Hola a todos, aquí les traigo un nuevo capítulo. Espero que les guste, porque las cosas se pondrán un poco tensas.

Los personajes no son míos, son propiedad de Masashi Kishimoto.

La doctora Tsunade aparcaba su coche en el pequeño estacionamiento de una remota clínica de Londres. La cual, supuestamente era a donde traían a los más peligrosos casos de enfermedades mentales.

Tomó el primer expediente y observó en el al primer paciente a entrevistar con un horrible pesar: Naruto Uzumaki. Bajó del auto y fue directamente a la recepción del hospital.

-Buenas tardes, soy la doctora Namikaze. Vengo a revisar a Naruto Uzumaki

-Por aquí doctora, la estaban esperando-la guió al pasillo de máxima seguridad psiquiátrica

Un espantoso malestar afloró en la rubia, sintiendo que las cosas cambiaría de forma drástica al hacer esta entrevista.

-Aquí esta: paciente 0792-le otorga el pase-tenga cuidado, suele ponerse violento cuando alguien intenta tocarlo-salió dejando asegurado por fuera

A la pobre mujer se le partía el corazón ver a su querido nieto de esa forma: ojos nublados y sin vida, cabello opaco y su mirada se encontraba perdida en algún punto inespecífico. Desgraciadamente había descubierto que era su nieto al revisar por primera vez los expedientes, no dijo nada antes para evitar levantar sospechas. Pero ahora, estaba cerca de su niño.

-Naru, mi niño. Soy yo... tu oba-chan-le sonríe cálidamente

-¿Se...se han ido?-susurró con dificultad el pequeño rubio

-Por supuesto, estamos solos tu y yo. No hay nada de que...-un repentino abrazo de su nieto y un llanto desgarrador inundaron la habitación

Tsunade lo abrazó con fuerza, dejando que se desahogue sin restricciones.

Después del efusivo encuentro, respiraron calmadamente.

-Naruto, no sé quien te puso aquí, pero prometo que voy a...

-Nadie me metió aquí Oba-chan. Yo mismo decidí internarme-le mira con algo de preocupación

-¿Por qué tomaste esa decisión tan drástica?-algo no estaba bien con su nieto

-Porque así él no sabrá dónde estoy-se abraza a sí mismo

-¿Él? ¿De quién hablas?

-Sasuke Uchiha-su mirada llena de horror y pánico lo decía todo-nunca creí que...que se volviera un maldito demente-lloró cubriendo su rostro

-¿Qué te hizo ese mocoso?-intentaba abrazarlo, pero no dejó que lo tocara

-Mató a sus padres...¡Mató a mis padres!-gritó horrorizando a la rubia

¿Él fue quien mató a sangre fría a su hijo y nuera y secuestró a Naruto por meses? ¿Por qué?

-¿Por qué razón hizo todo esto?

-¡ESTABA OBSESIONADO CONMIGO OBA-CHAN!

-Cariño, necesito que me cuentes todo lo que pasó para así atrapar a ese maldito psicopáta-le tomó por los hombros intentando calmar el ataque de psicosis

-E...esta bien-respiró varias veces, comenzando a narrar todo-fue hace un año...

Me había graduado de la preparatoria con los más altos honores de su clase, seguiría los pasos tuyos abuela Tsunade para volverme un excelente médico. Ahora, observaba cómo la Universidad de Londres se elevaba en todo lo alto, casi nadie podía ingresar a ella y sólo pocos eran los privilegiados.

Checaba con bastante emoción mi plantilla de materias, sin darme cuenta que alguien venía hacia mi dirección y por ello, ambos terminamos en el suelo con un lindo dolor en la retaguardia.

-Lo...lo siento no me di cuenta

-No te preocupes, los accidentes suelen pasar-un atractivo azabache me ofreció la mano

-Gracias-acepté y me impulsó para levantarme-otra vez, lo lamento. Es que... creo que me perdí-rasqué mi nuca con nerviosismo

-Puedo ayudarte, solamente di a que clase vas primero-amablemente el chico me enseñaría dónde estaba el aula-por cierto, soy Sasuke Uchiha

-Naruto Uzumaki-saludé con un apretón de manos-pues... mi clase es la 139

-¡Qué coincidencia! A esa misma voy. Vayamos juntos

-Pues no se diga más-le agradecí su ayuda sonríendole

Pasó el tiempo y las cosas con Sasuke iban viento en popa, íbamos a todos lados juntos...hasta nos decían que parecíamos novios, lo cual me dio bastante risa y algo de pena. Aunque en algunas ocasiones se mostraba bastante sobreprotector conmigo, pensé que era solamente por ser buenos amigos, pero me vine enterando de que realmente le gustaba.

-Naruto, sé que llevamos algo de tiempo de conocernos pero...no puedo ver a nadie más con amor, no si no eres tú a quien quiero ver de esa forma-su mirada llena de amor me hizo sonrojar tanto que hasta me puso la piel chinita de los nervios

-Sasuke...y...yo bueno t...tu también me gustas-me armé de valor y le dije lo que realmente sentía por él

Y sin pensarlo, nos volvimos novios. Todo fue de maravilla por un tiempo, hasta que un día, conocí al verdadero Sasuke...

Sai era un chico bastante burlesco y pervertido, molestaba a todos con sus burlas e insinuaciones descaradas. A este tipo se le ocurrió molestarme e intentó manosearme pero nunca esperó la violenta reacción de Sasuke.

-¡BASTA SASUKE! VAS A MATARLO-miraba con horror cómo golpeaba el rostro del tipo una y otra vez dejándole la cara totalmente irreconocible

-¡ESTE MALDITO GUSANO SE ATREVIÓ A TOCARTE!-siguió golpeándolo hasta que llamaron a los maestros intentaron apartarlo

Llamaron a la policía y tuvieron que llevarse a Sasuke para que diera declaraciones. Pasó varios meses en detención y cuando volvió, era una persona totalmente diferente.

Me miró a los ojos y con extrema felicidad me abrazó de posesiva mientras me susurraba una y otra vez: "nadie volverá a apartarme de tu lado, ni siquiera el mismo diablo...estaremos juntos para siempre". A partir de ahí... todo se volvió un maldito infierno.

-Sasuke, en serio puedo ir solo al baño-suspiré con frustración-está a unos pocos metros

-No vas si no estoy ahí para vigilarte-me miraba de forma seria-no quiero perderte de vista

-¡Por todos los cielos Sasuke! Solamente voy al baño... ¡AL MALDITO BAÑO DE MI CASA!-grité cansado de su sobreprotección

-¡AUNQUE SEA EL BAÑO DEL MISMISIMO PAPA NO VOY A DEJARTE SOLO!-me zarandeó con fuerza-JAMAS voy a dejarte y tú jamás vas a dejarme-sonrió de una forma que erizó los vellos de mi piel-vamos a estar juntos por siempre y siempre y siempre

-Sasuke, me estás asustando-intenté zafarme de sus brazos-por favor, suéltame

-No, no, no, no... ¡NOOOO!-me tiró al sofá violentamente-¡No te alejarás de mí! Eres mío, ¿entendiste? ERES MIO

-¡ESTÁS DEMENTE SASUKE!-corrí a la puerta de salida pero logró atraparme de las piernas y empezó a hacer algo que nunca le creí capaz

Intentó violarme...

Fue quitando mi ropa con brusquedad y estaba a punto de lograr su cometido, cuando mis padres junto con los de Sasuke y su hermano entraron rápidamente al escuchar mis gritos de auxilio. Al ver la impresión en su rostro, lo pateé y me soltó. Corrí a los brazos de mi madre mientras que él fue detenido por nuestros padres e Itachi.

Sollocé toda la noche, no pude dormir porque sentía que si lo hacía, él volvería por mí.

Pasaron varios meses y no volví a saber nada de Sasuke, pero las noticias me dirían lo que había pasado...

Mató a sus padres y dejó gravemente herido a Itachi. En las paredes de la sala estaba escrito con sangre: "Te amo Naru, iré por ti... no desesperes" "Nadie va a volver a separarnos". Mis padres y yo estábamos aterrados, así que ese mismo día nos largaríamos de inmediato sin avisar a nadie.

Empacamos todas nuestras cosas y cuando nos dispusimos a salir, vimos con horror a Sasuke que estaba parado en la entrada de la casa cubierto con sangre. Mi padre cerró la puerta y nos dijo a mamá y a mí que nos fuéramos por la parte de atrás.

Por supuesto iba a negarme, pero mamá me arrastró a la puerta de atrás. Corrimos sin parar y escuchamos varios disparos provenientes de nuestro hogar. Queríamos regresar a casa, pero observamos con pánico que Sasuke iba en un coche y aceleró directamente a nosotros. Mi madre lo distrajo para que pudiera escapar.

No funcionó...

Aceleró y atropelló a mamá sin piedad alguna y como eso no le bastara, puso reversa y...

-Le destrozó la cabeza-lloraba sin parar por cada recuerdo, sintiendo cómo seguía palpable, como si lo viviera en este momento

-Mi niño...

-Caí en un montón de bolsas de basura. Al lado mío, había botellas rotas. Él...él se acercó con una sonrisa de felicidad como...como si hubiera quitado un estorbo y...lo apuñalé-la rabia en sus ojos se dejaba fluir-lo apuñalé una y otra vez, hasta que el maldito dejara de respirar. Creí que ya estaba muerto, así que...llamé a la policía y a una ambulancia pero... pero

-Lo lamento tanto Naruto-lo abrazó con fuerza llorando amargamente

-Pude haberlos salvado si yo... si yo

-Ni siquiera lo digas Naruto. Hubiera sido peor si dejabas que te llevara-acarició su cabellera intentando calmarlo

-Decidí que en vez de que me llevaran con algún familiar, me trajeran aquí-le mira con cansancio

-Pero cariño, te están dando medicamentos para algo que no tienes y...

-Tranquila, ellos colocaron eso en mi expediente para evitar que personas que no llevaran mi caso, entraran a esta zona

-Cariño, puedes...puedes venir conmigo y...

-No-la interrumpe-no voy a arriesgarte a tí también. Supongo que es todo

-De hecho...-le muestra los expedientes de los otros chicos-¿Sabes quiénes son?

-Pues...creo que los he visto en algún lado, pero no recuerdo exactamente dónde-los mira con atención-lo siento Oba-chan, no sé quienes son

-Gracias mi niño-besa su frente con cariño-¿quieres que venga a visitarte?

-Me gustaría pero... no quiero que te pase nada-se sienta en un rincón abrazándose a sí mismo-gracias por la visita Oba-chan

Con ese gesto entendió que su tiempo había terminado. Se despidió de él y abrieron la puerta dejándola salir.

Durante el viaje de regreso a casa, tenía una sensación de que había algo más que no le había contado su nieto y lo sabía porque Naruto se la pasaba revisando detalladamente una de las esquinas de la habitación como si supiera que alguien pudiera estar escuchándolos y viéndoles con atención. Es como si...

-Supiera que el maldito bastardo estuviera vivo y que lo está buscando como demonio desatado en la Tierra-suspira con preocupación

Esperaba que realmente estuviera muerto el malnacido, aunque Naruto no sabía con certeza si lo mató o no. No quería ver a su niño destrozado mentalmente de forma real y se encargaría de que nadie lo lastimara.

Continuará...

Espero que les haya gustado. Parece que las cosas se complican para Tsunade, pero al final seguramente descubrirá algo que puede que no le guste del todo.

Cuídense, nos leemos pronto y espero verlos pronto por aquí.