Por dónde empiezo, ¿Quieren saber quién diablos soy? ¿Cuál es mi historia? ¿Sobre mi familia? ¿Cómo llegué a ser lo que soy ahora? ¿Mi historia de amor? o en especial cómo logré estar con la persona que más adoro en el mundo.

25/12/2003

En una glamorosa ciudad, en la cual muchos desean vivir, existe un barrio de los más pobres y peligrosos que uno puede imaginar...

En ese barrio hay una pequeña y humilde casa en mal estado, su pintura está desgastada, en el interior de ésta también su estado es un poco deteriorado, lo muebles se notaban que eran muy antiguos, por lo rotos que estaban.

Había un pequeño pino decorado con adornos navideños...

Un niño de unos 8 años aproximadamente, de cabellos rubios ceniza, ojos color miel, sonreía lleno de felicidad como cualquier otro niño en navidad, -¡Mamá! ¡Santa me dio un Violín!- dijo abriendo un paquete.

-Mamá te hice un dibujo como regalo- Dijo dándole una hoja de cuaderno donde había un dibujo hecho con crayones, en este había un niño con alas de halcón de la mano de una mujer, la cual cargaba un bebé.

La mujer mientras sostenía a un pequeño bebé, el cual tenía unos pocos cabellos negros y ojos rojos, aceptó el dibujo -Gracias mi pequeño tesoro, mi pequeño Hawks-.

-¿Te gusta como hice a Fumikage?- Dijo el niño alegre y entusiasmado.

La mujer le sonrió como respuesta...

El niño le sonrió a su madre, porque ella era su heroína, para éste ella un ángel... Hawks de una manera innata sacó el violín de segunda mano de la caja y comenzó a tocar, ese niño tenía un don increíble, tan solo escucharlo cualquiera podía caer rendido ante esa melodía, pero ¿dónde aprendió?

Es un misterio...

"Una madre soltera sin trabajo, con dos hijos"

"¿Cómo compró el violín?"

"¿Qué es ella?"

12/08/2004

Hawks tocaba el violín apasionadamente, le gustaba tocar en el patio de la escuela a pesar de que otros niños se burlaban de él por tocar melodías de "ancianos".

Como siempre éste los ignoraba, ignoraba a todos los que le molestasen, tenía amigos, pero su mundo se basaba en su madre, su hermano y el violín...

-Hawks, mi papá es policía y me dijo que tu mamá es una vendedora de drogas... ¿Es cierto?- Dijo un niño intentando de ofenderle.

El niño violinista lo observó serio y le respondió -Yo escuché que tu papá es un policía bueno para nada que se la pasa comiendo donas y bebiendo café-.

-Maldito, ¡muchachos ya saben que hacer con este idiota!- Dijo llamando a otros niños para que se le uniesen a golpear a Hawks.

Hawks agotado por los golpes llegó a casa y se encontró con su hermano gateando, éste se agachó y tomó a Fumikage -¿Dónde está mamá?-.

El pequeño de ojos rojos lo observó y dijo a duras penas -No sé-.

Hawks comenzó a reír, su hermano tiene como palabra favorita el "No sé"...

Últimamente llegaba muy tarde, Hawks cada vez era más padre y madre de Fumikage que ella... "es vendedora...", el niño negaba en su inocente y a la vez quebrada mente, porque en este barrio los niños a temprana edad comienzan a convertirse en adultos.

Pero Hawks es distinto, se concentra tanto en su hermano y en el violín que olvida el mundo aterrador en que vive, porque eso es lo que es aterrador.

-Hawks, llegaste temprano...- Dijo mi madre acelerada.

La observó enojado y sin pensarlo dijo furioso -Mamá son las 14:30, acabo de terminar las clases, y ¿en dónde estabas? ¡encontré a Fumikage gateando cerca de los enchufes!-.

La mamá de Hawks no lo contradijo, solo tomó su bolso y dijo con una sonrisa amarga -Vine por el bolso, llegaré tarde... dejé unas golosinas para que comas- y se marchó dejando solos a un niño de diez años y a un bebé de diez meses...

El niño apretó los ojos lo mejor que pudo para que sus lágrimas no rodasen por sus mejillas, él debía ser fuerte, por su hermano menor lo sería, y jamás lo dejaría sólo...

-¿Quieres comer?- Dijo Hawks con una leve sonrisa, el niño como respuesta asintió...

Hawks en definitiva haría lo que fuese por su hermanito, si debía insultar a la idiota de su madre lo haría, a pesar de lo buena que había sido con él.

29/10/2006

Hawks con su gastado violín tocaba en la sucias y repletas de personas de la fascinante ciudad en que vivía, ¿por qué? simple, mañana era el cumpleaños número tres de Fumikage y bueno el deseaba comprarle un pastel de chocolate, crayones y una croquera... a su hermano le encantaba dibujar y todo lo que tuviese chocolate. Y para eso se fue del infierno de barrio en que vivía a un lugar concurrido y con gente que le diese billetes.

El niño de ojos color miel ya había logrado comprar los crayones y la croquera, unos billetes más y listo, mañana Fumikage tendrá algo dulce en que pueda poner las velitas de colores... siempre a sido así, la loca y desaparecida de su madre siempre se olvidaba de los cumpleaños, al menos le compraba ingredientes y cosas para cocinar, y ropa... pero Hawks cocinaba y se encargaba de su hermano, además de hacer las trabajos escolares, eso no era una vida ideal para un niño de once.

Hawks todos los días se le acercaban alumnos de grados superiores para preguntarle a cuánto vendía la coca... él ya no podía defenderse si sabía que era cierto, ya no podía hacer oído sordo ¿cierto?, no cuando accidentalmente la vio vendiendo en su propia casa cuando éste había llevado de paseo a Fumikage al parque, ya no era ciego, pero aún tenía a su hermano y a ese instrumento de madera con cuerdas.

-¡Mira Rei!- Dijo la voz de una niña un tanto chillona para el gusto de Hawks, aunque algo en él decía que debía ver quien era ella.

Dejó de tocar y la vio, vio a una niña de unos diez años, usaba de anteojos que cubrían unos hermosos ojos grises como las nubes en un día de tormenta, su cabello blanco como la nieve, y su sonrisa lo flechó... y Hawks la observó mejor y se di cuenta que cargaba un estuche con forma de un Violonchelo.

Una mujer igual que la niña, pero de unos veinte años observó a la niña y le preguntó -¿Qué ocurre Fuyumi?-.

-Hermana, quiero que lo escuches, él es espectacular y creo que es mejor que el idiota de mi cuñado- Dijo Fuyumi observando a un hombre colorín que cargaba a un niño de unos tres años aproximadamente, para luego señalar Hawks que estaba completamente rojo como un tomate.

Rei le sonrió a su hermana menor -Fuyumi, cuantas veces te he dicho que no critiques a mi esposo y padre de mi hijo-.

La niña frunció el ceño y dijo -Lo único bueno de él es Shoto-.

Hawks sintió el ambiente pesado de las dos hermanas, por lo tanto, decidió tocar algo alegre... algo que les hiciese sentir en paz.

Y funcionó, ambas hermanas observaron como Hawks tocaba su instrumento, verlo y escucharlo era algo genial y asombroso, alucinante... con su música podía cambiar fácilmente el estado de animo de las personas.

Cuando dejó de tocar Rei y Fuyumi comenzaron a aplaudirle.

-¡Eres asombroso!- Dijo Fuyumi regalándole una sonrisa que brillaba más que mil soles.

Hawks no supo que responder, se sentía nervioso, no le habían dado un cumplido hace mucho tiempo, bueno en realidad Fumikage siempre le dice que es el mejor, pero alguien del exterior... es extraño, la gente solo ve a un niño que toca el violín por dinero, por lo tanto, estos se compadecen de él y le dan dinero, sin escucharlo y verlo...

Él es solamente un niño con un estuche de violín que pide dinero, es invisible, su música no es apreciada, la compasión es lo que lo rodea...

-Gracias...- Dijo Hawks a duras penas por la vergüenza.

-¿Dónde aprendiste a tocar de esa forma?- Preguntó entusiasmada Rei.

Hawks extrañado por la pregunta dijo -Aprendí solo...-.

Las dos hermanas se sorprendieron, era imposible que un niño de once años supiera tocar de esa forma sin aprendizaje de alguien.

Fuyumi le sonrió y dijo dándole una pequeña sonrisa -¿Enserio? ¡Eres genial!-.

-¡Rei! tenemos que irnos a casa- Dijo ese hombre colorín que inmediatamente le fue desagradable para Hawks.

-Vayámonos Fuyumi, Enji quiere irse a casa y sabes como se pone cuando se enoja- Dijo Rei con una leve sonrisa que se notaba a leguas que era falsa.

La hermana menor frunció el ceño y dijo -Ok, pero no pretendo hablarle-.

-¡Adiós!- Dijo la peliblanca a Hawks, el chico de ojos miel lo único que deseaba era conversar con ella, quería saber como era el sonido de un Violoncello en persona.

Hawks solo la observó como se iba hacia ese hombre imponente, ahora fijándose más de la ropa con la que se vestía se notaba que era de marca, por lo tanto, irradiaba niña adinerada, además tan solo ver a su hermana que poseía aretes de diamantes y una argolla de matrimonio con un brillante diamante.

A Hawks le daba lo mismo los estatus sociales, jamás le ha interesado el dinero o se a sentido inferior al resto, muchos odian a la gente adinerada, pero ¿por qué detestar a los millonarios? Él no los conoces y dudaba conocer a alguno, ya que en ese peligroso barrio hasta los policías le tienen miedo.

Una vez logrado su meta de conseguir dinero para el pastel se fue a esa pastelería en la cual siempre compra galletas para él y su hermano... ¿tan difícil es ser un niño que es rechazado por su madre en lo más importante? Cariño, eso es lo que desea Hawks, ¿Dónde está su mamá? vendiendo drogas, el pobre niño debe apurarse, esos adictos a la heroína llegan siempre a las cinco de la tarde, su hermano no debe quedarse en ese lugar a ver la realidad, ¡jamás!

Su hermano es muy pequeño para ver la mierda del mundo en que vivían.

Hawks, una vez en casa vio la hora y suspiró feliz, había llegado temprano, pero lamentablemente el destino quiso que éste se separase de su preciado hermano.

Un hombre bien arreglado cargaba a su hermano y dos policías estaban revisando su casa, ¿por qué estaban haciendo eso? ¿Quién mierda se creía ese tipo para cargar a Fumikage?

El violinista se acercó al hombre y dijo serio -Devuélvame a mi hermano-, el sujeto le sonrió a Hawks y le dijo serio -Lo siento niño, pero no puedo, es parte del protocolo-.

-¿Protocolo? ¿Qué protocolo? ¿Y por qué diablos ingresaron a mi casa?- Dijo Hawks alterado, al ver su casa desordenada.

El hombre le sonrió triste y dijo -Te explicaré cuando subamos al automóvil-.

Hawks frunció el ceño y dijo -Tengo once, no soy tan estúpido para subir al vehículo de un extraño-.

-Niño, soy de servicios sociales y hemos venido a buscarlos a los dos- Dijo intentando sonar tranquilo, el pobre hombre odiaba esa parte de su trabajo.

-No, no, no, no- Era lo único que podía salir de la boca de Hawks en ese momento, ese hombre de traje y corbata, los llevará a esa realidad que temía tanto éste... un hogar de menores.

Éste pensaba en la diferencia de edades, él se llevaba por ocho años con su hermano, Fumikage ya va a cumplir tres... su hermano once.

¿Los van a separar? Obviamente Fumikage lo adoptará fácilmente una familia, pero las familias no adoptan a un niño de once, no incluyen con su hermano...

Los van a separar, Hawks solo tendrá ese desgastado violín... algo que lo saca por unos malditos minutos de la repudiable realidad.

El hombre le dijo con un tono amable -Ahora estarán un mejor lugar, ya no tendrás que vivir de esa forma, ya no tendrás que hacerte cargo de todo-.

Ese hombre qué diablos sabía, todo eso era su vida, hacerse cargo de Fumikage era lo mejor que había en su vida, en esa maldita realidad en que él vive... sin su hermanito como podría dormir por las noches sin temer que alguien le haga daño, ¿Y si lo adopta alguien cruel? ¿Alguien que no lo ame? y principalmente ¿Qué ocurrirá si se olvida de él?

29/10/2007

Un año, un año, una primavera, un verano, un otoño, un invierno y de nuevo una primavera... crecen las flores, se marchitan, la hojas de los árboles tan verdes y luego cambian de color y caen hacia el suelo o se las lleva el viento.

Hawks, ignoraba todo a su alrededor mientras toca el violín en el parque, necesitaba el violín, sin ese instrumento musical volvería a la realidad de ese lugar donde debe permanecer hasta que cumpla dieciocho... dieciocho años y logrará encontrar a su tesoro... antes no quería dejar que se fuese lejos de sus brazos, pero los del orfanato les dijeron que los Tokoyami eran un buen matrimonio, para su desgracia ellos no pueden tener hijos, y vieron a Fumikage y supieron que ese pequeño debía ser su hijo, algo en ellos sucedió con una sola mirada dijeron él es nuestro hijo...

El niño no les había creído ni una mierda, pero si ellos deseaban tener de hijo a Fumikage... él no le iba a quitar la oportunidad, porque Hawks comprendió que su hermano no estaría seguro con él, porque éste era un niño de doce, y los adultos eran más fuertes que él...

Una difícil, pero correcta decisión... su hermanito no estará viviendo en ese barrio y tampoco en este lugar sombrío que teme por su seguridad, porque a Hawks si lo han golpeado, por defender a una niña... lo golpearon, pero no dejó que se la llevasen.

Lo golpeaban, pero él siempre los miraba a los ojos, Hawks no era un cobarde, no podía serlo, un día volvería a ver a su hermano y no deseaba que Fumikage se avergonzase de alguien que no lucha por lo que cree.

Fue difícil todo, éste lloraba de impotencia por las noches, ¿Cuándo acabaría esa horrible pesadilla?

-Hawks, me van a adoptar...- Dijo una niña de cabellos rubios y ojos de un peculiar color ámbar.

Hawks sonrió feliz, él ya no tendrá que protegerla de este peligro llamado "hogar", ésta no volverá a sufrir abusos...

28/12/2008

Feliz cumpleaños número trece... ¿a quién le importa importaba su mierda de cumpleaños? Lo único en que éste podía pensar es en su pequeño hermano que ahora tiene cinco... ¿Cómo le estará yendo en clases? ¿El verde sigue siendo su color favorito? ¿Cuánto medirá? ¿Le gusta aún el chocolate? ¿Seguirá diciendo "No sé"? ¿Me recuerda? ¿Todavía recuerda que él es mi fan número uno?

Esas preguntas carcomen el alma de Hawks día y noche, ¿Por qué tuvieron que separar a dos hermanos? ¿No es cruel esta situación tan usual? Alguien pensó en el niño de once años que es consiente de lo que sucede a su alrededor, ese inocente niño que se dedicó por tres años a hermano, que fue básicamente el padre y madre del pequeño...

Nadie piensa, porque los niños no entienden lo que sucede, no comprenden nada ya que viven en un mundo lleno de arcoíris en el cual la imaginación sobrepasa los límites.

-Oye me gusta tu violín, me lo das- Dijo un adolescente de unos dieciséis años, su mirada reflejaba que no se lo estaba pidiendo, le estaba ordenando que se lo regalase el instrumento musical.

Hawks observó con indiferencia a ese imbécil, no iba a pelear con ese idiota, porque la última vez los adultos lo golpearon como castigo... como si le importase, él ya no sentía los dolorosos golpes que le propinaban.

El adolescente golpeó al violinista y éste como respuesta le devolvió el golpe... para la desgracia vieron solo Hawks dando el puñetazo.

Uno de los encargados arrastró Hawks a una habitación y lo comenzó a insultar...

-¡Mocoso, es por tu actitud que no tienes amigos!- Dijo furioso y exaltado.

Hawks le sonrió y dijo burlesco -No tengo amigos porque no permito que se sobrepasen conmigo-.

El hombre abofeteó a Hawks, éste sonrió -Por esa actitud te dejaré amarrado y permanecerás hasta que seas un adulto, no permitiré que nadie te adopte-.

Hawks abrió los ojos impactado, pero no le importaba lo que hiciese ese hombre, él siempre diría lo que pensase -No me quieres soltar, me amenazas porque sabes que soy un peligro para ti, como el adulto inteligente que eres sabes que si me das libertad le diré a todos que eres un abusador-.

Al decir eso le dio un puñetazo y con una sonrisa dijo -Niño de mierda, agradece que eres hombre...-

Al decir eso Hawks se quedó callado, nunca le había tenido tanto miedo a ese hombre... el pobre desde ese día no sabía que pensar con respecto de defenderse o no.

¿Ese hombre ganó? Al parecer sí, quebró a Hawks con esa oración...

Los golpes eran una cosa, pero lo otro... Hawks a escuchado rumores y no es nada lindo, el pobre desea volver a su antigua vida, a ese barrio de mierda que era mil veces que este lugar.

¡Que buen cumpleaños número trece!

A quien engañan Hawks, es un ave enjaulada, pero una que jamás podrán dominar, porque él tiene una meta, y esa es la que lo mantiene en pie... volver a ver a su hermanito.

25/12/2009

-Niños, hoy vamos de salida a una fiesta hecha por la familia Todoroki que hiso para caridad este año...- Dijo el hombre con una enorme sonrisa.

Hawks observó al hombre y lo primero que se le vino a la cabeza ¿Todoroki? De seguro era una familia millonaria que no usaran solamente para verse bien con el resto.

Eso pensó Hawks, para luego sentirse mal por esos pensamientos... él no era así, él jamás había pensado mal de las personas con dinero...

Ese repudiable hombre se le acercó y lo observó fijamente -No dirás nada, solo tienes permitido comer y decir hola-.

En respuesta Hawks le sonrió burlesco, -No diré nada capitán...-

Quien diría que los Todoroki iban a hacer la fiesta en su propia mansión, era una muy elegante y decorada, había un gran buffet de postres, juegos en el patio y unos músicos tocando dulces villancicos.

Hawks observó a su alrededor y en lo único que logró concentrarse fue en un hombre de cabello rojizo que tocaba el violín de una forma majestuosa, era fantástico verlo y oírlo... en ese momento éste se dio cuenta de que el quería ser violinista profesional, no deseaba ser uno más de la calle, uno que la gente lo ignorase.

