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✩ 05


Febrero, 2021.

Desde que te habías ido, me había propuesto hacer realidad aquella promesa que te había hecho. Aparte de acabar los estudios, me habías pedido que fuera feliz y, que, sobretodo, hiciera nuevos amigos. Te sorprendería saber que ahora mismo tengo un gran grupo de amigos junto a mí, personas que realmente valen la pena, personas con las que he sido muy feliz todos estos años aunque estuvieras lejos de mí, probablemente es algo que te haría muy feliz al saberlo y sobretodo, de conocer a esas personas que me han acompañado a lo largo de estos años.

Justamente hoy nos encontrábamos en aquella de las reuniones que solíamos hacer los sábados por la tarde. Estábamos en casa de Hoseok, ya que era el piso más grande y cabíamos perfectamente todos ahí dentro. Allí estaban; Jimin, Hoseok, Sooyun —que era la novia de Hoseok—, Minhyung y su novia, Jooeun que seguramente te encantaría conocer y Taehyung el cual es el mejor amigo de Jimin, lo conoció durante sus estudios de baile ya que compartían piso aunque no realizaran la misma carrera, y yo.

Era genial pasar tiempo con ellos, más que genial, siempre nos divertíamos, reíamos y jugábamos a juegos de mesa que continuamente ponían en contra a las parejas, una cosa que era muy divertida de ver en persona aunque, en cierto modo me sentía algo desplazado en esas ocasiones ya que deseaba mucho que estuviéramos aquí para picarnos con ellos y disfrutar tanto cómo lo hacían. Bien es cierto que Taehyung y Jimin tampoco tenían novias pero, siempre me resultó que me faltabas aquí porque, aunque ellos no lo hicieran intencionadamente yo sentía que intentaban restregarme lo bien que estaban con sus parejas aunque así no fuera.

Justamente hoy, no me encontraba de muy buen humor como para estar bien con ellos y disfrutar de esas quedadas que solíamos hacer en las distintas casas. Sooyun y Hoseok estaban más cariñosos de lo normal —o quizás era yo quién lo notaba en ese momento cuando otras veces lo había ignorado— y me estaba afectando bastante ya que, no paraba de pensar que tú y yo podríamos estar de la misma manera, juntos, sin esa distancia asquerosa que teníamos. Además Jooeun había venido después de mucho tiempo con nosotros ya que había estado en época de exámenes por lo que también estaba muy pegada a Minhyung.

Ahora mismo me encontraba en el baño sentado sobre la taza del váter intentando tranquilizarme antes de volver a salir o me pondría furioso a parte de que quizás, acabaría llorando, y, la idea no era llorar delante de ellos como hace un tiempo porque sentía que daba pena, y no me gustaba sentirme así porque ellos, por mucho que lo intentaran, nunca iban a comprender la situación en la que me encontraba por lo que, era inútil llorar delante de ellos.

Sonaría injusto, egoísta pero... yo me sentía así, me sentía solo, sentía que me faltabas y no era una sensación lo suficientemente agradable, una sensación que jamás pasaría hasta que volvieras a mi lado. Pasé las manos por mi cara mientras intentaba recuperar el aliento e intentaba aliviar el dolor que mi pecho sufría, ¿quizás eras tú la única que podrías entenderme? Me dolía el alma. Cerré los ojos cansado de mirar al suelo, cansado de que no estuvieras a mi lado aún y, aunque faltara un mes dolía, dolía Hannie.

—¿Puedo pasar? —Sentí la voz de Jimin detrás de la puerta y asentí. Sabía que no podía verme pero, mi silencio era la respuesta para saber que podía pasar. La puerta se abrió obligándome a mirarle, me dedicaba una pequeña sonrisa que, en parte, agradecí—. ¿Estás bien?

¿Cuántas veces desde que te fuiste habré oído esa pregunta por parte de la gente que me rodeaba? Odiaba esa pregunta porque, ¿cómo podía decir que estaba bien cuando realmente no? Es más, la gente me podría llamar exagerado por depender de ti para vivir cuando se supone que nunca deberías de depender de alguien pero, ¿acaso esas personas sabían todas aquellas cosas que habíamos vivido cómo para criticarme? Tú eras mi vida, mi todo, aquello que nunca jamás me gustaría perder y perdí, irónico, ¿no?

