Skyler podía sentir como el estres llegaba a su ser. Todo esto debido a que faltaban pocos días para que se celebrara la segunda prueba y ella todavía no resolvía lo del huevo. Sus amigos la ayudaban en todo, y era algo que ella agradecía eternamente. Aveces no entendía porque después de todo lo que había hecho, seguían a su lado.

-Maldito huevo -dijo Draco tocandose los oídos. Estaba con sus amigos en la habitación de Skyler, todos en pijamas. Querían descubrir lo que sería la siguiente prueba por lo que se les ocurrió abrir el huevo, lo cual fue una pésima idea porque solo solto un chillido horrible.

-Casi me quedó sordo -Se quejó el moreno.

-¿Cómo carajo pretenden que descubramos lo que será la siguiente prueba, si solo sale ese sonido aturdidor? -Preguntó Astoria molesta.

-Estoy harto -dijo el rubio.

Theo al escuchar a sus amigos rodo los ojos y dijo:- Skyler y yo somos los inteligentes del grupo, ustedes solo comen, duermen y se quejan.

-¿Perdón? -Tori se giró a verlo con una ceja alzada y una mano en la cintura.

-Eh...nada amorcito, me refería a estos imbéciles -Señaló a Draco y a Blaise y soltó una risa nerviosa.

-Eso pensé.

-Miedoso -Se rió Skyler- Tori sueltale un poco la correa.

-¡Oye! -exclamó Theo indignado. Tomó una almohada de la cama de la pelinegra y se la lanzó, dandole justo en la cara.

-Estás en graves problemas Theodoro -Lo amenzó Skyler tomando la almohada.

-No me llamo Theodoro, Mi nombre es ¡Theodore! -Chilló justo esquivando la almohada que Skyler le había lanzado. Pero la almohada le dió a Blaise. Acto seguido empezaron una guerra de almohadas entre todos, y como consecuencia la habitación de la pelinegra quedó hecha un desastré.

[...]

Las clases acababan de terminar, los chicos se dirigían hacia el lago negro como era costumbre, pero la pelinegra tenía la gran necesidad de ir al baño, así que le dió a Shadow a Draco y se apartó de sus amigos y se dirigió al baño más cercano.

Se adentro a un cubículo y realizo sus necesidades, cuando había terminado de hacerlo y se estaba acomodando su uniforme. Escuchó un portazo y sollozos. Skyler abrió un poco la puerta del cubículo con cuidado de no hacer ruido y logró ver a Jane, quién estaba apoyada en los lavabos y en las manos sostenía una imagen.

-Me haces tanta falta -Sollozó Jane- No sé que hacer sin ti, lo eras todo para mí. Nadie puede comprenderme, nadie entiende el amor que siento por ti -Jane pasaba su mano por la imagen, como acariciandola- Ni siquiera Valerie y Ginny. Ellas no saben todo lo que tu y yo pasamos. No hay día que no lloré por ti, mi corazón está destrozado y mi alma está vacía... Todo esto está pasando por culpa de Skyler -Escupió- Nunca le hiciste algo malo como para que te hiciera eso, ¿¡Por qué a ti!? -Chilló, las lágrimas no paraban de caer por sus mejillas.- Es la persona más cruel que haya conocido. Pero aún así, juro que vengare lo que te hizo, no voy a descansar hasta verla pagar y sufrir todo lo que yo he sufrido. Valerie piensa que estoy obsesionada con Skyler, pero para ella es fácil decirlo porque no está en mis zapatos, no siente lo que yo siento - Jane se limpió las lágrimas, apartó la vista de la foto y miro hacia el espejo, viendose fijamente a ella misma- Tú puedes con esto, eres fuerte, eres valiente, eres inteligente, eres Jane White.

Jane respiró profundamente y después salió del baño. Skyler salió del cubículo, fue a lavarse las manos y se miró en el espejo.

-Vaya, sí que esta obsesionada conmigo...¡me encanta! -se rió. Salió del baño, iba caminando por los pasillos con una pequeña sonrisa en su cara por la diversión que le causaba el sufrimiento de la gryffindor, hasta que como siempre, alguien se interpuso en su camino. Era Cedric Diggory.

-¿Te puedes apartar del camino, niño bonito? -le dijo con una falsa sonrisa.

-Tengo que decirte algo sobre la segunda prueba -le mostró su dentadura blanca.

-¿Sí? ¿Y que es? -Preguntó Skyler sin interes mirando a su alrededor.

-La prueba tiene que ver con el lago negro -Informó-Toma un baño y lleva el huevo contigo.

-¿Un baño? -preguntó con confusión.

-Sí, un baño. Reflexiona las cosas en el agua caliente. Te ayudará a pensar, hazme caso...Oh, y una cosa más -Agregó- Usa el baño de los prefectos. Es la cuarta puerta a la izquierda de esa estatua de Boris el Desconcertado del quinto piso. La contraseña es "Frescura de pino". Eso es todo -Sonrió- Te lo he querido decir, porque creo que tú harías lo mismo.

-Sí, claro -Sonrió burlona- Gracias por esa información, tejón.

Skyler se dirigió al lago negro donde ya estaban sus amigos esperandola.

-¿Te atoraste en el inodoro o que? -le preguntó Blaise- Tardaste años en venir.

-La obsesionada conmigo fue lo que paso -respondió Skyler mientras apoyaba su cabeza en el regazo de Draco y Shadow subía hasta su estómago para enrollarse sobre el.

-¿La chica White? -preguntó Theo.

-La misma.

-¿Te peleaste con ella de nuevo? - cuestiono Tori con una sonrisa burlona.

-No -se rió- Pero escuché sus lamentos sin que ella se diera cuenta...Ah y también Cedric Diggory me detuvó.

-¿Qué quería Diggory? -preguntó Draco frunciendo el ceño.

-Me dijo que tomara un baño con el huevo. Al parecer decifró como abrirlo y me lo dijo -respondió la pelinegra- ¿Puedes masajearme la cabeza, por favor, Draquito?

-Sólo porque eres tú no te digo nada -dijo Draco. Enterró sus dedos en el lacio cabello de Skyler y comenzó a masajear su cabeza.

-Eres increíble, Rubio -Suspiró Skyler con los ojos cerrados.

[...]

Skyler con Shadow enrollado en su brazo y sosteniendo el huevo de oro, bajó las escaleras de la sala común de Slytherin con cuidado de no hacer ruido. Se suponía que ningún estudiante debería estar fuera de la cama. Pudo observar que había alguien sentado en los sillones. Tenía la cabellera rubia platinada, alguien inconfundible para ella.

-¿Qué haces aquí, Draco? - preguntó en un susurró, pero aún así causo que el rubio se sobresaltara.

-Oh, por salazar Skyler, me haz asustado -Dijo calmando su respiración.

-Lo siento, no ha sido esa mi intención - se disculpó- ¿Ya responderas mi pregunta?

-Sólo no podía dormir y decidí bajar a la sala común -Respondió y bajo la mirada a las manos de Skyler- Puedo ver que llevas el huevo contigo.

-Sí, iré al baño de prefectos.

-¿Porqué no tomas el baño en tu habitación? Recuerda que todos los estudiantes de Slytherin tienen su propio baño.

-Sí, pero tenemos regadera, genio. Tengo que sumergirme dentro del agua con el huevo -Dijo Skyler con obviedad.

-Oh, había olvidado eso -Soltó una pequeña risa.

-Acompañame.

-¿Qué? -preguntó Draco sin entender.

-Acompañame al baño de prefectos -respondió la pelinegra con simpleza.

-¿Estás segura? - El rubio agradecía que estaba oscuro porque sino la chica frente a él se daría cuenta que estaba sonrojado.

-Sí, vamos - Salieron de la sala común y caminaron sin hacer ningún ruido.

Los Corredores estaban iluminados por la luz de la luna, vacíos y en silencio. Cuando llegaron a la estatua de Boris el Desconcertado, Skyler localizó la puerta, se acercó a ella y tal como le había indicado Diggory, susurró la contraseña:

- Frescura de pino.

La puerta se abrió y los dos se adentraron por ella. Skyler cerró la puerta con cerrojo. Estaban maravillados y creían que valía totalmente la pena tomar un baño ahí. Estaba suavemente iluminado por una espléndida araña llena de velas, y todo era de mármol blanco, incluyendo lo que parecía una piscina vacía en forma rectangular en el centro de la habitación. Por el borde de la piscina había unos grifos de oro, cada uno de los cuales tenía en la llave una joya de diferente color. Había asimismo un trampolín, y de las ventanas colgaban largas cortinas de lino blanco. En un rincón había un montón de toallas blancas, y en la pared un único cuadro con marco dorado que representaba una sirena rubia profundamente dormida sobre una roca; el largo pelo que le caía sobre el rostro, se agitaba cada vez que resoplaba. Skyler pusó a Shadow y al huevo en una esquina de la superficie de la piscina, y junto al rubio abrió los grifos para que se comenzará a llenar.