Uno segundos después un hombre rubio comenzó a cantar me causó gracia, pero luego me fijé mejor y era ni más ni menos que el famoso cantante Hizashi Yamada...

-¡Esta canción va dedicada a ti Aizawa!- Dijo Hizashi señalando a un hombre de cabellos negros, el cual por su mirada se veía enfadado.

El cantante dijo alegre -¡Empecemos ahora Fuyumi!- señalando a una chica de unos trece años aproximadamente, sus cabellos eran blancos como la nieve, sus ojos de un hermoso gris... él la conocía, como no olvidar esa dulce mirada.

Ésta poseía un Violoncello el cual comenzó a tocar, lo único que podía pensar Hawks era lo maravillosa que era... y que sería de él.

-¡Shoto, no corras tan rápido!- Gritó un niño desesperado.

Hawks se dio la vuelta y vio a un niño de unos seis años corriendo, sus cabello era peculiar, un lado era de cabellos rojos y en el otro blancos, su ojos eran de distintos colores, gris y zafiro...

-Fumikage, no me vas a atrapar- Dijo el niño riendo...

Es imposible, hay cientos de Fumikage... No podía ser su hermanito, era imposible, eso solo pasa en novelas.

Entremedio de las personas apareció un niño de unos cinco años, el iris de sus ojos eran rojos como dos granates, y su cabello era corto y negro como la noche... era Fumikage, el preciado hermano de Hawks.

Sin pensarlos dos veces Hawks se acercó, y lo único que salió de su boca fue -Hola-.

El niño lo observó extrañado -¿Quién eres?-.

Eso quebró a Hawks, la pesadilla se volvió real, él se convirtió en un fantasma del pasado, que no lograba ser siquiera un recuerdo.

-¡Fumikage! ¡No corras de esa forma!- Dijo una mujer regañando al pequeño...

Hawks se había enojado, quien se creía al regañar a su hermanito.

-Lo siento Mami...- Dijo Fumikage triste.

La mujer se agachó y le abrochó los zapatos... -Fumikage, para la próxima llámame para que te ate los cordones-.

-Está bien, pero Shoto se burlará de mi...- Dijo el niño avergonzado.

Un hombre de terno apareció y le dijo con una enorme sonrisa -Entonces mañana te enseñaré a atártelos-.

-Gracias papi- Dijo el hermano de Hawks alegre...

Es en esos segundos cuando Hawks se dio cuenta de que su hermano estaba bien, si él intentaba ingresar a su vida... puede que recuerde ese tormentoso pasado que tienen, las cosas debían seguir como lo han sido durante estos dos años... Hawks no existe, será libre una vez que salga del orfanato ese hombre ya no lo golpeará o...

-Disculpa, ¿Quién eres?- Preguntó Fumikage a su hermano...

Hawks observó a su hermanito con tristeza, -Nadie, simplemente me acerqué para decirte sobre tus zapatos-.

Éste se dio la vuelta, porque una mirada más de Fumikage provocaría que estallase...

Fumikage lo sostuvo de la camiseta y le dijo -Te me haces conocido...-.

Enserio, ese niño lo haría llorar en cualquier segundo...

-Hawks- Dijo el demonio que lo atormenta día y noche... éste se dio la vuelta y se fue donde ese hombre, -Inmediatamente voy capitán-.

Los dos ya separados de todos le dijo sin rodeos -¿Con quién mierda hablabas?-.

Hawks lo observó detenidamente y como usualmente dijo una mentira -Un niño se iba a caer porque tenía desabrochados los zapatos... capitán acaso crees que soy capaz de decirle a un niño de cinco años "este tipo es un pedófilo, ¡arréstenlo por favor!"-.

El hombre arrastró a Hawks al patio, bajo las estrellas unos ojos color miel observaba a unos avellana como si fuese una lucha de poder... pero lo físico siempre ganaba.

Un puñetazo en la boca del estomago y listo...

-Hawks, es adorable tu hermano... hubiese sido divertido tenerlo a los dos en mis manos- Dijo el hombre con una sonrisa siniestra, -Sabes los señores Tokoyami te hubiesen adoptado si supieses que existías-.

-No comprendo...- Dijo Hawks anonadado.

El hombre alegre dijo -Bueno, desde que conocí esos ojos color miel supe que me pertenecías violinista-.

Hawks comenzó a llorar, ¿siempre será un ave enjaulada? ¿Alguien le dará una llave para abrir esa reja de metal?

-No llores, ¿Dónde está esa mirada desafiante que tanto me das? ¿Ya entendiste tu lugar?- Dijo el repugnante hombre con tono burlesco.

¿Desafiarle sirve de algo? Hawks ya no tiene propósito alguno por qué luchar, ¿por qué no mejor dejarse llevar? mejor ser ciego e ignorar lo que hace ese repugnante ser, lo más sabio será ser su esclavo, vivir y tocar el violín...

No, Hawks nunca será alguien que ignore a las personas a su alrededor, no desea ser ciego, él tiene ahora un nuevo sueño, será un violinista...

-Hawks, vamos a la fiesta...- No pudo terminar ya que Hawks salió corriendo para luego ingresar al salón, lo que no se esperó fue que chocase con la chica que hace unos momentos la reclamó.

Ella lo observó fijamente y le agarró la mano -Soy Fuyumi, y si bien recuerdo tu eres el violinista de la calle-.

-Soy Hawks, y bueno creo que también te reconocí...- Dijo rojo como un tomate, pobre Hawks, es la única chica de su edad con quien no puede hablar decente a causa de los nervios.

Fuyumi le sonrió y dijo mostrándole una enorme sonrisa -Me tiene harta el engreído de mi cuñado, necesito a un violinista talentoso que me acompañe-.

Así fue como Hawks se convirtió en...

-Aquí tienes el violín, ¿te sabes el cascanueces?- Preguntó mientras ésta le entregaba el violín, Hawks lo recibió y así inició la amistad con la chica del Violoncello.

Ambos comenzaron a tocar, todo veían impresionados como ese adolescente desconocido tocaba el violín... ese violinista de la calle estaba usando un instrumento musical que equivale a oro.

Poco realista, el joven dueño del violín de segunda mano y desgastado, estaba al frente de gente adinerada... pero lo principal, su hermano estaba ahí, Hawks deseaba con todo su corazón que supiera que esta dulce melodía era con cariño dirigido hacia él.

Aplausos de las personas a su alrededor, observó para todos lados, Fumikage no estaba, los señores Tokoyami tampoco... el destino es cruel, pero Hawks piensa positivo, su hermano tiene una familia de verdad, eso es lo único que importa, ¿cierto?

Caminó hacia la salida, capitán lo esperaba con el ceño fruncido, no demostraba sonrisa alguna, irradiaba ira... apenas llegase iba a golpearle o tal vez en el trayecto, le encanta que los otros niños vean el sufrimiento que le causa a Hawks.

-Oye Hawks no te marches...- Dijo Fuyumi acercándosele... Hawks con pavor de que ese hombre la tocase la alejó...

-¿Qué ocurre? ¿Él es el señor encargado de cuidarlos?- Preguntó con una inocente sonrisa.

-Si, y bueno creo que me debo despedir Fuyumi- Dijo triste, sabe que jamás la volverá a ver y es lo mejor.

Hawks se fue hacia donde se encontraba ese demonio, -Es linda, ¿cierto?- dijo con esa escalofriante voz que siempre usa cuando quiere algo.

-Te le acercas y grito que eres un pedófilo, y que me golpeas... puedo mostrar el moretón reciente- Amenazó Hawks con una mirada llena de odio, él lo decía enserio.

-Dilo y te corto la lengua, mejor destrozo tu violín, decide la mejor opción- Sonrió al saber que Hawks perdió.

10/01/2010

Hawks practicaba nuevas canciones, ayer con el dinero que juntó tocando el violín, decidió comprar libros de música, se dijo así mismo que estudiaría la historia de la música, además distintos géneros e instrumentos musicales, todo ese conocimiento deseaba tener para que cuando al fin salga de ese infierno donde vive éste, preparado para ingresar a la universidad.

Apareció el repugnante cuidador y dijo con una repulsiva sonrisa -Hawks, llegó esa niña muy bonita a visitarte... creo que su nombre es Fuyumi-.

Hawks inmediatamente se asustó, temía que algo le hiciera ese hombre a Fuyumi. Se levantó inmediatamente, y con nerviosismo dijo -¿Dónde está capitán?-.

-Hawks, es divertido tener ahora una forma de hacer para que pongas cara de pánico- Dijo con un tono un tanto raro...

El violinista se asustó, no le agradaba ver ese rostro que ponía últimamente... Esa mirada, esa expresión, a Hawks le causa la impresión de que algo pensaba hacer, hacerle...

¿Huye de ese lugar antes de que sea tarde? ¿Quién le asegura que él estará bien en las solitarias calles de la gran ciudad? ¿Qué decisión debe tomar un niño que vive en un hogar de menores con un pedófilo bajo el mismo techo? Decisiones, decisiones, decisiones...

-No a entrado, está esperándote afuera- Dijo sonriéndole.

Hawks lo observó extrañado, era raro que no fuese cruel con él, ¿Qué es lo que planea?, intentó ignorar sus temores y fue hacia donde estaba Fuyumi.

