La vida me dio más de una oportunidad.

Puede sobrevivir a un accidente de auto.

Pude reponerme de la muerte de mi padre.

Pude superar irme de mi hogar y dejar atrás a mis abuelos.

Pude sobrellevar el matrimonio infeliz de mi madre con su nuevo esposo.

Pude sanarme de un corazón roto.

No fui la niña miserable que parece que soy, de hecho, fui muy feliz. Hasta que todo se fue a la basura.

Lejos del hogar que conocía, crecí siendo parte de la élite de Nueva York. Tenía los mejores juguetes, la mejor ropa, iba al mejor colegio y era catalogada como la niña más bonita de nuestro círculo.

Qué dicha, ¿verdad? Bueno, para mí no lo era.

Y, cuando creí que todo se estaba yendo al demonio una vez más, la vida me dio otra oportunidad.

Hui. Hui de vuelta a mi hogar. A ese antiguo viñedo en Michigan que me vio nacer.

La vida se vuelve más bonita entonces, luego de tanto tiempo lejos, y allí me doy cuenta de lo mucho que lo había extrañado.

Sin embargo, lo que creí que sería un escape del estrés y de todo el ajetreo de mi antigua vida, se convierte en nuevas preocupaciones y menos descanso.

Rochester se torna rojo pasión, así como el vino tinto que fabrica mi familia. Lleno de lujuria, nuevos recuerdos, aventuras y amor.

No esperaba toparme con un gruñón y malhumorado nuevo vecino, ni con su sonrisa torcida que rara vez aparecía, ni con sus atormentados ojos azules que parecían dos estrellas en el cielo nocturno o con su capacidad de volverme loca.

No esperaba enamorarme, y mucho menos esperaba encontrarme en una encrucijada. La vida me pone contra la espada y la pared nuevamente, y no sé si pueda ganar esta vez. ¿Podré sobrevivir a esta nueva etapa de mi vida?