JiMin había dicho que iría a Wirwol de inmediato, y Jeon no pudo detenerlo. Estaba frustrado porque él había rechazado su oferta de acompañarlo, pero había algunas otras cosas de las que tenía que ocuparse mientras él estaba fuera.

"¿Dónde está el Vizconde Daesung?"

"Está recibiendo tratamiento en el palacio del sur."

"¿Está incapacitado?"

"No."

"Muy bien. Tráelo."

Jeon llamó al Vizconde Daesung y le preguntó sobre su relación con TaeHyung. El vizconde fue lo suficientemente inteligente como para saber que fueron los hombres del emperador los que lo salvaron. Supuso que el Emperador ya sabía lo que le dijo a Jungwoo, y repitió a gritos lo que había confesado.

Sin embargo, la respuesta de Jeon fue fría.

"Así que estabas chantajeando a TaeHyung a cambio de ocultar a su bebé."

"¡No, Su Majestad!"

"Entonces, ¿por qué TaeHyung te seguiría cuidando? Te odiaba hasta el punto de huir."

El Vizconde Daesung miró a Jeon y se dio cuenta de que el emperador tenía el mismo interés en ocultar el pasado de TaeHyung. El vizconde no estaba seguro de si el Emperador lo estaba haciendo por amor o porque TaeHyung estaba embarazado de su bebé, pero su actitud era clara. Daesung pensó rápidamente y dijo una mentira.

"El Joven TaeHyung se mantiene en contacto conmigo porque estoy criando a su bebé."

Inclinó la cabeza y bajó sus hombros para parecer lo más humilde posible.

"Por supuesto, quería serle útil. ¿Pero chantajearlo? Nada de eso. Nuestra relación es como... bueno, es más como un trato."

Jeon entrecerró los ojos. Las palabras del Vizconde Daesung parecían coincidir con los hechos. TaeHyung no siempre trataba de ocultar las visitas del vizconde, e incluso había conservado un mechón del cabello de su bebé. Con cada nuevo descubrimiento, las palabras del vizconde sonaban cada vez más creíbles.

El Vizconde Daesung dio un suspiro de alivio cuando pensó que Jeon ya no sospechaba de él, pero la averiguación del Emperador no había terminado.

"¿Dónde está el certificado de comercio de esclavos de TaeHyung?"

"¿Qué?"

"Le dijiste a Jungwoo al respecto."

¡¿Se enteró de eso?! El vizconde se estremeció sorprendido, mientras que Jeon lo miró con frialdad.

Preocupado de que el Emperador dijera "¿Por qué lo guardaste y no lo destruiste?" y le encontrara un fallo, el Vizconde Daesung se postró rápidamente en el suelo.

"Dejé el certificado a la Corporación Oso, y es probable que Lord Jungwoo haya ido a tomarlo."

Después de la reunión con el Vizconde Daesung, Jeon visitó Jungwoo personalmente en la Mansión Park.

Jungwoo estaba sorprendentemente tranquilo mientras permanecía encerrado en su habitación en el segundo piso. Aunque no se le permitió salir, le sirvieron comidas y la habitación estaba amueblada con un baño. Jeon no tenía intención de conversar con el hombre por mucho tiempo, e inmediatamente fue al grano.

"Serás desterrado."

Aunque conocía a Jungwoo y a JiMin desde la infancia, Jeon nunca tuvo una buena relación con el hijo mayor de los Park.

Jungwoo no parecía sorprendido por la proclamación de Jeon, como si hubiera estado esperando esto. De hecho, Jungwoo respondió con frío sarcasmo.

"¿Sabes cómo es tu pequeño juguete?"

"Lo escuché todo. Bien hecho."

Jeon no se molesto ante la provocación, lo que solo avivó aún más la ira de Jungwoo.

"¿Bien hecho?"

"Si no hubiera sido por ti dando un paso adelante, no habría sabido lo que sucedió en el pasado."

Jeon habló casualmente y miró a su alrededor.

"¿Dónde está el certificado de esclavo de TaeHyung?"

"Bueno, tenía el presentimiento de que el tipo tenía una oreja y una boca grande, pero qué lengua tan ligera tiene."

"Es preferible a ti, que tienes tanto unos puños como una mente ligera."

Jeon sonrió. Jungwoo le devolvió la mirada con ojos fríos y también sonrió.

"Por supuesto."

Jeon frunció el ceño ante el repentino cambio de actitud de Jungwoo, y la razón pronto se hizo evidente.

"El certificado vino de la Corporación Oso. Pero uno de tus caballeros lo confiscó."

Jeon lo miró con escepticismo, pero Jungwoo continuó alegremente.

"Por supuesto, pensé que estaba bajo tus órdenes. Pero a juzgar por tu reacción, eso no es cierto, ¿verdad?"

Se rió y extendió los brazos de par en par.

"Siéntase libre de registrar este lugar. Realmente no lo tengo."

"..."

Jeon le dirigió a Jungwoo una mirada de acero y le ordenó al Marqués Jaehyun que encontrara el certificado. Sin embargo, después de registrar las instalaciones, no lo encontraron por ningún lado. También se enviaron hombres a la Corporación Oso, y confirmaron que Jungwoo había tomado el certificado.

Los hombres registraron la mansión nuevamente, mientras Jeon se sentó en el sofá de un salón con los brazos cruzados. Sin embargo, no importa cuán exhaustivamente los hombres buscaron, no encontraron ningún certificado. La ira de Jeon comenzó a crecer. Sin el certificado, TaeHyung podría estar bajo sospecha de ser un esclavo en el futuro.

'¿Fue el Consorte el que lo hizo?'

Jeon recordó que JiMin sabía que Jungwoo había sido detenido en su casa solo unas horas después de que sucediera. Muchos de los caballeros eran leales a JiMin. Como a él no le agradaba TaeHyung, nunca le entregaría el certificado aunque lo tuviera en su poder.

La frente de Jeon se frunció con sospecha.

'Haré que los hombres registren la habitación del Consorte mientras él está ausente.'

Jeon salió de la mansión con las manos vacías, pero antes de hacerlo, habló con la pareja Park.

"Duque Park, Duquesa Park. ¿Saben que su hijo ha hecho todo lo posible para matar a mi bebé?"

"Me enteré ayer."

"No culparé oficialmente a su familia por el bien del Consorte. Pero Jungwoo queda desterrado de este país."

Aunque el Duque Park había sido informado por la guardia del Emperador del incidente, se tambaleó cuando escuchó el severo castigo. La duquesa agarró el brazo del duque para sostenerlo, y ella miró a Jeon.

El corazón de Jeon dio un vuelco cuando vio el parecido de sus ojos con los de JiMin, pero continuó con firmeza.

"Tengan en cuenta que mientras esté exiliado, Jungwoo no tiene autoridad legal en el Imperio Oriental, y será encarcelado tan pronto como cruce sus fronteras."