Cap 8
Hermana, ¿cuando piensas
decirle a Sapphire que quieres
darle y no consejos? :v
Cuando apruebes todas
las materias, Amethyst.
¡Hey! Eso es mucho.
Y ella hetero.
¿Hetero? JAJAJAJAJ
Rubs, amiga mía, ¿se han
besado?
Sí.
¿En el cuello?
Sí.
¿Todo su rostro?
Sí.
¿En los labios? 7w7
Sí, señora FBI.
HETERO MI MADRE, NO
ME VENGAS CON ESO :V
Flama Eterna se ha desconectado
La morena apago su celular en ese momento. No era como si nunca lo hubiera pensado, ¡claro que lo había hecho! Su mejor amiga y amor platónico, ¿qué tan cliché se tenía que volver todo?
Era verdad y ella lo sabía, cualquiera que las viera pensaría que eran pareja, cuando en realidad simplemente era una friendzone bien pagada.
¿Qué pasaría si se le declarara? Era una pregunta que siempre giraba por su mente.
¿La rechazaría y todo se volvería raro entre ellas? Posiblemente.
¿La ignoraría y simplemente dejaría de existir en su vida? Probablemente.
¿La aceptaría y podrían ser pareja? Imposible.
Bueno... quizás no tan imposible. Sapphire siempre decía ser heterosexual, toda la vida había tenido novios, pero cada vez que se le presentaba la ocasión coqueteaba con Rubí y besos entre ellas ya habían existido. Quizás habían sido accidentes, o productor del famoso juego de la botella, pero existieron.
El juego de la botella. Demonios, esa noche si que le había agradado.
『FLASHBACK』
-Muy bien Sapphire, tu turno -dijo Jasper, uno de los pretendientes de la chica mencionada, después de que ella lo "estafara" con un beso en la nariz.
La ojiazul tomo la botella en sus manos y la hizo girar, riendo a causa de la cerveza y esperando el resultado.
El pico del recipiente terminó por apuntar a aquella chica de cabello afro, la cual sin quererlo se sonrojo.
Una gran sonrisa se coló en el rostro de Sapphire para después mirar a su mejor amiga.
La rubia se le acercó, quedando a unos milímetros de distancia con su contraria. De un momento a otro un beso se formó entre ambas. Quizás fue el alcohol, quizás la lujuria, quizás la espera, la verdad es que nadie más que Sapphire lo sabría, ya que de un momento a otro terminó sobre Rubí mientras seguía con aquel beso.
Sus amigos ya habían comenzado a silbar, pero parecía que sólo estaban ellas en ese momento.
A la mañana siguiente, Sapphire no lo volvió a mencionar, pero Rubí agradeció mentalmente que sólo hayan estado personas de total confianza en aquella fiesta.
『FIN FLASHBACK』
-¡Rubí! ¡Abre la puerta o prometo que no tendrás dedos para tu siguiente novia! -los gritos de una molesta Sapphire se escucharon detrás de la puerta de su habitación.
-¿Sapphy? ¿Qué ocurre?
-¡Abre la maldita puerta Red! -muy bien, algo andaba mal.
Muy pocas veces Sapphire la llamábamos por su apellido, y eso la asustaba un poco. Hizo un esquema mental de todo lo que había hecho los últimos días, ¿qué le podía molestar a Sapphire? Sobre la pelea con Mike, no, ya se había enterado y no había mostrado quejas; desaprobó su ultimo examen, pero eso no, nunca le reclamaba; la discusión con sus hermanos, no, para nada; ¿el a-? Oh rayos, ya entendía completamente.
-¿Abres o prefieres que entre por tu ventana? -una muy molesta Sapphire seguía detrás de la puerta.
-¿Qué he hecho esta vez?
-Nada por ahora cariño, sólo tengo que confirmar algo -se notaba que la molestia seguía en ella, pero al menos esta vez no gritaba.
-Ajá, a mí no me engañas dulzura.
-¡Sólo abre de una vez!
Rendida y sin poder negarse aunque quisiera, abrió la puerta, simplemente para encontrarse con la rubia, que sin siquiera saludar la paso de largo y subió rápido las escaleras hacia la habitación de la morena.
-Hola Sapphire.
-Hola Sapphire.
-Hola Sapphire.
Se escuchó el saludo de tres de los hermanos de Rubí mientras ella pasaba en frente de sus respectivas habitaciones.
Algo nerviosa la morena la siguió a paso lento, intentando entender la situación.
-Creo que tu novia está molesta -dijo Eyeball, uno de sus hermanos.
-Lo sé.
-¿Por qué?
-No lo sé.
-Se ve estúpidamente sexy enojada.
-Cierra tu maldita boca -y diciendo esto le dio un golpe a su hermano, para después ir a su habitación, donde ya estaba su amiga.
Al entrar, la rubia tenía en manos dos latas vacías de pintura, que antes se encontraban debajo de su cama.
-Rubí, sé que Navy no es de tu agrado, ¡pero es tu hermana! ¡No puedes simplemente tirarle pintura a su casa!
-¡No es mi hermana! ¡Es una extraña que entre apoyar a su familia y dinero eligió el dinero! ¿Cómo debería sentirme ante eso? ¡Además, tu ojo perdió parte de su vista por su culpa!
-Todos cometemos errores Red, ¡deberías empezar a normalizarlo!
-¡Bien sabes que nunca normalizaré una traición!
Y ahí estaban, ambas jóvenes discutiendo como si de un matrimonio se tratara. La verdad, ninguna quería estar en esa situación, la verdadera molestia de Sapphire era porque, si no fuera por ella, su amiga podría estar mínimo veinticuatro horas en una celda; y Rubí... bueno, a ella en realidad le molestaba que su amiga no comprendiera sobre su situación con Navy, necesitaba más apoyo, no más reproche.
Aunque ambas sabían que se amaban, también eran conscientes de que esos "detalles", como algunos los llamarían, hacían que entre sí estén en estado crítico.
Odiaban discutir, pero se preocupaban mucho mutuamente, y nunca nada es perfecto, por lo que también tenían cosas que querían mejorar de sí, pero como dice Rubí, juntas, no a los gritos como lo era ahora.
Su discusión continuaba, esta vez con ambas más cerca que al principio, sus cuerpos no se tocaban, por lo que, para lo que estaban acostumbradas, no era mucho.
-¿Por qué mierda sigues siendo tan terca con respecto a perdonarla por mi ojo? ¡Ni siquiera fue tan grave! ¡Sigo viva Red!
-¡No me importa que hayas salido casi ilesa, me importa que pudo hacerte daño y yo no estuve!
-¿Entonces estás enojada contigo?
-¡Agh! -completamente vacía de paciencia tomo a su compañera por los hombros, sin llegar a ser bruta- ¡Sí! ¡Estoy enojada conmigo por no poder cuidarte! ¡Pero también estoy molesta con ella por no importarle!
-¿Por qué le debería importar? ¡No tenía ninguna relación con ella!
-¡Pero eres quien más me importa y ella lo sabe!
Aquel comentario, aunque probable, no fue lo que Sapphire espero, y al presenciar el silencio de la ojiazul, Rubí lo entendió.
-Olvídalo. Ve a tu casa, hablamos mañana, ¿te parece?
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro