Parecía que las hojas habían caído hace apenas uno o dos días, pero ya soplaba un viento fuerte y el aire era fresco. JungKook ordenó que llevaran una mesa a la terraza. Fue allí con su diario y se sentó. Un sirviente le trajo un plato hecho con castañas y azúcar en manteca de cerdo calentada, junto con una sopa hirviendo que necesitaba soplar para comer. Mantuvo abierto el diario con una mano y levantaba la cuchara con la otra.

Comer solo era aburrido, así que resultaba más pasable hacerlo leyendo algo. Pero aunque sus ojos permanecían fijos en el diario, su mente divagaba.

"Marqués Jaehyun. De acuerdo con los registros del tribunal, ese hombre, TaeHyung, me habló con rudeza e hizo una declaración escandalosa. ¿Es cierto?"

JungKook recordó la expresión nerviosa del Marqués Jaehyun cuando le habló de esto hace unos días. Perdió el apetito, por lo que chasqueó la lengua y cerró el diario.

Tras aquella primera petición de que volviera a casarse o que al menos llevara a Sheir al palacio, se habían ido sucediendo peticiones similares. Este hombre, TaeHyung, hizo una declaración escandalosa en un sitio repleto de personas. Con la posición de consorte ahora vacía y el Gran Duque Daehwi sin mostrar mejoría, era comprensible que la gente estuviera preocupada. Desde la perspectiva de JungKook, no era mala idea traer a Sheir al palacio. JungKook no quería casarse con nadie más que JiMin. Eso era aún más cierto ahora.

<< Nota: Sheir es el hijo del Gran Duque Daehwi. El siguiente en la línea de sucesión. >>

'En un momento como éste, Sheir sería un gran escudo...'

Además, si estuviera aquí tendría la seguridad de que no caería en manos de otros. Decidido, JungKook dejó la cuchara y llamó al Marqués Jaehyun.

"¿Qué puedo hacer por usted, Su Majestad?"

"Trae a Sheir. Si acabaremos haciéndolo de todos modos, entonces será mejor cuanto antes sea."

El Marqués se sobresaltó momentáneamente, pero hizo una reverencia.

"Sí, Su Majestad."

JungKook estaba en lo cierto. Era sólo cuestión de tiempo que lo necesitaran. La sorpresa del Marqués Jaehyun duró poco. Además, el JungKook de la noche quería lo mismo.

"Por cierto, Su Majestad. Sobre la investigación del Duque Jong que usted ordenó..."

"¿La completaste?"

"Mucha gente era cercana al Duque. Después de todo, su familia fue una vez la más poderosa del imperio."

JungKook frunció el ceño.

"Aun así, seguro que algunos eran más cercanos que otros."

El Marqués asintió.

"Sí. El Duque era cercano a su primo, el Marqués YoungJae, y al Duque MoonBin. Ambos también cercanos a la anterior reina."

"¿Qué hacen ellos ahora?"

"Tras la muerte de la anterior reina, el Marqués YoungJae se libró de ser juzgado por su implicación en el 'intento de asesinato al consorte' por parte del Duque Jong, ya que cambió de postura para apoyar al nuevo consorte. Sin embargo, mantiene un perfil bajo. Se recluye en su casa."

"¿Qué hay del otro?"

"El Duque MoonBin ya actuaba favorablemente hacia el Consorte mucho antes del incidente del Duque Jong. ¿Tal vez porque no está emparentado por sangre? He oído que le ha ido bien desde entonces. Sin embargo, últimamente está mucho más callado."

JungKook se detuvo a pensar. Había muchas cosas a las que prestar atención cuando se trataba de estos nobles extranjeros. Lo que él quería era deshacerse de YoonGi, no dañar a JiMin. Tenía que considerar la situación desde todos los ángulos. ¿Estarían resentidos esos nobles si cometía un error? ¿O volverían a ser leales súbditos de YoonGi?

"¿Qué desea hacer, Su Majestad?"

JungKook se golpeó la barbilla.

"Intenta sondearlos."

"Sí, Su Majestad."

El Marqués se despidió y se marchó. Sin embargo, regresó al poco tiempo.

"Su Majestad."

JungKook acababa de ordenar a los sirvientes que se llevaran los platos de comida sin consumir, ya que había perdido el apetito.

"¿Qué pasa?"

"Ha venido alguien en representación del Imperio Occidental para llevarse a Ahn."

"¿Dónde está? Me reuniré con esa persona yo mismo."

Aunque el Emperador YoonGi había mediado, esta fue una petición personal de JiMin. No vendría un representante oficial. Lo más probable es que una persona cercana a JiMin sea quien se ocupara del asunto. Si JungKook la atendía bien, tal vez llegaran a él comentarios positivos. JungKook caminó más deprisa.

El 'representante' que JiMin había enviado se encontraba en una pequeña habitación cercana a la Sala de la Rosa Blanca. Cuando JungKook entró, el 'representante' se sobresaltó tanto al ver al emperador en persona, que se puso en pie de un salto. Su brusco movimiento hizo caer la bolsa que llevaba sobre el regazo.

"Su Majestad, es un honor. Soy Beomgyu Rimwell."

'¿Beomgyu Rimwell?'

El nombre le resultaba familiar. JungKook aceptó su saludo con aspereza.

"Tú—"

"¿No me recuerda? Ah, bueno, sólo nos hemos visto brevemente antes. Soy el tío de Ahn. Al que Su Majestad salvó..."

JungKook finalmente lo recordó. Su nombre aparecía en los documentos de la Corte Suprema. El hijo de Daesung Rimwell, que había sido declarado culpable de conspirar con TaeHyung. Conspirar para mezclar la línea de sangre de uno con la del emperador era un delito grave. Tan grave que a menudo familias enteras eran castigadas. Curiosamente, en este caso, sólo Daesung Rimwell y Beomgyu Rimwell fueron castigados.

El hijo de BoGum y TaeHyung había sido vendido como esclavo, pero no por su vinculación con este caso.

Ahn fue vendido por ser hijo de un esclavo, y su padre, de la nobleza, sentenciado a pena de muerte como un criminal convicto. Simplemente se le trató como exigía la ley.

Pero, ¿por qué Beomgyu Rimwell y la Vizcondesa Rimwell no fueron castigados en absoluto? JungKook leyó esa sección del documento de la corte, preguntándose por qué muchas veces. No encontró ninguna respuesta en su diario. El hecho de que no estuviera registrado en el diario significaba que probablemente no podían haber sido castigados. JungKook se preguntaba si había hecho algún tipo de trato con el Vizconde Daesung. Ahora, una de las partes implicadas apareció en su puerta, enviado por JiMin.

'Qué asunto tan complicado. No...'

Frunció el ceño ante su siguiente pensamiento.

'Este joven noble llamada Beomgyu... no está aquí como hijo de un noble. ¿Está aquí como señor del territorio de su familia?'

Su padre le había dejado su territorio. El JungKook de la noche había dado su aprobación. Se había preguntado por qué en ese momento, pero como no podía recordar, había pasado a otro asunto. Ahora, se preguntaba...

Si indagaba en la relación entre él, JiMin y TaeHyung... ¿le llevaría a sus recuerdos perdidos?

Decidimos habilitar la habitación frente a la mía y la de YoonGi como cuarto del bebé. Queríamos que estuviera lo más cerca posible para poder estar pendientes en todo momento.

"¿Qué diseño le gustaría para la cuna, Su Majestad?"

Preguntó JiSoo.

"¿Qué tal hacer una de pino, Su Majestad?"

Sugirió la Condesa Wendy.

"¿No sería bueno un patrón de estrellas para el móvil?"

Comentó Rosé con una sonrisa.

"¡Ah! Señorita Rosé, el Emperador YoonGi dijo que pondría joyas en el móvil, así que olvidémonos de eso."

Señaló JiSoo.

"El bebé necesita ropa cómoda, ¿verdad?"

Intervino Lisa.

"Y si llevamos al bebé a las fiestas con nosotras, también será necesaria ropa formal."

Añadió la Condesa Wendy.

El palacio estaba lleno de actividad estos días, en la preparación del cuarto del bebé, de los juguetes y de los accesorios. Tal vez porque una nueva vida estaba en camino, no quedaba rastro de las oscuras sombras que se habían cernido sobre el palacio.

No sólo estábamos preparando el cuarto del bebé. El palacio también necesitaba algunas reformas. Teníamos que asegurarnos de que el bebé pudiera corretear sin hacerse daño. Se colocaron amplias alfombras en los pasillos y se hicieron pequeñas sillas para cuando el bebé se cansara y necesitara sentarse. YoonGi colocó más guardias en los pasillos, y mis damas de compañía decoraron las paredes.

Era mucho más trabajo del que esperaba.

Incluso con mi prominente vientre, me encargué de los arreglos para la vida diaria de mi primer bebé.
Sin embargo, los nubarrones en mi cabeza no se disipaban fácilmente, por muy luminoso que fuera mi entorno. ¿Podría eliminar en secreto el nido que YoonGi había construido?

Al estudiar sobre la infancia, descubrí cuán vulnerables eran los bebés. Por mucho que lo pensara, un nido seguía siendo poco conveniente. Cuanto más aprendía, menos quería a mi bebé en ese nido descuidado de YoonGi. El problema era...

"¡Mi Consorte, Mi Consorte! Mira qué bonita es esta joya amarilla. ¿O encuentras más bonitas la joya púrpura?"

Cuando YoonGi me extendió dos joyas para que las examinara, suspiré.

"¿Mi Consorte?"

Estaba ocupado decorando su nido. HoSeok también correteaba por ahí, recolectando seda para añadir a su propio nido. Como necesitaban construir sus nidos convertido en pájaros, con frecuencia veía a través de las ventanas de mi oficina a un pájaro negro grande y otro azul más pequeño revoloteando.

"¿No podemos montar un nido después de que el bebé crezca un poco?"

"Ah, Su Majestad. El bebé necesita pasar varias horas al día en su forma de pájaro."

"Eso he oído, HoSeok. Pero mientras el bebé es un pájaro, ¿realmente tiene que estar en un nido?"

"Un nido es más cómodo en forma de pájaro."

Quise decirle que eso no era cierto, pero como yo nunca había sido un pájaro, no podía objetar. Al final, me reuní con YoonGi y HoSeok en mi salón para elegir la seda y otros detalles para los nidos. YoonGi y HoSeok necesitaban probar ellos mismos la seda, así que se transformaron y me dejaron como único humano. Mi trabajo consistía en poner y quitar la seda alrededor de sus alas mientras probaban varias opciones.

"¿Su Majestad?"

El Vizconde Kim llamó desde el otro lado de la puerta.

Había enviado a todas mis damas de compañía fuera para que pudiéramos llevar a cabo esta prueba. Comprobé por última vez cómo estaban los pájaros y me acerqué a la puerta. Les había dicho a todos que, en la medida de lo posible, no me molestaran, porque estaba trabajando en algo complicado.

"El hombre llamado SuRan está aquí."

Dijo el Vizconde Kim.

Oh, SuRan. Había pedido que me avisaran cuando llegara SuRan. Pero ahora mismo... cuando miré hacia atrás, HoSeok lo oyó y se quedó inmóvil con una ramita en el pico. Encontrándolo divertido, Reina batió las alas y rodó por debajo de la mesa.

A veces se comporta como un tonto. ¿O también sus cerebros se vuelven de pájaro cuando se transforman?

"Vizconde Kim, siento el estómago muy pesado ahora mismo. ¿Puede decirle que no puedo verle en este momento? No me siento bien."

"Si, Su Majestad."

El Vizconde se inclinó.

Después de que cerré la puerta y volví al sofá, HoSeok resbaló y cayó de bruces sobre la mesa. Era tierno ver a un pajarito tumbado boca abajo en línea recta. Pero en cuanto me eché a reír, YoonGi le dio una patada. Acto seguido, YoonGi se tumbó de la misma manera, mirándome con ojos brillantes.

Prácticamente podía oírle pensar, '¿No soy más tierno?'

