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Ariadna

Estoy de nuevo en la playa, con la flor como núcleo de este tormento

-¿Hola?- pregunto al aire. Nadie responde -¿Hola?- repito.

¿Tendré que tocar la flor de nuevo?

Me niego a hacerlo, no quiero volver a ver esas imágenes, ese caos, esa destrucción, esa sangre, solo sería una tortura para mí.

Siento que el suelo comienza a temblar, mis nervios comienzan a salir a flote pero respiro profundo para tratar de retenerlos.

¿Dónde está papá? Quiero a mi papá

-¡¿Hola?!- pregunta una voz masculina a lo lejos, no la reconozco.

Comienzo a mirar hacia todas las direcciones tratando de buscar al dueño de esa voz.

-¡¿Dónde estás?!- grito -¡No te veo!

-¡Sigue mi voz!- pide gritando -¡Yo seguiré la tuya, solo no dejes de hablar!

Comienzo a gritar cualquier cosa, mientras corro siguiendo la voz del hombre extraño. Corro sin parar subiendo un acantilado, sigo sintiendo el suelo temblar cada vez más, pero no dejo de correr y lastimar mis pies descalzos con el suelo.

Me detengo al ver una figura masculina, es aproximadamente un hombre de 45 años, cabello castaño, ojos marrones, de contextura gruesa y musculosa.

Cuando nuestros ojos se conectan un escalofrió recorre todo mi cuerpo y veo esas imágenes de las que quería escapar, al no tocar la maldita flor.

Salgo del shock en el que al parecer entramos los dos. De una forma extraña no me siento intimidada por él, su rostro me parece familiar.

El comienza a dar pasos hacia mí, pero cuando aproximadamente queda a 2 metros de distancia, la tierra se rompe haciendo me caer. Y lo último que note fue al hombre misterioso corriendo para tratar de evitar mi caída.

Despierto con la respiración acelerada y con mucho miedo.

Me levanto de mi cama y me miro en el espejo de cuerpo completo. Mis ojos están completamente naranjas, mi cabello en llamas y estoy ligeramente sudada. Tomo un par de respiraciones profundas y puedo sentir como mis sentidos se calman. Veo hacia mi mesa de noche en la que reposa el reloj, son las 4am.

Han pasado exactamente 6 días desde la Noche de Shock.

Si, ese es su nombre y así llamare a ese evento.

La semana en la escuela ha sido igual que la pasada, para mi sorpresa los tres chicos no se han acercado a nosotros, se tomaron muy literal lo de "Lo que escuchaste y viste aquí... Nunca paso" Pero así mejor, no arriesgamos a más personas. Lo único diferente fue que hable un par de veces con Emily, ella es realmente dulce e inteligente.

Pero en estos últimos días también he tenido este tipo de pesadillas, en las que estoy en la playa. Las primeras dos veces eran sueños en los que hablaba con papá, después quedaba completamente sola y hasta que no tocara la flor no despertaba. Hoy fue diferente ya que vi a ese hombre.

🔹🔥🔹

Es hora del almuerzo, Alexa, Luna y yo estamos sentadas en la meza de siempre. Luna esta bebiendo del termo de sangre que le traje, Alexa está viendo su teléfono mientras come sus alimentos y yo dormí tan mal que no tengo ganas de comer.

-¿Tan malas son las pesadillas?- me pregunta Luna.

Les había contado de las pesadillas solo a ellas, ya que sentía que tenía que desahogarme, y contárselo a mi hermano o a mi madre era literalmente un mar de preocupación seguro.

-Ni te lo imaginas- respondo -La de hoy fue la más rara de todas.

-¿Ah sí? ¿Qué paso?- cuestiona Alexa.

-No quería volver a tocar esa flor de mierda, así que comenzó a temblar- explico -Escuche una voz masculina así que la seguí hasta dar con el portador, cuando me encontré con el hombre fue muy raro, ya que vi las mismas imágenes que veo cuando toco la flor- tomo una breve pausa para tomar agua -Cuando salimos del shock en el que nos dejó las imágenes se comenzó a acercar a mí, pero antes de que pudiera llegar se abrió el suelo y caí.

-Mierda- murmura la periodista.

