L.2 Capítulo 26
Izuku Yagi
01/01/2019
Un corte, Uno... dos cortes, Dos... tres cortes, Tres, Cuatro, Cinco, Seis...
¿Cuándo mi vida se volvió un continuo contador?
Se suponía que anoche me divertiría en mi primer año nuevo con Toshinori, me sentía feliz comprando ese traje, a pesar de que no me sentía yo mismo, aunque al menos no me veía mal; anoche fue el recordatorio de todo lo que odio en mi vida, todo lo que no deseo llegar a ser.
Se supone que sería divertido, pensaba que la pasaría bien, pero no es solo el asunto de Shoto y Monoma, es la fiesta en la mansión de los Todoroki, me sentía raro, no calzaba, no me sentía cómodo... extrañaba a mis conocidos, a mis amigas, a los Sres. Uraraka...
Extrañaba esa normalidad que a muchos les aburriría, pero a mí me fascina, amo las cosas sencillas, sin máscaras que ocultan la condescendencia y el elitismo, sin máscaras que ocultan tu verdadero ser...
Estar en esa fiesta significaba volver a utilizar una máscara, al fin estoy destruyendo la otra para ser una nueva persona, una que se acepte a sí misma y por tener que aparentar con desconocidos millonarios tenía que crear otra.
Fueron demasiadas máscaras por una noche, una aterradora presión por no demostrar miedo, frustración, ira y tristeza, en ningún momento pude ser simplemente yo y nada más, siempre tuve que estar alerta en la toma de mis acciones.
Con Shoto no iba a demostrar que dolía, es rara esta palabra, creí que ya no existía en mi vocabulario, pero no quería que aplastara mi orgullo.
"Orgullo"
¿Desde cuándo volvió eso en mí? ¿Cuándo volvió a resurgir eso en mí? Pensé que Bakugo y mis excompañeros lo habían eliminado completamente.
Interesante, si sigo el camino que por ahora estoy tomando temo terminar en un mal rumbo y no, no digo que seré un maldito adicto o un perro que agacha la cabeza ante un niño mimado, tampoco seguiría ciegamente a Shoto, no soy tan idiota e inocente para caer en las promesas falsas.
Temo a las emociones negativas, temo equivocarme en mis decisiones y lastimar indirectamente a las personas que quiero...
"Temes ser completamente un ser humano"
Ya he cometido errores por mis acciones, la mayoría por mis intentos de suicidio o por olvidar que ahora tengo seres queridos; jamás se me ha dado la oportunidad de cometer otro tipo de errores.
Mis disculpas de antaño eran más que nada por existir o por algo que no merecía.
Gracioso, me siento diminuto al no lograr comprender todos los sentimientos.
Comprendo la tristeza y el dolor; llevo poco tiempo asimilando nuevamente qué es la felicidad, siento diversión, puedo reír y sonreír de forma autentica; también creo comprender cada día mejor el amor romántico; siempre he sentido empatía; el miedo, bueno eso es algo continuo y creo que tardaré en erradicarlo; el odio, ese sentimiento que tengo y que he aceptado que jamás se marchará de mi corazón... una emoción que perdura y que me da miedo lo que puede llegar a generar.
La ira.
La he experimentado pocas veces y la mayoría con violencia física o verbal, ¿cómo no tenerle miedo a la ira? ¿Cómo no temer a lo que te puede llegar a convertir en un monstruo?
Me da miedo estar cerca de Monoma, él es todo lo que odio en una persona y temo volverlo a ver...
Temo golpearlo sin parar y luego de lo que escuché, sé que de seguro terminará mal.
No creo que lo dejaré medio muerto, pero con tan solo darle un puñetazo...
Odio en mis sueños pensar en todas estas cosas negativas.
Si me alejo de Shoto... no volveré a ver a Monoma y no estaré metido en el tema de las drogas, seguirá mi vida tal cual, pero ¿por qué se siente tan mal abandonar a alguien?
Es un adicto a las drogas, ellos son unos mentirosos, usualmente no cambian, pero me siento una mierda de persona al abandonar a alguien que, si bien se portó mal ignorándome, lo hizo por miedo...
