Tocarte
Tocarte
Sigo tocándote mientras te pienso, en mi mente me estás tocando las cervicales, fingiendo que sabes lo que hace, pero me está mirando fijamente, y te descubrí. Eso me ha excitado delante de ti y te me has puesto muy sexy. Siguesmirándome y se te ha escapado una sonrisa. Te gusta verme empalmado por causa del momento a su lado. Sigues dándome el masaje hermoso, pero mis manos empiezan a tocarme tus pechos, y sigues mirando mi pene y estás intrigada. Yo, aparte de darme cuenta sigo mirando tus pechos que se me acercan, no puedo evitarlo. No llevas sujetador y te he visto hasta los pezones, te has desabrochado un poco adredemente sin yo haberme dado cuenta. Aún te me pones más seductora al pensar en querer comerte las tetas, Dios santo. Dejaré que tu me hagas lo que desees, si es que quieres claro. Me hace mal insinuar algo y que tu no quieras nada, me haré el dormido. No sé qué es peor, simulando que estoy dormido pienso en que quizás se atreva a tocarme mi miembro, ¿Lo harás? Claro que sí, se te ven las ganas, ya se está acercandote demasiado, me está rozando por la entrepierna. Vaya cuerpo tan suculento. Ojalá me quités los calzoncillos y me vea completamente desnudo y empalmado, tengo muchas ganas. Que observes mi pene pero que no vayas a ser directa a acariciarme, que sigas y comiences a hacerme un masaje por todo el cuerpo. Que me mantengas con un poco de ganas tocándome todo hasta llegar a donde deseas ya impaciente, eso me encantaría demasiado. Te voy a decir que puedes hacer conmigo lo que quiera, y que si quiere que me apetece quitarle el sostén que llevas debajo del vestido para acariciarla. Son blancas, me gustan las bragas blancas, las estoy viendo porque esta inclinadas hacia mi . Como provoca saborear tu vagina y que estés encima de mi y muestres lo que deseo de ti hasta el punto que jamás volvamos a separarnos, me haces una masturbación y metes a tu boca mi pene y vas con prisa a saborear con esos ojos deseosos de lujuria y placer con suavidad y despacio hacia el paraíso infinito y eterno.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro