- Seohyun muchas gracias por acompañarnos a mí y a Jihyo al supermercado. - Le dijo Dahyun dejando las bolsas del mandado en la mesa de la cocina

- No Dahyun, gracias a ti por sacarme de la casa, se siente muy sola sin mi nieto y Rosé

- Mami ¿Ya le podemos decir a mi abuela quién está aquí? - Dijo la pequeña

- Seohyun, quiero presentarle a alguien muy especial para mí

- Dahyun, hace unos días me habías dicho que tú y Momo habían discutido y que se fue de la casa, pero no pensé que tan pronto tuvieras a alguien más

- No. - Sonrió. - No es eso Seohyun, quiero que se reencuentre con éstas dos personas que son muy importantes para usted, venga conmigo. - Dahyun tomó su mano y caminaron hasta la sala de la casa. Casi se desmaya al verlas, no podía creerlo, ellas estaban ahí, sus dos hijas las cuales daba por muertas estaban a tan solo centímetros de distancia sonriéndole

- No p-puedo c-creerlo. - Su voz temblaba al igual que sus piernas. Jisoo y Lisa se acercaron a ella, Seohyun las abrazó fuerte. - ¿De verdad son ustedes? - Preguntaba acariciando el rostro de las dos. - No puedo creerlo, pero ¿Dónde estuvieron todo este tiempo? ¿Por qué nunca avisaron que estaban vivas? ¿Por qué? Lisa, Jisoo, no saben cuánto sufrí, no saben cuánto les lloré ¿Por qué me hicieron ésto? Nunca se comunicaron conmigo ni con nadie

- Todo tiene una explicación mamá, vamos a responder a todas tus preguntas. - Lisa tomó a su madre y juntas se sentaron en uno de los sillones para explicarle todo lo que había pasado durante todos éstos años

- Lisa pero si tú estabas bien ¿Por qué nunca te comunicaste conmigo? Pude haberte ayudado

- Créeme que quería hacerlo, pero Jennie y yo teníamos miedo de que Jongin se diera cuenta de dónde estábamos y tratara de hacerle algo a nuestra hija

- Tampoco puedo creer que tengas una hija, siempre pensé que seguirías siendo soltera y disfrutando de la vida, como siempre solías decírmelo

- Quisiera tenerla entre mis brazos y decirle cuánto la amo, pero ese maldito me la arrebató, no solo a mi pequeña, también a Jennie

- Nunca pensé que un hombre así como Kim Jongin fuera tan cruel y despiadado, a tal grado de hacer este tipo de cosas ¿Qué piensas hacer?

- Voy a buscar a Taehyung, es el hermano de Jennie, espero que él pueda ayudarme. - Seohyun miró hacia el sofá de enfrente, donde estaba Jisoo, quien era abrazada por su hija

- ¿Y tú Jisoo? ¿Cómo estás? - Le preguntó

- Imaginate mamá, desperté después de siete años, pero para mí fue como si todo hubiera ocurrido hace días. - Acarició a su hija. - Mis hijos ya están grandes, me perdí tanto de ellos y ahora el enterarme que Rosé no murió y se casó con Jungkook me tiene con el alma destrozada

- Tu familia llegará muy pronto, estoy segura de que Rosé entenderá todo lo que pasó y volverán a estar juntas, como siempre debieron estar

***

Días después

- ¡Abuelita! ¡Abuelita! - La puerta de la casa fue abierta dejando ver a un Seokjin bastante entusiasmado de ver nuevamente a su abuela

- Hola mi amor. - Se dieron un abrazo. - ¿Cómo te la pasaste? Te extrañe mucho

- Yo también abuelita, debiste de venir con nosotros, estuvo muy divertido todo lo que hicimos

- Hola Seohyun ¿Cómo está? - Ahora fue Rosé quién entró del brazo de su ahora esposo