-Después desperté y no pude volver a dormir.

-¿Y sabes quién era ese hombre?- pregunta la porrista.

-No, la verdad- niego -Pero me pareció conocido, lo he visto en algún lado, no sé dónde pero lo he visto.

-Deberías contar le a tu mamá Ariadna, ella podría ayudarte.

-No quiero preocupar la.

-¿Y a tú hermano?- cuestionan.

-Sería el mismo caso.

-No sé, pero tú estás siendo irresponsable al no contarles- me regaña Luna.

-Estoy de acuerdo misteriosa- opina Alexa -No puedes seguir teniendo esos sueños, te están torturando.

-Prométenos que si en unos días no se van. les contaras- piden.

-Chicas...

Interrumpen -Nada de excusas Ari.

-Bien- digo frustrada -Lo prometo.

Son peor que mi mamá

-Bueno creo que ahora tienes otro problema- agrega Luna.

-¿Qué?

-Noah a tus cinco- exclama -Y está viniendo para acá.

¿Noah está qué?

Mis nervios comienzan a aumentar, mis manos a sudar y me remuevo en mi asiento.

¿Qué estás haciendo?

Soy Ariadna Miller por favor, yo no siento nervios por un chico.

Pues no lo parece.

Cállate conciencia.

Siento una mano en mi hombro y me tenso de pies a cabeza.

-Hola- nos saluda Noah.

-Hola- contestan las chicas.

-¿Cómo están?- nos pregunta.

-Muy bien- responden.

Yo no hablo, no me muevo. Me bloquee y ahora ni siquiera sé que hacer. Noah comienza a verme, pero yo ni siquiera cambio mi postura.

-Bueno Porrista ¿Me acompañas a comprar una malteada?- interroga Luna a Alexa, con la mirada les suplico no dejar me sola.

-Si vamos periodista- contesta ella.

Puedo ver en ellas las intenciones claras. Se levantan de sus puestos y me dejan sola con Noah. Este se sienta a mi lado.

-Ariadna ¿Te bloqueaste?- cuestiona divertido.

-¿Cómo?

-Los nervios te bloquearon o algo así- ya no lo pregunta es más una afirmación.

-¿Y por qué yo he de bloquear me según tú?- curioseo.

-Porque me acerque- me muestra esa estúpidamente bella sonrisa.

Yo bufo -No te des tanto merito, tu sabes perfectamente que soy una chica ocupada.

-Entonces ¿Por qué no me vez cuando te hablo?

Maldita sea lo noto

Toma mi barbilla y voltea mi cara hacia su dirección. Ahora puedo verlo, sus ojos azules tienen un brillo especial, su cabello negro desordenado como siempre y una sonrisita picara y divertida.

-¿Ves? Sé que te pongo nerviosa, pero no es razón para no mirar me cuando te hablo.

-No me pones nerviosa tonto.

-Yo creo que sí, no te preocupes tú causas el mismo efecto en mí.

-¿Ah sí?

-Claro que si- responde -¿Acaso no me viste babeando por ti en los últimos días?

Por supuesto que sí lo vi, fue tan obvio que Harry lo regaño en clase porque en vez de estar respondiendo las preguntas, estaba babeando.

-Como si yo estuviera poniendo mi atención en ti- miento.

-Eso dolió, pero como sé que es mentira lo dejare pasar.

Me acerco un poco a el -Pensé que la médium era tu hermana ¿Ahora tú también tienes esos dones?

-Y yo pensé que el brujo era tu hermano. No me explico ¿Cómo es posible que me tengas tan hechizado?- bromea -Aunque eso ojos grises lo explican un poco.

Siento como mis mejillas se calientan así que me alejo. No puede ser que me esté sonrojando.

-Te sonrojaste, te vez linda cuando estas sonrojada- coquetea y vuelve a acercar su rostro al mío.

-¿Necesitas algo Noah?- pregunto haciendo caso omiso a su comentario.

-Si- contesta -¿Te gustaría salir conmigo hoy?

Vuelvo a tensarme de pies a cabeza.

-No puedo hoy- miento.

No voy a salir con él, no quiero dar paso a ilusiones o compromisos a los que no podre enfrentar.

-¿Por?

-Estoy ocupada.