Sin quererlo comencé a llorar, dejando que toda aquella coraza de valentía que me había impuesto sin querer desvaneciéndose por completo. Ya me daba igual, ya me daba igual que cualquiera me viera llorar pero, no podía aguantar más el dolor que en mi pecho residía. Jimin se acercó asustado hasta mí poniéndose de cuclillas quedando a mi altura para intentar mirarme a los ojos.

—Ey Jungkook... —murmuró intentando calmarme mientras acariciaba mi brazo de manera familiar. Joder, eso me recordaba tanto a ti que dolía aún más.

—Mi pequeño... —murmuraste tomándome por las mejillas intentando que mirara tus ojos y afrontara el miedo que me daba que me vieras llorar. Hacía días que no me encontraba en mis mejores condiciones por algunos asuntos familiares—. Tranquilo, ¿vale? Todo irá bien —acariciaste mis mejillas buscando de nuevo tranquilizarme junto a tu suave voz.

—¿Cómo va a ir todo bien? —Pregunté provocando que dieras un pequeño brinco al escuchar mi voz quebrada. Negué con la cabeza intentando apartarte pero, fue un intento fallido.

—Cariño, no seas negativo...

—Joder Haneul, yo confiaba en que él podría dejarlo con tranquilidad, pero le está costando más de lo esperado y tengo miedo de lo que pueda pasarle —solté y comencé a agobiarme con mis propias palabras mientras hablaba provocando que volvieras a asustarte e intentaras calmarme.

—Es normal que le esté costando, lleva muchos años fumando —intentó animarme con sus palabras. No tenías ni idea, no tenías ni idea de los ataques de ira que le estaban dando a mi padre por la adicción, era imposible lidiar con él y no soportaba que se enfadara como lo hacía con mi madre.

—Mi padre... Mi padre necesita tranquilizarse y bueno, yo necesito estar un tiempo lejos de casa, ¿a tus padres les importaría acogerme por esta semana? —Levanté la cabeza mirándote a los ojos provocando que me miraras con preocupación. Limpiaste mis lágrimas mientras negabas con la cabeza.

—Seguramente te dejarán quedarte, solo sería explicar la situación, ya sabes que en casa eres bienvenido —medio sonreíste provocando que sonriera a pesar de mis lágrimas—. ¿Está teniendo problemas de ira o algo parecido? —Afirmé con la cabeza sin poder afirmarlo con palabras ya que para mí era difícil explicar todos aquellos gritos que se habían oído últimamente y todas las peleas.

—El psicólogo dice que lo mejor es que le dejemos que se tranquilice y descanse, no queremos que pase a algo peor que gritos o discusiones...

—Entiendo —murmuraste acercándote a mí para rodearme con los brazos dándome aquel abrazo que necesitaba con todas mis ganas. Tus brazos eran tan cálidos e inspiraban tanta tranquilidad, me sentía protegido con ellos—. Ya verás que todo mejora Jungkook, después de todo, tu padre ha mejorado bastante, ya a penas fuma y hace unos años eso era imaginable para ti —me aseguraste provocando que una pizca de positivismo apareciera en mí. Eras y seguramente sigas siendo, más que increíble.

—Menos mal que te tengo para mirar el lado positivo de las cosas —provoqué que rieras ante mis palabras produciendo aquel sonido que era el preferido de mi oído. Te separaste de mí dejando tus manos sobre mis hombros con una sonrisa dibujada en tus labios.

—Tu padre fue la razón de que nos conociéramos, tienes que amarlo por eso —bromeaste provocando que sonriera solamente con esas palabras. Junté mi mejilla con la tuya cariñosamente haciéndote reír.

—Eso es verdad, fue la razón de mi enfado para irme aquella cafetería —moviste la cabeza para que nuestras mejillas se acariciaran. Plantaste un beso en mi mejilla después de eso para levantarte de mis muslos y tirar de mí.

—Nunca más llores a no ser que sea de felicidad.

—Jimin... —murmuré justo después de que él me llamara. Ni siquiera podía decir algo coherente para que él pudiera ayudarme.

—Estoy aquí, tranquilo —volvió a acariciar mi brazo en busca de tranquilizarme y, de alguna manera lo estaba consiguiendo, casi como tú hacías, como normalmente él había hecho durante estos años—. ¿Quieres que nos vayamos a casa? —Negué con la cabeza. A pesar de lo mal que me sentía, no era justo que Jimin tuviera que irse por mi culpa.

—Es injusto...

—Tampoco voy a estar aquí si no te encuentras bien —me interrumpió para hacerme callar. Levanté la cabeza encontrándome con los ojos preocupados de Jimin—. No hace falta que lo ocultes más Jungkook, sé que continuamente sufres porque te gustaría que Haneul también estuviera aquí, te conozco como a un hermano pequeño y lo sé por mucho que tú quieras ocultarlo —abrí los ojos como platos al oír esas palabras por su parte aunque sabía que me conocía, por un lado, aún me sorprendían esas cosas. Por un momento volví a encontrarme mal, con ganas de soltarlo todo.

—Pero...

—Sabes que si lo dices ellos lo entenderán, quiero decir, ellos entenderán que estás mal.

—Me da miedo decirlo Jimin, más quedando a penas un mes para que ella llegue —le interrumpí impidiendo que pudiera continuar diciéndome que no estaría mal que demostrara mis sentimientos—. Además, tú la conoces y bueno, Minhyung también pero, ¿los demás? Únicamente la han visto en fotos, en algún que otro vídeo y las veces que se ha hablado de ella salteadamente pero, no quiero crear una imagen mala de ella.

—¿Por qué ibas a crear una mala imagen de ella? Estás lejos de ella, es normal que te sientas mal pero, no es porque haya sido mala contigo, porque hubieran habido problemas, simplemente ella quiso estudiar algo que quizás no lo hubiera estudiado tan bien como lo hizo en Seúl —dijo más poniéndose en el lugar de ella, ya que había vivido algo parecido, que en sí por la simple razón de que sucedía. Limpié las últimas lágrimas que se deslizaban por mis mejillas en busca de levantarme y lavarme la cara.

—Jimin, aprecio que quieras que muestre mis sentimientos pero, creo que es mejor que esto quede entre nosotros —murmuré con cariño por su gesto de hacerme sentir mejor antes de pasar el agua por mi cara. Jimin respiró hondo antes de levantarse quedando de pie a mi lado.

—Entiendo tu decisión pero, si te sientes mal ya sabes que puedes decirlo e iremos de vuelta a casa, ¿vale? —Asentí una vez me sequé la cara con la toalla. Mi hyung me dedicó una sonrisa sincera antes de darme un gran abrazo familiar mientras acariciaba mi espalda—. Pronto la verás, a penas te quedan unas semanas, ¡después de tantos años no me vengas a decir que ahora te vas a desmoronar!

No pude evitar reír ante aquello preguntándome si tú alguna vez has llegado a sentirte de la misma manera que yo.


✩ Hola pequeñxs!! ¿Cómo están? Espero que bien. Aquí traigo un nuevo capítulo que, bueno, aunque no sea la gran cosa, es algo muy significativo en su relación porque, realmente quería que se viera el sufrimiento de ambos por la distancia (aunque normalmente se ve pero, en especial en estos capítulos). Me gustaría plasmar lo muy duro que puede llegar a ser y además, lo mucho que se puede sacrificar alguien por la persona que ama.

¡Muchas gracias por leer enserio! Cada vez me siento mucho más contenta de que suban las leídas en esta historia♡

Dejo en el reparto a los dos nuevos personajes que han sido nombrados (Jooeun y Taehyung) para que la vean y también vean la era que escogí de Tae, realmente amo cómo se ve con ese color de pelo.

· Aquí dejo el capítulo desde la perspectiva de Haneul, amadlo también.

· Recuerdo que la es el símbolo de Haneul así no habrá pérdida con los capítulos y que el de nuestro Jungkook es ☆.

¡Nos vemos en el próximo capítulo bebus!♡

Ánimo mental para el comeback, va quedando poco ah.

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