✨Capítulo 2✨
Comienza la búsqueda
En los pasillos de Hybe, la empresa para la que trabaja Bangtan Sonyeondan corría Bang Shi Hyuk con desesperación. Él era el fundador de la banda, quién seleccionó a cada miembro de BTS en el pasado y quien hizo que el grupo fuera recorriendo todo el mundo. Claro que nada de eso hubiera sido posible sin el esfuerzo de cada uno de los siete integrantes, sin embargo Bang PD fue el primero en creer en ellos como grupo. Él era bajito, piel morena, regordete, ojos rasgados, cabello negro, lentes de aumento y lucía un traje ejecutivo.
Lleno de sudor llegó al camerino en el que se encontraban los seis integrantes que acababan de llegar de la entrevista fallida. Furioso, preocupado y desconcertado les gritó al llegar.
—¡¿Me pueden decir dónde carajos esta Jeon Jungkook?!
Los seis se miraron los unos a los otros sin saber qué decir. ¿De verdad Bang Shi Hyuk no sabía dónde estaba Jungkook? Porque de ser así entonces estaban en verdaderos problemas.
—¿Por qué se quedan callados? —Cruzó los brazos molesto.
—Para empezar quiero que bajes tu tono de voz —advirtió Yoongi mirándose las uñas, Bang PD cerró la puerta del camerino con llave sentándose en la pequeña sala blanca junto con los chicos.
—En todos los años que llevamos juntos nunca habíamos quedado mal en una entrevista. ¿Dónde está Jungkook?
—La cosa es que no sabemos —dijo Namjoon—. Creímos que quizás tú podrías saberlo. Pero ya veo que no...
—¡Diablos Nam! ¡¿Por qué no cuidas a tus miembros?! —le reclamó, al ser Namjoon el líder el peso de las acciones de cada miembro caía sobre sus hombros.
—Yo podría decir lo mismo, ¿Por qué no cuidas a tu grupo? —preguntó Yoongi, él nunca se quedaba callado a la hora de responderle a Bang PD.
—Cálmense los dos, creo que es mejor tratar de dar con Jungkook primero. La última vez que lo miramos fue anoche y ya han pasado...
—Dieciocho horas —contestó Jimin interrumpiendo a Namjoon, su voz irradiaba preocupación.
—A cada segundo le llamo por teléfono, pero me sigue mandando a buzón —murmuró Hobi con cansancio—. ¿Y si le pasó algo grave? —preguntó asustado.
—¡No lo digas ni de broma! —Jin golpeó el brazo de Hobi y este lo miró con el ceño fruncido.
—¿Y si está con la chica misteriosa...? —susurró Taehyung.
—¿Chica? ¡¿Qué chica?! —gritó PD.
—¡¿Por qué delatas a tu amigo?! —se quejó Jimin.
—¡Porque está desaparecido, Jimin! ¡Estoy preocupado por su bienestar!
—Ya envié agentes a las cinco casas de Jungkook y en ninguna se encuentra. Ahora mismo están buscando su automóvil, y ahora que lo mencionan, seguramente está en algún hotel con esa chica —dijo Bang PD rodando los ojos—. Cuando lo encuentre, voy a hacerle... ¡Les juro que voy a...
—Le tocas un solo cabello a Jungkook y no solo te enfrentarás conmigo, te enfrentarás con todo Army —amenazó Namjoon molesto por la reacción de Bang PD ante la desaparición de Jungkook.
—Solo estoy preocupado, al igual que ustedes. Jungkook es parte de mi familia. —Su voz estaba a punto de quebrarse.
—Lo sabemos, pero ahora es momento para estar unidos —dijo Jin tratando de aligerar las cosas.
—Estoy seguro de que Jungkook está bien —dijo Yoongi—. Además de ser el chico más talentoso que conozco es inteligente, audaz y fuerte. —Se mordió el labio—. Preocuparnos hará las cosas más lentas, será mejor esperar con paciencia.
De pronto alguien llegó a la puerta del camerino tocando frenéticamente. Namjoon fue quien abrió, una miembro del Staff que estaba con semblante decaído dijo frente a todos la noticia que estaba rondando no solo por toda la empresa, sino por todos los medios de comunicación.
