15. Un día extraño
Los chicos se encontraban tomando el desayuno en el Gran Comedor. A decir verdad, Skyler desde que se desperto, se sentía sin ganas de nada, con un fuerte dolor de cabeza y tenía el presentimiento que no iba a ser un buen día.
-Skyler tienes que comer algo-Dijo Astoria arrimandole un plato de panqueques.
-No tengo apetito. La cabeza me va a estallar-Dijo Skyler agarrandose la cabeza.
-¿Quieres que te acompañemos a la enfermería?-Preguntó Blaise.
-No, no quiero que Madame Pomfrey me de una de sus pociones asquerosas. Me aguantaré el dolor.
-Anda, de perdido comete uno-Volvió a decir Astoria, tendiendole un tenedor para tomar un panqueque.
-Esta bien - Comenzó a comer, y Tori sonrió satisfecha, pues había logrado lo que quería.
-Chicos, ¿No tienen el presentimiento de que será un mal día?-Preguntó Skyler.
-Ehh...no-Respondió Theo.
-Es que desde que me desperte, tengo el presentimiento de que hoy no sera un buen día-Dijo la pelinegra- Tengo una punzadita en el pecho, como si quisiera decirme algo pero no se que.
-Pues es extraño.
-Mejor vamos a la clase de transformaciones.
[...]
Decir que el dolor de cabeza se había calmado, era una total mentira. El dolor de cabeza de Skyler estaba incrementando cada vez más, jamás le había dolido así en su vida. También sentía la necesidad de dormir, pero nada superaba el dolor de Cabeza.
Estaban en el aula de Encantamientos, la cual esta vez compartían con los Ravenclaw. El profesor Flitwick les dictaba unos cuantos conceptos que les servirían para el examen que se les aplicaría durante el curso. Todos escribían con rápidez sobre sus pergaminos para que no se les pasara nada. Skyler trataba de seguirles el ritmo pero, a cada momento se tomaba la cabeza entre sus manos y cerraba los ojos con fuerza.
-¿Segura que no quieres que te lleve a la enfermería? -Preguntó Astoria preocupada, ella se encontraba sentada en el banquillo al lado de la pelinegra.
-No, estoy bien-Respondió con voz baja.
-No lo estás Skyler-Reprochó la castaña- Iré a decirle al profesor Flitwick que no te encuentras bien y te llevaré a la enfeemería, esperame.
La menor de las Greengrass se levantó de su asiento para ir hacia donde estaba el profesor, Skyler vió hacia ellos y quizó decir algo, pero sintió una fuerte punzada en la cabeza, bajó la vista al escritorio, sentía como todo se movía y sus ojos poco a poco se iban cerrando.
-¡Skyler!- El gritó de su amiga fue lo último que escuchó, antes de caer en la oscuridad.
Narra Skyler
Abrí los ojos lentamente, ya que una potente luz me calaba en los ojos. Debo decirle a Pomfrey que apague esa molesta luz, pensé. Al abrir completamente los ojos, me di cuenta que no estaba en la enfermería como yo pensaba, me levante sobresaltada mirando a mi alrededor. Todo era completamente blanco, no había nadie, tampoco había un solo objeto, era un lugar vacío.
-¿Donde carajos estoy?-Pregunté para mi misma.
-En una pequeña parte del mundo de los espirítus- Escuché una voz gruesa, era la misma voz que escuchaba en mis sueños, y la misma que me advertía cosas.
-Reconozco tu voz-Dije- ¿Dónde estás? No te puedo ver.
-No soy visible-Respondió- Sólo se puede escuchar mi voz. Mi voz es la guía para todos en este mundo de espirítus.
-Entonces, ¿Eres como un Dios en este mundo de espirítus?
-Sí, por así decirlo.
-¿Donde están todos los demás espirítus?
-Ellos no están aquí, y tampoco son visibles para nadie-Dijo- Sólo hay tres espirítus que son visibles, el guía de la Oscuridad, que tu ya conoces: Tom. El guía de la luz, que es incierto. Y la guía de los guías.
-Tom me ha hablado sobre una mujer, supongo es la guía de él.
-Sí, su nombre es Aria-Dijo la voz.
-Es bueno saberlo. ¿Y tú? ¿Tienes nombre?
-Rahar, ese es mi nombre.
-Interesante-Dijo Skyler- ¿Por qué estoy aquí? Sólo recuerdo que tenía un fuerte dolor de cabeza y luego creo que me desmayé.
- Lamentó eso, pero tenía que producirtelo para poder verte. Estás aquí porque tengo que decirte algo importante.
-¿Y qué es?
-Cómo bien sabes, tu oscuridad está avanzando cada vez más-Empezó-Tienes un guía que la entiende perfectamente y sabrá guiarte con sabiduría. Eres fuerte y Valiente, y si a eso le agregas que eres astuta, vengativa y ambiciosa, te convierte en alguien letal. No existe persona más fuerte y poderosa que tú. Para que tú oscuridad este completa, se necesita pasar muchas secuencias. Y debes estar lista para todo lo que se avecina. En cada año de tu vida, ocurren sucesos importantes, ya sean malos o buenos. Pero apartir del año que viene, ocurriran cosas más grandes de las que has vivido. Nada ni nadie podrá revertirlo. Y pon mucha atención en lo siguiente que te diré:
Tu oscuridad se hundirá, para después salir en potencia en el momento indicado.
-Es hora de despertar-Dijo Rahar.
-Está despertando - Escuché unas voces cerca.
-Aún lado, niños, aún lado.
Abrí completamente los ojos, y aún lado de mi, estaban mis amigos y la enfermera. Draco tenía a Shadow en sus hombros.
-¡Skyler! ¡Al fin despiertas!-Chilló Blaise.
-No se grita en la enfermería-Regañó Madame Pomfrey-Skyler, ¿Cómo te sientes?
-Creo que bien.
-Tu amiga me comentó que desde que te despertaste sentías un fuerte dolor de cabeza ¿Aún lo sientes?
-Sí, pero ya no con la misma intensidad que antes-Respondí incorporandome-¿Puedo irme ya?
-Sí, pero antes tienes que tomarte esta poción, es para el dolor de cabeza-Dijo tendiendome un vaso con una poción color verde, se veía asquerosa.
-¿Es necesario?-Dije al tomar el vaso.
-Muy necesario, ahora tomatelo-Arrugé la nariz y de un sorbo me la tomé completa.
-¡Agh, que asco!-Le regresé el vaso.
-Bien, ahora puedes irte-Dijo la enfermera- Si vuelves a sentir el dolor, vienes de nuevo por favor.
-Gracias - Me pusé de pie, y los chicos me abrazaron con fuerza-Les agradezco su cariño, pero vamonos que hay más clases.
-No, ya se acabaron-Rió Theo- Estuviste inconsciente todo el horario escolar. Ahora ya estamos libres.
-Genial- Sonreí- Vamos a la Sala común, quiero descansar un poco.
Salimos de la enfermería, y caminamos por los pasillos para llegar a las mazmorras, pero mucho antes de que pudieramos hacerlo, sentí como iba en dirección al suelo, por suerte me sostuvieron de la cintura. Me incorpore y Draco me soltó. Giré hacia atrás y me encontré con la culpable: Jane.
-Estás buscando que te haga pedazos ¿Verdad?-Pregunté molesta.
-Yo lo haré primero, tengo que vengar a Alexander-Respondió igual de molesta que yo.
-Eres muy ilusa al creer que podrás conmigo.
-Eso ya lo veremos-Dijo y me apuntó con su varita- ¡Flipendo!
-¡Impedimenta!-Solté, apuntando mi varita hacia ella. Los chicos se habían hecho a la orilla-¡Everte Statum!
Jane salió volando por los aires y cayó de golpe al suelo. Se paró de inmediato y volvió a apuntar su varita hacia mí.
-¡Locomotor mortis!- Soltó.
Haciendo magia no verbal lo evité. Y ella sólo me vió sorprendida. Aproveché su desconcentración y pensé: Expelliarmus. Su varita salió volando.
-Ahora sentirás lo que es estar prendida en fuego-Reí, centré mi mirada en ella y desee que tuviera fuego encima, pero nada pasaba. Eso me confundía mucho. Apunte mi manó hacia ella y tampoco funciono.
-¿Que mierda?- Pregunté en voz baja-¿Que esta pasando?
Tu oscuridad se hundirá, para después salir en potencia en en momento indicado.
Recordé lo que me dijo Rahar, ahora todo tenía sentido. Mi oscuridad no estaba en función en estos momentos, se había hundido.
-Al parecer lo que le hiciste a Hermione en el patio, ya no te funciona-Rió Jane. Quería ver mi orgullo herido, pero jamás se lo permitiré.
-Puedo tambalear, pero jamás pierdo el equilibrio-Sonreí, la apunté con mi varita- ¡Destructo!
-¡Protego!- Se escuchó una voz muy conocida para mí.
-Dumbledore- Escupí.
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Al fin nuevo capítulo.
Les pido perdón por tardarme en actualizar, pero ya estoy en el ultimo mes del semestre, y estoy llena de tareas (deberes) y estoy que muero del estres.
Espero ya no tardarme tanto en subir los demás capítulos. Muchas gracias por leer!
Kazel.
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