JungKook le miró y sonrió. Fue hacia él y le besó.

- ¿En serio quieres mirar casas?

- Sí. Has aguantado un día con mis padres, eso es que puedes aguantar cualquier cosa.

JungKook rio.

- Ojalá mis padres fueran como los tuyos.

- Nunca hablamos del tema de los padres. Siempre pensé que era un tema delicado…

- Bueno, en mi caso sí. Ellos aun no me hablan por ser homosexual.

TaeHyung le miró.

- En mi caso yo no esperé a conocer a la persona indicada, cuando lo supe, simplemente se lo dije a mi madre y ella me dijo que eso no podía ser, que era antinatural.

- Pero no lo es.

- Me dijo que estaba enfermo.

- JungKook…

- Se lo estuvo callando y me prohibió que se lo dijera a nadie. Me quitó el teléfono y sólo me dejaba conectarme a internet en su presencia para hacer los deberes… Durante un tiempo lo anulé, ¿sabes? Me dediqué a estudiar y sacar buenas notas y mi padre me solía alabar y presumía de mi ante mis amigos. Yo no volví a decirles nada a mis padres sobre el hecho de ser homosexual, sólo les dije que me quería mudar a Seúl cuando terminara los estudios para empezar la carrera y lo apoyaron. Conseguí una beca y, por mis buenos resultados, me la han ido aumentando, así conseguí éste piso. Creo que durante mi primer año estuvieron muy orgullosos de mi…

- ¿Qué pasó?

- Te conocí y yo estaba más que dispuesto a conseguirte- dijo JungKook- en aquella época la relación con mis padres era bastante buena. Ellos hacía video conferencia conmigo todas las semanas y, en verano, yo empecé a trabajar para ahorrar y tener mi propio colchón de dinero. Pero fue justo en ese verano cuando yo empecé a cuidar más de mi aspecto, quería verme bien para ti y mis padres notaron mi cambio. Mi madre solía decir que estaba muy fuerte y me pedía fotos para enseñárselas a sus amigas y presumir de mi. Imagina, me sentía tan feliz de que me dijera aquello- suspiró- yo le enviaba fotos mías con camisetas ajustadas y ella se las enseñaba a sus amigas y las hijas de sus amigas querían conocerme… el día que ella, muy emocionada, me escribió para decirme que había tantas chicas detrás de mi…

- ¿Se lo dijiste ahí?

- Sí. Yo tenía claro que te quería en mi vida, no tenía sentido esperar. Así que se lo dije a ella y a mi padre.

- No habrá sido bonito.

- No lo fue. Me dijeron que estaba despreciando mi vida y que así no iba a llegar a ningún lado.

- ¡Pero sí que lo has hecho! ¡Eres el mejor de tu clase! ¡Te dan beca todos los años! ¡Los profesores quieren recomendarte para que des clases!

- Y te tengo a ti.

- ¡Y me tienes a mi!- dijo TaeHyung.
Ambos se besaron y se abrazaron.
Pasó una semana y TaeHyung se hallaba frente al espejo, arreglándose, quería verse decente.

- ¿Me veo bien?- preguntó TaeHyung- ¿demasiado clásico? ¿Demasiado arreglado?

- Te ves demasiado perfecto.
TaeHyung le abrazó.

- Sólo me veo demasiado perfecto porque voy a tu lado.

JungKook rio y le dio un pequeño azote. Se tomaron de la mano y salieron, TaeHyung subió al coche junto a JungKook. Una vez que llegaron a la sede de la editorial, TaeHyung sintió que la boca se le secaba.

- ¿Agua?- preguntó JungKook, dándole una botella.

- Gracias.

TaeHyung bebió y salió del coche con JungKook. Allí ya estaba su agente. Se dirigieron a la tercera planta, la indicada en el mensaje que el señor Jung le había puesto en el mensaje, y esperaron en la salita de espera.

- Todo saldrá bien- dijo JungKook.

- Eso lo dices porque eres mi novio.

- Lo digo porque es verdad.

A las cinco en punto se abrió la puerta del despacho del señor Jung y una secretaria asomó por allí.

- ¿Kim TaeHyung?

- Soy yo.

- Pasen, el señor Jung les espera.

TaeHyung y JungKook entraron en despacho seguido del agente de TaeHyung y los tres tomaron asiento.

- ¡Me alegro de poder veros!- dijo el señor Jung dándoles la mano a los tres- bien, creo que lo mejor será explicar los términos del contrato.

El señor Jung contó los términos del contrato: TaeHyung recibiría el setenta por ciento de las ganancias totales, él tendría el derecho de sus obras pero la explotación de las mismas correspondería a la agencia, el contrato sería de tres años, revisables cada año. TaeHyung tendría derecho a correcciones y traductores, bajo pago, pero el marketing de las obras correspondería a la empresa.

Tras leerlo todo minuciosamente, TaeHyung firmó el contrato y le estrechó la mano al señor Jung.

- Bienvenido a la familia, Kim TaeHyung.

- Muchas gracias, señor. El honor es mío.

- Antes de que te vayas, me gustaría tratar algo…- dijo el señor Jung- sé que no has sacado a relucir en la prensa tu relación con JungKook, desde la empresa no va a importar que lo hagas. Imagino que quieres esperar por lo sucedido con el escándalo de citas hace poco, pero cuando lo hagas, simplemente cuenta con nuestro apoyo.

- Estamos pensando en hacerlo… pero no encontramos el momento adecuado.

- No hay un momento adecuado, TaeHyung, simplemente es un momento que tú elijas- dijo el señor Jung- ten presente que si lo escoges tú, siempre será mejor a si te pillan por ahí con JungKook e inventan sobre tu vida.

- Gracias, señor.

- De nada.

- En los próximos días lo haremos, pues.

- Celebro oír eso.