Allí estaba la dulce Fuyumi esperándolo con una cálida sonrisa, ella era especial para Hawks, desde que se conocieron ese 25 de diciembre ésta nunca lo dejó de visitar, se habían convertido en buenos amigos, ella tocaba el elegante Violoncelo y él su preciado Violín.

-¿Qué ocurre Fuyumi? ¿No ibas a ir a Francia?- Preguntó extrañado por su llegada.

Ella lo observó y le dijo con una enorme sonrisa -Decidí quedarme en enorme ciudad, sin mi amigo me aburriría-.

Hawks le sonrió, ella es la única que puede hacerlo sentir feliz, la única que puede reemplazar el Violín, pero ella no lo sabe y jamás lo sabrá, porque ésta vive en un mundo donde la música es oro y él en un mundo donde no es escuchada...

Fuyumi le dio la mano y dijo -Vamos a mi casa, hoy cuidaré a Shoto y a su amigo Fumikage-.

Al escuchar el nombre de su hermano se puso nervioso...

¿Y si me recuerda? No, él no debe recordarme, no necesita recordar fantasmas del pasado... si me recuerda sufrirá, puede que recuerde a mamá, esa asquerosa casa.

Todas esas cosas pensaba Hawks apenas Fuyumi dijo el nombre de su hermano, ¿Por qué un chico de 14 años debe pensar así? ¿Por qué un adolescente teme ser recordado? ¿Por qué no puede pensar que es un buen recuerdo?

Sin darse Hawks estaba caminando con Fuyumi hacia su impresionante mansión, pero algo en éste le dijo tengo que comprarlas, necesito saber si aún le gustan...

-Fuyumi, vayamos al centro, quiero comprar algo- Dijo serio, cosa que extrañó a Fuyumi.

Luego de caminar y cientos de preguntas que en gran parte fueron respondidas y otras ignoradas, Fuyumi le preguntó lo que siempre deseó saber.

-Hawks, ¿alcanzaste a conocer a tus padres?- Preguntó la joven dándose cuenta que la pregunta que hiso fue muy estúpida.

-A mi madre sí, a mi padre... no importa- Dijo serio al nombrar al último, Fuyumi al ver el rostro de Hawks se dio cuenta que dijo una estúpida pregunta la que le hiso.

-Vamos, pronto cerrarán- Dice Hawks evitando más preguntas.

Cuando al fin llegaron Fuyumi lo observó extrañada, -¿Por qué estamos en una pastelería?-

Hawks sonrió y dijo melancólico -Deseo comprar unas galletas de chocolate, te aseguro que a ti y a los niños les gustarán-.

"Hermano quiero comer galletas"

"¿De qué sabor?"

"¡Chocolate!"

-Niños, Hawks trajo galletas- Dijo Fuyumi observando a los dos pequeños.

Los dos dijeron al unisono -¿De qué sabor?-.

Hawks se acercó a ellos nervioso, todo su ser rogaba por confirmar si algo del niño que conoció aún seguía, saber si su hermano le gusta aún algo que él le regalaba todo el tiempo...

Nervioso el rubio dijo con un intento de sonrisa -Chocolate-.

Fumikage sonrió inmediatamente -¡Genial! ¡Adoro el chocolate!-.

"Escoge un sabor"

"Chocolate"

"¿Por qué?"

"Porque es mi favorito"

Fuyumi sonrió y observó a su sobrino -Te traje Vainilla-, al oír vainilla Shoto sonrió y abrazó a su tía -Gracias tía Fuyumi-.

Fumikage sacó la galleta y antes de comerla la olió, dando como resultado que comenzase a llorar y a comerla rápidamente...

Hawks quedó con la boca abierta, nunca había hecho llorar a su pequeño hermano.

Shoto preocupado se acercó a su amigo y lo abrazó -Tranquilo Fumikage, no estás solo-.

Preocupada Fuyumi le pregunta -¿Por que lloras?-

El niño no supo que decir, ni siquiera él sabía por qué lloró, porque el sabor se le hacía conocido -No lo sé, sabe a casa...-.

La joven no comprendió, ¿sabor casa?

-Huele a esa persona- Dijo sonriendo, pero no sabía tampoco quién era él.

Hawks se puso nervioso, su hermano lo estaba recordando... en esos momentos no quería que le recordase ¿Por qué tenía que haberlo hecho? Él tenía que salir de ese infierno y ser libre, entrar a la universidad y volverlo a ver ya como un hombre que puede valerse solo... un hermano que pudiese mostrar con orgullo, un violinista que toque música de oro, no uno de la calle.

¿Dejar de intentarse de acercar y crecer para convertirse en un hombre del cual sin vergüenza alguna le diga hermano en la calle? ¿Si se enteran que dirán los Tokoyami, y si lo alejan por qué es mala influencia?

Hawks tenía miedo a esos pensamientos, no quería pensar, deseaba vivir feliz, libre, lejos de ese lugar en que vive, pero a dónde ir, nadie querrá adoptar a un adolescente, ya es muy viejo, ya no necesita cariño, además Capitán jamás lo dejará libre.

Cuatro años terminará esa tortura, pero en ese tiempo muchas cosas pueden pasar y cada vez le teme más al capitán...

-¿Puedo comer otra?- Funikage le pregunta entusiasmado a Hawks.

-Claro que si...- Dijo con una enorme sonrisa, una que solo puede sacar su hermanito.

La adolescente observa extrañada a Hawks, lo notaba tenso, pero ahora se veía tan feliz...

20/01/2010

Hawks ingresa a la mansión con una caja de lápices y con una enorme sonrisa grita -¡Niños les traje unos lápices-.

Fuyumi lo observa fascinada, la actitud y la sonrisa de Hawks era totalmente distinta a la que vio en navidad, desprende esa alegría que vio cuando lo vio en ese parque cuando eran más pequeños.

Los alegres niños se acercaron a Hawks, recibieron los lapices y con unas hojas de papel comenzaron a realizar sus obras de arte mientras comían galletas.

Luego de unos minutos Fumikage se acercó a Hawks y le dio el papel esperando a que le dijese como le quedó.

Hawks observó el dibujo y quedó impresionado por lo bien hecho que estaba, era un halcón y un cuervo volando a quién sabe dónde... pero detrás de la hoja había un de niño pequeño y otro más alto.

-Hawks, tu eres el más grande y yo soy el más chico- Dijo sonriente el niño.

-Me encanta el dibujo, muchas gracias Fumikage- Dijo Hawks intentando no derramar las lágrimas que amenazaban caer, iba a guardar ese dibujo por la eternidad.

Fumikage sonrió y se marchó hacia donde estaba Shoto, dejándolo a solas con Fuyumi.

-Es extraño, Fumikage te conoce hace unas semanas y te trata como si lo conocieses de toda la vida...- Dijo Fuyumi observando como el pequeño corría hacia Shoto, Hawks abrió los ojos sorprendido por lo buena que era deduciendo las cosas.

-Si es extraño...- Hawks dijo calmado, intentando de no correr a ocultarse porque tal vez había descubierto parte de su secreto.

-Oye, ¿Qué piensas de ingresar a Yuuei? eres talentoso, ganarás una beca tenlo por seguro- Dijo dándole esa hermosa sonrisa, pero Hawks sabía que jamás lograría ingresar a Yuuei, era un sueño imposible, así que mejor decir que no.

-Lo siento, pero no es lo mío...- Dijo observando el suelo, ese es un sueño para personas que no están atados con cadenas en un lugar que solo saldrás con dieciocho...

Fuyumi desilusionada solo asiente, es triste, pero debe aceptarlo...

20/01/2011

La vida de Hawks era tranquila y alegre, al menos fuera del hogar de menores, porque en ese lugar su vida era un infierno, pero no importaba, él era feliz con Fumikage, Shoto y Fuyumi... ver a esos tres lo hacía la persona más feliz...

En un hermoso prado estaba Hawks y Fuyumi recostados en el césped, ambos reían y sonreían -Estoy feliz de que al fin salieses de vacaciones, es muy aburrido estar sin ti, y solamente escribirte cartas y verte una vez al mes- dijo Hawks abrazándola.

-Pero fuiste niñero de Fumikage y Shoto, según escuché los Tokoyami te adoran- Dijo sonriéndole a Hawks... cuidar a Fumikage lo hacía sentir feliz y triste, saber que es tu hermano y no poder decirle es horroroso, cenar con los Tokoyami le era divertido, ¿Si hubieran sabido sobre su existencia serían las cosas así? ¿Él le diría papá y mamá?

Hay momentos en que Hawks deseaba decirles que es el hermano mayor de Fumikage para así le permitieran verlo cuando se le diese la gana...

-Sip, y adoro cuidarlos, pero igualmente extraño a mi preciada novia...- Dijo con sinceridad, Hawks amaba a Fuyumi con locura, era uno de sus pilares, a pesar de que ella no lo supiese, por la joven de ojos grisáceos no sabía la verdad, la dura verdad de su novio.

Lamentablemente en una relación no hay que ocultar cosas a pesar de ser dolorosas...

31/10/2011

14:00 pm

-¡Tu que sabes Fuyumi! Tu no entiendes nada de lo que pasa en mi vida- Dijo furioso Hawks, él quería quedarse callado, no deseaba abrir la boca y arruinar todo lo que hiso para que ella estuviese con él... -¡Tu vida es perfecta, duermes en una cómoda cama, no compartes habitación con nadie, tienes padres que te aman y una hermana que te adora! ¡Así que no vuelvas a hablarme como si me conocieses- finalizó arrepintiéndose de todo lo dicho, de la expresión tan triste en el hermoso rostro de su novia, de esa pequeñas lágrimas cristalinas, había sido un imbécil por temor a ser descubierto.

-¡No te creo! ¡Dime la verdad! tu no eres así, qué es lo que ocultas, ¿a qué le temes?- Dijo Fuyumi desesperada.

Hawks asustado, sin saber que decirle, no, no deseaba que se enterase de quien en realidad era él, un inútil y débil adolescente, uno que sufre y llora, un cobarde, alguien que no logró cumplir la promesa de estar con su hermano y cuidarlo...

-¡A nada! ¡Así que no te metas!-Dijo Hawks largándose, el violinista huyó del hogar de su novia sin mirar atrás... él pobre no sabía cual iba a ser su destino al llegar al mundo de sus pesadillas...

Una voz femenina se escuchaba en una habitación del hogar de menores "Por favor suélteme..."

Hawks entró a la habitación, Capitán sostenía a una adolescente, el violinista lo empujó, la joven huyó, él y capitán a solas, lo agarra del cuello y lo empuja contra la pared, no puede respirar y un puñetazo en cara le dio de regalo...

"Hawks, me tienes harto, vas a tomar el lugar de ella"

El violinista forcejea, aprieta el cuello más fuerte, el adolescente llora de impotencia, la sangre gotea de su nariz... por primera vez en su vida tuvo tanto miedo por lo que le podía suceder.

"Suéltame maldito bastardo"

Sonrisa, una sonrisa vio en capitán, cerró los ojos Hawks resignado, no servía de nada luchar... pero sonó el timbre, el hombre lo soltó, pero antes le dijo "Eres mío".

A la mierda, Hawks le robó dinero de Capitán, fue en búsqueda de su violín, el dibujo que le regaló Fumikage y un suéter, no tenía tiempo de huir por la puerta, por lo tanto, le dio una patada a la venta y huyó... huyó a lo desconocido, asustado sin saber que hacer...

19:00 pm

La grandiosa fiesta de Halloween de la casa de los Todoroki había iniciado, muchas personas importantes habían, entre ellos los Fumikage y alumnos Yuuei, los cuales era amigos de Fuyumi... eso si, faltaba un invitado importante para Rei, y era ni más ni menos que su cuñado Hawks.

Rei lo adoraba, era como el hermanito que nunca tuvo, además se divierte al ver como Enji y Hawks comienzan a competir, y le gana con el violín.

Porque Hawks era mejor violinista que la mayoría, él debería ser estudiante de Yuuei, pero no todo se puede lograr en la vida... en especial el amor.

Hawks corría a la casa de los Todoroki, le iba a decir todo a Fuyumi, absolutamente todo y también le iba suplicar su perdón, porque él la ama con todo su corazón y alma...

Él le explicará lo que le sucedió, sobre Fumikage e incluso el intento de violación, para luego escapar lejos de todo, lejos de Capitán, pero eso si, éste se ira sin antes decirle "Volveré, espérame Fuyumi"

Para la desgracia de Hawks, la vida puede a veces ser cruel, ingresó a la mansión, buscó por todos lados, para luego salir al patio trasero... algo en él le decía que no fuese, pero ignoró esos extraños pensamientos, ignoró su intuición.

En el patio habían muchos adolescentes de aproximadamente su edad, estaban disfrazados desde animales adorables, hasta aterradoras criaturas... detrás de ese maquillaje pudo apreciar que eran los amigos de Fuyumi de la academia Yuuei, todos eran perfectos, con hermosas vidas y talentosos.

Verlos parados recordó lo que le dijo su novia "Tu deberías estar en Yuuei, perteneces allí...", y luego sonrió y pensó: tal vez tocando el violín lo lograría, tal vez con el supuesto talento que dices, pero como persona no encajo, soy un adolescente que vive en un hogar de menores donde lo maltratan, esas sonrisas de tus amigos, jamás podré tener, pero tal vez tu me ayudes a volver a querer vivir"

Fuyumi estaba bailando, con un chico de Yuuei, un día se lo presentó, es uno de sus amigos que toca el violín, es un hijito de papi, y a la vez un maldito engreído, aún recuerdo esa mirada de asco que le dio, y el coqueteo hacia Fuyumi, la cual no se daba cuenta.

Estaba a un metro de ellos y él la besó, Hawks lo iba a golpear, pero Fuyumi lo besó, y lo abrazó... ¿Tan fácil era de reemplazar? ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Se lo merecía por pelear con ella? Huir, eso deseaba él, largarse a otro lugar... ya no tenía novia, su hermano menor no sabía quién era él, no tenía un hogar, le dolía su cuerpo, su cuello le dolía, y sentía sangre caer de su nariz... el dolor de la golpiza recién la había comenzado a sentir.

"Fuyumi, ¿Por qué besas a ese extraño?" Dijo la voz de su hermanito, Hawks se dio la vuelta y vio a Fumikage y Shoto disfrazados sosteniendo calabazas repletas de caramelos observando a Fuyumi, ésta se dio la vuelta y se sorprendió, los niños la habían visto; para la desgracia de ella, estos dos a pesar de tener ocho años, no eran tan despistados, y sabían que salía con Hawks, y se suponía que no podía besar a otro... los niños veían programas de televisión a escondidas que no eran para niños...

Hawks comenzó a reír, la mirada de odio de Fumikage no tenía precio, parecía que deseaba arrancarle el cabello, porque nadie tenía permitido hacerle daño a su amigo que toca el violín, porque Hawks es una buena persona...

Al escuchar esa risa todos en el patio observaron a Hawks, algunos extrañados, no sabían quién era, ¿Alguien que entró a la mansión sin permiso?, otros preocupados al ver la sangre y rostro herido de éste, sin mencionar que su cuello estaba rojo.

Fuyumi lo observó impactada al ver la apariencia de su novio solamente pudo decir "Hawks..." , Hawks sonrió y dijo "Hola mi querida novia, ¿Te divertiste besando a otro? No me esperaba eso de ti Fuyumi, y pensar que pensaba que eras la mejor persona que he conocido en mi asquerosa vida".

La joven de ojos grises frunció el ceño, iba a decir algo, pero Hawks continuó sin importarle que los viesen otras personas "¿Quieres saber que ocurre con mi vida? ¡Hoy te lo iba a decir! ¡Pero al fin después de seis años iba a decir todo lo que me ha ocurrido y te veo aquí con otro! ¿Quieres saber? ¿Quieren saber chicos de Yuuei? ¡Hawks vive de los once años en un hogar de menores! Piensa Fuyumi, si tu estuvieses en ese lugar, una niñita ¿Qué le ocurriría? ¿Sabes cuanto agradecía nacer hombre en esa mierda de lugar? ¿Sabes que se siente ser humillado? ¡¿Eso es lo que deseabas saber?! ¡¿Qué tu ex fue abusado física, psicológica y s...?!" Lo último se quedó callado, y huyó del patio... no quería recordar, deseaba olvidar todo, pero se detuvo al oír unas pisadas que lo seguían.

Se dio la vuelta y vio a su pequeño hermano llorando "Hawks ¿Te vas?", Fumikage inconscientemente sabía que Hawks se marcharía lejos, muy lejos de él, "¿Nos dejarás por culpa de Fuyumi?", Hawks le sonrió y se agachó para llegar a su estatura "No me iré por mucho, pero siempre estaré cuando escuches en la ventana de tu habitación a una ave cantar, ella te estará diciendo que estoy bien"

Fumikage lo observó triste y dijo mientras se limpiaba los ojos "¿Y si no cantan?", Hawks serio le sonrió melancólico "Significa que estoy tocando el violín", "Te creeré, ¿prometes seguir siendo mi amigo?" preguntó Tokoyami a su hermano mayor, "Lo prometo, ¿Prometes no olvidarme?" "Lo prometo Hawks" finalizó abrazando al mayor.

"Fumikage, recuerda seguir siendo como eres, y cuida tu amistad con Shoto, es bueno tener un amigo que te acompañe en las buenas y en las malas" Dijo separando el abrazo y marchándose.

Hawks no se esperó que esa frase quedara marcada por el pasar de los tiempos en la mente de Fumikage, cuidar su amistad... ¿suena fácil? ¿cierto? eso pensó el niño de ocho años.

Con cada paso que daba llegó sin saber cómo a una plaza, en donde susurró unas palabras que se las llevó el viento mientras las lágrimas caían por sus mejillas..."Lo siento hermano, pero te volveré a ver cuando tengas dieciocho... o más adulto o tal vez nunca, no deseo que veas el rostro de la persona que seré ahora" "¿Qué hice?"

01/11/2011

16:40

Hawks despertó adolorido en un cómodo sofá, le dolía el cuerpo por las heridas del día anterior, su cuello dolía, pero cuando fijo su vista vio sentado en otro sofá a un hombre de unos cuarenta años alto y muy musculoso, de cabello corto y castaño oscuro, tenía una larga cicatriz en su rostro, y ojos color verde oscuro; el violinista se levantó inmediatamente, pero cayó de nuevo en el sofá.

-Tranquilo no te haré daño, mi sobrino te encontró herido e inconsciente en una plaza y como se cree un héroe, te trajo aquí- Dijo con una enorme sonrisa, la cual contradecía su aspecto.

Una niña de unos ochos años vestida de abeja apareció corriendo por el lugar, y se sentó en la pierna del hombre; ella era pequeña y delgada, su tez era un poco bronceada al igual que la del hombre, su cabello le llegaba hasta los hombros y era de color castaño claro, y sus ojos eran de un tono verde claro, que observaban fijamente a Hawks.

-¡Hasta que despertaste! ¡Koichi te arrastró por cuadras! Yo le dije que habías muerto, pero el no me hiso caso- Dijo la niña observando Hawks fijamente, -Tamao, no digas cosas como esas- Dijo el hombre regañándola -¡Pero Papi, es verdad!-, le respondió a su padre.

Hawks estaba confundido, ¿dónde diablos estaba?, recuerda lo que pasó, pero no el como llegó aquí, ¿quién es Koichi? y por la mierda ¿dónde estaba su violín?, de repente apareció un joven de su edad, era alto y delgado, su tez era broncea, su cabello castaño y muy corto, y los iris de sus ojos eran de color almendra; -Soy Koichi Haimawari, me alegro que te hayas despertado...- Dijo con una enorme sonrisa.

Hawks lo observó fijamente, y soltó un suspiro -Soy Hawks...-, el hombre sonrió y le dijo -Soy Oguro, pero dime Knuckle Duster, y yo creo que debes tener hambre-.

Desde ese momento comenzó una amistad, el Señor Oguro no era un matón, ni un delincuente ni un secuestrador de niños, era un hombre viudo que se dedicaba a criar a su pequeña hija Tamao y a su sobrino Koichi quien no tenía padres, además de ser el dueño de una verdureria, pero de noche era un boxeador de peleas ilegales... bueno un poco matón era, pero se necesitaba el dinero, Tamao era su pequeña hija la cual era muy astuta y un tanto excéntrica, y por último Koichi era un joven fan del boxeo, pero su sueño era ser el guitarrista principal de una banda de rock, lamentablemente no tenía amigos para poder formar una. Para Hawks, Koichi era el mejor amigo que se podía pedir, lo ayudó a salir a delante, y le confió todos sus secretos, y sueños, dando como resultado que juntos se dedicaran a tocar el violín y la guitarra en el metro, y en la calle.

Juntos contra el mundo, pero ellos querían subir de nivel, iban a la escuela, pero no querían estudiar en la universidad, querían ser estrellas de rock, por lo tanto, ellos le pidieron ayuda al señor Oguro para que los entrenase para poder así boxear, con diecinueve años ya eran expertos en ese deporte.

Con el dinero suficiente, compraron una guitarra eléctrica y un violín eléctrico, querían crear su propia banda de Rock, pero necesitaban más integrantes, pero ¿quienes se les unirían?

El primero fue Dabi, él era un año mayor que ellos, irradiaba oscuridad y peligro con sus tatuajes y su grandes cantidades de piercing en su rostro, lo conocieron en un bar de mala muerte mientras el tocaba la batería... nunca ha dicho nada de su pasado, Koichi siempre dice "Cuando esté listo lo dirá"... luego de una charla muy larga, lograron que fuese el baterista de la banda, faltaban dos, dos y listo.

La segunda fue Yu Takeyama, es una joven de la misma edad que Dabi, un tanto engreída y le encanta la moda, y tiene la voz más hermosa que se puede pedir, ¿cómo se conocieron? fue bastante simple, Hawks, Dabi y Koichi estaban interpretando una canción de rock, a ella le fascinó y les rogó por ser la cantante principal, ellos le pidieron que cantase algo de Rock, y bueno una vez terminada la canción, fue aceptada sin pensarlo dos veces, hasta Dabi dijo "contratada"...

"Ahora sigo yo, como narrador"

30/10/2013

16:30 pm

Recuerdo aún unos de los mejores días de mi vida, era el cumpleaños número diez de mi hermano, otro cumpleaños sin él, otro año con miedo a que ya me haya olvidado, es gracioso ¿cierto? una persona de diecinueve años llora en las noches, patético, eso era lo que pensaba.

Fui a la pastelería a comprar las galletas preferidas de Fumikage, lo sé, soy un puto masoquista que va al barrio donde nació, a una pequeña plaza con juegos oxidados a sentarse en una banca a comerlas...

Una lágrima caía por mis mejillas hasta que escuché una tierna voz femenina un tanto conocida -¿Estás bien?-, la observé fijamente, y pude apreciar a una muchacha de más o menos mi edad, era alta y delgada, su tez era pálida, su cabello rubio estaba amarrado de una forma muy desordenada, y sus peculiares ojos color ámbar tenían las pupilas similares a las de un gato... ella se le hacía muy conocida. ¿Dónde la había visto?

Si bien recuerdo no le respondí, no tenía porque hacerlo, pero esa tierna mirada que me dio hiso que le respondiese -He tenido días mejores...-, ella frunció el ceño y contestó -¡Hawks! ¡Se supone que debías reconocerme inmediatamente!-.

En ese momento quedé perdido, ¿qué diablos? yo no la conocía, pero ¿cómo sabía mi nombre? -Soy yo, ¡Toga!- dijo alegre, ese nombre inmediatamente me trajo recuerdos...

"Hawks, sálvame, ese hombre malo me quiere hacer daño" "¡Eres mi héroe!" "Me gusta tu música" "Me adoptaron" "¿No me vas a olvidar?" "Jamás te olvidaré Toga".

Sin previo aviso la abracé y dije feliz -Toga, tanto tiempo sin vernos...-, ante el abrazo el rostro de Toga volvió rojo como un tomate, -¿Quieres ir a comer algo y a charlar?- dije arrastrándola sin esperar alguna respuesta.

Por cosas las cosas de la vida, Toga fue nuestra última integrante, ella es quien se dedica a tocar el teclado en la banda... lamentablemente, a veces tiene cambios de humor y se vuelve un poco extraña y se altera con facilidad, aunque la adoptaron un bello matrimonio quedó con secuelas por los traumas de nuestros pasados, todas las noches llora mientras me suplica que no la deje, ¿Cómo dejar a ese hermoso ser, a ese ángel?

Si piensan que Toga y yo estamos juntos, es correcto, ella me ayudó a volver amar a una persona de forma romántica... en realidad es mi prometida, pero nuestra relación amorosa es otra historia, la que se ha estado contado no es una historia en donde he caminado por un sendero de flores, sino una por la cual he camino entre espinas y caídas, una llena de obstáculos.

Logramos la fama, con Koichi cumplimos nuestra meta de tener una banda de Rock, pero el imbécil sigue boxeando, Yu le dice que deje de ser un imbécil, que somos famosos y ya no podemos darnos el lujo de hacer cosas como esas, Dabi también lo regaña... sigo sin saber quién es él, se me hace tan conocido, se parece a alguien...

Que es lo que tengo en mi vida, fama y dinero, y todo gracias a lo que más me gusta en el mundo, tocar el violín, estoy en una banda de Rock, tengo de amigos al Señor Oguro y a Tamao, a la extravagante de Yu y al siniestro de Dabi, a mi mejor amigo Koichi y a mi preciada prometida... saben que es lo triste, aún no logro ser feliz por completo, me siento un ser horrible al querer cambiar todo y tener a mi hermano, a ese pequeño pintor, que ahora tiene doce años.

Sufro constantemente, todas las noches recuerdo todas la mierdas que me han pasado en mi vida, pero no se lo digo a Toga, ella también recuerda, cada segundo en ese lugar, para su desgracia yo llegué un año después que ella, soy un héroe que se atrasó en llegar, pero ella dice que lo soy y siempre lo seré.

¿Soy cruel porque prefiero a mi hermano antes que todos?

¿Soy despreciable por querer cambiar todo por querer que mi hermano recuerde quién soy?

No lo sé, pero lo que si sé, es que si existiese la posibilidad la aceptaría sin pensarlo dos veces, porque mi hermano siempre será mi primera opción, se lo prometí cuando nació...

31/10/2016

19:30

Hoy es Halloween, festividad que no es para nada de mi agrado, me trae malos recuerdos, los cuales solo saben Koichi y Toga...

¿Por qué estoy en el barrio en que viví y que tanto odio encapuchado y cargando una bolsa de papel que contiene galletas? La respuesta es simple, ayer tuve un espectáculo con la banda y no pude asistir a mi tradición masoquista... comer galletas sentado en el parque celebrando el cumpleaños de mi hermano, ayer fue el número trece, aún no puedo creerlo, cinco años han pasado desde el día en que nos separamos, por eso odio esta fecha.

Mientras Hawks caminaba escuchó la voz de un joven en un callejón -¡Aquí tienes esta repugnante droga, ahora largo de nuestra vida!-.

-Tokoyami, ¿por qué no? temes divertirte?- Le respondió una voz carrasposa, ¿Tokoyami? No, es imposible, no podía ser él.

La persona se rió y dijo sin temor alguno -No soy como él, tus intentos de lavado de cerebro, no funcionan contra mi, además hay cosas más divertidas que la coca...-.

-¿La has probado? ¿Si no cómo puedes decir que no te gusta?-

Éste se preocupó al escuchar la voz de un ¿adolescente, y además Tokoyami? y la más adulta era la del bastardo de Kenji.