- Muy bien Rosé, yo...tengo que hablar contigo

- ¿Sucedió algo Seohyun? - Preguntó Jungkook

- No hijo nada, solo que... Dahyun habló, pensó que ya habían llegado y pues me dijo que quería hablar contigo, quería saber cómo te fue en tu luna de miel

- Bueno pues ya mañana iremos a su casa para contarle todo. - Respondió Jungkook. - Ya es noche, mañana podemos ir

- Jungkook tiene razón, los tres estamos un poco casados por el vuelo, mañana iré con Dahyun para platicarle todo. - Jungkook tomó la mano de su esposa. - Buenas noches Seohyun, descanse. - Juntos subieron las escaleras para ir a su habitación

***

- Lisa ¿A dónde vas tan temprano? - Preguntó Jisoo

- Pude comunicarme con Taehyung, me dijo que Jongin mandaría a mi hija a la escuela. - Sonrió. - Hoy es su primer día de clases y Taehyung quiere que yo esté con ella

- Me alegro por ti de verdad

- Otra cosa importante que me dijo fue, que como Jongin siempre está ocupado él sería quién se ocupara de mi hija y también de Jennie

- Tendrás más oportunidades de poder verlas

- ¿Nos vamos Lisa? - Preguntó Dahyun

- Sí Dahyun, estoy lista

- Jihyo ven, despídete de mamá. - La pequeña hizo caso y fue con Jisoo para despedirse. - Pórtate bien mi amor

- Sí mami. - Contestó sonriendo

- ¿Hoy verás a Rosé? - Le preguntó Lisa

- Sí, más tarde nos veremos, mi mamá quedó de traerla aquí, por fin podré verla y explicarle cómo sucedió todo

- Suerte Jisoo, nos vemos después

Cuando llegaron a la escuela, Lisa Bajó del auto y caminó hacia la parte trasera del colegio, ahí era donde Taehyung le había dicho que aguardara.

- Ey Lisa. - Escuchó la voz de Taehyung, se dió media vuelta y miró a su hija, quitó la gorra de la sudadera que llevaba puesta al igual que los lentes, su hija la observó y corrió rápidamente hacia ella para abrazarla

- Mi amor, mi princesa, no sabes cuántas ganas tenía de verte y abrazarte. - Su hija seguía aferrada a ella y hasta notó como comenzaba a llorar. - ¿Qué pasa mi amor?

- El hombre malo nos dijo a mi mamá y a mí que te había matado, nos dijo que estabas muerta mami

- Mírame Lia, estoy bien y te prometo que muy pronto estaremos juntas las tres de nuevo

- Le tengo miedo al hombre malo

- ¿Te hace algo? ¿Te pega?

- No, pero es muy malo porque no quiere que estemos contigo, él quiere que me olvide de ti

- Pero eso no lo vamos a permitir ¿Verdad?

- No, yo te quiero mucho por eso no te puedo olvidar

- Lisa ya sonó el timbre para entrar, ya despídete de ella. - Advirtió Taehyung

- Mi amor, escúchame bien

- No quiero irme mami. - La pequeña volvió a abrazarla aún más fuerte, pues no quería separarse de su madre. - No quiero regresar a la casa con el hombre malo

- Lia, tienes que hacerlo, escúchame mi amor, prometo que muy pronto estaremos juntas, será muy poquito tiempo el que estarás ahí, Lia, yo sé que eres una niña muy fuerte, por favor cuida de tu mamá y aunque tú no quieras hazle caso al hombre malo, es por tu propio bien ¿Sí? ¿Me lo prometes?

- Sí, sí mami te lo prometo

- Ahora ve con tu tío para que te lleve a tu salón. - Dejó un beso en su frente. - Te quiero mucho Lia, cuídate por favor

- Yo también mami. - Taehyung tomó su mano y caminó con ella, dejando a Lisa con el corazón aún más destrozado

***

Rosé estacionó el auto frente a la casa de Dahyun, tenía muchas ganas ya de saludar a su amiga y contarle cómo se la pasaron en su viaje de luna de miel.

