ʚ Capítulo 56. Duque Seok (1) ɞ
El doctor de la corte cambió de lugar el estetoscopio con una expresión seria, y quince minutos después finalmente retiró el frío instrumento de metal.
"¿Como está?"
"Su fiebre es un poco más baja que ayer."
Todos a su alrededor emitieron un sonido de alivio.
Jeon había colapsado después de su pelea conmigo, y aunque no creía que fuera mi culpa, estaba preocupado. Ahora también podría sentirme aliviado.
"Gracias por venir de inmediato."
"En absoluto, Su Majestad. Es solo mi deber."
Después de que el doctor y todos los demás salieron de la habitación, acerqué una silla al lado de la cama de Jeon. Abrió los ojos y fijó su mirada en mí, mientras yo tomaba una toalla de una palangana fría a su lado, la apretaba y se la colocaba en la frente. Se estremeció tan pronto como la toalla tocó su piel.
"Está fría."
"Estás sobrecargado de trabajo."
"He escuchado. Estaba despierto cuando el doctor dijo eso."
"No desperdiciemos este viaje a la villa."
Suspiré al recordar el repentino beso incómodo que Jeon me dio.
"¿Estás bien? Deberías tomar un descanso."
Hablaba con claridad, pero pude detectar una nota de cansancio. Sin embargo, estaba feliz de que tuviera más energía. Le quité la toalla de la frente, la sumergí en agua fría y se la puse de nuevo.
"Fría..."
Jeon gimió de nuevo y luego murmuró una disculpa.
"Tu cumpleaños fue arruinado por mi culpa. Lo siento."
"Venimos aquí todos los años. No te preocupes por eso."
"No puedo evitar sentirme mal."
"Tendré mi cumpleaños el año que viene."
"Pero tu cumpleaños de este año... huu. Hablar con el Consorte es como..."
"¿Cómo hablar con un colega?"
Jeon hizo una mueca cuando hice eco de sus palabras.
"¿Sabes que estás siendo un poco cruel?"
¿Un poco cruel? Fue una simple burla, pensé.
"El doctor dijo que tenías que descansar unos días más. ¿Debo llamar a TaeHyung?"
Jeon me miró como si no pudiera creer lo que dije. Lo dije en serio esta vez. Sabía que preferiría que él lo cuidara. Por supuesto, como no quería que los tres estuviéramos juntos, volvería al palacio imperial si él viniera. ¿No era eso lo que Jeon quería de todos modos? Sólo necesitaba una persona.
"Consorte... ¿estás siendo sarcástico?"
"¿Suena así?"
"¿No?"
"No."
Respondí con una sola palabra y miré hacia abajo, mientras JungKook miraba de reojo hacia mí.
"No tienes que traer a TaeHyung."
"No quiero que te decepciones."
"¿Pero no es esto bueno para el Consorte?"
Excepto cuando TaeHyung no estaba molesto, siempre me culpaba. Por otro lado, si él viniera aquí y yo volviera al palacio, sería realmente útil. Tenía mucho trabajo para ponerme al día. En lugar de responder, puse más hielo en la palangana, luego le quité la toalla de la frente y la empapé nuevamente. Puse la toalla fría en la parte posterior de su cuello, él saltó y agarró mi muñeca.
"¿Estás enfadado conmigo?"
"No."
"..."
"De verdad."
"Bien. Deja de mirarme."
Suspiró, quitándose la toalla del cuello y colocándola sobre la colcha.
"No llames a TaeHyung."
¿Estaba realmente bien para él? Cuando levanté la vista, vi que los párpados de Jeon caían hacia abajo.
"TaeHyung es hermoso y encantador cuando habla, pero no me siento cómodo con eso ahora. Me duele la cabeza... así que me gustaría que haya silencio."
TaeHyung estaría molesto. Desde que se convirtió en su concubino, se aseguró de nunca estar lejos de Jeon.
Simplemente asentí y volví a colocar la tela en su frente.
Mi sospecha de que TaeHyung estaría molesto era correcta. Después de una semana de descanso, regresamos al palacio imperial, y TaeHyung, que había estado esperando en el jardín, saltó dentro del carruaje antes de que ninguno de nosotros pudiera salir. TaeHyung encerró a JungKook en un fuerte abrazo, mientras que todo lo que hizo por mí fue inclinarse torpemente. No era inusual que el Emperador Consorte viera a una concubino, pero su actitud era diferente, considerando que había sido demasiado amigable conmigo antes. Si bien TaeHyung no podía soportar estar sin Jeon, parecía más preocupado de que estuviera a solas conmigo.
TaeHyung y JungKook no parecían dispuestos a separarse el uno del otro, así que fui solo al palacio central y ordené a los funcionarios que me trajeran todo mi trabajo que había pospuesto.
Desde entonces, la vida diaria continuó. Pasé un poco más de tiempo en el palacio central para ponerme al día con el trabajo de una semana, mientras que Jeon disminuyó sus horas extras siguiendo el consejo del doctor. TaeHyung todavía se aferraba al Duque Kyuhyun durante el día mientras cuidaba a Jeon por la noche. A veces me encontraba con el Príncipe YoonGi cuando salía a caminar, y Reina traía cartas de vez en cuando.
Ah, pero hubo un cambio. JungKook me convocó menos para hacer acusaciones escandalosas sobre TaeHyung. Ha vuelto a la normalidad con los asuntos relacionados con TaeHyung, y había menos razones para hacer demandas. Afortunadamente, ya no me lo encuentro con frecuencia y, naturalmente, me fatigué menos a pesar de que mi trabajo aumentó. Mi corazón todavía estaba triste cuando se trataba de JungKook, pero después de unos años así, tal vez podríamos ser como una pareja real normal.
Viviríamos una vida moderadamente aburrida pero pacífica, sin la preocupación del abandono o la renuncia.
La siguiente vez que me encontré con TaeHyung fue en una fiesta de té organizada por el duque Seok. Adyacente al palacio central había una pequeña mansión llamada la Casa de Cristal. El exterior no estaba hecho de cristal, como su nombre lo indicaba, sino con vidrio dispuesto en varios ángulos que hacían que toda la casa brillara con luz.
Escuché que en el pasado, una concubina amada por el emperador vivía aquí. Hoy en día se presta principalmente a los nobles por un día o dos. Fue esta Casa de Cristal la que el duque Seok tomó prestada para organizar su fiesta de té, y hoy pude terminar mi trabajo temprano y unirme a la fiesta.
"Temía que estuvieras demasiado ocupado para venir, Su Majestad."
"No, en absoluto."
Saludé al duque Seok y me senté en una mesa en el jardín. Había una selección de té y café en la mesa, así como una variedad de galletas, pasteles y otras delicias cubiertas con tapas de vidrio. El ambiente se estaba volviendo maduro para saludar a los nobles y mujeres.
"Oh querido. Debimos llegar tarde."
Una voz vino desde la entrada del jardín. Miré más allá de un pastel y vi a un hombre con cabello rubio ondulado que nunca había visto antes. Junto a él estaba TaeHyung.
'Oh. ¿Es el Duque Kyuhyun?'
Los ojos del hombre cayeron sobre mí.
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