—El auto de Jungkook fue encontrado a las afueras de un bar de los barrios bajos.
Todos ampliaron los ojos sorprendidos, pero más que nada asustados y preocupados por el bienestar del muchacho.
—Se está emitiendo en las noticias —añadió.
—¡¿Quién filtró esa información?! ¡¿Y por qué soy el último en enterarme?! —cuestionó Bang PD en un grito furioso.
Jimin encendió la televisión rápidamente, encontrando el canal de las noticias y subiendo el volumen para que todos escucharan.
—Es un bar de mala muerte, se dice que una noche anterior ocurrieron disparos, pero lo que más preocupa es que un artista de talla mundial dejó su automóvil en ese sitio. ¿Es parte de la delincuencia? ¿O fue víctima de las circunstancias? Lo alarmante es que la banda coreana más exitosa del mundo hoy tenía una entrevista con nosotros y la ha cancelado por motivos personales. ¿Serán esos motivos personales a causa de Jeon Jungkook?
—¡¿Cómo supieron que el auto de Jungkook es ese?! —cuestionó Seokjin.
—Fácil, un soplón —dijo Yoongi.
—Odio que vendan nuestra información privada, me hace sentir que no soy libre —se quejó Taehyung.
—Todo esto, que Jungkook no aparezca comienza a inquietarme, repito, ¿Y si le pasó algo malo? —preguntó Hobi.
—¡Dios ya no puedo más! —gritó Jimin desesperado y comenzó a llorar. Taehyung lo abrazó de lado brindándole su apoyo mientras comenzaba a llorar también.
—Tranquilos, vamos a estar bien. Siempre estamos bien. —Namjoon trató de calmarlos.
—Será mejor contactar a los medios de comunicación y tú. —Bang PD señaló a Namjoon—. Vas a decir que todos estamos bien, que Jungkook vendió su auto y que no quiere dar entrevistas.
—¿Quieres que mienta? —preguntó indignado.
—Army va a alarmarse, ¿Quieres eso?
—¡No voy a mentirles! —gritó Namjoon.
—Eso, será mejor decir la verdad. Si Jungkook no aparece comencemos a buscarlo por cielo mar y tierra —opinó Yoongi.
—Nadie puede saber que está desaparecido, de lo contrario recibiremos muchas burlas, hate y la presión del fandom será mucha —dijo Bang PD.
—Army puede ayudarnos a buscar, ellos son increíbles —opinó Hobi.
—Entonces... —PD apretó los labios resignado—... Ustedes ganan, esperemos un poco más y daremos un comunicado a la prensa. Pero más vale que aparezca.
—¿Mientras tanto qué? —cuestionó Yoongi—. Jungkook debe ser buscado por la policía.
—Ya lo están haciendo, ¿Crees que no tengo el suficiente dinero como para movilizar a todo el país? Lo están buscando hasta por debajo de las piedras.
—Pues no veo que esté dando mucho resultado —masculló Seokjin.
—¡¿Y si alguien lo secuestró?! —preguntó Jimin entre lágrimas.
—¡No lo digas ni de broma! —Hobi lo regañó.
—Pero no podemos descartar eso por ahora —dijo Bang PD—. Todos estén pendientes a sus teléfonos y por favor cualquier detalle háganmelo saber, que necesitamos encontrarlo sano y salvo.
—Va a aparecer y mañana nos estaremos riendo de este día —dijo Namjoon con esperanza en la voz.
Darle la noticia al mundo entero acerca de la desparición de Jungkook se aplazó por una semana más, incluso sus padres no estaban enterados acerca de eso porque si sabían iban a querer movilizar todo. La investigación acerca del caso tenía vueltos locos a los criminólogos más experimentados y capacitados, vaya incluso el ejército de Corea del Sur comenzó a buscarlo por las calles del país sin lograr buenos resultados. El día en el que los seis miembros de la banda darían el anuncio acerca de la desparición había llegado. Ellos vestían un traje negro cada uno, lucían decaídos, tenían los ojos rojos de tanto llorar e incluso estaban tomando pastillas para lograr concebir el sueño durante la noche. La rueda de prensa que darían iba a ser en vivo y en directo, ellos esperaban cualquier noticia acerca de su hermano más pequeño y sabían que Army ayudaría a buscarlo.