- Hola Rosie. - Le saludó con un beso. - Pasa por favor, te estaba esperando

- Gracias Dahyun ¿Te pasa algo? ¿Por qué estás así tan emocionada?

- Ve al jardín yo iré por unas cosas, ahora te alcanzo

- Está bien te espero.  - Rosé caminó hasta el jardín, se quedó un momento observando las flores

- Rosé. - Sintió un nudo en su estómago al escuchar esa voz detrás de ella, se dió vuelta para observar y ahí estaba ella, era Jisoo

- Jisoo. - Dió unos cuantos pasos para acercarse a ella. - Mi amor. - Puso sus brazos alrededor de su cuello. - Eres tú, estás aquí, estás viva

- Tengo tanto que decirte, han pasado tantos años

- Sí, sí ha pasado mucho tiempo ¿Donde estuviste? ¿Por qué te fuiste sin mi? - Sollozaba. - ¿Cómo pudiste hacerme ésto? ¿Por qué me abandonaste?

- No, no Rosé déjame explicarte

- Me dejaste sola, llevo siete años llorándote, sufriendo todos los días por no tenerte a mi lado ¿Sabes cuántas veces me he preguntado por qué te fuiste sin mi, sin nuestro hijo?

- Perdóname, mi amor déjame explicarte, vamos a hablar

- ¿Qué me vas a decir? Que tuviste que huir para que la policía no te detuviera, pudiste haberme esperado, pero no lo hiciste

- Todo pasó demasiado rápido, discutí con Lisa y Jennie tratando de que no despegara esa avioneta, los esperé hasta el último momento, pero ya en el aeropuerto la policía llegó y no tuve otra opción más que abordar sin ustedes y tenía planeado que cuando yo estuviera a salvo ustedes irían conmigo

- Siete años para venir por nosotros, entiéndeme, yo ya no se quien eres, no sé que hiciste todo este tiempo, quién sabe dónde estabas, mientras yo, yo me moría lentamente sin ti

- Déjame terminar de explicarte por favor

- Sabes Jisoo, hubiera preferido mil veces llevarte a Seokjin a prisión para que te viera, te contara todos sus logros, sus travesuras en vez de llevarlo a una tumba vacía

- Mi hijo. - La mayor no pudo evitar que las lágrimas brotaran. - Todo lo que me perdí

- Porque así lo quisiste, tu decidiste escapar sin nosotros ¿Por qué? Solo puedo decirte que llegaste demasiado tarde

- Estuve siete años en coma, siete años que para mí se fueron en un abrir y cerrar de ojos

- Mi amor, perdón mi amor. - Fue hacia ella y la abrazó fuertemente

- Yo no te abandoné, no los abandoné. - Decía la mayor mientras aún seguía aferrada a ella

- Perdóname, perdón, yo no sabía

- No, yo entiendo el dolor que fue para ti el quedarte sola. - Se separó. - Pero la vida continuó sin mi, tu continuaste sin mi. Llegué a Seúl el día de tu boda pero llegué tarde para impedirlo, demasiado tarde ¿Por qué? ¿Por qué te casaste con él?

- Me casé por muchas razones, porque pensé que estabas muerta, porque todos me aconsejaban que ya era momento de rehacer mi vida y sobre todo lo acepte por agradecimiento, el nunca me dejó sola, siempre cuido de mi y de mi hijo

- ¿Lo amas? - Preguntó seriamente la mayor

- No

- ¿Y a mí? ¿Me sigues amando?

