológicos ingresa la llamada de ellas, con el nombre de su tío. Llegó a hablar con ellas aproximadamente tres horas de seguidas, les expliqué porque no podrán viajar mañana, no paraban en hacerme preguntas por sobre cómo ha sido mi día aquí en la ciudad y querían saber aún más, pero mañana les espera un gran día se están quedando en el pent-house de Chase, también apareció Ryan de vez en cuando en la llamada, aunque noté ciertas actitudes extrañas en él.
Solo las llegué a ver cuando estaba con mi hermana y eso me recuerda que por ahora lo mejor que se puede hacer, es no tocarle el tema a Agnes de su separación con mi mejor amigo, ya eso será después, hasta que el ambiente deje de estar algo tenso por todo lo que ha sucedido, terminó de hablar con mis hijas, luego ceno con mis hermanas cerca de la piscina que se encuentra en el patio trasero, ambas hoy quieren dormir conmigo así que no me niego y propongo hacer noche de chicas.
Dónde habrá mascarillas, palomitas, maquillaje como solíamos hacerlo antes cosa que les agrada inmediatamente porque extrañaba hacer ese tipo de cosas con ellas, quiero recuperar los años que me perdí de mis hermanas, porque fallé ante mi promesa que llegué a hacerles en algún momento: "Siempre estaré con ustedes, nunca estaré ausente."
Las promesas se cumplen y si no lo harás, entonces lo mejor que puedes hacer es nunca realizarlas, es preferible tener un buen concepto sobre ti mismo a qué estés decepcionando a las personas que en algún instante de tu vida, te ayudaron a alcanzar las estrellas.
Ian Evans
Me concentró en mezclar los colores mientras Eminem invade mis oídos, por medio de los audífonos inalámbricos, necesito desestresarme, no quiero participar en las carreras ilegales como solía hacerlo, creo que es una etapa que debía pasar en mi vida, pero en el fondo sabía que no iba a durar lada siempre.
Gracias a ellos tengo cierta afición hacia los autos y motocicletas, algo que no negaré ni mucho me arrepentiré, porque tener la adrenalina en todo su esplendor por mi sistema hizo que desarrollara una parte de mi personalidad, algo que me identifica, de pronto más adelante regrese al Slow death, en futuro lejano porque cortó ni me apetece hacerlo, muerdo mi labio inferior al ver cómo la obra de arte que estoy realizando va teniendo sentido.
Tomó otra cantidad del color azul rey que resalta en la paleta mezcladora, frunzo el ceño porque lo que estoy observando, no es lo que tenía planeado realizar, me tenso por un momento y en la pintura se está reflejando, un recuerdo de mi adolescencia cuando practicaba equitación o corrección me tocó que aprender equitación, porque a la hora de pertenecer a la alta sociedad, debes destacar en diferentes deportes tanto físicos como de agilidad mental.
Aprendí equitación por obligación y presión, pero al darme cuenta de que era bueno en ello me gustaba practicarlo en mis tiempos libres, en conclusión, para muchos la manera que escritura, música, libros puede ser su forma de salir de la realidad o ser felices por unos cuantos minutos, pero mi manera de hacerlo era realizar todo aquello que me causara una felicidad indescriptible e inimaginable, las carreras, equitación, esgrima y.... pintar.
Dejó de pintar dejó la paleta mezcladora en una mesa de madera, luego me acerco hacia otra mesa donde se encuentra el Borbón, me sirvo en un vaso de cristal, para después beber todo su contenido, escuchó la puerta del cuarto abrirse y mi vista continúa en el lienzo.
Y no comprendo porque desvío mi vista en una obra que hice hace tres años con exactitud, dónde me encuentro con Rose en la recámara frente al televisor viendo mi serie favorita The vampire diaries, porque estaba comenzando a amar la serie tanto como lo hacía yo.
Ahora en este preciso momento me siento como si estuviese viviendo un maldito Deja vu, al recordar la reacción de quién continúa siendo mi esposa y lo seguirá hasta quién sabe cuándo, toca que esperar que Harvey ya no sea el máximo jerarca de la CIE para no destruir la imagen de nuestra familia, cómo él lo mencionaba.
—Esa siempre será una de mis favoritas. —comenta mi hermano menor, Gael, señalando la pintura que estoy viendo.
—¿Por qué es una de tus favoritas? —le preguntó con cierta curiosidad.
—¿Honestidad ante todo? —responde con otra pregunta y asiento.
—Lo es, porque en todos los años que llevo conociéndote Ian. —menciona Gael con madurez. —Nunca te llegué a ver tan feliz en las relaciones que has tenido, esa felicidad solo sucedía con Rose ni siquiera con la chica perfecta que tienes ahora como novia.
—Gracias por tu honestidad hermanito. — digo sarcásticamente.
—Es en serio, —me refuta con seriedad. —De acuerdo no quiero discutir, ya tengo suficiente con mi universidad ahora ¿Ryan está saliendo con alguien?
Se acerca a la mesa donde se encuentra el Borbón y se sirve para él, después lo hace en mi vaso al notar que está vacío...
—No tengo ni la más mínima idea. —bebo otro sorbo del Borbón. —solo necesito ir a Londres por unos días, porque me llegan reportes semanales del Teniente a cargo en la central de allá, porque mi queridísimo hermano, no se lleva nada bien con una chica de su mismo cargó.
