Había pasado ya una semana desde lo ocurrido entre Draco y Skyler. Una semana en la que Draco la evadió por completo. Skyler había intentado miles de formas posibles para hablar con él, pero él rubio simplemente no cedía, eso frustraba totalmente a la Slytherin.

Realmente a Skyler le dolía que él la evadiera, sabía que lo hacía porque tenía verguenza y miedo, Draco creía profundamente que la pelinegra no compartía los mismos sentimientos que él. Y en cierto punto era entendible, porque Skyler nunca le dió alguna señal de que lo quería más allá de ser amigos, pero lo que él no sabía, era que la chica de la que estaba enamorado, había abierto los ojos y había aclarado sus sentimientos.

Skyler estaba profundamente dormida sobre su cama, tanía a Shadow al lado de ella, quién también dormía. Faltaban dos horas exactas para que iniciaran las clases en Hogwarts, y entonces:

Es hora...Es Hora...Es hora

La voz de Rahar apareció en su mente, lo cuál la hizo despertarse rápidamente. Se sentó en la cama confundida. Llevaba meses sin escuchar esa voz, la última vez fue en la primera prueba. ¿Por qué aparecía hasta ahora? Se preguntaba Skyler.

Se dió una ducha y comenzó a prepararse para las clases, una vez que estuvo lista, junto a Shadow se dirigió al Gran Comedor para tomar su desayuno. Cuando entró pudo ver que sus cuatro amigos ya estaban ahí, al acercarse ella a la mesa, pasó lo que ya esperaba, Draco se levantó de la mesa y se fue.

-Tengo que hablar con él hoy si o si -determinó Skyler frustrada sentandose, y como ya era usual Shadow subió hasta su regazo.

-Nosotros le hemos dicho que lo haga, que hable contigo -dijo Blaise- Pero está muy avergonzado.

-Sí, cree que lo arrinuo todo. Dice que no puede ni mirarte a los ojos, cree que te burlaras de él porque no será correspondido -añadió Theo.

-No sé porque cree eso, él sabe perfectamente que jámas me burlaría por algo así -resopló la pelinegra- Además, ¿Cómo puedo decirle lo que siento si ni siquiera me deja acercarme?

-Tardaste mucho -le dijo simplemente Tori, pero Skyler entendía a lo que se refería.

- lo sé, y fue mi peor error -Skyler apoyó su codo en la mesa y su cabeza en su mano, miró a su comida y solo jugaba con ella.

[...]

Estaban en Pociones, clase que compartían con los Gryffindor. En esa clase, Draco siempre se sentaba a su lado, pero ahora se sentaba a dos mesas alejado de ella. A su lado ahora estaba Blaise.

-La Poción a realizar el día de hoy, es la poción agudizadora del ingenio -dijo Snape- Es una poción qu permite al bebedor pensar con claridad. Debido a esto, actúa como un antídoto contra el encantamiento confundus -Explicó- Las instrucciones están en la página 115. Trabajaran de forma individual, la poción tiene que tener como resultado el color morado. Cuando acaben su poción avisenme y yo iré a checarla...espero no hagan un desastre...

Cuando Snape terminó de dar las indicaciones, Skyler se dirigió al armario de ingredientes y tomó lo que necesitaría, volvió a su mesa y dejó los ingredientes ahí. Giró a ver a la mesa donde estaba Draco y vió que este ya estaba empezando la poción. Estaba decidida a que al acabar la clase hablaría con él si o si. Sabía que Draco era bueno en las pociones y probablemente la acabaría rápido, por suerte ella también lo era, así que sin perder más el tiempo comenzo a prepararla.

Añadió el jengibre al caldero, y después de eso añadió la bilis de armadillo y los escarabajos molidos. Volvió a leer las instrucciones y le pedían volver a echar un poco más de cantidad de los ingredientes ya mencionados. Meneó los ingredientes en el caldero y un poco de tiempo después la poción estaba lista.

-Termine profesor -le avisó a Snape, quién inmediatamente fue a su mesa a verificarla.

-Muy bien hecho, nunca me decepciona Señorita Beckett -le dijo- ojala otras personas aprendieran de usted- miró con desagrado a Potter y regresó la mirada a ella- Puede retirarse.

