Ordenaba sus cosas cuando mercedes paso por en frente de su despacho, una idea paso por su mente. porque ¿no? Se dijo a si mismo. Era un buen momento, perfecto quizás, la invitaría a cenar y luego la llevaría a casa, en lo que no estaba seguro, era en si deberia de decirle lo que llevaba algunos días pensando, que días, ¡semanas! Agarro su bolso y salió trás ella.

-¡eh, mercedes!

Ella se detuvo, en cuanto lo vio sonrió, se veia tan lindo con esa camisa azul, perfecto mejor dicho, lo hacía ver formal, pero sin perder ese toque de galán que siempre lleva y que deseguro trae muerta a toda chica, así era Ruggero Pasquarelli, guapo, divertido, caballeroso (cuando quería), aplicado en su trabajo, en resumen perfecto, y la mejor parte, estaba enamorado de ella, debería de sentirse afortunada, y lo hacía, toda chica lo estaría si alguien como ruggero la escogiera por sobre las demás.

-¿que pasa?-. Dijo acercandose a paso lento.

-pues...queria saber si, te gustaría...

Fabián y Ángela pasaron por detrás lo bastante alejados para pasar desapercibidos, pero no para mercedes, que los vio sin dificultad.

-ahí están...-.lo interrumpió

Ruggero se quedo callado mirandola. Con lo mucho que le habia costado comenzar a hablar de ese tema, y ahora venia y le cortaba toda la inspiración.

-tenemos que ir a hablar con ellos, no me voy a quedar aquí de brazos cruzados sin saber cual fue la razón que los llevo a hacer lo que hicieron-. Se alejó, practicamente corriendo de él.

Ruggero suspiró agotado, quizás ahora no era el momento como pensó, pero es que ¡Demonios! En serio necesitaba hablar con ella...al diablo con Ángela y Fabián, ya tendrán tiempo para hablar con ellos. Lamentablemente mercedes no pensaba igual que él.

(. . .)

-¡chicos!-. La oyó decir

Ambos voltearon, evidentemente nerviosos. Pobres, ni que los fuera a golpear. Pensó sonriendo. Aunque viendolo de otra manera, si seria capaz de hacerlo, ¡COMO AMABA A ESA CHICA, DIOS!

-eh...hola...mercedes...-Ángela hiso un intento de sonrisa, que se le dio fatal.

-necesitamos hablar con ustedes-. Los ojos de ambos viajaron de mercedes a ruggero que se encontraba detrás. Este hiso un movimiento con la cabeza como respuesta.

-claro...pero creo que este no es buen sitio para hablar-. Agregó Fabián ya mas calmado.

-Vamos a esa habitación-. Señaló mercedes, apuntando con la cabeza a una pequeña sala de espera, que casualmente estaba libre.

Los cuatro se dirigieron hacia allá. Dos sofás adornaban la estancia, junto con cuatro lámparas, una en cada esquina del cuarto, varios cuadros colgaban de la pared, y la ventana daba una vista maravillosa de las recien salidas estrellas.

La situación se estaba volviendo incómoda y tensa, nadie hablaba, se miraban los unos a los otros, analizando lo que posiblemente podria venir a continuación. Solo una persona estaba distraída, absorta de todo lo que sucedía a su alrededor. Su distracción era una hermosa joven que estaba sentada a su lado, con sus manos apoyadas en su regaso, y mirando fijamente hacia un punto muerto en la habitación.

-chicos queremos saber cuál fue su razón para involucrarse en esto, queremos escuchar su versión, no podemos juzgar sin conocer-. Comentó mercedes después de salir de su trance.

-pues la verdad, es bastante simple de explicar, pero difícil de afrontar...-comenzó Fabián.

-nuestra familia, nos amenazó con lastimar a nuestra familia, que podiamos hacer, era eso o verlos sufrir...-. La voz de ángela comenzaba a ser irregular-...no saben lo asustada que me puso cuando lastimaron a mis padres y a mi hermana por decirles que no los ayudaría, no quería que les hiciesen daño, tuve que aceptar-. Fabián coloco una mano en su rodilla, dandole su apoyo.

-no nos dieron elección, mechi. Tu me conoces desde hace un tiempo, no haría algo así a no ser que de verdad estuviese desesperado, o mejor dicho asustado-. Fabián entrelazo sus manos, suspirando continuó-. Provocaron un accidente automovilístico, como advertencia por haberme negado, los muy hijos de puta, chocaron el auto en donde iba mi madre con mi tía y su hija de 5 meses, la bebé estuvo a punto de morir, no sabes lo angustiados que estaban todos por ella, me sentí tan culpable, que no vi otra opción que aceptar...gracias a Dios no hicieron tanto daño como tenian planeado, no saben lo de cosas que tenian planeado para lastimar al que se le cruzara por el camino, tuvieron suerte de salir con vida, principalmente tú mercedes, tenian planeado matarte cuando abrieran esa caja, y no por tener algún motivo, solo les dio la puta gana de asesinarte...-. Todos se quedaron en silencio mirando hacia el suelo, leves sollozos se escapaban de la boca de Ángela, que estaba al borde de un ataque de llanto.

