Cuando Damián expresó que estaba seguro que su esposa era humana, el alma se me escapó.

Porqué tenía un pequeño presentimiento de que había algo de lo que yo sabía que podía coincidir con esa hipótesis, era algo ....algo que no quería decir. Que tenía que ver con ese odio arraigado hacia lo lobos , ese desprecio, por algo que su especie hizo, no directamente a mi, pero si causó el destino de mi niñez y vida.

¡Dios! Que esto era una salida a almorzar, no una terapia para enfrentar mis temores sin ninguna preparación.

-Zack - fue el llamado de Damián al verme guardar silencio, su ceño se profundizo al máximo -¿Estás bien?- preguntó de inmediato, llevando esta vez su mano a un costado de mi rostro con total gentileza.

- ehhh si , creo que si....- dije antes de tomar la botella y tomar de nuevo un trago largo - solo creo que me afectó el whisky- dije justo antes de volver al líquido.

Damián retiro con delicadeza la botella.

- de ser así mejor regresemos , es demasiada información y seguro debes estar saturado, no te dije todo esto con la intención de abrumarte ...solo piénsalo detenidamente, no tienes que forzar nada zack , jamás te obligaría a nada si así no lo sientes , tus sentimientos y tus pensamientos son solo tuyos y tienes libertad sobre ellos. Sí me los ganó , solo el tiempo lo dirá....así que vamos-

- ...¿Ah?- volví a preguntar , ¿Por qué diablos tenía que decir cosas tan lindas? , ¿Cómo no iba a saber que el maldito lobo ya me gustaba ? Claro que lo hacía , Damián es maldita mente enamorable, ¿Quién no caería con verlo sonreír y tratarte como si fueras un tesoro de puro oro .

Desde allí solo asentí y regresamos al auto en un silencio extraño, más porque mi cerebro estaba en otro lado. De camino a la hacienda, puse la radio e intente entablar una conversación suave sobre las canciones que iban sonando. No quería que Damián se sintiera rechazado, porque no era el caso ,no por su historia lo dejaría, ni que fuera estúpido, era... porque sus palabras involucraban hechos un poco más importantes que no había pensado revelar aún .

-¿Te quedarás en la hacienda de los Jeferson con nosotros a cenar? O ¿Quieres ir directamente a la hacienda de don Antonio?- fue su pregunta un poco antes de entrar en los terrenos de la hacienda.

Me apoye sobre la ventana antes de mirarlo.

- me quedaré a cenar-

Mi respuesta pareció sorprenderlo, esa reacción me dió a entender que Damian se estaba sintiendo algo culpable por decirme todo de una vez, podría decir que incluso pensaba que yo podía alejarme de él por un tiempo.

Soy pendejo pero no tanto.

- Damián- lo llamé.

Sus bellos ojos verdes se despegaron unos segundos de la carretera para mirarme.

Sonreí al ver cómo sus cejas se fruncían casi con una dolorosa ansiedad.

Sus ojos iban y venían del pavimento frente a él y yo a su lado.

- solo no saques conclusiones apresuradas por mi reacción, realmente...estoy muy feliz de saber que soy tu pareja - le dije.

Los ojos de Damián se ampliaron un poco más.

Mis orejas se sentía calientes . ¡Que vergüenza, ahí iba mi rastro marchito de dignidad arrastrándose otra vez!, ¡El único pedazo de dignidad que me quedaba y era feliz arrastrándose!

- yo ... pensé que jamás iba a tener una pareja con un cuento así todo estúpido como el de max ...y saber que me gane una lotería contigo...de verdad me tiene muy feliz y...eso sí, no me pongas mucha atención, no soy bueno para decir palabras bonitas , la idea se entiende que es lo importante, ya te dije que me pongo estúpido cuando estoy nervioso- le dije esta vez mirando hacia mi ventana, para evitar ver el brillo de cachorro que había en los ojos verdes y profundos del lobo.

- bien, tomaré rumbo hacia la hacienda de los Jeferson- dijo al cabo de unos buenos minutos. Solo que está vez podía sentir un ánimo mucho más agradable y sí mi oído no me fallaba , allí había el rastro de una sonrisa.

También sonreí.

Luego de unos 15 minutos aproximadamente la hacienda de los Jeferson nos dió la bienvenida.

- para el día de hoy , solo debe de estar Tomilson y Dalí , Evans ya debió regresar a la manada, lo más posible es que el alfa regrese tal vez mañana - me informó Damián mientras caminábamos rumbo a la casona.

-¿Y tú ?, ¿Regresarás a la ciudad?- le pregunté.

- no tengo prisa , el proyecto del hospital me está necesitando muy continuamente, sí los Jeferson me permiten quedarme un tiempo más en el oeste, me quedaré. ¿Y tú zack, te irás?- me preguntó el lobo.

- max piensa volver tal vez en dos o tres días, el trabaja conmigo como mi gerente, tengo un encargado de la administración y mis dos chicos de la seguridad son bastante leales , ellos siempre me mantienen informado de todo, no necesito estar allá todos los días. Puedo trabajar desde aquí algunos días, tal vez... Traer mi PC y algunas cosas, pero solo sí los Jeferson me dejan con ellos, don Antonio es muy amable, pero aún así no somos parientes de sangre, por lo que quedarme en su hacienda más tiempo sería incómodo, además de que me hace trabajar- le dije haciendo algo de mala cara al final.

- así que puedo deducir entonces que piensas quedarte un tiempo más - dijo  mirándome detenidamente.

Asentí.

- solo si consigo dónde quedarme, sino tendré que volver a la ciudad- comenté

- muy bien, entonces déjame organizar eso, Mike es un alfa muy razonable, si le comentamos el caso seguro nos permitirá estar una temporada- fue su gran respuesta.

- ¿Cómo estás de seguro? Sigo siendo un extraño y no pertenezco a ninguna manada -

Damián sonrió un poco más amplio.

- no te preocupes, déjamelo a mí -