Los observó fijamente, era Kenji hablando con un adolescente, a duras penas Hawks podía verlo, pero pudo apreciar unos cabellos largos y negros, y el intenso rojo de sus iris...

Algo en especial le llamó la atención del adolescente, su buena postura, su acento al hablar, y además de como estaba vestido, para ser un adolescente de este barrio usaba ropa de marca y bien arreglada, aquí no se ven personas de su edad con camisa y suspensores...

-¡No! Y no me interesan, así que aléjate de él- Dijo el adolescente furioso, cuando de repente saca una bolsa y se la da -¡Así que toma esta mierda y no vuelvas a venderle!-.

-Mocoso, seguiré vendiéndole, es mi fuente de dinero, así que si no quieres coca, vete a tu casa...- Dijo con un tono de voz serio.

El adolescente no se movió y sin titubear dijo -Le daré lo que sea-.

Hawks abrió los ojos asustado, decir te daré lo que sea a un narcotraficante y en especial a Kenji, significa que eres alguien muy estúpido, por lo tanto, fue hacia donde ellos...

Kenji agarró de la camisa a Tokoyami y sonrió de forma depravada... -Muchacho, cuida lo que di...-, no alcanzó a terminar puesto que Hawks lo empujó provocando que éste cayese al suelo.

Kenji se levantó y lo observó -Hola Hawks...-, Hawks vio que iba a sacar una pistola e inmediatamente le dio un puñetazo en la cara dando como resultado que se desmayase, nunca se metan con un alumno de Knuckle Duster... pero igual podía despertar rápido el imbécil.

-¡Vayámonos niño!- Dijo agarrándolo del brazo corriendo sin rumbo alguno ocultándose detrás de unos basureros en un callejón...

-¡Cómo se te ocurre venir a estos barrios a estas horas mocoso!- Dijo Hawks furioso, -Imagínate sino estuviese allí, Kenji te habría hecho cosas que no quieres ni imaginar- finalizó alterado, no conocía a ese adolescente de unos trece años, pero al ver esos iris rojos, algo en él le decía que debía protegerlo.

-Yo...- El adolescente no pudo decir nada, solo podía llorar y susurrar cosas, -Yo no quiero que él vuelva a nuestra vida, quiero que desaparezca, que él le deje de vender-.

Hawks sin pensarlo lo abrazó, ver como ese básicamente niño lloraba y fue a un barrio peligroso solamente por una persona lo hacía sentir triste y le preguntó sin pensar -¿Quién es esa persona? ¿Tu papá o tu mamá o algún hermano?-.

Tokoyami abrió los ojos y frunció el ceño y dijo triste -Juré nunca decirle a alguien, por lo tanto, yo voy a solucionar el problema en que nos metió el imbécil de Monoma...-.

-¿Monoma?- Preguntó extrañado Hawks, ¿quién diablos era ese tipo?

Tokoyami lo observó y dijo serio -Un compañero de clases, por su culpa mis padres piensan que consumo drogas... ¡y yo las odio! esas mierdas arruinaron mi vida-.

-¿Te arruinaron la vida? Tienes trece años y no pareces de mala situación ¿cómo te pudieron afectar si ni siquiera tu vida se vio involucrada en ellas hasta ahora?- Dijo Hawks cada vez más extrañado.

-Eres muy interrogativo, no sabemos nuestros nombre y ya te estás intentando saber quién soy- Dijo levantando una ceja y sonriéndole -Soy Tokoyami Fumikage...-.

Hawks abrió los ojos impactado, era su hermano en un barrio de mierda a las ocho de la noche, muchas cosas pensó en decirle, pero solo pudo decir -¿Fumikage?-.

Fumikage lo observó fijamente, esa voz diciendo su nombre se le hacía conocida -¿Quién eres?-.

-Soy yo, Hawks- Dijo feliz al saber que su hermano estaba más alto y lo único pudo pensar fue: me perdí parte de su niñez, su primer diente caído, y todo es culpa de mi madre.

Abrió la boca impactado y dijo sin parar -¡Hawks! ¿Qué fue lo que ocurrió contigo? ¿Quién te adoptó? ¿Cómo llegaste a ser un violinista que toca rock en una banda? ¿Por qué no me lo dijiste?- lo último fue un susurro apenas audible.

-¿Qué cosa no te dije?- Preguntó extrañado Hawks.

Fumikage frunció el ceño enojado y dijo -¡¿Por qué no me lo dijiste?! ¡Sabes que es enterarse a los doce años y que esa persona estuvo a mi lado! ¡Que de la noche a la mañana se la tragó la tierra! ¡Verlo en la televisión e internet! ¡Buscar en su twiter dónde diablos está! ¡Si tienen algo en común, si se siente sólo, ¿si te extraña aunque sea un poco...?! ¿Me extrañaste?-.

Hawks se quedó callado, su hermano ¿sabía la verdad?, que importaba, era hora de hablar de una vez por todas -No esperaba hablar contigo en un callejón sobre el pasado en el barrio donde viviste por tres años...-.

Tokoyami se quedó callado, solo observó a Hawks esperando a que siguiese -Recuerdo que le decía mamá de que tu tenías que nacer el 31 no el 30, pero se te ocurrió nacer a las once con cincuenta minutos, me molesté mucho quería celebrar tu cumpleaños en Halloween y decirles a todos que mi hermanito era una criatura mágica, ya que nació en esa fecha y que celebrar tu cumpleaños disfrazados, comeríamos pastel y luego iríamos por dulces y... lo siento me voy por las ramas, nunca soy así, pero hablar contigo siempre me ha ayudado a expresarme, después de todo eras mi Fan número 1...- Decía Hawks mientra le caían las lágrimas -No tengo mucho que contarte de los dos, mamá vendía drogas y yo me dedica a cuidarte, y a tocar el violín mientras dibujabas, eso es todo... llegaron los de servicios sociales y nos separaron y...- el violinista se quebró y no pudo continuar.

Tokoyami se sorprendió, nunca imaginó que su encuentro con Hawks fuera tan chocante, verlo llorar como un niño pequeño le hiso sentir mal... -Yo... lo siento Fumikage, tenías tres años, no quería que me apartasen ¡pero tenía once años y tu tres!, cada día agradezco de te adoptasen, si seguías en esa mierda de lugar... no quiero ni saberlo, todo el tiempo pedía que tus actuales padres fuesen buenos y amables, que te cuidasen, que tuvieses más juguetes, que tuvieses un mejor hermano que yo, uno que te cuidase y que te protegiera del mundo tan cruel que había fuera de las paredes de tu casa- Dijo entre lágrimas, Fumikage no sabía que hacer, nunca había visto a un adulto llorar.

-Lo siento, siento haber sido débil, lo siento por no decirte quien era en la fiesta de navidad, yo quería abrazarte y decirte que era tu hermano, pero vi el amor familiar que tenías con tus nuevos padre ¿quién era yo para quebrar lo que tanto les costó a ellos? Aparte no quería que capitán se acercase, no quería que te vieras involucrado en mi mundo, en ese lugar donde los maltratos físicos, psicológicos y bueno, la pedofilia son constantes... y yo, yo quería ser alguien, un ejemplo a seguir, un hombre que pudiese valerse por si mismo y así poder decirte soy tu hermano, pero no logré cumplirlo...- Dijo Hawks intentando con todas sus fuerzas dejar de llorar, -No merecía hablar aún contigo, huí de ese lugar porque... porque- se quedó callado, no quería decir esa palabra.

-¿Qué cosa?- Dijo Fumikage preocupado por su hermano mayor.

-Intentaron abusar de mi...- Dijo apenas audible, mientras le caían las lágrimas, -¿Qué hice para merecer eso? ¿fui un niño malo?... eso era lo que pensaba mientras huía a ni idea dónde- Finalizó mientras se abrazaba a si mismo.

Fumikage lo abrazó, su hermano pasó por tanto, mientras el vivía sin problemas, nunca lo golpearon, cero, y en cambio a su hermano mayor le sucedió de todo, injusta la vida, pero a pesar de lo que le sucedía Hawks, él vivía en un paraíso.

-Lo siento Hawks, siento que te hayan lastimado- Dijo Fumikage abrazando lo más fuerte posible a su hermano mayor.

Ambos hermanos lloraron, ambos hermanos que a pesar de años sin verse y hablarse aún se querían, dos jóvenes que fueron de niños al fin estaban juntos y jamás los iban a separar.

Porque la sangre es más espesa que el agua, y no importa que, siempre te llama.

No importa qué, pero cuando tienes a un hermano lucharás para volver a estar juntos... porque el amor de hermanos es irreemplazable y único.

Al menos Hawks piensa así, ahora que su hermano sabe quién es él, nadie lo apartará de Fumikage...

-Hawks, ¿quieres ir a ver a mis padres y les decimos la verdad?- Preguntó Fumikage ansioso, al fin estaba junto a su hermano mayor.

El violinista nervioso dijo en voz baja -Está bien mocoso-.

-Una última cosa, yo sigo siendo tu Fan N° 1, lo soy desde que nos volvimos a encontrar, así que no le permitas a otro el título, nací con el derecho, ¿entendido?- Dijo dándole una sonrisa a Hawks.

-Sigues igual, ese pequeño que me alejaba de Shoto y Fuyumi...- No pudo terminar la frase sin fruncir el ceño.