- Jisoo, nunca te he podido olvidar, mi amor por ti sigue intacto dentro de mi, tú eres mi gran amor, tú eres la mujer de mi vida porque yo jamás podré arrancarte de mi corazón, de mí mente. - Con sus manos Rosé tomó el rostro de la mayor y se acercó a ella. - Te amo Jisoo, te amo más que a mi propia vida. - Dijo uniendo sus labios, sintiendo de nuevo aquel dulce sabor de sus besos los cuales extrañaba tanto

- No sabes cuánto deseaba volver a besarte, tenerte junto a mi

- Me haz hecho tanta falta, no sabes cuánto te amo

- Dime que eres mía

- Porsupuesto que soy tuya, siempre he sido tuya

- Demuéstramelo, si de verdad eres mía demuéstramelo ésta noche, quiero tenerte, estar contigo, besarte

- Jisoo, no sé si esté bien

- Hay un hotel en el centro de la ciudad, no lo pienses

- Tu sabes que nada me haría más feliz que estar nuevamente entre tus brazos, hablaré con Seohyun para que me ayude a inventar un pretexto para estar contigo

- Estoy segura de que nos ayudará, te esperaré por la noche en el hotel

- Está bien, yo estaré ahí

***

Jisoo aguardaba en aquella habitación de hotel en la espera de su amada. Se sentía nerviosa, pues ya había pasado bastante tiempo y Rosé no llegaba, tal vez no pudo salir de su casa, tal vez Jungkook no la dejó salir. Estaba por tomar sus cosas e irse pero tocaron la puerta, su corazón se aceleró aún más, pues abrió la puerta y era ella, sí había llegado a la cita.

- Estaba por irme, pensé que no vendrías. - Rosé pasó

- No sabes la de excusas que tuve que inventar para salir, pero tenía que venir contigo mi amor. - La ahora rubia se acercó a la mayor y enredo sus brazos alrededor del cuello. - Hazme tuya. - Susurró en su oído para después comenzar a repartir besos por su cuello, Jisoo no sé quedó atrás y también la acariciaba hasta unir sus labios en un dulce y tierno beso, pues no solo quería tener sexo con ella, quería hacer el amor, entregarse por completo a ella.
Lentamente fue quitando las prendas de la rubia dejándola solo en ropa interior, la guió hasta la cama, dejándola acostada esperando a que ahora la mayor se desprendiera de su ropa. Jisoo dejó un rastro de besos desde sus pies, pasando por sus muslos, deteniéndose un par de segundos sobre sus pechos donde la despojó de su sostén para acariciarlos mucho mejor, haciendo jadear a la rubia. Extrañaba ésto, la manera en que Jisoo la tocaba era excepcional nunca nadie la había tocado de esa manera, sus caricias, sus besos, la amaba demasiado.

- Te amo mi amor. - Le dijo deteniendo por un momento a la mayor. - No sabes cuánto

- No sabes cuánto te extrañaba, cuánto deseaba este momento, el tenerte así, entre mis brazos y lo feliz que me hace

La mayor siguió con los besos y las caricias. Las dos estaban ya muy excitadas, se necesitaban la una a la otra. Jisoo bajo lentamente sus bóxers y de igual manera lo hizo con las bragas de la rubia, se colocó nuevamente sobre ella, repartió unos cuantos besos más por su rostro, tomó su miembro y lo fue introduciendo lentamente en su interior, provocado gemidos por parte de Rosé, mientras ella se sentía en el cielo al sentir de nuevo aquella sensación que tanto extrañaba. Rosé se aferró a la espalda de la mayor cuando comenzó a moverse dentro de ella, las embestidas eran suaves, mientras no dejaba de verla, ni de acariciarla, pues le encantaba los gestos que hacía al proporcionarle tal placer.
La mayor comenzó a dar embestidas aún más fuertes y rápidas, pues notaba que tanto ella como Rosé estaban a punto de llegar al éxtasis. Y así fué, después de unas cuantas veces más embistiendo se vino dentro de ella llenándola de su semilla.

Se quedaron así durante varios segundos, mirándose, mientras trataban de regular su respiración.

- Te amo Rosie

- Yo más a ti, Jisoo eres y serás por siempre el amor de mi vida, te amo