Los seis se sentaron frente a una mesa blanca y larga que tenía seis micrófonos. Frente a ellos las cámaras y Bang PD apoyándolos tras bambalinas. Luego de presentarse, el entrevistador comenzó con la primera pregunta.
—Bueno chicos, todos estamos sorprendidos porque nos pidieron realizar una entrevista. ¿Esto a qué se debe? ¿Se trata de incidente con el antiguo auto de Jungkook? Por cierto, ¿dónde está él?
—Eso quisiera saber —murmuró Jimin, pero nadie lo escuchó.
—En esta ocasión no daremos exactamente una entrevista. Queremos dar un comunicado primeramente a Army, y después al mundo entero —dijo Namjoon sonando más serio que nunca, después de eso suspiró con profundidad y endureció la quijada-—. El automóvil que encontraron en aquel bar sí era de Jungkook. —El entrevistador parecía sorprendido.
—¿Y por qué la empresa dijo que Jungkook lo había vendido? ¿Tuvo un accidente? ¿Dónde está él?
—Como dije antes, daré un comunicado, no una entrevista —contestó Namjoon tratando de sonar calmado, pero se escuchaba molesto y cansado de la situación. Aunque en realidad estaba tratando de ser fuerte para no desmoronarse ante la cámara pues la noche anterior no durmió llorando por la desaparición de Jungkook.
—Lo siento, puedes continuar.
—Desde el 10 de marzo no sabemos nada acerca de él, Jungkook desapareció.
De pronto Seokjin comenzó a sollozar, no pudo seguir permaneciendo fuerte ante la cámara. Jimin arrastró su silla para recargar la cabeza en su hombro y juntos lloraron. Taehyung puso sus codos en la mesa y ambas manos en su rostro para cubrirse, pero las lágrimas no paraban de gotear encima de la mesa. Hoseok puso su mano cerca de su nariz limpiándose los mocos y lágrimas mientras trataba de mantener la compostura, pero llorar le era inevitable. Incluso Min Yoongi que no acostumbraba a demostrar sus sentimientos rompió en llanto, con la cabeza baja escuchaba las palabras de Namjoon deseando que todo eso fuera una terrible pesadilla.
—¿Cómo que desapareció?
—Así como escuchas. Ya se hizo hasta lo imposible para encontrarlo, sin embargo no lo hemos encontrado. Por eso quiero pedirle a todos los que vean este vídeo que si saben algo acerca de él, cualquier cosa nos lo notifiquen. Estamos devastados, no podemos creer lo que está sucediendo.
—Lo siento mucho chicos, sé que esto es duro para ustedes —dijo el reportero.
—Army... —Namjoon miró directo a la cámara, las lágrimas comenzaban a asomarse por sus ojos—. Hoy más que nunca necesitamos estar juntos, demostrar lo fuerte que somos, demostrar de lo que estamos hechos. Demostrar que en realidad somos a prueba de balas y que podemos superar cualquier obstáculo. —Lágrimas gruesas comenzaron a caer por las mejillas de Namjoon mientras decía cada palabra.
»A partir de hoy Bangtan Sonyeondan no hará ninguna actuación, tampoco tendremos nuevos lanzamientos... —Pronto la rueda de prensa y las palabras de Namjoon fueron transmitidas por todo el mundo captando la atención de army e incluso de personas que nunca en su vida habían escuchado la música de BTS—. Y si Jungkook no aparece, nos disolveremos. Estos han sido unos días difíciles para nosotros, los peores días desde que debutamos. Por favor, ayúdanos a encontrarlo.
—Lo siento mucho chicos —dijo el reportero tocando el hombro de Namjoon y este se quedó en silencio agachando la cabeza.
