¿Safe? parte 2
Leon apunto nuevamente con su arma y linternas el oscuro pasillo por el que caminaban para cerciorarse de que no había nada que los atacara, tras él iba Helena, Sherry y por ultimo Jake, les recordaba se habían encontrado durante lo de Simmons, pero esta vez era más grave aún.
Habían encontrado un viejo laboratorio de Umbrella escondido bajo un edificio que ahora era una clínica. Jake se había dado cuenta del pasadizo secreto por mera casualidad mientras quitaban cajas con remedios en busca de algunos para llevar a los sobrevivientes. Habían dudado en entrar pero al ver el logo de la antigua compañía estampado en una de las paredes se convencieron en avanzar. Llevaban unas horas recorriendo el lugar en donde solo quedaban esqueletos y uno que otro cuerpo aun descomiéndose, sangre manchaba algunas paredes y el desorden era tanto que parecía que un tornado había pasado por el lugar, todo estaba a oscuras y los roedores junto a algunas arañas delataban el desuso del recinto.
—No creo que encontremos algo aquí, debe llevar años abandonado— dijo Sherry mientras intentaba no tener arcadas debido al olor a putrefacción.
—Comúnmente destruyen sus laboratorios, no los dejan así de simple— hablo Leon deteniéndose en una esquina del corredor que se dividía en dos direcciones. —¿Derecha o izquierda?
—Quizás olvidaron este lugar— hablo la rubia, Leon la miro por sobre su hombro esperando que así fuera, regreso rápidamente la mirada al frente. El silencio que hubo tras este comentario los alerto, un sonido provenía desde el pasillo a la derecha, gruñidos y pasos.
—¿Problemas? — pregunto Jake quien le daba la espalda a Sherry cubriéndolos a los tres.
—Tendremos que ver— murmuro el Kennedy antes de chequear el pasillo derecho y moverse rápidamente hacia el izquierdo al ver el anterior despejado. Con pasos grandes se acerco rápidamente notando que al final del pasillo, justo donde unas amplias puertas se encontraban, parecía filtrarse luz a través de las grietas y mamparas de vidrios en el centro de las puertas. Leon los detuvo alzando su mano, con cuidado de no hacer ruido se apoyaron contra la pared y lentamente se fueron acercando. El equipo escucho una gran variedad de gruñidos y sonidos guturales característicos de zombies, se detuvieron pero el Kennedy les indico que continuaran. Leon apago su linterna y se la entrego a Helena para ver mejor. Con cuidado se apoyo abriendo lentamente la puerta para dejar espacio suficiente para ver, en el interior habían algunos hombres con traje de asalto de Umbrella acuchillando a zombies, tan rápido y de una manera precisa que los zombies caían muertos sin soltar gruñido alguno. Reviso rápidamente el lugar, pero su mirada se detuvo sobre una sola persona, tenía que ser una maldita broma. Helena observo que Leon parecía paralizado y tan pronto ella dio un paso hacia el frente el retrocedió y volteo a verlos.
—Corran, Ahora— les ordeno. Sherry y Helena por inercia acataron la orden al ver el rostro del Kennedy, Jake lo pensó por un momento, pero supo que era grave cuando escucho a los demás que estaban en el interior acercarse. Corrieron lo más rápido que podían hasta alcanzar el pasillo por el cual habían llegado, pero el ruido de disparos atrajo a zombies desde el pasillo derecho que parecían haber estado en un trance de tranquilidad, ya que tan pronto el ruido de las armas sonando los hizo reaccionar acercándose.
—Mierda— maldijo Helena disparándoles, Sherry la acompaño en esto, pero notaron que no tenían balas suficientes para aquello por lo cual continuaron corriendo. Jake agarro la muñeca de Sherry y la hizo avanzar mas rápido mientras Leon intentaba dispararles a los zombies para retrasarlos, pero cuando se volteo para volver a dispararles noto que los de Umbrella se acercaban y que parecían no importarles los zombies con tal de atraparlos. Cuando estaban llegando a las otras puertas, aquellas que podrian cerrar dejandolos separados por al menos el tiempo suficiente como para escapar, los escucharon.
—¡Alto ahí! — exclamo uno de los hombres. Leon y Jake voltearon a ver y notaron que estaban demasiado cerca. Al verse acorralados los hombres se detuvieron y cubrieron a las mujeres en caso de tener que hacer algo arriesgado, ellas podrían defenderse mejor y correr más rápido, lograrían escapar. Sherry y Helena notaron que el Kennedy y el Muller se habían detenido y voltearon a verlos.
—¡Las manos arribas, arrojen las armas!— exclamo uno de los hombres en el medio de la formación. Junto a él estaba a quien Leon había visto, pero ahora cubierto por un casco que no permitía ver su identidad.
—Corran— murmuro Leon. Sherry y Helena dieron unos imperceptibles pasos hacia atrás dándoles espacio a los hombres para voltearse y correr, con rapidez ambas voltearon y Jake también, Leon no alcanzo a moverse de ahí recibiendo un disparo en el pecho por parte del hombre con el casco. Jake lo vio caer al suelo, no dejaría que el temor de Scott se volviera realidad, no dejaría que el Kennedy muriera ahora. Se lo había prometido a Scott.
—¡Sáquenlo de aquí! — exclamo volteándose y disparando. Helena y Sherry se acercaron al Kennedy y notaron que aun respiraba pero que había sangre en su camisa. Con fuerza lo cargaron lo que más pudieron y atravesaron el arco en donde las puertas se encontraban. Jake a cada disparo daba un paso hacia atrás intentando que las balas de ellos no lo alcanzaran, noto que quien llevaba el casco no se había movido, antes de que pudiera ver más las puertas se cerraron y noto que ya había pasado el arco. Se acerco rápidamente y coloco las barras de seguridad mientras ellas sostenían las puertas. Se acerco a chequear al Kennedy notando que el sangrado no era tanto como esperaba de una herida de bala y es que lo que tenia enterrado en su pecho no era una bala o al menos una común y corriente.
—Aún respira, ¿Qué es eso? — pregunto viendo el dispositivo enterrado en la piel del agente.
—No lo sé— hablo Sherry quien se había acercado a revisarlo también.
—Lo averiguaremos después, lo mejor será salir de aquí— hablo la Harper al notar que las puertas comenzaban a ser sacudidas por la fuerza de los demás al otro lado. Con cuidado ayudo a Jake a cargar a Leon cada uno sosteniendo un hombro. Sherry los guiaba, pero todos se detuvieron al ver que por el pasillo que había llegado también lo habían hecho otros zombies.
—Deben haber escuchado los disparos— hablo la Birkin deteniéndose. —No podremos salir por ahí.
—Tampoco podemos regresar— hablo la Harper. Jake busco con la mirada alguna otra salida y noto el cuarto de control.
—Ahí, entremos— hablo, pero antes de que pudieran avanzar con tranquilidad, los zombies los alcanzaron. Helena soltó el brazo de Leon que cargaba sobre el hombro para tomar su arma y la del Kennedy así apoyar a Sherry con los disparos mientras se acercaban a donde el Muller había señalado. Este ultimo noto que la respiración de Leon se hacía dificultosa y que no había manera de hacerlo reaccionar.
—Hey, hey, el enano y la pequeña necesitan a su padre así que resiste— dijo mientras lo intentaba arrastrar con tan solo un brazo rodeando su torso mientras que con el otro apuntaba con su arma a los zombies.
Sherry abrió la puerta y así lograron entrar, ya adentro ella se encargo de Leon mientras él con Helena hacían una barricada en la puerta con los muebles cercanos. La Birkin reviso el estado de su antiguo tutor preocupada, Leon no parecía recobrar la conciencia y tampoco el poder respirar de manera regular. Helena encendió la linterna y se acerco para verlo mejor.
—¿Que será esa cosa? — pregunto al ver un tipo de dardo incrustado en la piel del Kennedy.
—No lo sé, quizás será mejor quitárselo— hablo la morena presionando la piel de Leon, para ver si había señal alguna de dolor, pero el Kennedy pareció no sentirlo.—No parece haber hemorragia— dijo revisando la piel alrededor del objeto.
—Entonces quítalo— le dijo Jake a Sherry, el no se atrevía, no es que le tuviera miedo ni nada parecido, pero temía arruinarlo quitándolo muy fuerte o provocando algo. Con cuidado la Birkin acerco su mano y retiro el objeto que ahora claramente se notaba que era algún tipo de dardo.
—¿Que tenia? — pregunto preocupada la Birkin al ver solo pequeños rastros de un liquido rojo en el interior. Jake frunció el seño y lo tomo para verlo más de cerca.
—No lo sé, pero no debe ser bueno como para ser disparado en contra de nosotros.
—¿Que haremos ahora? — pregunto la agente rubia acomodando a quien fuera su tutor sobre unas viejas colchonetas.
—¿Creen poder salir y ir por ayuda? — les pregunto el Muller colocándose de pie y recorriendo la habitación hasta el final de esta.
—¿Como piensas que saldremos cuando estamos confinados en este cuarto? — pregunto con seriedad Helena. El pelirrojo volteo a verlas y les indico con la linterna un conducto de aire que estaba por sobre un estante. —Son las únicas que caen por ahí y lo más seguro es que salga al exterior.
Ambas se miraron esperando tener algo que decir en contra, pero la situación ameritaba el sacrificio de entrar ahí y encontrar quien sabe que al final de este. Ambas asintieron y se pusieron de pie, caminaron hasta el mueble, sin ayuda alguna Helena lo subió y se arrodillo sobre este.
—Hey súper chica, lo mejor será que vayas a la base y le digas a la espía. Algo no me da buena espina en todo esto. — le dijo entregándole su arma, que tenía más balas y una linterna.
—¿Por qué? — pregunto mientras se equipaba, Helena mientras tanto estaba abriendo la malla de seguridad del conducto.
—Recuerda que el vio algo allí adentro, algo que lo asusto como para hacernos correr y ser al único que le dispararan esa cosa.— respondió mientras miraba de soslayo al Kennedy que descansaba aun sobre las colchonetas.
—Bien— asintió. La Harper saco la malla y apunto hacia el interior con la linterna.
—Se ve asqueroso— dijo con una cara seria mirando de nuevo al Muller. —Más vale que tengas razón.
—Siempre la tengo— Sherry lo miro extrañada y Helena solo arqueo una ceja antes de entrar en el conducto de ventilación. Jake ayudo a la Birkin a subir y antes de que entrara volteo a verlo nuevamente.
—Cuidado— murmuro, el solo sonrió de lado y asintió.
—Ten el comunicador prendido, el mío siempre lo estará— dijo a lo que ella asintió.
—Sabrás si me encuentro una rata en el camino, te amenazaré como jamás nadie lo ha hecho— Jake sonrió y ella solo entro en el lugar para alcanzar a Helena quien ya iba un par de metros adelante.
El Muller bajo del estante de tamaño medio en donde se había parado para ayudar a la Birkin y se acerco a Leon. Se notaba que parecía tener fiebre y que algo le dolía debido a su ceño fruncido. Tomo nuevamente el dardo y lo observo. Sabía que lo había visto en algún lado, pero no podía recordar donde. Volvió a observar a Leon y noto que parecía respirar con más dificultad que antes.
Recordó uno de esos días en los que había sido obligado por la ex-espía para hacer de niñera, se encontraba en el patio trasero con el pequeño Scott descansando tras haber jugado todo el día. Leon estaba trabajando y Ada había llevado a Amy al doctor por lo cual Scott había estado preocupado por su hermana menor durante todo el juegos.
—Hey, ¿Sigues preocupado enano? — pregunto el pelirrojo recostándose en el pasto con sus brazos tras su cabeza y esta levemente vuelta hacia un lado para mirar al Kennedy.
—Si— asintió algo cabizbajo —Mamá dijo que Amy se pondría bien, pero ella no dejo de llorar anoche.
—Bueno, es normal que los niños se enfermen— hablo sonando tranquilo para no preocupar aun más al niño. —Pronto estará bien y no llorará por las noches.
—Papá me dijo que cuando el no estuviera yo debía proteger a mi hermana, pero yo no quiero que él se vaya, aun no puedo cuidarla. No quiero que le pase nada a mi papá, se que él tiene un trabajo peligroso, lo escuche hablar con mi mamá, y tengo miedo de que nos deje, solo el nos puede cuidar.
—No le pasara nada malo a tu papá, y lo que sientes por tu hermana es preocupación de hermano mayor, no tengo hermanos menores pero sé lo que se siente el querer protegerla a toda costa, pero no siempre puedes, por ejemplo ahora eres muy pequeño, por eso debes dejar que ahora lo haga tu mamá y tu papá— le explico con paciencia mientras el pequeño rubio escuchaba atento.
—Entonces, cuando crezca protegeré a mi hermanita— dijo decidido el pequeño, Jake miro sonriente al niño y asintió. Extendió su brazo hasta alcanzar con su palma la cabeza del pequeño y revolvió su cabello.
—No lo dudo— volvió a recostarse y cerro sus ojos, escucho al niño moverse junto a él, pero no hizo nada.
—Señor Jake— el hijo de Wesker hizo un ruido que asemejaba a un "¿Qué?" y el niño volvió a hablar.—Y usted, ¿Por qué me protege? — pregunto el niño curioso. Jake miro algo sorprendido a Scott, no lo había pensado bien antes, es decir, al principio lo había cuidado porque no quería que aquel niño sufriera lo que él sufrió de pequeño, pero ahora lo hacía inconscientemente, es decir, jamás habría aceptado ser niñero pero esos dos niños lo cambiaban todo. El Muller tomo aire y miro al pequeño.
—Para mi eres como un hermano menor, por eso te cuido— Scott sonrió feliz por lo dicho por el pelirrojo.
—Gracias por cuidarme, usted, el señor Chris y mi papá, son los mejores hombres del mundo y algún día seré uno como ustedes.
Y así también recordó lo que habían hablado horas antes en el parque mientras esperaban al matrimonio. Mientras Sherry cuidaba de la pequeña Amy, Jake estaba cuidando al primogénito de la "espía" en los juegos para niños. El pelirrojo miraba atento a que el niño no se cayera, pero se sorprendió cuando el mismo Scott se detuvo de súbito y volteo a mirarlo.
—Señor Jake— El Muller lo miro fijamente y alzo una ceja. —¿Mis papás estarán bien?
—Claro— respondió cruzándose de brazos y apoyando su espalda contra un pilar de los juegos.
—Es que... — el pequeño se sentó en la orilla del juego y se afirmo del barandal mientras miraba al Muller. —Siempre hay problemas.
—Tranquilo enano— el Muller le sonrió para luego acercarse y apoyar su mano sobre la rubia cabellera del niño y alborotarla. —Yo los ayudaré si hay problemas, lo prometo.
Y ahora era lo que debía hacer, cumplir su promesa e intentar que el Kennedy no muriera por lo que fuera que le hubieran inyectado. No podía recordar de donde había visto aquel liquido, ¡todos se parecían!, pero sabía que había algo malo, algo peor con aquel. Y aun tenia la duda de saber quién era el misterioso hombre que había llegado a sorprender al agente. Se levanto y camino hacia la puerta para ver por el cristal sobre esta y noto que parecía no haber nadie al rededor. Como si los zombies y los agentes hubieran desaparecido por arte de magia. Aunque eso hubiera tranquilizado a cualquiera no lo hizo con el Muller, era una mala señal tanta tranquilidad, era como encontrarse en el ojo del huracán.
.
Entraron con rapidez a la base antes de que los guardias, que por suerte las habían visto, cerraran las puertas dejando a los infectados tras estas. Ambas estaban agotadas de todo lo que habían tenido que correr. Jake había tenido razón y aquel conducto de ventilación terminaba en un callejón tras el edificio que ocupaba la clínica, desde ahí habían corrido todo lo que sus piernas les habían permitido hasta alcanzar un lugar seguro, descansaron y notaron que estaban a tan solo un par de cuadras de la base. Habían recorrido gran parte de las afueras de la ciudad y agradecían que no tuvieron que cruzar esta, ya que sin más municiones y energías habría sido su fin. Recobraron el aire rápidamente y corrieron de nuevo hasta el interior del edificio, subieron al ascensor haciéndole el quite a los guardias que habían intentado detenerlas y subieron hasta el piso en donde el control todas las operaciones se monitoreaban. Mientras el aparato mecánico subía Sherry noto que había un mensaje de Jake en su celular.
"Está empeorando, tiene fiebre y parece que algo le duele, apúrense"
Tan pronto el ascensor se detuvo ambas corrieron por el pasillo pasando frente a la sala de las computadoras y pasando junto al corredor en donde se encontraban las habitaciones. Ada, quien justo se había asomado para salir vio a la castaña pasar rápidamente.
—¿Helena? — dijo sorprendida al ver a la castaña correr por el pasillo y entrar en la sala de control. Le indico con un gesto a Scott que se mantuviera ahí y salió de la habitación rápidamente, pero antes de llegar a la esquina del pasillo y dar la vuelta se encontró de frente con Sherry, quien exhausta había chocado con ella.
—Ada— dijo sorprendida la rubia al reconocer a la esposa de su antiguo tutor.
—¿Sherry? — pregunto sorprendida por la presencia de la exhausta rubia, pero se preocupo al verla regresar sola, lo cual noto al mirar tras ella —¿Y los demás?
Noto que la mirada de la agente cambio drásticamente, así también su respiración. La Birkin intento controlar esta ultima al inhalar y exhalar, para luego tomar aire y hablar.
—Están en un laboratorio escondidos— respondió con algo extraño en su voz, pero que alerto a la morena. —Leon... le dispararon, esta grave.
Su pesadilla se había hecho realidad, Leon había estado al borde de la muerte o quizás aun lo estaba y podría ser el fin.
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