Ángel esbozó una sonrisa curiosa ante la respuesta de Kyuhyun.

"Veo que tienes un cuerpo muy caro."

El Duque Kyuhyun pareció disgustado.

"Tal vez."

Ángel se cruzó de brazos.

"Tendrás que repetirlo luego. Delante de la Corte de la Alianza. ¿Te parece bien? Ahora todavía puedes cambiar de motivo. Haré la vista gorda."

El Duque se encogió de hombros.

"Me parece bien."

"Si tú lo dices."

Había asegurado que no tendría inconveniente, así que no había necesidad de ser más considerado. Ángel sacó una libreta y anotó el motivo. Luego preguntó,

"Dado que el Consorte TaeHyung del Imperio Oriental nació esclavo, no podía convertirse en consorte. Por lo tanto, cualquier trato que haya hecho con el anterior consorte se considera ilegítimo. Además, como el Consorte TaeHyung hizo el acuerdo arbitrariamente, la transacción es inválida. ¿Es eso correcto?"

"No."

Ángel levantó una ceja.

"¿Estás refutando esto?"

"Hay una condición necesaria para que el ascenso de TaeHyung a la posición de consorte pueda considerarse nulo."

Respondió el Duque.

"El Emperador JungKook no debía saber que era esclavo antes de nombrarlo Consorte."

Ahora ambas cejas de Ángel se alzaron.

"Duque Kyuhyun, ¿afirma que el Emperador JungKook lo sabía y lo consintió?"

"Sí. Por lo tanto, todos los acuerdos que hizo son válidos ya que fue un consorte legítimo."

El Duque sonrió satisfecho.

Ángel anotó todos los detalles en la libreta. Su pluma se deslizaba afanosamente. De repente, la mano de Ángel se detuvo. Debía de tener algo más que escribir, pero aun así bajó lentamente la libreta.

"Por casualidad, ¿sabe algo de todo esto el Emperador del Imperio Occidental?".

Los ojos del duque se entrecerraron.

"¿Por qué preguntas por él?"

"Los dos pasaban mucho tiempo juntos antes de su ascenso al trono."

El duque se encogió de hombros.

"Pasábamos mucho tiempo juntos, pero en este caso, no actuamos en conjunto."

"Ya veo."

Ángel dio un golpecito con el pie.

"Sin embargo, en este complicado escenario, al final él salió beneficiado."

"Se casó con el hombre del que se enamoró. A eso no se le puede llamar beneficiarse. Sería demasiado calculador."

"El matrimonio siempre ha sido un movimiento calculado, Duque Kyuhyun."

Ángel volvió a escribir en su libreta. Kyuhyun esperó. Un momento después, la pluma de Ángel volvió a detenerse.

"Ah, Duque Kyuhyun, esto no concierne al puerto, pero..."

"Pregunte."

"¿Está el Emperador YoonGi involucrado con el fenómeno de la disminución del maná?"

Kyuhyun hizo una ligera pausa.

"No."

"Ya veo."

Ángel asintió y sonrió. Escribió una última frase en su libreta.

— El Duque Kyuhyun sabe algo.

En medio de la noche, alguien susurró a JungKook.

"Su Majestad, Su Majestad."

Abrió los ojos y se incorporó. El Marqués Jaehyun, que tenía la boca cerca de su oreja, retrocedió rápidamente. JungKook miró el reloj. Eran las dos de la madrugada.

"Le pido disculpas, Su Majestad. Me quedé esperando, pero no se despertaba..."

"No, hiciste lo correcto."

JungKook miró el reloj con el ceño fruncido. Otras veces se había despertado solo, poco después de ponerse el sol. Pero hoy había pasado bastante tiempo. En realidad, había estado ocurriendo durante los últimos días. De hecho, basado en la fecha de hoy, hubo un día en el que no se despertó en absoluto.

Eso inquietó a JungKook,

"Tráeme agua fría."

"Sí, Su Majestad."

El Marqués Jaehyun rápidamente volvió con el agua. Una vez que JungKook la aceptó, Jaehyun dio un paso atrás.

"He investigado algunas de las cosas que Su Majestad ordenó."

"¿Que yo ordené?"

Frunció el ceño.

"Ah. ¿Sobre combinar mis personalidades?"

"Sí. Su Majestad sufrió una gran conmoción, que dividió su personalidad. Para que vuelva a su estado original, el médico del palacio y yo estamos de acuerdo en que debe reunirse con la persona que le provocó esa conmoción."

"Ya lo intentamos, pero no surtió efecto."

"Es cierto. Cuando te reuniste con JiMin, no hubo efecto. Al principio. Pero después de que tu personalidad del día lo viera, y se acostumbrara más a tus deberes como emperador, comenzaste a actuar de forma diferente."

La declaración del Marqués Jaehyun sonaba peligrosa.

"La diferencia entre mis dos personalidades es cada vez mayor."

"Sí, Su Majestad. Mi opinión es que, en vez de aplacar su mente conmocionada con otro incidente impactante, debemos pensar en este incidente como en una herida. Debemos encontrar una manera de sanarla."

'Si Su Majestad pudiera ver a Glorym una vez más... Pero está muerta. No hay forma de verla.'

El Marqués Jaehyun estudió detenidamente el rostro de JungKook.

"Su Majestad, ¿podría explicar con más detalle lo que pasó ese día?"

"Tuve una visión de TaeHyung yendo tras JiMin. Salté para intentar salvarlo... En el sueño, vi a una niña cubierta de sangre. Probablemente era Glorym."

"¿Y después de eso?"

"Después de eso, me desperté como ahora."

JungKook suspiró y se levantó de la cama. Sacudió la cabeza, como si estuviera mareado, y luego se balanceó.

"No sé si ahí está la clave."

"Lo pensaré."

A continuación, el Marqués Jaehyun informó de algunos asuntos urgentes.

JungKook se acercó a la mesa y selló sus propuestas o las rechazó. Tratados los asuntos urgentes, JungKook se dirigió de nuevo a la cama, como era habitual.

"Su Majestad, el Comandante de la 4ª División de los Caballeros Transnacionales estuvo aquí."

El Marqués Jaehyun le contó las exigencias de Ángel para llegar a un acuerdo. Luego le contó lo que había decidido el JungKook del día.

"Así que la alianza intenta sacar provecho del conflicto entre el Imperio Oriental y el Occidental."

JungKook murmuró. Se quedó pensativo por un momento.

"Presenta testimonios firmados de nobles y funcionarios sobre la aparición del Duque Kyuhyun en la prueba de paternidad del templo con Ahn. Explica cómo él fue el único que estuvo a su lado cuando circularon rumores sobre su estatus de esclavo. Además, detalla los diversos escándalos que resultaron de su cercanía."

Planeaba demostrar la invalidez de los documentos, basándose en el hecho de que el Duque Kyuhyun sabía desde un principio que TaeHyung era un esclavo.

Pero el Marqués Jaehyun no terminó ahí.

"Su Majestad, hay una cosa más que debo decirle."

"¿Qué es?"

"El Emperador YoonGi ha pedido que le demos la ubicación de Ahn."

JungKook frunció el ceño.

"No se la des."

"Dijo que JiMin quería saber."

"Uh. Dile a ese tonto que aparece durante el día que al menos se encargue de eso."

A la mañana siguiente, JungKook, de diecinueve años, se despertó sin saber nada de lo ocurrido durante la noche. Aun así, podía suponer que el JungKook de la noche se había ocupado de cualquier asunto urgente antes de volver a dormir.

Tras pedir que le trajeran el desayuno, JungKook comió en su mesa mientras repasaba su trabajo. Había pospuesto muchas cosas, sabiendo que le faltaba experiencia. Pero en algún momento pensaba cumplir con sus deberes él mismo. Para ello, tenía que estudiar tanto como pudiera.

Una vez que ordenó al sirviente que recogiera los platos, uno de sus secretarios entró para informarle sobre Ahn.

"Su Majestad, encontramos los registros que pidió de cuando Ahn fue vendido como esclavo, los cuales explican a dónde fue."

"Tráelos."

"Sí, Su Majestad."

