Había una persona que observaba todo esto escondida detrás de un pilar. Era una dama de compañía de ShengZu. Ella miraba cuidadosamente la situación, y cuando vio la extraña atmósfera entre el Gran Duque TaeMin y el Rey Consorte JiMin, regresó emocionada para contarle a ShengZu.

"Mi Reina, he descubierto algo realmente bueno."

"¿Algo bueno?"

"¿Conoce al Gran Duque TaeMin?"

"De Rwibt.."

"Sí, debe haber venido por la boda."

ShengZu asintió.

¿Qué hay de bueno en que haya venido? La visita de un invitado extranjero era bienvenida, pero en este caso el propósito de la misma no tenía nada que ver con ella.

La dama de compañía sonrió y susurró.

"Sin embargo, cuando los vi juntos, me pareció que el Gran Duque TaeMin albergaba un gran odio hacia el Rey Consorte JiMin."

"¿El Gran Duque TaeMin?"

ShengZu lo pensó por un momento y preguntó extrañada.

"¿No se quedó en el Imperio Oriental por un tiempo?"

"Algo debió haber pasado entonces."

"¿Eso crees...?"

"Era evidente que lo odiaba. Cuando el Rey Consorte JiMin lo saludó, el Gran Duque lo ignoró. Rosé y Lisa estaban refunfuñando enojadas."

La dama de compañía estalló en risas alegremente y sugirió con una cara brillante.

"Mi reina, aproveche esta oportunidad. ¡Haga que el Gran Duque TaeMin se ponga de nuestro lado!"

"El Gran Duque TaeMin..."

"Sí. ¿No quiere el Consorte JiMin usar a Sir Jungwoo para ganar popularidad entre las jóvenes damas? Dicho esto, el Gran Duque TaeMin también es un hombre apuesto que no perdería ante Sir Jungwoo. Si usa al Gran Duque, podría retener a su lado a las jóvenes damas .

¿Cómo puedo hacer que cambien de opinión?

Después de mucho pensarlo, lo primero que hizo fue enviar invitaciones a todos los nobles que vivían en la capital.

"A menos que sea por una circunstancia especial, nadie puede rechazar la invitación del Consorte Imperial."

Como dijo la Vizcondesa Yewon, todos los nobles se reunieron en el jardín, pero parecían desconcertados por la repentina invitación de ese día.

TaeHyung puso una gran mesa en el jardín y la cubrió con comida sumamente llamativa. La comida en sí misma era sorprendente a la vista, y el sabor le hacía justicia.

El chef del emperador cumplió fielmente sus órdenes. Incluso los nobles, que estaban desconcertados por la invitación, se sorprendieron al ver el castillo de dulces sobre la mesa.

Un río de helado fluía alrededor del castillo de dulces, y mermeladas hechas de todo tipo de frutas estaban en carruajes de galletas.

""¡Qué maravilloso!""

Mientras los nobles admiraban la comida preparada, TaeHyung sonrió elegantemente y dijo,

"Lo preparé especialmente para todos ustedes."

Los nobles se sorprendieron incluso más al ver a TaeHyung que cuando vieron la aldea de dulces hecha en la mesa. Esto, debido a que su forma de hablar era similar a la del Consorte JiMin. TaeHyung normalmente hablaba con un tono alto y adorable. Ahora, incluso su tono de voz era más bajo de lo habitual.

Algunos con buen ojo también notaron que el elegante vestido rojo de TaeHyung era similar a la ropa que usaba a diario el Consorte JiMin No era exactamente el mismo diseño, pero era definitivamente parecido.

Los nobles intercambiaron miradas en silencio.

"Todos, por favor siéntense."

TaeHyung sonrió elegantemente y los invitó a sentarse, mientras él mismo se sentaba en la cabecera de la mesa. Luego continuó con una voz tranquila.

"Han pasado muchas cosas, pero ahora todo se ha estabilizado."

"..."

"Esta es una nueva era. Quiero construir amistades y mantener buenas relaciones con todos ustedes. Las luchas internas entre los nobles son también una molestia para Su Majestad el Emperador."

Sonriendo, TaeHyung levantó su copa de champán para hacer un brindis. Los nobles siguieron su ejemplo y levantaron sus copas de champán. Después de tomar medio sorbo de champán, TaeHyung bajó la copa y puso su mano sobre su vientre.

"Lamento no poder beber más con ustedes. Por el bien del bebé, me detendré aquí."

Cuando mencionó al bebé, los desconcertados nobles sonrieron inmediatamente y comenzaron a dar sus bendiciones a TaeHyung.

Fue gracioso verla imitar al Consorte JiMin tan abiertamente, pero tenía razón. Ahora una nueva era ha comenzado, y el Consorte JiMin nunca regresará. Si estuviera en el retiro, existía la posibilidad de que regresara. Pero, ¿no se volvió a casar con el rey de otro país?

En este caso, lo mejor sería estar en buenos términos con el actual Consorte. Incluso si el Consorte cambiara de nuevo, la diferencia estaba en el bebé en el vientre del Consorte TaeHyung.

