Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

3. Algo mas que una amistad.

Especial: San Valentín.

—¡Apúrate Sam! ¡No tengo todo el día!— exclamé, irritada.

—¡Espérame April! ¡No seas tan ansiosa, enana!— me respondió él.

Estaba apurada, Sam seguía en el baño y yo esperando como loca en la puerta a que se digne a venir. Mi amigo de toda la vida tardaba mas en arreglarse que una mujer, ¡increíble!
  Cómo ya lo dije, somos amigos desde que tengo memoria, y ahora, a mis 20 años, me vine a vivir con él; porque a pesar de ser un ser muy pesado, terco, y asqueroso, es mi amigo y lo amo.

Ahora mismo estamos por salir al centro a pasear, terminamos los estudios y nos tomamos un pequeño descanso. Bueno, si Sam piensa en salir del baño iremos al centro, si no es mas probable que me convierta en un maniquí acá afuera.

—¿Todavía estás en la puerta?— dijo desde el baño. Sí, sigue ahí dentro.

—Si tardas dos minutos más ya no.— respondí cansada. —¿Qué tanto puede tardar un hombre en un baño? Ni que tengas que maquillarte y todo eso— rodé los ojos.

—Lo necesario, linda— dijo. Sé que no puedo verlo, pero de seguro sonrió de forma burlona; lo conozco como la palma de mi mano.

—Apúrate o tendrás que ir solo al centro— añadí, y lo escuché reirse.

—No irás sin mí, te conozco.

Es cierto, me conoce tal vez más que yo misma, y es por eso que lo adoro. Les cuento un secreto, Sam me gusta hace mas o menos cinco años, pero no me animé nunca a decírselo; además de que como somos tan amigos nunca lo voy a perder. Pero al final me decidí; hoy, catorce de febrero, San Valentín, llevaré a Sam a una cita sorpresa. No será una típica cita romántica, pero sé que le encantará, porque tiene algunas de sus cosas favoritas.

Escuché cerrarse la puerta de baño. ¡Al fin salió! Pensé que se iba a quedar a vivir ahí dentro. Sam se asomó a la escalera y bajó como todo un famoso, no sé que tiene en la cabeza.

—¿Cómo me veo?

—¿En serio?— me reí, —¿qué tienes en la cabeza?— lo dije entre risas, no podía aguantarme.

—Cerebro, neuronas y más cosas; gracias por preguntar— sonrió y le pegué un puñetazo en el hombro, — ahora, ¿cómo me veo?— volvió a repetir la pregunta.

—Pues... ¿bien? Supongo— le sonrío. Me estaba aguantando para decirle que se veía hermoso. Llevaba un jean azul con una camisa a cuadros sobre una remera negra, y zapatillas blancas; su cabello castaño estaba peinado en un jopo para el costado y llevaba colonia. Per-fec-to.

—¿Bien? Estoy divino.— hizo un gesto de elegancia.

—Si si, como digas. Ahora, ¿podemos irnos de una vez?

—¡Obvio! ¡Centro comercial, allá vamos!— levantó su puño como lo hace Buzz Lightyear de Toy Story (soy muy fan de Disney, ahora lo saben).

Salimos de la casa dispuestos a ir al centro comercial, pero desviamos para ir a una feria que estaba por ahí cerca, con la exscusa de que yo quería ver las atracciones. Cuándo llegamos, Sam estaba muy confundido, él estaba seguro que todas esas atracciones yo ya las conocía, pero igual lo convencí para que nos quedáramos.

En una hora, más o menos, recorrimos muchos juegos y obtuvimos varios premios. Sam ganó un peluche gigante de un oso en un juego que consistía en embocar un aro de plástico en botellas, si acertabas tres de cinco intentos ganabas. Y yo gané una brasalete con dijes de corazones de distintas formas en un juego de adivinar el valor de los productos. Estábamos muy felices por el rato que estábamos pasando, pero llegó el momento que he estado esperando.

—Sam, ¿te parece si vamos a comer algo? Hay unos carritos con comida rápida y mesas por allá.— señalé un lugar.

—¡Si! ¡Vamos! Tengo mucha hambre— dijo, sonriendo.

No hagas eso por favor, que me derrito.

Caminamos hasta el carrito mencionado y de inmediato nos trajeron las cartas con los platos para elegir. Yo opté por una hamburguesa doble con papas fritas y Sam pidió unas empanadas de choclo y queso, (vale aclarar que son sus favoritas). Ambos pedimos Coca-Cola y nos sentamos a comer.

Llegó el momento. No... no estoy lista...

No seas cobarde, April. Dilo de una buena vez. Okey, mi conciencia no ayuda mucho. Está bien, aquí vamos.

—Emm... ¿Sam? Escucha... Emm, tengo algo importante que decirte— no tartamudée, por suerte, pero si se me vió muy nerviosa.

—Bueno dilo, ¿por qué tanto misterio?— sonrió para sacar el clima de nerviosismo.

—Pasa lo siguiente... Ehh, hace más o menos cinco años me di cuenta que te veo de forma diferente, ya no como un amigo o un hermano, si no que ahora ocupas otro tipo de espacio en mi corazón— hice una pausa e inhalé profundo para seguir—; Sam, me gustas. Me gustas demasiado, sé que es muy sorpresivo esto, pero son mis más sinceros sentimientos. No quiero que te alejes de mí, y si no sientes lo mismo por favor prométeme que no dejaremos de ser mejores amigos. Yo te necesito a mi lado más que nadie; tú eres quién saca lo mejor de mí; tú eres quién me alegra cuándo tengo un día malo; tú eres lo que necesito para estar bien, para vivir y ser feliz—. Concluí y lo único que pude hacer fue mirar al piso, No quería ni ver su cara. Ya está, lo dije.

¡Así es, vaquera! Muy valiente, felicidades. Cállate.

Por el rabillo del ojo pude ver que se rascó la cabeza, y después habló:

—Hey, enana, mírame— levantó mi rostro con sus dedos y me obligó a mirarlo a los ojos— todo lo que me dijiste... Yo también lo siento... fuiste una persona muy especial desde que te conocí y me atrevo a confesar que yo siento algo por ti hace más tiempo— sonrió — te necesito a mi lado más de lo que crees, y no me imagino la vida sin ti— ahora la que sonríe soy yo, a la par de que me sonrojo-— te amo.

¡AHHH! ¡SIII! ¡LO DIJO!. Ay, me va a dar algo. Esperen... me está mirando, y yo como una loca embobada sin decir nada. ¿Qué hago? ¿QUÉ DIGO? AYUDAAA.

Primero cálmate, desesperada. Ahora dile algo, ¡y fin! Okey... Emm... ahí voy.

—Yo también.

¿En serio? ¿Yo también? Ay Mijita, necesitas ayuda de verdad. Es lo mejor que pude hacer, cállate.

Sam sonrió y agachó su rostro, con sus cachetes levemente rosados. Es lo más tierno que vi... Basta, concéntrate. Posé mi mano en su cara y él me miró, con esos ojos tan lindos. Rápidamente se paró de su silla. ¡¿Qué?! ¿Qué hace?

—¿A dónde vas?

—A dónde vamos, querrás decir— ¡otra vez me sonrió! Ay no no no, en cualquier momento me desmayo. Agarró mi mano y me levantó del asiento—. Vayamos a caminar y a disfrutar la noche juntos— dijo. ¡Obvio bebé! Contigo hasta la luna ida y vuelta.
  Comenzamos a caminar y me tomó la mano, ¿esa no se la esperaban, eh? ¡Pues yo tampoco!

—Sabes, estuve mucho tiempo conteniendo mis sentimientos porque pensé que sólo me veías como un amigo— se rió, y yo también.

—Y yo porque no quería arruinar nuestra relación de amigos, porque en serio te quiero mucho, y no soportaría tenerte lejos— una pequeña y traviesa lágrima recorrió mi mejilla. Quise agregar algo más, pero Sam no me dió tiempo. Tomó mi rostro entre sus manos y me besó. ¡Me besó! Fue el beso que estuve esperando casi toda mi vida; el beso que más quería. Fue un beso tierno y suave, uno que no olvidaré jamás. Paramos porque nos faltaba el aire y nuestras frentes quedaron apoyadas una contra la otra.

—Te amo. Te amo demasiado.— dijo entre jadeos, y me dio otro beso, cortó pero igualmente hermoso. Nos separamos y yo le llené la cara de besitos pequeños, ya no me aguantaba más.

—Yo más.

—April, ¿quieres ser mi novia?— sonreí ampliamente, en serio fue una gran sonrisa.

—¿Es una broma? ¡Obvio que quiero!— salté encima suyo y lo abracé con todas mis fuerzas. Nos volvimos a besar.

Él es con quién quiero pasar el resto de mi vida.
Él es el que quiero ver cada mañana cuándo me levanto.
Él es el que quiero que esté cuando me caiga, para levantarme.
Él... él es el amor de mi vida.

                             ▪▪▪

☆ ¡Feliz San Valentín, tortolitos/as! ☆

Disfruten este día, la pasen solteros o en una relación, no importa. Pueden pasarlo y disfrutarlo con sus familias o amigos, al fin y al cabo, a ellos también amamos. ♡

                      

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro