Cristian POV

Siento a Ana tensarse, se suponía que esta sería una noche agradable. La aparición de Paul Clayton en compañía de Jack no me es agradable. Ana se suelta de mi agarre haciendo intento de marcharse, sé que el recuerdo del forzado beso de Clayton a Ana sigue fresco y eso me hace hervir la sangre.

-No te marches, nena. No estás sola – Le digo en su oído.

-Chicos, ¡Qué casualidad encontrarlos aquí! – Dice Jack.

-No lo creo – Inquiere Ana.

-Anastasia, felicidades por tu graduación – Saluda el imbécil de Paul y trata de acercarse a ella.

-Mantén tus putas manos fuera de Ana – Le advierto, porque de verdad quiero golpearlo, pero no quero que Ana se entere que sé lo del beso; ella haría preguntas que no deseo contestar.

-Tranquilo Cristian – Inquiere Jack.

-Si valoras nuestra amistad Hyde llévate a este pendejo. No es bienvenido en nuestro grupo – Los chicos al ver nuestra interacción se acercan.

- ¿Jack quién es tu amigo? - Pregunta Kate, siempre de entrometida.

-Él es Paul Clayton y es un excompañero de estudios. Somos egresados de Oxford igual que Ana – Explica Jack.

- ¿Ana este es el idiota que te beso a la fuerza el día de tu defensa? – Pregunta Mia. Ana se pone pálida y este es mi pase para golpear al hijo de puta.

Le lanzo el primer golpe en la cara y el segundo en el costado, siento unos brazos rodearme, deteniendo mis golpes.

-Por favor, Cristian. Detente, este no es el recuerdo que quiero de mi graduación- Me detengo ante su petición.

-Lo siento, nena. ¿Quieres que nos vayamos? – Me volteo quedando frente a ella, mientras Jack recoge a su amigo.

-Si, vámonos. Ya es tarde y estoy cansada – Me dice bostezando.

-Chicos, Ana y yo nos vamos. ¿Se quedan? –

-Nos vamos – Dicen a la vez Ethan y Elliot –

-Cristian, somos amigos, no quiero que nuestra amistad se dañe por un inconveniente en le que no tuve nada que ver. No sabía que ustedes estarían aquí y mucho menos que Paul forzara a Ana a hacer algo-

-Tranquilo Jack. No es contigo mi molestia, es con ese idiota que persigue a Ana como un perro. Como su amigo sugiérele que se mantenga alejado de mi chica – Él me brinda una sonrisa que no puedo descifrar.

-Se lo diré –

Bajamos al piso donde estamos hospedados, miro a los chicos que contrató Welch apostados en cada una de las puertas. Elliot entra a su habitación, Mia hace lo propio con Ethan, yo llevo a Anastasia hacia la habitación donde están sus padres. Ella se detiene.

- ¿Alguien te espera en tu habitación, Cristian? – La pregunta me toma desprevenido.

-No, Ana. Nadie me espera en la habitación. ¿Desconfías de mí? – Su pregunta me desconcierta, creí que habíamos superado esa etapa de nuestras vidas.

-No, es... es que creí que iríamos ahí –

-Ana, deseo muchas cosas contigo. Tus padres duermen tras esa puerta, si amaneces conmigo, creo que tu padre me castrara –

-Yo no lo permitiría y considero que tu equipo de seguridad tampoco – Lo dice riendo.

- ¿Se burla de mi señorita Steele? –

-Creo que sí señor Grey – Ella se ríe de mí.

- ¿Estas segura de ir a mi habitación? -

-Si lo estoy – Ella me da un beso en la mejilla y me regala una bella sonrisa que hace que mi corazón salte de alegría.

La tomé de la mano dirigiéndonos a la suite donde me hospedo.

- ¿Deseas beber algo? - Le pregunto no más entrando a la habitación.

- ¿Estas tratando de embriagarme, Cristian? – Ríe a mi costa.

-Señorita Steele ya usted esta pasada de copas. Pero sólo quería ser cortes – Le digo mientras sirvo el vino.

-Cristian, yo lo que deseo es que me beses – Le entrego la copa de vino. Ella se toma el vino de un solo trago para luego lanzarse a mis brazos y apoderarse de mi boca. Creo que el alcohol está desinhibiendo a Ana, pero no soy un degenerado, no me voy a aprovechar.

-Ve, pongámonos cómodos – Nos dirijo a la habitación donde le quito el vestido, ella se tapa los senos que es lo que ha quedado a la intemperie, sus pechos son hermosos, no puedo dejar de mirarlos. Ana se acerca a mí, toma una de mis manos y la pone sobre uno de sus pechos.

- ¿Te gusta? – Me pregunta.

-Ana, me gusta todo de ti, nena –

-Quiero dormir contigo, Cristian -

-Yo también y lo haremos por ahora conversemos – Quiero hacerla mía, pero no ahora no quiero que después sienta que me aproveche de ella por su estado, será lo primero que digan sus padres. Pese a que Ana es una mujer adulta, para ella todavía importa la opinión de Carla y Ray. Mis padres tampoco lo aprobarían. Pero lo más importante es dejar claro que el pasado se queda ahí y ahora lo quiero todo con ella, sé que Anastasia es una chica diferente y juraría que no ha estado con ningún hombre, porque siempre me ha amado y en honor a ese sentimiento, quiero que nuestra primera vez la recuerde toda la vida. Tomo una de mis camisetas y se la pongo, luego yo me desvisto quedándome sólo en bóxer.

-Lista vamos a conversar – La tomo dirigiéndonos a ala sala de la suite.

- ¿No iremos a dormir? – Pregunta con un tono de decepción.

-Si nena lo haremos, pero antes dejaremos algunas cosas claras – Le sirvo otra copa de vino y yo una de coñac.

- ¿De qué quieres hablar? – Pregunta mirándome a los ojos.

-Lo que te dije en la disco, es cierto. Tenías que marcharte para darme cuenta de lo especial que eres, Ana. Lo único que lamento es que tengas que quedarte porque será un infierno tenerte lejos de mi –

-Podemos hacer video llamada, Cristian -

-Lo sé, pero no será lo mismo. Lo otro es ese maldito de Clayton, no desaprovechará lo oportunidad hacer creer a la gente que tu y él tienen algo –

- ¿No confías en mi Cristian? – Pregunta dolida.

-De ti confío hasta con los ojos cerrados. Es de él del que no me fío. Él intentará cualquier cosa, con tal de obtener lo que desea, hasta de aprovecharse de ti-

-Mi padre quiere contratar a alguien para que sea mi guardaespaldas – Eso sería perfecto para que Luke este más cerca de ella.

- ¿Tu padre ha visto a alguien? Podría sugerirle a tu padre la empresa que utilizo para contratar mi personal de seguridad –

-No lo sé, Cristian. No estoy muy a gusto con la idea. Dejemos de hablar, bésame – Ella me hace un puchero.

La acerco a mi enredándola con mis brazos, para besarla, ella pasa sus manos por mi cuello. Nos sentamos, pero yo la siento a ella en mi regazo, le acaricio las piernas, me detengo cuando la siento estremecer.

Seguimos tomando vino mientras nos echamos mano, hasta que Ana se queda dormida en mi pecho. La llevo a mi cama para luego caer dormido con ella.

Unos golpes me hacen despertar, me remuevo despacio para no despertarla, camino hacia la puerta donde me encuentro a Taylor.

- ¿Qué pasa Taylor? -

-El señor Steele pregunta por la señorita Anastasia. La fue a buscar a la habitación de su hermano como no estaba ahí, vino a buscarla a esta habitación señor –

-Si, es obvio que piense que esta conmigo, al no encontrarla con Kate –

- ¿Cristian tienes algo para el dolor de cabeza? La resaca me está matando –

Ana sale de la habitación en mi camiseta y bragas. Voy a ir a taparla para que Taylor no la mire pera la puerta abriéndose de golpe me distrae.

- ¡Mierda! – Exclama Ana.