'Este Ahn del que hablan es supuestamente el primer hijo de ese hombre llamado TaeHyung ¿Por qué JiMin estaría buscándolo?'

El JungKook del día no sabía que TaeHyung y Ahn eran prácticamente desconocidos. No entendía la petición de JiMin, que el Emperador YoonGi le había transmitido. En cualquier caso, lo vio como una oportunidad de utilizar al niño para ponerse de nuevo en contacto con JiMin.

En contacto... pensar en ello le recordó la irritante carta enviada por el Emperador YoonGi. Arruinado su humor, JungKook caminó solo hacia el Palacio Oeste. Fue a la habitación que una vez utilizó JiMin, aunque no recordaba nada. Sentado solo en el suelo descubierto, en una habitación desprovista de muebles, estiró las piernas.

En el momento en que imaginó las conversaciones íntimas que JiMin y él pudieron haber mantenido en esta habitación, le invadió la envidia. Dio un fuerte pisotón en el suelo mientras intentaba reprimir el inesperado dolor punzante.

"¡Ack!"

Se apretó la cabeza. JungKook tardó mucho en poder bajar las manos. La expresión que mostraba ahora era mucho más sombría.

Los dolores de cabeza comenzaron después de ver a JiMin. Sentía como si truenos pasaran por sus oídos. No era tan doloroso como para no poder soportarlo, pero era una sensación sumamente desagradable. Antes, se habría limitado a pedir un analgésico. Pero ahora sabía que en realidad no tenía diecinueve años. Cada vez que llegaba el dolor, JungKook sentía más miedo. Vivía aterrado ante la idea de que llegara el día en que no despertara más. De que llegara un momento en que el JungKook original ocupara tanto el día como la noche, y él dejara de existir.

El Marqués Jaehyun y los otros secretarios eranp los hombres del JungKook de la noche. No podía consultar con ellos. Si les contaba sus preocupaciones, felizmente encontrarían la manera de deshacerse de él.

'Necesito un confidente...'

JungKook se puso de pie y se acercó a la ventana. Se agarró al marco. El jardín, teñido por las coloridas hojas otoñales, era hermoso, a pesar del frío viento.

'Necesito un subordinado que siga mis órdenes y guarde silencio sobre mi situación. '

También necesitaba pastillas para dormir. Pastillas que le hicieran dormir toda la noche, sin despertarse. Tal vez entonces su personalidad de la noche desaparecería lentamente.

YoonGi se había marchado a recuperar otra piedra de maná, pero regresó tras encontrarse con una fuerte lluvia.

"No pasa nada, mi Consorte. Todo lo que necesito es un té y dormir bien."

Lo dijo completamente empapado. Pero al día siguiente, su estado empeoró hasta el punto de que ni siquiera podía hablar. Aún conservaba su agudeza mental, era más un fuerte dolor de garganta. Después de que el médico del palacio lo trató, YoonGi se agarró la garganta, angustiado por no poder comunicarse. Podría haber soportado la fiebre, pero no poder hablar era agonizante para él.

Me dolía verle así, así que le tomé la mano.

"Yo cuidaré de ti. No te preocupes, YoonGi."

HoSeok trató de disuadirme.

"No puede, Su Majestad. Sería terrible que se resfriara. Yo cuidaré de él."

Pero YoonGi estaba tan afónico que no podía comunicarse con nadie. En momentos como éste, debía quedarme con él. Después de todo, podía entenderlo como a un libro.

"No te preocupes, HoSeok. Yo cuidaré de YoonGi. Sería difícil para ti, porque no lo entiendes. Él me necesita a su lado, ya que puedo saber lo que quiere."

Tal como ahora. Visto cómo YoonGi agitaba desesperadamente los brazos, él prefería que lo cuidara yo antes que HoSeok.

Los ojos de HoSeok se abrieron completamente al mirar a YoonGi.

"Pero... ¿no lo entendería yo mejor?"

Su afirmación era absurda. No le creía, pero me contuve y le dije a HoSeok que YoonGi deseaba que yo cuidara de él.

Dado que HoSeok no comprendía las señas que él me hacía, al final acordamos que ambos cuidaríamos de él juntos.