Antes era más fácil, los que me lastimaron lo hicieron con maldad y sus patéticas inseguridades, pero Shoto...
¿Es lástima lo que siento?
Temo estar cerca de él y terminar cayendo en ese bucle de mentiras, porque eso hacen los adictos...
Todo era más sencillo sin Shoto en mi vida, pero también se volvió más divertido añadir a una persona más en mi grupo.
Decisiones, decisiones, decisiones...
¿Qué haría Ochako en mi lugar? ¿Cómo afrontaría la situación?
Estoy tan confundido, no sé qué hacer, no quiero ser "malo" con Shoto por mis experiencias, pero tampoco quiero quedar como un idiota iluso.
¿Me estoy ahogando en un vaso de agua cuando ya sé qué voy a hacer?
Espero no equivocarme en la elección que tome.
10:20 am
Desperté con dificultad, sentía las lagañas en mis ojos y la tensión en mis hombros por el mal sueño, hoy tenía que poner mi mejor cara, no quería hacer sentir mal a las chicas; estiré mis brazos y bostecé, maldita mala noche; cuando me iba a levantar me llegó un mensaje, tragué nervioso al pensar que podía ser Shoto, pero resultó ser un mensaje de Jiro.
Jiro
Hola Izuku, no podré ir hoy a tu casa, amanecí mal de la espalda, pero tranquilo, no es nada grave
Tranquila, será en otra ocasión, te deseo lo mejor, cualquier cosa nos avisas
Jiro
Okey, nos vemos! También ya le avisé a Ochako por si acaso
Solté un suspiro, ¿por qué le tuvo que pasar eso a ella? No se lo merecía, pero me sorprende y alegra ver su fuerza para continuar cada día, aunque tiene al Sr. Bakugo que la apoya. También tiene a Bakugo, que al parecer es bueno con ella... sin comentarios.
Me levanté y fui al baño, necesitaba una ducha fría para despejarme.
Al terminar mi ducha, me vestí con lo primero que encontré en el armario, una camiseta verde manga larga y pantalones de mezclilla, muy sencillo y cómodo.
Hoy vendría Ochako, no tenía que usar un atuendo incómodo con ella, aunque reconozco que una parte mía le habría gustado que me viese con el traje y quién sabe, tal vez bailar esos típicos bailes lentos y...
¿Desde cuándo deseo bailar? Eso significa ser el centro de atención, pero me gustaría algún día vernos a los dos bailando un vals.
Me dan ganas de sonreír como un tonto enamorado al pensar que solo Ochako puede generar este deseo de disfrutar estando en el centro de atención.
¿Cuándo cambiaron tanto mis sentimientos para llegar hasta este punto?
Por Ochako bailaría un vals con ese traje, no me interesaría la incomodidad o que me observen mientras bailo...
Mis mejillas ardieron mientras bajaba al comedor para desayunar.
Me hace feliz pensar en Ochako.
-Izuku, el desayuno está listo -dijo Toshinori sirviendo las tostadas con la taza de leche de chocolate.
Me senté y comencé a comer en silencio.
-Invité a almorzar a los Sres. Uraraka -dijo Toshinori de la nada para luego beber el té de su taza.
Abrí los ojos sorprendido, se suponía que Ochako vendría después de almuerzo y sola... aunque no sé por qué me siento feliz al escuchar que ellos vendrán a comer.
-Necesitaré tu ayuda para cocinar el pavo relleno y la ensalada -continuó con una sonrisa.
Asentí varias veces, me gustaba ayudarle a preparar la comida, pero ahora era mejor, ya que era para un almuerzo con ellos tres.
Me siento muy emocionado por el día de hoy, celebrar año nuevo con ellos me parecía más emocionante que cualquier fiesta glamorosa...
Cuando terminamos de desayunar, comenzamos a preparar el almuerzo mientras charlábamos sobre la fiesta en la mansión Todoroki. Una vez terminado el pavo, lo colocó en el horno.
Ambos fuimos al comedor a preparar la mesa, al parecer Toshinori era un experto a la hora de organizar la mesa, ya que le quedaba elegante y bonita. Resultaba que sus padres estaban acostumbrados a realizar cenas donde los visitaban miembros de la iglesia y amigos de éstos, por lo tanto, su madre lo tenía como ayudante.
-De algo que hayan servido esas cenas tan aburridas.
Solté una pequeña carcajada ante su respuesta.
Los minutos pasaron y el timbre resonó en la casa, una sonrisa se formó en mi rostro e inmediatamente corrí hacia la puerta.
-¡Yo abro! -dije mientras salía a abrir la puerta del antejardín.
Al llegar vi a Ochako con una radiante sonrisa mientras cargaba una bandeja cubierta de lo que parecía ser un pastel; sus padres miraban curiosos el jardín, mientras sostenían bebidas y lo que parecía ser una cacerola con comida.
-Feliz año nuevo -dije mientras abría la puerta.
Los tres invitados respondieron lo mismo; cuando ingresaron al jardín le ayudé a la Sra. Uraraka a cargar las bebidas, ella como respuesta me agradeció la ayuda con una cálida sonrisa y no sé cómo explicarlo, pero el padre de Ochako me dio una mirada de "bien hecho".
De alguna forma me siento como si el padre de Ochako me estuviera poniendo a prueba a veces y siento de alguna forma la necesidad de su aprobación, después de todo es un buen hombre y el padre de mi amiga...
-Tienen un lindo jardín -dijo el Sr. Uraraka mientras observaba las flores y árboles.
Sonreí al escuchar aquello, me alegraba escuchar que les gustase algo que Toshinori y yo cuidamos.
-Gracias, aunque creo que le gustará más el patio trasero -respondí emocionado-, tenemos un sauce y camelias rojas y rosadas, además hay muchas mariposas rondando.
-Entonces ya deseo verlo.
Al ingresar a la casa Toshinori los saludó con un gran entusiasmo. Fuimos hacia la cocina para dejar la comida y refrigerar el pastel. Una vez terminado nos sentamos y comenzamos a charlar de temas triviales.
Una pequeña parte de mi temía hablar a solas con Ochako y descubriese lo que me ocurrió anoche, no deseaba que se preocupara por algo sin sentido, porque estoy bien, no me hice daño...
Ochako de alguna forma me miraba con sutileza, como si estuviera analizando cada cosa que decía. Sin dudas ella sabe leerme.
Cuando el pavo terminó de cocinarse con la ayuda de Ochako comenzamos a servir la comida en los platos.
Ver este escenario me parecía tan natural y cómodo, me sentía en familia y en paz, solo nosotros 5 comiendo y celebrando este nuevo año, deseo ver esta escena el próximo año... mejor dicho, toda la vida.
Recordaba aquel sueño donde tenía una familia con Ochako celebrando la Navidad, me agradaba la idea y vernos a todos presentes me provocaba un sentimiento cálido y de deseo.
El deseo de ser una familia. Me gusta ver a los señores Uraraka, adoran a Ochako, la ven como un preciado tesoro, no estoy acostumbrado a ver ese tipo de relación, tampoco ver ese amor de matrimonio.
Quiero ser algún día tan feliz como ellos lo son; escuchar sus anécdotas era divertido, sus viajes y realidades eran muy distintas a las de Toshinori, lograba notarse que se llevaban bien.
Toshinori y los padres de Ochako se llevan bien.
Me gusta vernos de esta forma.
Quiero seguir celebrando con ellos más fiestas.
He descubierto que las enormes fiestas formales no son lo mío, no me interesa celebrar algo tan lindo con traje y falsas sonrisas para aparentar, me gusta ser solo Izuku ante los ojos de los demás.
No necesito mostrar una máscara con ellos 4 mientras como, no debo intentar encajar en un mundo que no me interesa, porque es demasiado frío y triste celebrar algo como esto con personas que sabes que jamás te verán de buena cara si saben tu historial.
Me gusta esta burbuja y ahora que sé cómo se siente, no voy a reemplazarla por una fiesta de los Todoroki o cualquier ricachón.
Toshinori, Ochako y los Sres. Uraraka son quienes me hacen sentir en familia, pero ese será mi secreto hasta que llegue ese día.
Luego de comer, fuimos con Ochako al jardín trasero a tomar aire libre mientras comíamos unos helados de paleta; me gusta este jardín floreado, la Sra. Nana tuvo un buen gusto al escoger las flores, entre ellas un enorme sauce y árboles de camelias.
-Me gustó que comiésemos los cinco -dijo Ochako rompiendo el cómodo silencio que habíamos formado-, es divertido y agradable... me siento en...
-Familia -dije accidentalmente, mis mejillas ardieron, pero más aún al ver la sonrisa cómplice que me dio Ochako, ella piensa lo mismo.
-Correcto -dijo sin más, para luego sentarse en el pasto debajo del sauce.
Imité su acción sentándome a su lado, nuevamente ese cómodo silencio reinaba.
Mi teléfono comenzó a sonar, extrañado lo saqué y vi el nombre del contacto, solté un suspiro y lo apagué, no deseaba hablar con Shoto.
-Eres mi mejor amigo Izuku, puedes decirme qué ocurre -dijo con una sonrisa-, no es normal que ignores una llamada y sé que no es Jiro, ¿pasó algo con tu nuevo amigo?
Abrí los ojos con nerviosismo, no sabía cómo decirle todo lo ocurrido y mis sentimientos por la situación, hablarle sobre mi miedo a las adicciones, esa horrible alucinación.
-No es necesario que lo digas, pero quiero que sepas que yo te escucharé y no te juzgaré, puedes confiar en mí, soy toda oídos.
¿Cómo callar luego de esas palabras?, Ochako es mi mejor amiga, ella sabe casi todo de mí, es la única persona que con tan solo unas palabras puede lograr bajar mis defensas.
Solo ella puede verme sin esta horrible máscara y no tenerle miedo del qué me dirá.
Ochako merece que sea honesto, porque ella también es honesta conmigo.
Decidí hablarle de todo lo ocurrido y cómo me sentí ante las palabras de Monoma, además le hablé sobre Shoto y que no sabía qué demonios hacer con el dilema que sentía.
-Izuku, eres la persona más valiente y fuerte que he conocido en mi vida -dijo con una sonrisa-, te admiro, no todos pueden soportar tantas emociones negativas sin quebrarse en ese mismo instante, estoy orgullosa de ti.
Esas palabras provocaron que mi corazón se acelerase a mil.
-Nunca serás un alcohólico, no es necesario que bebas algún día para descubrirlo, pero debes entender que nunca serás uno solo por beber de vez en cuando -continuó con seriedad.
Amaba cómo Ochako me tenía tanta fe, pero yo simplemente no podía.
-Sé que algún día dejarás ese temor que tanto te atormenta. -Me dio la mano con delicadeza, la acepté sin dudarlo-. Te prometo que nunca me verás beber alcohol y cuando tenga mi propio hogar, en la nevera solo encontrarás jugo y gaseosas.
Tragué con fuerza y sonreí-: no es necesaria esa promesa, no me importaría verte beber... porque sé que jamás lastimarías a alguien.
Sentí vergüenza ante lo último, ¿es raro lo que dije? ¿Es raro pensar de esa forma cuando alguien bebe alcohol?
No quiero parecer un viejo cerrado de mente que le echa la culpa a las cosas por la violencia que causan, es absurdo, siento que me convertiría en un tipo a favor de la ley seca...
No comprendo mis propios pensamientos, no creo que por tomar eres alguien malo, pero tengo miedo de que terminen transformándose en ella, un monstruo adicto y cruel.
Me siento idiota.
Ochako me miró de arriba abajo, soltó un suspiro y dijo-: todo a su tiempo Izuku, no tienes que matarte la cabeza por encontrar una respuesta, pero quiero que sepas que tú tampoco te convertirás en un monstruo.
Sonreí, ella sí me comprendía, no tenía que hablar para que comprendiese mis dilemas o cómo repienso todo sin parar, Ochako lo sabe y me ayuda a alejarme de esos pensamientos nocivos.
-Todo a su tiempo... -susurré con una pequeña sonrisa.