Gael niega con la cabeza y se ríe por cómo está actuando, nuestro hermano.
—Sabes muy bien que Ryan es demasiado competitivo. —menciona en medio de risas.
—Samantha Blythe también lo es. —le contradigo.
—¿Es una Blythe? —pregunta perplejo, asiento.
Los Blythe son otra de las familias adineradas de nuestro país y fundadoras de la CIE, mi padre tiene cierta enemistad hacia esa familia, técnicamente nadie de nuestra familia tiene una buena relación con algún miembro Blythe, porque son nuestra competencia en la parte industrial como en la agencia y bueno no es ser ególatra, pero absolutamente nadie supera a mi familia en los diferentes campos que nos destacamos.
Gael me comenzó a hablar sobre cómo ha sido su vida estudiantil, en su carrera de administración de empresas en dónde no lo notó tan animado, trata de demostrar que lo está cuando en realidad es todo lo opuesto, terminaré después la pintura es hora de cenar con mis padres y mi hermano, tengo que esperar que Ryan me confirme cuando vendrá a la ciudad porque sé que lo hará pronto.
Continúo cenando y mi móvil no para de sonar, lo tengo en uno de los bolsillos de los vaqueros que traigo puestos.
—¿Qué está sucediendo cariño? —me pregunta mi madre gentilmente.
Diane Evans Stone, los ojos mieles me detallan de abajo hacia arriba, luego acomoda un mechón de cabello detrás de la oreja.
—Eso revisaré. —le contesto y sacó el celular de los bolsillos.
Desbloqueó la pantalla de inicio del iPhone y revisó las notificaciones, varias notificaciones del banco donde se han realizado, transferencias de grandes cantidades, me levanto del asiento y caminó por la mansión hacia mi despacho, ¿Qué carajos está sucediendo? Esos movimientos, no los estoy realizando yo, los valores superan las siete cifras, después llega otra notificación del banco que tengo en Londres donde se ha hecho el cambio de las libras por los dólares estadounidenses.
Cuando estoy frente del despacho automáticamente abro la puerta, tomó el iPad que está en el escritorio de madera, ingreso a las distintas aplicaciones donde encontraré una respuesta a lo está pasando o quien está realizando ese tipo de acciones.
No me sorprendo al ver el nombre de Rose en la pantalla, mañana me tiene que dar una explicación, ¿Porque cuando nos casamos no hicimos una cuenta bancaria para cada uno?, Es algo que no comprendo o ¿Estaba tan cegado en ese entonces?, Comparto tres varias cuentas bancarias con Rose, tarjetas de créditos como débitos, sin contar que tenemos un banco propio.
De acuerdo, si ella quiere comportarse de esa manera, entonces debemos mover bien las fichas del ajedrez, está vez no son las fichas blancas contra las negras, aquí es la reina contra el rey, en el iPhone busco el número de Jayden, seleccionó la acción para marcar, solo con insistir una vez contesta.
—Buena noche señor Evans. —menciona Jayden por medio del móvil.
—Buena noche Jayden. —digo amablemente.
—¿Me necesita señor Evans? —vuelve a hablar.
—¿En qué propiedad se está quedando la señora Evans? —le pregunto y una sonrisa divertida se dibuja en mi rostro.
Hay un silencio por varios minutos.
—Jayden...
—Señor Evans en la casa en el bosque. —contesta de inmediato.
¿No sé está quedando en su apartamento? Eso es extraño, pensé que no quería saber absolutamente nada de mí.
—Jayden necesito que mañana a primera hora todos los autos y motocicletas que están en el pent-house, —explico. — se trasladen hacia esa casa.
—¿Se mudará de casa señor? —me pregunta.
—Por ahora no, pero quiero vender el pent-house. —Esto está siendo divertido. —aprovecharé que mi esposa se encuentra en nuestra ciudad.
Terminó de hablar con Jayden y después lo hago con los bancos, dónde solicitó que creen una cuenta, exclusivamente para Rose, no quiero saber nada sobre sobre sus movimientos bancarios, mañana la veré en la agencia y dejaré varios asuntos en su lugar, porque esto no puede continuar de esta manera y sé que habrá cosas que la molestaran.
Nuestro juego empezó hace cuatro años, lo ideal es que estando ella de regreso continúe de la manera en dónde ambos somos buenos en ello, será un placer seguir con nuestro juego Williams.
Continuará...
Nota de autora: HOLAAAA, chicosss quiero actualizar semanalmente además me aleje de mi red social una en donde he llegado a interactuar con varios de ustede Instagram (IG:danigarciaw), preferí colocarla como cuenta personal ya que no quería que personas tóxicas que en algún momento permití que ingresarán a mi vida destruyeran o trajeran daños colacterales.
Ahora último estoy prefiriendo mi tranquilidad antes que todo, porque ya me he dado cuenta las redes sociales como son de tóxicas, luego cuando retomé Instagram les comunícare sobre ello.
Dónde realice una cuenta nueva que utilizaré exclusivamente para mis historias y poder interactuar con ustedes, fangilear, aparecer en historias sin necesidad de sentirme incomoda.
Ya que han sido esas personas que se preocupan por mí, también aquellas que me apoyan sin importar que ❤️, los quiero un montón. ✨
Att: Dani G.
Pd: ¿Les gustaría un libro sobre Ryan? 👀 ¿O Gael?
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