Sintiéndose más tenso que nunca, YoonGi tragó saliva. La saliva le quemaba al bajar por su garganta hinchada. No podía relajar los hombros. Cuando JiMin le hizo aquel dibujo antes, no tenía ni idea de lo que significaba. YoonGi pensó que ocurriría lo mismo si fuera al revés, pero JiMin nunca supo que no había podido interpretar su dibujo. De hecho, había escondido el malentendido debajo de la alfombra, para nunca resolverlo.

YoonGi amaba a JiMin, pero no podían comunicarse sin palabras. Ahora no era diferente.

Frenéticamente, le había indicado que prefería que le cuidara HoSeok. Pero JiMin no le entendió en absoluto. Más bien, se sentó a su lado con una sonrisa.

"Comprendo. Cuidaré de ti. Me quedaré a tu lado todo el día de hoy, YoonGi."

Le temblaron las manos.

¿Se sentiría JiMin profundamente decepcionado si supiera que su comunicación fallaba? JiMin creía que se entendían con una mirada. YoonGi no quería ver su decepción. Así que, aunque le dolía tanto la garganta que le costaba respirar y el cuerpo le ardía de fiebre, se esforzó por hacerse entender correctamente.

"¿YoonGi? ¿Tienes frío?"

JiMin le agarró las manos temblorosas. La preocupación cruzó su rostro helado. Sus cálidas manos envolvieron suavemente las de él.

YoonGi se aferró a sus manos y miró por encima de su hombro a HoSeok.

'Ayúdame.'

HoSeok asintió sutilmente en señal de que lo entendía.

No obstante, un minuto después, YoonGi se desmayó. Cuando recobró el conocimiento, JiMin lo miraba con preocupación. Al contemplar aquellos ojos fríos, rebosantes de afecto, YoonGi pensó que era tonto por temer sus cuidados. Había renunciado a una guerra por la mirada de aquellos ojos. No podía creer que hubiera tenido miedo.

Culpándose de lo que había hecho antes, reunió todas sus fuerzas para sonreírle a JiMin. Cuando JiMin lo vio, frunció el ceño.

"¿De verdad vas a bromear en medio de todo esto?"

YoonGi sacudió la cabeza. Pero debido a su enfermedad, los músculos de su cara no se movían. Relajó su sonrisa para no ofenderlo. Pasaron unos treinta minutos. YoonGi sintió sed, quizá porque había sudado mucho, así que levantó una mano y se señaló la garganta.

'Agua. Por favor, tráeme agua, mi consorte.'

Cuando pronunció su deseo, JiMin volvió a fruncir el ceño.

"Realmente no puedo impedírtelo."

'¿Qué hice?'

Sin darle oportunidad de responder, JiMin besó su cuello. Cuando sus labios suaves y fríos tocaron su piel enrojecida, se sintió electrizado. Pero en cuanto él se echó hacia atrás, le entraron ganas de llorar. Por encima de su hombro, vio a HoSeok perplejo, con una botella de agua en la mano.

'No, no me la des. No importa. Mi Consorte se avergonzaría si me entendieras.'

YoonGi habló con la mirada. HoSeok dejó la botella en el suelo. Aliviado, YoonGi miró a JiMin y le agradeció.

Pasó otra hora. YoonGi quería cambiarse de atuendo, así que agarró su ropa y la sacudió.

"¿Tienes calor?"

JiMin le abanicó de inmediato.

HoSeok, que estaba a punto de traerle ropa, se sentó a regañadientes cuando YoonGi le hizo señas de que no importaba. Pasaron dos horas más y YoonGi sintió hambre. Se palpó el estómago. JiMin le preguntó si le dolía y se lo frotó mientras le cantaba. HoSeok estaba a punto de traerle sopa, pero observó la cara de YoonGi, preguntando en silencio,

'¿Qué hago?'

Esta vez, YoonGi no le dijo que no importaba. Estiró la mano hacia HoSeok a espaldas de JiMin, moviendo los dedos con desesperación.

'Sálvame.'

Van a disculpar las demoras de las actualizaciones, nos vemos en el próximo capítulo