Cuando la piscina estuvo llena de agua, espuma y burbujas, cerraron los grifos. Skyler empezó a quitarse las zapatillas.

-¿Qué haces? -Preguntó el rubio.

-No pensarás que me meteré con todo esto puesto ¿O si? -Skyler se quitó el pantalón y la blusa, quedando a si solo en ropa interior, a lo que Draco se sonrojó. La pelinegra se dirigió a un extremo de la piscina y se sentó para así introducirse al agua.- ¿Te quedarás ahí parado?

Draco reacciono y se sacó la ropa, dejando solo sus boxers. Se introdujo al agua al lado de la pelinegra y esta le sonrió.

-Bonito cuerpo tienes, Rubio -le dijo sonriendo sin pensar que alteraría las emociones de su amigo.

-Eh...-Fue lo único que Draco logró artícular, ya que estaba nervioso. Skyler camino hasta el huevo y regresó junto a él.

-Bien, hagamos esto rápido -Skyler hundió el huevo y lo abrió- toma aire, lo necesitarás.

Los dos dieron una gran bocanada de aire y se hundieron junto al huevo. No escucharon los horribles chillidos que emitió el huevo cuando estaban con sus amigos, sino que escucharon unas voces melodiosas:

Donde nuestras voces suenan, ven a buscarnos, que sobre la tierra no se oyen nuestros cantos. Y estás palabras medita mientras tanto, pues son importantes, ¡No sabes cuánto!; Nos hemos llevado lo que más valoras y para encontrarlo tienes una hora. Pasado este tiempo ¡negras perpectivas! Demasiado tarde, ya no habrá salida.

Cuando el canto termino los dos subieron a la superficie a tomar aire.

-A lo que he entendido, se llevaran lo que más valoras -le dijo Draco pensativo- ¿Pero quién?

-Diggory dijo que la segunda prueba tenía que ver con el lago negro, supongo que será ahí -respondió- ¿Qué criaturas hay dentro del lago?

-Solo sé que hay una buena variedad de especies ahí abajo.

-Sí, pero, ¿Que criatura tiene parecida la voz a un humano? -Skyler miró el cuadro de la sirena que había en el baño y algo pareció activarse dentro de su cabeza -¿Hay sirenas en el lago?

-Sí, creo que sí. ¿Por qué la pregunta?

-Porque el canto de una sirena en la superficie, solo se escuchan chillidos -explicó- Y de bajo del agua, se escucha su melodiosa voz.

-Así que, el canto que sale del huevo es de una sirena...

-Exacto -sonrió mirandolo- Bueno, creo que acabamos de resolver esto.

-Sí, solo una cosa más, ¿Cómo harás para aguantar la respiración tanto tiempo?

-Oh...no lo sé -Dijo Skyler- Creo que le pediré ayuda a Theo con eso, ya lo resolveré.

-Esta bien -Draco se recargo en la pared. A lo que Skyler se acercó hasta él, colocó sus piernas alrededor de su cintura y lo abrazo. El rubio ya convertido en un tomate andante, pusó sus manos temblorosas en su cintura.

-Gracias por ayudarme, rubio, te amo -Skyler se separó un poco de él y le dió un beso en la mejilla- Ahora, disfrutaré un poco, deberías hacer lo mismo.

La pelinegra se separó por completo de él y comenzó a nadar lentamente mientras disfrutaba de la agradable temperatura del agua. Draco solo la observaba, era incapaz de moverse. "Te amo" esa palabra le rondaba la mente, su corazón latía tan rápido, que sentía como si se le quisiera salir por la garganta. Sabía que la chica frente a él le había dicho esa palabra porque lo amaba como su mejor amigo. Pero él no quería torturarse, así que prefirió imaginar que ella lo amaba como hombre. Salió de sus pensamientos, cuando sintió que le salpicó agua en la cara. Skyler estaba frente a él riendose.

-Oh, no hiciste eso, ¡Ya verás!-le dijo y con las manos le aventó agua.

-¡Esto es guerra! -Chilló Skyler riendo, y los dos se aventaban el agua lo más fuerte que podían.