Descripciones de ElisabetofosClandrag

Calavera 1:

El tiempo gris de la mañana dejaba observar aquel peculiar objeto, no era más que un pedazo de hueso, sonriendo a la nada, sin alma, sin espíritu. Así se encontraba aquel Cráneo tirado en la podrida y desgastada tierra, se podía notar que su felicidad no era por estar en la esplendorosa tierra que hay se mantenía inerte, podría decirse que sea por el hermoso cintillo que como rosas blancas lucia, pero es un simple cintillo no era motivo para estar feliz, creo que la respuesta es aquel pedazo de hueso que como papel mache lucia, se encontraba al lado, tal vez por eso es que esta tan feliz, solo espero que no se dé cuenta que aquel cráneo no es del todo cierto.

Calavera 2:

Solo una débil luz alumbraba un poco de lo que se podía ver, una niña con cuerpo de mujer, una mujer con cara de niña no era nada lindo ni acogedor tampoco daba miedo, su boca es de un color rosado un poco más suave de lo que aparenta. Su enrulado y despeinado pelo que a simple viste se notaba de un color plateado oscuro, tal vez por el reflejo de aquella luz en forma de esfera que como una luciérnaga alumbraba esos enormes aretes que guindaba de esa mujer con cara de niña. Aquel cintillo de flores negras era la misma representación del alma de aquella mujer, casi tan representativa como sus oscuros y profundos ojos sin fin. La niña con cuerpo de mujer intentaba agarrara a esa luz con las manos, como un niño intentando agarra a una luciérnaga, sus profundos ojos decían lo contrario explicaban con gran sutileza el alma de la chica y con razones casi escuchables explicaba por qué no quería agarrar aquella esfera rodeada por una manta añil. Esta manta añil que es como un desierto alumbrado por la luna, como una galaxia, así se podía observar. La piel blanquecina de aquella chica, los profundos ojos que contradicen, sus enormes y redondos aretes, su rosada boca que como una rosa alumbrada por la luz señalaba la fría paz, sus manos apuntando a esa esfera luz anunciando el rompimiento de la paz.

Calavera 3:

El día era gris mucho más de lo que alguna vez pude haber recordado, una Enorme y espesa niebla inundaba aquel lugar, la niebla no era blanca, era gris. El bosque era realmente tenebroso, justo al frente se encontraba un lago, sus aguas eran negras y su reflejo gris, igual que una película en blanco y negro. En ese momento el agua reflejó a una mujer.

Una mujer de pelo negro con un cintillo blanco lo podía observar no sabia si estaba alucinando o era una aparición fantasmal, Pero podía ver como siempre lucia su bello traje de bodas blanco el cual se desaparecía Con el reflejo de la luz grisácea, también observaba su hermoso, largo y despeinado pelo, tenía aquel objeto que siempre juste era un hermoso cintillo de rosas blancas, no sé si sea por el tiempo, no sé si sea por el clima tal vez ya este loco. Sin embargo esta es la mejor alucinación de nostalgia que he tenido, solo por verte a ti mi querida esposa.

Calavera 4:

En ese momento volví a ver aquel pasillo, pero esta vez era diferente habían cinco ventanas que dejaban entrar la gris luz de la luna, no podía ver todo el lugar pues estaba oscuro, en ese momento alado del pasillo vi unas escaleras que no llevaban a ningún lugar, era lo más extraño que había visto lo único que dividía el pasillo de la escalera era un arbusto de hojas grises con una estatua de un angelito muy borrosa, no recuerdo este lugatt esto casi seguro que nunca he estado en un lugar como este, te podrá parecer una locura pero es como si estuvieran conectados de alguna manera, como si fueran un solo lugar. Pero es imposible, el arbusto que separaba al pasillo de la escalera era borroso, tenia el presentimiento que cuando me concentrara en el pasillo, los escalones o el angelito los otros dos iban a desaparecer, sin embargo no podía, no importa cuanto quería no me podía mover, ni pestañear, ni hablar solo observar.

Calavera 5

Ojos perdido en un mar de blanco, cabellos como serpientes muertas, ramas como látigos de hierro pequeñas siluetas saliente de la nada en forma de brazo tomaban con pudor las tenebrosas serpientes que de su calva de branca salían, casi invisible se encontraba algunos trapos que de su piel salía, su blanca y muerta cara, aquellas siluetas confundía la piel branca con aquellos trapos que ocultaba el único rastro de lo que alguna vez tuvo vida, su boca pintada de negro eso fue lo ultimo que logro ver en su vida.

Calavera 7

La Madame de la noche y la soledad despierta en un hermoso palacio añil, sus hermosas paredes, sus casi invisibles ventanas un lugar sumamente hermoso, hoy despierta con un hermoso color de pelo celeste usa su vestido de escarlatas color añil con uno de sus más costosas joyas color añil, usa un abanico negro pues el de color añil lo uso ayer, la noche de hoy decidió pintarse una mariposa negra y añil, pues hoy terminara uno de sus más difíciles trabajos. Con mirada de elegancia y soledad se dirige a su objetivo.