Reseñado por talitaisla

¿Quién dijo que toda la poesía tenía que ser en verso? Abraxas, de SamanthaHirszenberg, muestra lo flexible que puede llegar a ser el género poético en manos de una buena escritora. A lo largo de sus 12 partes, el poemario sondea los sentimientos de seres tristes y angustiados, y que a menudo son testigos de su propia destrucción.

Abraxas, la palabra que le da nombre, es una deidad que representa la unión entre el cielo y el infierno, el mediador entre el bien y el mal, la razón y la pasión. En otras palabras, representa la unidad que nace del autoconocimiento. Y eso mismo es lo que encontraremos en este poemario: un 'yo' envuelto en hilos que poco a poco van desenvolviéndose. Como una araña que teje con hilos con los que atrapar a sus propias presas, o a sus demonios.

De la prosa poética de Samantha destacamos el detalle, el cuidado y lo plástico de la forma en que construye descripciones sobre el cuerpo y la naturaleza. Ambos espacios suelen enzarzarse para crear paisajes que nos recuerdan constantemente cuál es el ciclo de la vida. Como escribe la autora en el poema 'Perversidad Neonata': "Mi nacimiento siempre significará tu muerte".

El ciclo que siguen todas las cosas es fundamental en el poemario. No en vano, la imagen de una mariposa (ser cíclico por excelencia) encabeza cada uno de los poemas. El néctar, las larvas, los parásitos... En todas esas imágenes la autora plasma una consciencia profunda de cómo vivir es sabiendo que al otro lado aguarda la quietud del descanso.

Abraxas es sin duda el poemario indicado para aquellos lectores que tengan ganas de dejarse llevar por imágenes reveladoras, que anudan lo libertad de la poesía y la precisión de la prosa. Ahí vemos también al dios de la unidad: tendiendo puentes entre aquello que parece separado por las (falsamente) inamovibles categorías de los géneros. ¡No esperábamos menos de la autora que en 2019 ganó un Watty por su obra 'Bóreas'!

Os dejamos algunos de los versos destacados de Abraxas. ¡Hasta el mes que viene!