-Lastima- su mirada decae.

-Lo siento- digo.

-No te preocupes, tal vez en otra ocasión.

Se levanta de la silla, pero antes de irse me da un beso muy largo en la mejilla.

-No me rendiré tan- me susurra en el oído rosando la comisura de sus labios con mi piel, y se va.

Realmente me gustaría salir con él, realmente no quiero que se aleje. Pero eso es lo mejor para él.

-¿Que te dijo?- me preguntan las chicas mientras se sientan con rapidez.

-Me pregunto si quería salir con el- digo sin ánimos.

-Dime que dijiste que si Ari- pide Alexa.

-Dije que no- suelto.

-¡¿QUÉ?!- gritan llamando la atención de muchos en la cafetería.

-Yo no puedo salir con el, chicas- explico -Yo no tengo nada que ofrecerle además, de sangre, muerte, bla bla bla. Él en cualquier parte del mundo lo espera alguien quien le podrá dar lo que el necesita.

-A ver ¿tú no escuchaste nada de lo que dijo Emily?

-Si lo escuche, pero si algo me ha enseñado la vida es que nada es completamente seguro y que el destino se puede cambiar.

Ellas me miran con desaprobación.

Un mensaje llega a mi celular y lo reviso.

Anciano/Harry👴🧛‍♂️:

Pensé que tendría que volver a vigilarte... Me alegra que le hayas dicho que no.

Con la mirada busco por todos lados la cabeza del pelirrojo. Lo encuentro sentado en un mesa solo, levanta la mirada para que pueda mirar le a los ojos.

Yo:

Que hoy diga que "no", no significa que el "no" sea para siempre

¿Papá no te enseño que es malo escucha conversaciones ajenas, Anciano?

Cuando lee el mensaje vuelve a mirarme, y esta vez con mis ojos le advierto que se calle.

Hoy no estoy de humor para lidiar con el

-Voy a ir por unos libros a mi casillero- informo -Nos vemos en clases.

Me levanto y salgo de la cafetería. Llego hasta mi casillero y comienzo a sacar unos cuantos libros que tengo que llevar a casa.

-Hola cuñada- dice una voz angelical a mis espaldas.

Me volteo para ver a la menor de los hermanos Bryant -Hola corazón.

-¿Cómo estás?- pregunta.

-Un poco desanimada, la verdad- respondo cerrando mi casillero -¿Y tú?

-Bien- me dice -¿Qué le dijiste a Noah?

-Entonces ya tu sabias que él me invitaría a salir.

-Se muchas cosas- repite encogiéndose de hombros.

Una chica choca con Emily, haciendo que ella y sus cosas caigan.

-¡¿Por qué te instalas en el medio del pasillo mocosa?!- le grita mientras levantas sus objetos.

Ayudo a Emily a levantarse -¿Y tú por que no te fijas mejor?- le pregunto en un tono hostil.

Es una chica con rasgos asiáticos y cabello oscuro.

-Esa mocosa esta en medio del pasillo- acusa.

-Cuidadito con volverte a referir de esa forma a ella- le advierto.

-A ver ¿ella no se puede defender sola?

-Solo fue un accidente como para que te pongas así- le dice Emily.

-Mejor sigue tu camino- le recomiendo.

El timbre suena y ella de mala gana sigue su camino.

🔹🔥🔹

Estoy en mi habitación preparando un mi equipo de fotografía, ya que pienso salir a tomar alguna fotos. No tengo un momento para tomar fotografías desde el partido de beisbol y digamos que la noche no terminó como se esperaba.

Cuando tengo todo listo decido salir de mi habitación y encuentro a mi madre en el pasillo -¿Vas a salir a tomar fotos?- pregunta.

-Si- afirmo.

-Mira no quiero que hoy vallas al centro ya que hoy se va infiltrar Kim- me informa -Sabes que aquí al lado tenemos el acceso al bosque ¿Podrías tomar tus fotos en el bosque? Sé que suena un poco incoherente, pero no quiero que estés rodeada de personas, y posibles peligros.

Realmente quería ir a tomar fotos al centro, pero la propuesta no suena mal y en entiendo que quiere que este segura.

-Bien- respondo.