-Gracias Profesor -agradeció. Tomó su mochila y miró a sus amigos- Los veo al rato.

Le dió un vistazo a Draco y camino hacia la salida u detrás de ella se arrastraba Shadow. Se recargó en la pared de al lado de la puerta esperando al rubio. Pasaron algunos minutos hasta que salió.

-Draco -lo llamó cuando paso delante de ella.

-Ahora no Skyler -le dijo apenado sin siquiera mirarla, pero al menos se detuvo.

-Draco, por favor dejame decirte que...-Algunos estudiantes salieron del aula haciendo ruido lo cual distrajo un poco a Skyler.

El rubio aprovechó su distracción y se dió la vuelta para empezar a alejarse. Cuando Skyler se giró de nuevo hacia él, se dió cuenta que ya iba algunos metros alejado.

-¡Espera! -apenas iba a comenzar a correr, cuando una mano la detuvo agarrandola del brazo suavemente. Al voltear, estaba Potter sujetandola.

-Skyler yo...

-No tengo tiempo ahora, Potter. Debo hacer algo importante -Lo interrumpió y se safó de él, comenzó a correr hacia donde Draco se había ido, por suerte todavía lo alcanzaba a ver, y todavía para más suerte de ella, el pasillo estaba casí vació.

-¡Espera Draco, Por favor! -Paró de correr cuando logró ponerse frente a él impidiendole el paso.

-Sky -la miraba con tristeza.

-Escucha yo solo...

-Sé lo que me dirás y no quiero escucharlo -la interrumpió, su voz parecía como si se estuviera a punto de quebrar.

-No, no creo que lo sepas. Draco, por favor, solo dame un poco de tu tiempo para sacar lo que tengo que decirte -pidió suavemente- ¿Sí?

-No lo creo Sky -le respondió mirando hacia el suelo, donde se encontraba Shadow.

-Se que me has estado evadiendo por verguenza y miedo, pero no tienes por que sentirte así, yo jámas me burlaría de ti por eso -Le dijo frustrada- Me has evavido durante una semana completa, y durante esta semana he estado intentando acercarme y decirte lo que siento, pero no me lo has permitido...Sé lo que sientes por mi, ahora sé que aquellas palabras que dijiste en la sala de trofeos era lo que pensabas de mí, me alegra saber que una persona me ve como tú lo haces...Escucha, antes de venir a Hogwarts, yo crecí once años sin amor alguno, me es un poco dificil entenderlo aún, pero, los chicos y tu me han hecho aprender a amar, daría la vida por los cuatro si es necesario, y estoy segura que eso ya lo sabes. A ellos los amo como a mis mejores amigos, casi hermanos, pero a ti...a ti te amo de otra manera, te amo como hombre...-Draco la miró sorprendido, parecía como si no pudiera creer las palabras que acababan de salir de la boca de la pelinegra- Me tardé en admitir mis sentimientos, lo sé. Pero apenas logré entenderlos. Ahora entiendo porque tenía revoltijos en el estomago cuando Pansy se acercaba a ti, estaba celosa, no me gustaba y sigue sin gustarme que este cerca ti, aunque no la culpo por estar enamorada de ti. Y como no estarlo, si eres extremadamente guapo, eres inteligente, encantador, divertido, leal...eres lo que toda las mujeres desean...lo que yo deseo. Correspondo tus sentimientos Draco, estás enamorado de mi, y yo lo estoy de ti -Le sonrío.

Draco la miraba con la boca abierta, se sentía incapaz de hablar, estaba procesando las palabras de ella. Sentía un mar de sensaciones en su estómago, lo predonimaba el amor y la felicidad, lo emocionaba saber que ella correspondía sus sentimientos.

-No sabes cuanto me alegra saber esto...-Le dijo cuando lo proceso todo, sonreía demasiado- Tenía miedo de no ser correspondido pero veo que no es así.

Skyler le sonreía y llevó una mano a la mejilla de él rubio y la acarició. Pero de repente, sintió unas fuertes punzadas en la cabeza y en el pecho, lo cual la hizo llevar las manos a las zonas de dolor respectivamente.

-¿Skyler estás bien? -le preguntó Draco preocupado al verla.

-Sí...lo estoy...-le respondió con expresión de dolor.