-Sobre lo de Monoma, ese tipo está loco, pensé anoche que era un imbécil, pero ahora subió más escalones -señaló con una mueca de disgusto.
-Es el tipo de persona que me desagrada más que nadie -dije con honestidad-. No me gustan quienes insisten e intentan dañar tu orgullo para manipularte, él es basura y no deseo volver a toparme con él nuevamente.
-Creo que es lo mejor que puedes hacer, si te rodeas con una persona como él, terminarás estresado y molesto -dijo con una sonrisa.
Asentí y solté un largo suspiro, ahora debía contarle la parte más dura de lo ocurrido anoche.
-Anoche tuve una absurda alucinación, mis brazos estaban lastimados y sangraba demasiado... tenía miedo de haber arruinado mis avances -miré mis zapatillas rojas fijamente-, no entendía cómo me corté las muñecas y por qué no existía el dolor, fue horrible y tan real.
Ochako me envolvió con sus brazos y comenzó a acariciar mi cabeza con suavidad, a veces jugando con mis rizos, mientras tanto yo solo podía llorar en silencio.
-Soy un idiota, lloro por algo que no ocurrió... -susurré con dificultad, mi corazón dolía como el mismísimo infierno.
Ella deshizo el abrazo y posó sus delicadas manos en mis mejillas provocando que nos viésemos cara a cara. Su mirada caramelo me veía con gentileza mientras sus pulgares limpiaban las lágrimas de mis mejillas, su tacto era tan cálido y dulce.
-Izuku, no eres un idiota, tal vez no te lastimaste, pero el dolor en tu corazón sí existió -besó mi frente con delicadeza provocando que mis mejillas ardiesen, se separó un poco y susurró-: si te duele puedes llorar todo lo que quieras, nunca te reprimas, no conmigo.
Mi corazón palpitaba como loco, no sabía que un beso de Ochako en la frente podía causar tanto efecto en mí.
Amada mía si supieras cuánto te amo.
Ochako se alejó y volvió a mirarme, sus mejillas estaban sonrojadas, pero no apartaba sus ojos de los míos-, me gusta ver ese brillo tan lleno de vida en tus ojos.
Jamás imaginé la frase "lleno de vida" a algo relacionado con mi persona, pero de alguna forma me hizo sonreír. Imité a Ochako y coloqué mis manos en sus mejillas, pude ver la sorpresa en sus ojos.
-Gracias por darme ese brillo -dije con una gran sonrisa, para luego besar su frente.
No entendía de dónde saqué el valor para besarla.
Cuando me alejé sonreí de oreja a oreja al ver que estaba completamente roja desde el cuello hasta la cabeza. Me gustaba ver que no era el único afectado.
Por un momento miré sus labios, pero negué en mi mente por muchos motivos y entre ellos es que puede que los padres de Ochako y Toshinori salgan al patio... no quiero que el Sr. Uraraka me dé una paliza por besar a su hija.
-Me gustas Ochako.
Ochako parecía un tomate maduro, enserio era divertido ver esas expresiones que le causaba.
Solté una pequeña carcajada y coloqué mi frente contra la suya, no podía apartar mi mirada de sus ojos y al parecer ella tampoco.
-Me gustas Izuku -susurró-, me gustas más que ayer.
Algo en mi me gritó bésala, acerqué mi boca a la suya y... el sonido de la puerta me hizo separarme rápidamente.
Me di la vuelta para ver si alguien alcanzó a ver, por suerte -la vergüenza sigue existiendo- era Toshinori, la expresión del rostro de él era nula, no demostraba signos de regaño o se veía avergonzado y creo que eso era peor.
-Vamos a comer pastel por si quieren...
Tampoco su voz reflejaba nada, dudo que me regañe, pero parecía que estaba pensando en algo y creo que terminará mal.
-¡Claro! -Exclamó Ochako, me di la vuelta y una parte de mí quiso reírse, estaba más roja, sus ojos se veían nerviosos y tiritaba nerviosa.
Ambos nos levantamos y fuimos hacia la puerta, Ochako fue la primera en ingresar y justo al momento en que yo iba a entrar Toshinori me detuvo.
-Recuerda que están sus padres -susurró Toshinori con un tono burlón para luego soltar una pequeña risilla.
Mis mejillas ardieron por el comentario, deseaba que me tragara la tierra en estos momentos.
Comimos pastel en silencio mientras los 3 adultos charlaban tranquilamente, no sabía qué decir y además en algún momento de la conversación me perdí por completo.
Solo podía pensar en Ochako y yo hablando en el jardín y... mis mejillas de nuevo me arden.
La tarde continuó con Ochako y conmigo jugando videojuegos en la sala de estar, fue complicado, pero le gané en una de las carreras.
Era divertido ver cómo fruncía el ceño por haber perdido y exigiendo una revancha, una que obviamente ganó.
Ochako era muy expresiva cuando jugaba, se movía con el control a la hora de dar las curvas en el juego, se reía demasiado, simplemente verla jugar era divertido.
El día de hoy había sido grandioso, pero subió de nivel cuando Ochako me dio una entrada para ir a un parque de diversiones.
-¿Quieres ir conmigo el tres al parque de diversiones? -dijo con nerviosismo mientras esquivaba mis ojos.
Ochako me había invitado a un parque de diversiones, no podía negar que vino a mi mente la palabra "cita", ya he salido a solas con ella, pero esta invitación se sentía de una forma distinta a cualquier otra.
-¡M-me encantaría! -exclamé levemente sonrojado.
La sonrisa de oreja a oreja de Ochako mostraba sus perfectos dientes, ella estaba verdaderamente feliz por haber aceptado, cabe señalar que era obvio para cualquiera que nos conociera o viera que yo diría que sí.
Amo a Ochako, me es imposible negar una salida de amigos con ella...
Cuando los tres se marcharon sonreí y le dije a Toshinori con honestidad-: el próximo año nuevo mejor hagamos una cena y celebremos con ellos.
-Me parece una buena idea Izuku, es mejor celebrar las fiestas en casa.
Una cena en casa.
-Sabes Izuku, como adulto responsable y viendo que tú y la joven Ochako están besándose -dijo con seriedad-, creo que tenemos que tener cierta charla.
Fijé mi vista avergonzado, analicé su mirada por un segundo para saber si era una broma... sus ojos se veían muy serios.
-En biología ya lo expli...
-No confío completamente en el sistema educativo y dos charlas no vendrían mal -interrumpió sin borrar esa mirada-. No deseo ser abuelo antes de tiempo.
Mierda, esta iba a ser la tarde más vergonzosa de toda mi existencia.
Trágame tierra.
Continuará...
Nota
Antes que todo, perdón por la demora, pero no quedaba conforme con el capítulo y bueno he cambiado muuchas de las cosas que tenía planeadas, me gusta más incluso.
Volvimos al presente junto con nuestro prota y por ende cada vez más cerca del final.
Me siento bien, vuelvo con el prota y de paso escribo Izuocha fluff, pero con beso en la frente y lo mejor es que es Izuku quien lo hizo 😎
Amo escribir momentos Izuocha en esta historia, me siento como Sebastian diciéndole al príncipe Eric que bese a Ariel xd
Siento la tensión entre Ochako e Izuku desde lejos.
No estaba planeado el beso de la frente y todo eso, es de los cambios más grandes que hice para este capítulo.
F por Izuku, le darán la charla al pobre.
Extrañaba a Izuku y sus problemas, llevo varios meses sin escribir su punto de vista así que es raro cambiar las formas de sentir de los pjs.
A partir de ahora Izuku nos mostrará otra faceta y estoy emocionada por escribirla.
Me dio risa la ignorada que le hizo Izuku a Shoto, pero el Izuocha es el Izuocha xd
Solo puedo decir: Tic tac, ira, tic tac, pólvora, tic tac, uno cae... tic tac, más cerca del prólogo.
#UnfinalfelizparaIzuku
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#MuerteaMonoma
#Izukugalánxd
#Sevienecita?
Hasta la próxima 💖
Capítulo 27: El trato y mi determinación.
Publicado: 09/10/2023
Que la fuerza los acompañe, se despide Autora-chan 🦄💖
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