-lo entiendo no se preocupen, yo en su lugar haría lo mismo, estaban presionados y no sabian que hacer, lo más lógico era aceptar, no había otra opción para ustedes-. Mercedes los miró comprensivamente, dedicándole a Ángela una sonrisa tranquilizadora.

-concuerdo con mechi, también haría lo mismo, y no se preocupen por nuestro jefe, mercedes y yo nos encargaremos de que no les pase nada y todo esto quede en el pasado.

-gracias, de verdad, me voy a ir muy triste de aquí, fue un placer conocerlos-. Comentó Ángela limpiandose los ojos con su manga.

-yo igual, ojalá podamos vernos algún día, y charlar sobre cosa más agradables-. Sonrió Fabián.

Mercedes se levantó del asiento y fue a abrazar a Ángela, quien al sentir el contacto de ella, se largó a llorar en su hombro, mercedes solo logró acariciarle la cabellera.

Luego de estar abrazadas un rato, mechi se dirigió hacia fabián, quién le sonreía abiertamente.

-te voy a extrañar, tontito-. Le dijo abrazandolo.

-yo también, hermosa, gracias por todo-. Sonrió dandole un beso en la mejilla.

Ruggero lo miró con furia, descuartizandolo con la mirada. Que se creía para tratarla así, él llegó primero, bueno técnicamente no, pero...

-¡ya hombre! Si no pienso quitartela, ya se que es tuya, no hace falta que me asesines.

Fabián rió al ver como la expresión de ruggero pasaba de rabia a vergüeza absoluta. Ángela también sonrió, sabia lo mucho que la quería, ojalá algún día se anime a declararse como es debido, harían una pareja fenomenal.

(. . .)
Después de despedirse de los chicos, mercedes accedió a que ruggero la acompañara hasta casa, rieron, bromearon y se pelearon por cualquier tontería, parecían, a simple vista, unos adolecentes enamorados, y no estaban muy lejos de serlo.

Cuando al fin llegaron a la puerta de la casa de mercedes, ruggero la detuvo, agarrandola de un brazo, si no pudo ser hoy, tendrá que ser mañana.

-Mercedes, me preguntaba si...te gustaria ir a cenar conmigo por la tarde...si estás muy ocupada, lo entenderé, podrá ser otro día, no hay apuro-. Aunque en realidad si lo hay, estoy impaciente por salir contigo y decirte todo. Pensó.

-Claro, no hay problema, mañana por la tarde entonces...¿a qué hora?

-paso por ti a las ocho ¿te parece?

-me parece perfecto, nos vemos-. Le dio un beso en la mejilla y entró en su casa.

Genial ahora no iba a poder dormir pensando en ella, y en su salida de mañana, aunque diciendo la verdad, desde hace semanas que le viene robando el sueño, y si no es así, siempre es la protagonista de ellos.

Camino con una sonrisa boba hasta su casa, ni despierto lo dejaba tranquilo, esto de estar enamorado es una tortura como también es lo mejor que te puede pasar.

Después de ducharse, y comer algo, se acostó en su cama y agarro su celular, buscó en sus contactos hasta hayar lo que buscaba

Mechi ❤

Desde que se dio cuenta de lo que sentia por ella, no pudo evitar cambiar el nombre por el cual la tenia. Antes era un simple:

Mercedes.

Y hasta en un momento, cuando de verdad lo sacaba de quisio (aún lo sigue haciendo, con la diferencia de que ahora le parece, lindo, divertido y hasta le gusta) llegó a ser:

Mercedes
Esa chica cuando se lo propone es insoportable, pero a pesar de ser insoportable, enojona y muchas veces cabezota, tambien es tierna, dulce, buena persona, responsable, trabajadora, hermosa como ninguna, y una infinidad de cosas más, que necesitaría toda la vida para enumerarlas.

-de verdad parezco un adolecente-.Susurró sonriendo, ella lo hacia sentir asi, como un niño con su primer amor, y lo más divertido de todo...no le importaba en absoluto.

Dulce sueños, mechi, descansa , te quiero ❤

Antes que todo les quería preguntar si se ven las caritas o corazones que coloque???

Bueno ahora si, espero que les haya gustado, llevaba siglos sin actualizar, lo sé pero hoy me vino la inspiración, y no la iba a desaprovechar. En el prox. Cap habrá cita #ruggechi siiiii...
Bueno comenten y voten si les gusto este capitulo. Bye
Pd:diganme que vieron el teaser de #TiniElGranCambioDeVioletta...