La bestia desciende a gran velocidad. No puedo huir necesito ponerme de pie y tomar mi espada lo más rápido posible, el entumecimiento en mi cuerpo duele cada vez menos. La adrenalina fluye por mi sangre.

Esa cosa llegó a la base de la cascada a por mí, recupero la compostura y desenvaino mi espada; me coloco en posición de batalla listo para su primer ataque.

Estando a unos pocos metros de distancia da un gran salto, retrocedo para evitar el impacto, sus capacidades no se alejan tanto de las humanas. No quita que sea fuerte.

Toma dos grandes rocas y salta hacia mi de nuevo, pero antes de caer aplasta las 2 rocas en el aire generando una cortina de polvo, ya no lo veo. Lo escucho moverse. A mi derecha, izquierda ¡Por detrás! Su enorme brazo se extiende para sujetarme, cm de distancia me separan de el.

Aprovecho la oportunidad y voy a por su pecho, apenas pude cortarlo. Su piel es muy dura.

¡GRRRRRRRAAAUUUU!

Está más enojado que antes y ahora lanza un golpe directo hacia mí, no puedo esquivarlo y me da de lleno empujándome dentro del bosque hasta impactar con un árbol. Empiezo a Ver borroso y también solté mi espada. No he dejado de pensar en mi hermana y dónde se habrá metido. En éste punto al borde de la muerte siquiera puedo pensar en la posibilidad de rendirme.

Aprieto los dientes recojo mi espada y veo que viene hacia mí, lo esquivo y golpea el árbol dejando la marca de su puño en el, me lanzo directo a cortarle el cuello. Me esquiva y estando en el aire me agarra de una pierna; me usa para golpear el suelo y luego me arroja de regreso al lago.

El dolor es intenso, debería llamar a mi novia para despedirme, aunque seguramente, no me responda. Nunca responde al momento.

La bestia vuelve y me levanta sobre su boca, estando apunto de morir sólo sigo pensando que soy un hermano patético. Me suelta y aquí se ha terminado todo. Me va a comer vivo.

No, mientras haya vida aún hay esperanza. Con la fuerza que me queda sujeto mi espada y la clavo en su ojo. La bestia grita de dolor y se mueve a todos lados, mi pierna izquierda resbala sólo para ser atrapada por sus fuertes dientes, la sangre brota a chorros y como a un muñeco de trapo me sacude por aire. Muerde más fuerte y es todo, me quitó la pierna a nivel del tercio medio del muslo al tiempo que me mandaba a volar, para quedar atrapado entre las ramas de un árbol.

Me estaba desangrando y no podía evitar gritar de dolor, malditasea voy a morir y ni siquiera lo pude llevar conmigo. El Gigantopithecus empieza a trepar por el árbol. Llega a mí y aprieta su puño con la intención de aplastarme.

-¡Trueno estelar! -Gritó mi hermana desde abajo ¡BUM! Un potente disparo que a pesar de la distancia me dejó un tinitus horrible.

Directo a la cabeza, la bestia cae dejando este mundo con un último quejido. Un último adiós.

Veo venir nuestra nave a lo lejos, un pequeño disco flotante se adhiere a mí pecho y cuando la nave está por encima de nosotros, nos teletransporta a su interior.

-Traigan también al mono -Dice mi madre viéndome con una cara de odio y desprecio.

-Nos han traicionado, pero tenemos lo que buscábamos. Es hora de retirarnos de éste asqueroso planeta -Escucho decir a mi padre. Se acerca y me dice: -Estoy muy decepcionado, a tu edad yo hubiera acabado con 5 de esas bestias sin problema ¡Llevenlo a la enfermería!

Es lo último que escucho antes de caer inconsciente...

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Nos vemos en el siguiente reporte.

Sé que son muy cortos, pero es por su propio bien.