—Yo... Em... —comenzó a hablar Yoongi—. Este mensaje va para Jungkook. Si estás viendo esta transmisión, si la estás pasando mal quiero que sepas que te voy a encontrar. Y si la estás pasando bien, entonces regresa... —Un silencio invadió el estudio porque Yoongi trataba de quitarse de la garganta el enorme nudo que se le había formado, mientras trataba de calmarse, de dejar de llorar—. Te necesitamos, te necesito más de lo que un día pude llegar a imaginar.
—¡Army! —gritó Hoesok y la cámara lo enfocó—. Te ruego que nos ayudes a encontrarlo, estamos desesperados, no dormimos, no comemos, no sonreímos, hasta comienzo a creer que estoy enloqueciendo. ¡Te lo ruego Army, ayúdanos a difundir la noticia! ¡Y Jungkookie aquí voy a estar esperándote hasta que regreses sano y salvo!
—Jungkookie... Él es sin lugar a dudas el niño dorado de Corea del Sur —dijo Taehyung, seguido de eso lamió su labio inferior—. Mi amigo, mi hermano, mi todo. Desearía que todo esto fuera una camara oculta, una broma de mal gusto, pero no es así. Cada mañana despierto y voy a su habitación tratando de encontrarlo dormido sin calcetines y enredado entre las sábanas, pero no está. Incluso los plátanos del refrigerador se pudrieron porque a ninguno de nosotros nos gusta el plátano tanto como a él. No voy a mentir, estoy destrozado... Tanto que siento que voy a morir.
—Canguro... ¿Quién va a cuidar mis espaldas si no estás tú? —preguntó Seokjin en un susurro, pero el audio del directo logró captarlo. Millones de Armys alrededor del mundo estaban llorando en ese momento sin lograr creer lo que estaba sucediendo—. Bangtan no es nada sin uno de los miembros, los siete somos parte fundamental. Y justo ahora siento que me han arrancado un pedazo de mi alma. Quiero saber si Jungkook comió, si durmió bien, si ha reído, pero no sé nada y me frustra pensar que está herido. Por eso le pido a la policía que lo encuentre pronto... —Seokjin iba a decir algo más, pero el nudo en su garganta no se lo permitió, así que terminó con un—: gracias.
—Él llevaba un sueter amarillo el día que desapareció, tenía una enorme sonrisa traviesa aquella noche cuando dejó la casa —soltó Jimin de pronto—. Jungkook es un ángel que merece el mundo entero y estuvo a punto de tenerlo... si alguien sabe de su paradero dígame. Daré todo lo que tengo, todo lo que soy, pero devuelvanme a mi bebé... —Comenzó a llorar desconsolado.
A partir de ese momento Army comenzó a presionar no solo al gobierno de Corea del Sur, sino también al gobierno de sus respectivos países. Haciendo que los mandatarios no tuvieran otra opción más que ayudar en la búsqueda de Jungkook. Army organizó marchas en las afueras de los edificios gubernamentales de todos los países del mundo, incluso manifestaciones pasivas, otras Armys comenzaron a contactar detectives privados gracias a los fondos que tenían en las fan bases y dejaron de lado votaciones, stream e incluso responsabilidades de sus vidas privadas para concentrarse en la búsqueda del cantante.
El mundo que conocíamos ya no existía, porque un grupo de hombres y mujeres de todos los países causaron gran impacto en la sociedad con tal de encontrar a Jeon Jungkook.
Las calles estaban llenas de personas que vestían camisas color púrpura, algunas lisas, otras con estampados, otras con el nombre de la banda, pero todas tenían el mismo propósito: identificarse entre la multitud para que el gobierno notara que Army no se iba a quedar en silencio, que vieran que necesitaban respuesta, y que querían a Jungkook a salvo.
Pasaron únicamente 72 horas desde que salió al aire la noticia de su desaparición cuando el jefe de seguridad nacional de Corea del Sur llegó a la casa donde se estaban quedando los seis integrantes de Bangtan. Él era un hombre asiático, media 1.90 de estatura, sus canas blancas perfectamente acomodadas y recortadas estilo militar. Él con su uniforme de trabajo y zapatos bien lustrados se sentó en la sala de la casa. Fue Bang PD, su secretaria que era la segunda al mando y Namjoon quienes lo recibieron.