Sí. Definitivamente sus cerebros se vuelven de pájaro.

Después de elegir cómodas sedas y más joyas para los nidos, HoSeok y YoonGi volvieron a su forma humana y los tres comimos juntos. Los dos discutieron, aunque esta vez no sobre los nidos. YoonGi se rió de HoSeok tras enterarse de su situación con SuRan.

"Supongo que te vas a casar, HoSeok."

HoSeok resopló, pero YoonGi no lo dejó pasar.

"Los dragones no tienen género determinado, ¿cierto? Además, los dos son azules. ¡Hacen buena pareja!"

"¡¿Cómo puedes decir eso?!"

"¡Fíjate con qué seriedad va a por ti!"

"¿Qué quieres decir? ¡Ni siquiera me mira al pasar! Sólo quiere una mascota. ¡Por eso lo hace!"

Terminamos la comida charlando entre risas, luego pedimos café y té. Salimos al jardín para disfrutar de las actividades vespertinas, disfrutamos del sol y comimos tranquilamente el postre. YoonGi dijo que quería cantarle al bebé. Le cantó suavemente una canción de cuna en voz baja. HoSeok gozó de un momento de paz mientras se tapaba los oídos.

En ese momento, apareció Sir BamBam.

"Su Majestad."

"¿Qué pasa?"

YoonGi dejó de cantar. Su expresión relajada cambió a la habitual en un instante. HoSeok se quitó las manos de las orejas y se levantó.

"Ha llegado una carta de la Alianza del Continente Wol."

"¿Una carta?"

"Sí. Enviaron cartas a todos los países miembros al mismo tiempo. Creo que eso significa que todas dicen lo mismo."

BamBam le pasó la carta a YoonGi. ¿Qué dice? YoonGi arrugó la frente mientras leía. ¿No son buenas noticias?

Al sentir nuestras miradas sobre él, YoonGi levantó la vista.

"Es una invitación formal. Este año organizarán una Ceremonia de Año Nuevo conjunta, en vez de que todos la celebremos por separado. Desean que todos los reyes y emperadores asistan."

Todos los reyes y emperadores... No era algo inaudito. No se reunían regularmente, pero sí una vez cada tres o cuatro años. ¿Pero ahora? Hasta donde sabía, aún no era momento de reunirse para Año Nuevo.

A mi lado, HoSeok chasqueó la lengua.

"Creo que están tramando alguna cosa. Justo cuando están intentando descubrir las debilidades de nuestro país, de repente quieren organizar una reunión."

Sir BamBam asintió.

"Así es. Es sólo una suposición que cada país recibió la misma carta. Podrían ser todas diferentes."

YoonGi deliberó sobre la cuestión con cautela. Finalmente, se levantó y me plantó un beso en la frente.

"Mi Consorte, quería quedarme contigo todo el día. Pero, ¿puedo irme un momento?"

"Está bien."

¿Desde cuándo me pedía permiso?

YoonGi besó mi frente una vez más, puso su mano sobre mi estómago y murmuró.

"Escucha a tu papá mientras estoy fuera."

Luego, fue apresuradamente junto a Sir BamBam y HoSeok al palacio principal.

Incluso después de que se marcharon, me quedé sentado tomando el aire fresco hasta que el sol se puso por completo. Quería dar un paseo, pero... últimamente sentía el vientre más pesado. Me costaba caminar más que antes. Era de esperar, con un bebé dentro de mí, pero a veces pesaba mucho más de lo que podría haber imaginado. A veces me asustaba.

"Su Majestad, el aire de la noche es frío. Debería entrar ahora."

Dijo uno de mis cortesanos.

"Sí, estaba a punto de entrar."

Sin embargo, mientras avanzaba por el camino de piedra hacia mi habitación, vi dos imponentes siluetas frente a frente. Estaban de pie cerca del palacio principal. Reconocí una enseguida.

¿Lisa?

Por la lanza en su espalda, estaba seguro de que era ella. Y el hombre apuesto que estaba frente a ella era...

"Lord Jungwoo, me gustas."

¿Mi hermano?

Ay doble x q si
Ya estamos )( así del parto😌