Tokoyami observó a su hermano y dijo soltando un suspiro -Ella aún te ama, y está soltera... si te interesa, a mi no me agrada ella, pero...-, el de ojos color miel abrió los ojos y le sonrió.

-Fumikage, tengo una prometida a la que amo y ella me ama como soy, y lo sabes- Le dijo serio a su hermano pequeño.

-Era una prueba, lograste aprobar- Le dijo Fumikage con una enorme sonrisa.

Hawks sonrió, pero luego dejó escapar unas palabras -Fumikage, me prometes no olvidarme y seguir siendo considerado tu hermano mayor... no te avergonzarás de este inútil bueno para nada, una persona cobarde que miente ser valiente, de un llorón de primera...- .

-Hermano, prometo jamás olvidarte y ¿cómo podría sentirme avergonzado de alguien tan fuerte como tu? eres, aunque no lo creas, la persona más valiente que conozco- Dijo el adolescente sonriéndole -Debería yo preguntarte esto, ¿Tu no me odias aunque sea un poquito? tu sufriste sólo, mientras yo vivía como un rey...- continuó mientras las lágrimas caían por sus mejillas -Yo soy una basura, te olvidé, a un no recuerdo nada, no se de mi pasado, pero solo se que estaré contigo hasta que seamos ancianos-.

-Jamás podría odiarte, eres mi hermanito- Dijo sin titubear, Hawks esperó demasiado hablar con su hermano, odiarlo no estaba en su planes.

Dos hermanos, en el barrio donde nacieron, detrás de unos sucios basureros, en un callejón ocultándose del peligro, prometieron que siempre serían hermanos sin importar lo que sucediese, siempre estarían el uno para el otro, hasta que las parcas se los llevasen.

Eran dos simples hermanos, uno con un pasado horrible en un hogar de menores, y otro en una cuna de oro con unos maravillosos padres.

Es injusta de la vida ¿cierto?, uno feliz y otro infeliz... pero así es la vida, a veces es dolorosa y horrible, pero es uno quien lucha por cambiarla, olvidar el dolor del pasado, y buscar un buen futuro.

-Vayamos a casa, mamá y papá te extrañan, además les gusta tu música y papá cocina la mejor sopa de zanahorias- Dijo Fumikage agarrando del brazo a su hermano y arrastrándolo hacia la mansión Tokoyami...

21:00 pm

-Papá, Mamá... Hawks es mi hermano mayor- Dijo Fumikage serio a sus padres, El matrimonio Tokoyami observó fijamente a Hawks, querían saber si era verdad o una broma de mal gusto, -Esto, yo... lo... lo soy- dijo nervioso esquivando la mirada, no quería ver el rostro de ellos dos, se levantó del sofá para poder irse.. él tenía miedo de enfrentar a ese dulce matrimonio.

-No entiendo, ¿cómo es que Fumikage es tu hermano?- Dijo el señor Tokoyami extrañado.

Hawks se volvió a sentar y sonrió con tristeza -Esa mujer tenía dos hijos, uno de tres años y otro de once, y bueno una persona tachó mi nombre, después de todo, así sería más fácil adoptar al más pequeño... nadie quiere a un niño de once años hijo de una vendedora de drogas-.

La señora Tokoyami abrió la boca impactada, Hawks, el muchacho que contrataban para que cuidase a Fumikage era el hermano mayor de éste, y peor aún era esa mirada, una que se veía tan quebrada, unos ojos miel los cuales mostraban el profundo dolor que sentía. -Desde cuándo lo sabes...- preguntó la mujer.

-Desde la fiesta navideña de los Todoroki... la del 2009, él tenía 5 y yo 13- Dijo Hawks observando a la mujer.

-¿Sabías de esa edad? ¿Lo sabías y cuidabas de él? ¿Por que no nos dijiste?- Preguntó el hombre impactado, ¿cómo sabía y no decirlo?

-Porque él era feliz, tenía a dos padres que lo amaban... yo no deseaba que recordase el pasado, además si ese hombre se hubiese enterado, y si se le acercaba un día y le hacía daño y si... y si- Se bloqueó Hawks, no podía seguir, no le salía la voz.

-¿Fumikage que le pasa?- Dijo nervioso el padre a su hijo.

-No lo sé, se puso igual hoy al hablar de su pasado, fue en el momento en el que habló del que los cuidaba en el hogar de menores...- El matrimonio inmediatamente comprendió, Fumikage aún no comprendía bien el trauma, pero sus padres sabían que era lo que podía haberle sucedido.

-Gracias... gracias por adoptar a mi hermano, siempre quise decirlo, yo no hubiera podido protegerlo- Susurró Hawks observando el suelo mientras una lágrima rodaba por su mejilla.

La mujer comenzó a llorar, ver a ese joven en ese estado y saber que podría haberle pasado a su hijo allí, ¿qué cosas le hicieron a Hawks? ¿habrán abusado de él?

-Nunca me tocaron de esa forma si es lo que está pensando, de que me golpeaban sip, digamos que defender a niñas indefensas no era del agrado de Capitán... huí porque él prometió hacerlo, una vez que se fuese la persona que había tocado el timbre- Dijo soltando un suspiro, cinco años habían pasado y aún recordaba ese dolor en su cuello.

Sonó el celular de Hawks era un mensaje de Dabi que le exigía que fuese a practicar una nueva canción que compuso Yu, -Señores Tokoyami, ya me tengo que ir, mi baterista me quiere ver practicando una nueva canción o me mata- dijo dándoles una sonrisa y luego ansioso preguntó -¿Puedo volver a venir a visitarlos?-.

El matrimonio solo le sonrió...

04/03/2019

Estaban en la mansión de los Tokoyami, la madre y el padre de Fumikage se arreglaban, mientras Hawks lo ayudaba con sus cosas.

Los padres de Fumikage pensaron que era lo justo ser él quien lo ayudase, después de todo Hawks no estuvo en el primer día de clases, y bueno hoy era uno de los días más importantes, su hijo asistiría de ahora en adelante en Yuuei en el departamento de artes.

-¿Por que no te cortas el cabello?- Decía Hawks mientras le arreglaba el largo cabello de Fumikage, -Porque no quiero y punto- dijo el adolescente serio.

Hawks se río y dijo burlesco -Lo tienes largo porque a tu novia le encanta como se te ve, y no lo niegues que te escuché hablando con Tsuyu-.

Fumikage se sonrojó por completo -¡Hawks!-, -Debes estar feliz que ambos también pertenecen al salón 1-A y en el departamento de artes- dijo Hawks sonriéndole a su hermano de ya quince años, -Estoy orgulloso futuro pintor, recuerda que yo soy tu Fan N° 1, Tsuyu es una admiradora- finalizó serio, Tokoyami frunció el ceño y sonrió -Toga y tu futuro hijo también lo son-.

-Claro que sí mocoso, nadie podrá quitarte ese lugar- Sonrió Hawks, es gracioso, pero su hermano menor, siempre sería su prioridad.

-Y ¿cómo está la relación con tu amigo?- Dijo Hawks triste al ver como la expresión de Fumikage cambió a una sombría.

-Hemos hablado, pero no es lo mismo... ¿cómo puedo volver a ser el mejor amigo de alguien que jamás tomó en cuenta todo lo que hiso para ayudarte? ¿Cómo volver ser amigo de alguien que se dejó ayudar por alguien que apenas conoció? ¡Nos conocemos desde los cuatro años! ¡Arriesgué cientos de veces mi vida para ayudarlo! ¡Mis padres pensaron que era drogadicto! prefirió la ayuda de esas personas antes que la de ella, Tsuyu y la mía... nosotros, los que lo conocíamos de toda la vida, que compartíamos los mismos sueños- Dijo serio sin darle la mirada a Hawks.

El violinista suspiró y le dijo -Se que volverán a ser amigos, los conozco a los dos desde niños, su amistad es tan fuerte, se podría decir que son como hermanos-.

Tokoyami observó el suelo y dijo a duras penas - Hawks, lo extraño mucho...-.

-Hermanito mio, vivirás por tres años en el mismo internado, tarde o temprano harán las paces y volverán a ser amigos- Finalizó Hawks arreglándole la corbata.

-Eso espero Hawks...- Susurró melancólico.

Nota final

Autora-chan: ¡Jo jo jo, feliz navidad atrasada! ¡No se lo esperaban! ¡He desarrollado este capítulo desde antes de la noticia sad, siendo franca, me dolió escribirlo porque habla de los lazos familiares, pero sobre todo hermanos en una situación así donde no les queda más que decir adiós, por otra parte costó mucho porque omití mucho aunque no lo crean, yo deseaba con locura mostrar su periodo de boxeador, pero no quería seguir alargándola, creo que esta podría ser una historia aparte, pero ñe... ah y mis manos ya están escribiendo el capítulo 22.

Pd: Me dicen si quieren saber más de Hawks para escribir a futuro otro, uno donde explique sus periodos como boxeador y como músico, su relación con Toga, y mucho más de Koichi y Knuckle Duster!

Pd2: Desde ahora solo tengo planeado: Izuku, Katsuki, Uraraka, Jiro, Kaminari y Mei! (Principalmente Izuku y Katsuki al menos en cuatro capítulos seguidos), ah y prepárense para las lágrimas... un ser querido me dijo -No lo hagas, no seas cruel- y yo como -Lo soy y punto-.

OMG: 11.883 palabras, me he superado xD