-Sé que no sueles tardar mucho pero te quiero aquí antes de las 7- pide.

-Si mi Generala- bromeo haciendo un saludo militar.

Bajo las escaleras y llego hasta la cocina, guardo una barrita de cereal y un tremo de agua. Salgo a patio rumbo al bosque.

Ya dentro escucho los pájaros cantar, siento el viento en mi rostro y el olor a césped solo da tranquilidad. Comienzo a tomar unas cuantas fotos, a los pájaros, los rayos de luz que atraviesan los árboles, las pequeñas flores que acompañan al césped.

Lo que ven mis ojos cusa tranquilidad.

No sé pero a mi llega nostalgia, todo lo que me rodea empieza a traerme recuerdos. Las veces que escapaba a los límites del Palacio de Sangre, como Alfons y mamá me regalaron mi primera cámara fotográfica, cuando Mérida pasaba semanas insistiéndole a papá que me dejara ir de compras con ella y al el acceder traíamos las tiendas enteras, como Jacob le sacaba sonrisas a todos de una forma tan natural, como Harry solo se tomaba fotos conmigo, como nuestro padre me enseño a bailar.

También recordé las tantas veces que me preguntaron si extrañaba a Esteban, y aunque tal vez suene mal yo no lo extrañaba.

No podía extraña un amor que no recordaba

Si mamá me había mostrado de sus recuerdos muchas cosas, amaba a Esteban Miller, lo admiraba y en los sueños que he tenido he podido sentir amor, me siento protegida. En mi juventud cuando no había conocido a Alfons, el sentimiento era por lo que me habían quitado y no pude disfrutar.

Yo supe verdaderamente que era extrañar a un padre, cuando se me fue arrebatado.

No pude agradecerle, ni decirle un te amo por última vez

¿A quién amaba más a Esteban o a Alfons?

Los amaba por igual, al final del día los dos me amaron y protegieron por sobre todas las cosas.

Con todo lo que he hecho y visto, no me siento merecedora de su sacrificio

Sus muertes pesan sobre mis hombros, más que las de cualquier otra persona

Unas lágrimas corren por mis mejillas las cuales quito rápidamente. Para tranquilizar me levanto la mirada al cielo, encontrándome con un hermoso azul. He inmediatamente un nombre viene a mi mente.

-Noah- digo en un susurro.

¿Qué estará haciendo ahora?

¿Entrenara? ¿Estudiara? Podría está escuchando música o simplemente pensando y como costumbre acariciando su labio inferior... Sus labios son..

Para de pensar en él

Después de una hora, decido volver a casa, pero una melodía acústica detiene cualquiera de mis pensamientos.

¿Quién esta tocando?

Comienzo a adentrar me en el bosque, siguiendo la melodía. Con una mano en mi bolsillo derecho tomando mi navaja y en una posición defensiva me acerco a mi objetivo.

Pero mi sorpresa es ver a Noah recostado de un árbol mirando hacia el lago, está muy distraído tocando la guitarra. Descalzo, con sus jean, puedo notar su camisa colgada de una rama.

Dios ¿Por qué lo hiciste tan bello?

Detallo su abdomen, es marcado y tiene un lunar en el pecho, es pequeño casi no se nota.

Tomo mi cámara muy sigilosamente, quiero guardar esa imagen en una foto.

Clik clik

Suena la cámara al tomar la foto, el parece reaccionar con sorpresa. Sus ojos van directo a mí, su mirada tiene un brillo especial, sorpresa, tranquilidad alegría, coquetería, todo eso es lo que demuestra haciendo temblar mis piernas y sudar mis manos.

-¿Me estas siguiendo Miller?- me pregunta.

🔹🔹🔹

¡HOLA, HOLA!
Capitulo 23🤎🤍
¿Quien será este misterioso hombre de ojos oscuros?
¿Creen que al final Ariadna y Noah si tendrán esa cita?
Harry deja de escuchar conversaciones ajenas... Te amo mi pelirrojo, pero respeta
No se ustedes pero yo amo cada día más a Emily Bryant, y no me gusta que le falten al respeto 😠
¿Han escuchado ese refrán donde dicen "Que los ojos son la ventana del alma"?

Nos veremos pronto...