Es hora...

Escuchó de nuevo la voz de Rahar, escuchó como se repetía seguidamente y como si hubiera eco en su cabeza.

...La oscuridad te llama...

Skyler escuchó la voz como si un fuerte trueno retumbará en su cabeza, por lo cuál las punzadas le daban más fuerte cada vez más.

-Sky, no estás bien, vamos te llevaré a la enfermería -Dijo Draco muy preocupado tomandola del brazo.

...Vamos...

Skyler comenzó a caminar, se dirigía a donde escuchaba más cerca la voz de Rahar. Draco la llamaba pero la pelinegra no era capaz de escucharlo. Draco sabía que algo no estaba bien, y tenía miedo de que algo le pasará a la chica que amaba, así que tomó a Shadow y fue detrás de ella intentando detenerla. Al inicio del pasillo, estaban apareciendo Theo, Tori y Blaise, quienes se dirigían a la Sala Común de Slytherin. Pero lograron ver como Skyler subía las escaleras hacia el tercer piso y Draco iba detras de ella, parecía algo alterado y la pelinegra parecía metida en un trance. Rápidamente que algo extraño estaba sucediendo, por lo que corrieron a las escaleras a alcanzarlos.

-¿Qué pasa, Draco? ¿Qué le paso a Skyler? -preguntó Tori preocupada, cuando llegaron hasta sus amigos.

-No lo sé, estaba conmigo... y de repente se sujeto la cabeza, hacía muecas de dolor, le dije que la llevaría a la enfermería pero comenzó a caminar, parece metida en un trance y no la quizé dejar sola -dijo Draco mirandola preocupado.

-Algo pasará, lo sé, lo presiento -habló Blaise mirando a su amiga, ya habían llegado al tercer piso, su amiga comenzó a caminar hacia un pasillo que se veía oscuro.

-¿A dondé va? -Preguntó Theo, estaban justo detrás de ella siguiendola. Skyler no parecía darse cuenta de su presencia.

...Oscuridad...esta cerca...

Skyler se paró frente a la puerta donde escuchó la voz. La abrió y se adentró en ella.

-Ya hemos estado aquí -Dijo Draco al entrar mirando a su alrededor, Shadow se había enrollado en su brazo.

-Sí, es la habitación donde estaba el espejo de los deseos -dijo Theo.

-Y ahí sigue -Señaló el moreno. En medio de la habitación había un gran espejo.

-No entiendo, ¿Cómo que ya habían estado aquí? ¿Un espejo de los deseos? -Preguntó Astoria confundida.

-Sí, ¿Recuerdas que te contamos sobre aquél bosque y la cabaña que habíamos encontrado y mis padres dijeron que no existía? - Habló Draco.

-Sí...

-Bien, la cabaña tenía un traslador y nos trajó hasta esta habitación. Pero...no sabíamos que estaba aquí en Hogwarts -respondió.

-Miren, Skyler está caminando hacia el traslador que nos llevo de vuelta a la cabaña -dijo Theo.

...esta cerca...

Skyler dirigió su mano hacia la copa, había escuchado la voz de Rahar ahí, la toco y al momento desapareció.

-¡Ah! -chilló Tori de la impresión.

-¡Vamos no hay que perder el tiempo! Debemos seguirla -dijo Blaise, corrieron hacia el traslador y juntos tocaron la copa. Sintieron como todo se movía a su alrededor y segundos después aparecieron dentro de una cabaña que estaba llena de polvo. Skyler les daba la espalda, estaba abriendo la puerta.

-¿Está es la cabaña que me contaron?

-Efectivamente, Tori. Es está misma cabaña -Le respondió Draco. Caminaron con rápidez tras Skyler, quién ya había salido hacia el bosque.

-No sé a que punto del bosque se dirije -dijo Theo preocupado- Esté Bosque es inmenso, cuando nosotros estuvimos aquí sólo recorrimos una parte.

-¡Skyler! -la llamó Draco intentando pararla, pero fue en vano. Skyler siguió caminando hacia donde escuchaba la voz.

...Serás la oscuridad más grande que exista...

Después de un tiempo de caminar y seguir la voz, Skyler se detuvó. Se detuvó frente a una hermosa laguna de aguas cristalinas.