—¿Tienen noticias? —Preguntó Namjoon al sentarse, sus ojos lucían desorbitados y su semblante decaído.
—Tenemos noticias, pero es imperativo que mantengan todo lo que les voy a decir en secreto. —Bang PD cruzó los brazos.
—¿Secreto? ¿A qué se refiere con secreto? —cuestionó la secretaria. Ella era asiática, de piel blanca amarillenta, cabello rubio cenizo lacio hasta los hombros, llevaba un fleco recto que hacía ver sus rostro todavía más pequeño de lo que era. Ella muy elegante al hablar, caminar e incluso al reír.
—El diez de marzo hubo un enfrentamiento en el bar donde encontraron en automóvil del señor Jeon Jungkook, y muchas personas murieron aquella noche.
—¡No puede ser! —exclamó Namjoon creyendo lo peor.
—Las armas que se utilizaron son tecnología que nosotros no poseemos todavía, así que creemos que se trata de un ataque alienígena.
—¿Es una broma, cierto? —cuestionó Bang PD al ponerse de pie lleno de indignación.
—La información que les estoy entregando no puede salir a la luz, porque todavía no se confirma de dónde llegaron ese tipo de armas. Además no queremos alarmar al pueblo.
—¿Y Jungkook? ¿Dónde está él? ¿Tienen alguna pista?
—El dueño del bar nos dijo haber visto a un joven con sus características, dice que llevaba un sueter amarillo holgado, cubre bocas negro y que estaba con una señorita muy atractiva... —El jefe de seguridad suspiró—. Nos dijo que los alienígenas, si es que así quieren llamarlos estaban atacandolos a ellos y que ambos escaparon por la puerta trasera del bar.
—Es que esto parece una broma —masculló Namjoon endureciendo la quijada.
—No espera. —Bang PD señaló al jefe de seguridad— ¿Podemos ir a ver el lugar de los hechos?
—¡¿Ver el lugar?! ¡¿De verdad crees todas las mentiras que te está diciendo?! —preguntó Namjoon en un grito al ponerse de pie sin poder creer las palabras del jefe de seguridad.
—Lo que digo no es mentira y es un secreto nacional. Además si relacionamos lo sucedido con las declaraciones de Park Jimin, quien fue la última persona que miró a Jeon Jungkook antes de su desaparición. Podemos confirmar que ambos sabían que esa noche sería peligrosa, entonces llegamos a dos conclusiones con nuestras investigaciones.
»Numero uno: Ambos sabían de la existencia de los alienígenas. —Namjoon rodó los ojos con fastidio, pero el jefe de seguridad lo ignoró—. Numero dos: Park Jimin le tendió una trampa a Jeon Jungkook.
—¡Esto es inaudito! —gritó Jimin saliendo de su escondite.
Pues resulta ser que el resto de los miembros estaban escondidos atrás del muro de las escaleras en forma de caracol para escuchar la conversación. Todos parecían molestos ante los comentarios del jefe de seguridad, pues creían que les estaba tomando el pelo, sin saber que en realidad él estaba muy, muy, muy cerca de dar con la verdad y con el paradero de Jungkook.
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Haaaaaasta aquí el capítulo de hoy, espero que te haya gustado💜. ¿Crees que Jimin traicionó a Jungkook? Y de ser así ¿Por qué lo haría? Y lo más importante ¿Por qué se llevaron a nuestro conejito a otro mundo?
Admito que lloré cuando escribí lo de la entrevista🥺 y si te gusta llorar y no lloraste vuelve a leer esa parte con música triste de fondo, vas a ser un mar de lágrimas.
Aclaraciones: El accionar de Bang PD en el libro es propio de la trama, al escribir esto no estoy diciendo que él actuaria de una u otra manera.
En cuanto a Army, creo que quemaríamos todo para encontrar a nuestro conejito, o a cualquiera de los chicos, sin más que decir les deseo una linda semana. Borahae💜✨
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