"Tendrá un bebé sano, Su Majestad."

"Será un bebe maravilloso, ya sea que se parezca al Consorte o al Emperador."

"No muy diferente de un ángel viviente."

"¿Ha pensando en el nombre de su bebé, Su Majestad?"

Era justo lo que pensaba.

TaeHyung acarició su vientre, sonriendo frente a los nobles que lo estaban elogiando. Él quería mostrarles quién era el dueño del palacio del oeste, quién estará por encima de ellos de ahora en adelante, y quién lleva en su vientre al próximo emperador, lo reconozcan o no.

"Su nombre es- no lo sé. Su Majestad el Emperador lo decidirá."

TaeHyung sonrió y se acarició el vientre una vez más, pero estaba perturbado.

La imagen del cuerpo de un bebé recién nacido vino a su mente en ese momento. El pequeño cuerpo que el Vizconde Daesung le había mostrado, afirmando que el bebé había muerto justo después de nacer.

Ciertamente no era el bebé de TaeHyung, pero el cuerpo no era falso. TaeHyung había sostenido en sus brazos al bebé muerto, sollozando desde el fondo de su corazón.

En ese momento, no estaba asustado, aunque sabía que era un cadáver. Sólo se sentía afligido, desconsolado y desgarrado.

¿De quién era ese bebé? ¿De dónde sacó el Vizconde r a ese pobre bebé?

Entonces, sus pensamientos se dirigieron hacia su verdadero bebé... su primer hijo, Ahn.

"¿Su Majestad?"

La Vizcondesa Yewon la llamó cuidadosamente.

Sólo entonces TaeHyung se dio cuenta de que se había quedado en blanco y sonrió rápidamente.

Sí, nada de eso importa. Todo forma parte del pasado, de un pasado doloroso.

Ahora, tanto él como el bebé en su vientre serían felices.

En ese momento, se escuchó una fuerte risa desde un costado de la mesa. Era una risa maliciosa.

El entorno se volvió inmediatamente silencioso.

TaeHyung miró al asiento de donde provenía la risa. Había un hombre alto de cabello rubio platinado sentado allí. Sus ojos eran amarillos, y desprendía un aire intelectual como si fuera un erudito. Además, tenía un rostro atractivo...

TaeHyung se dio cuenta de quién era.

El día que el Consorte JiMin se divorció, este hombre había corrido hacia él antes de ser detenido por los guardias del emperador, gritando sin entender por qué tenía que divorciarse.

TaeHyung se culpó a sí mismo por haber invitado a este tipo de personas. Sabía que algunos de los nobles que vivían en la capital habían estado del lado del Consorte JiMin.

Sin embargo, envió invitaciones a todos, excepto al Duque y la Duquesa Park.

Quería que comprobaran con sus propios ojos quién era el dueño del palacio del Consorte ahora.

Probablemente, por eso también él vino...

Él se arrepintió de su decisión demasiado tarde.

Cuando la mirada de las personas reunidas aquí se centró en él, este hombre- el Marqués Jinwoo- sonrió encantadoramente y se disculpó con palabras vacías ante TaeHyung.

"Oh, lo lamento. Su Majestad, es sólo que esta situación es un poco graciosa."

"¿Insinúas que soy gracioso?"

TaeHyung le preguntó de vuelta tan fríamente como lo haría el Consorte JiMin, sin retroceder ni un ápice.

"De ninguna manera."

El Marqués Jinwoo levantó las cejas como si tuviera miedo, y dijo, con una sonrisa más profunda.

"Sólo digo que parece un poco irónico que la persona que declaró con orgullo ante los reporteros que sería el 'Consorte de los Plebeyos' ahora intenta acercarse a los nobles..."

Ante el evidente veneno en sus palabras, TaeHyung le ordenó con el ceño fruncido.

"Si no quieres tener una relación amistosa conmigo, vete ahora mismo."

El Marqués Jinwoo murmuró, "Vaya, qué miedo", e inmediatamente se levantó.

"Ya que es una orden, no tengo otra opción que retirarme."

Entonces, rápidamente se despidió y se fue.

Algunos nobles se miraron entre sí y siguieron al Marqués Jinwoo, diciendo que tenían dolor de estómago, iban al baño, o recordaron un asunto urgente.

Los números crecieron cada vez más hasta casi un tercio de los presentes.

TaeHyung apretó sus puños, mordiéndose los labios con fuerza.

"Hice exactamente lo que me dijiste, pero ¿por qué él hablo de esa manera?"

Después de una corta fiesta de té. TaeHyung llamó al Duque Kyuhyun para informarle de la situación, y le preguntó enojado.

Fue el Duque Kyuhyun quien le aconsejó sobre qué decir en las entrevistas.

En ese entonces, TaeHyung había seguido sus consejos porque pensó que era lo correcto. Sin embargo, se enfureció cuando el Marqués Jinwoo hizo un comentario sarcástico abiertamente sobre las entrevistas, y muchos de los nobles parecieron estar de acuerdo con sus palabras.

"¿No le enseñaste a propósito a Tae las respuestas equivocadas?"