Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 17

VIOLETA

No se que tenía ese té pero me hizo dormir como un bebé, sin problemas ni preocupaciones, sin embargo mi dilema emocional empezó cuando llegó el día siguiente, los padres de Seth me consiguieron un uniforme nuevo y entallado, por primera vez renegué al momento de usarlo, hasta ayer creía que era agradable usarlo pero ahora siento que hasta me da comezón al momento de usarlo.

Me miré al espejo, me veo como siempre pero no me siento como mis días anteriores, algo ha cambiado y creo que todos lo han notado.

— Cielo, ¿Puedo pasar? — Oigo a la madre de Seth hablarme desde el otro lado de la puerta —

— Si... — Respondí —

Ella entró con una sonrisa cálida y hermosa, trae un vestido rojo que se apega perfectamente a su silueta de mujer, su cabello castaño parece recién salido de un salón de belleza lo cual me sorprende ya que eso solo había antes, actualmente no existe, además está bien maquillada, algo natural pero sobresaliente, lo que más destaca de esto es lo rojo de sus labios perfectos los cuales le dan un toque hermoso a esa sonrisa angelical que siempre trae consigo, como dije alguna vez, ella parece recién salida de una agencia de modelos, si es que hubiera una, ella sería la mejor estoy segura.

Sus ojos verdes se centraron en como me veía, con el uniforme parezco una pelusa a su lado.

Aunque siendo sincera, así me pusiese lo mejor que tengo me vería como una pelusa al lado de semejante mujer.

Sin embargo, ella asiente con una sonrisa, aprobando de cierta manera como me veía.

— No sé quien sea el diseñador de esos uniformes pero definitivamente andaba ebrio cuando los hizo — Suspira, eso tiene mucho sentido al ver lo horrible que es — Ven cariño, te ataré el cabello para que bajes a desayunar antes de irte a la escuela.

— Gracias — Me senté en una silla, la señora Mónica tomó el peine y empezó a pasarlo por mi negra cabellera — ¿Enserio creen que es una buena idea ir hoy?.

— No queremos que te retrases en tu educación solo por una bola de gente descerebrada, tienes que siempre anhelar saber más y nadie va a quitarte ese derecho — Sigue con esa sonrisa, aunque se ve ligeramente molesta — No te preocupes, mis hijos te protegerán de cualquier disturbio, solo no te alejes de ellos.

Asentí con una sonrisa, no sé porque estoy recibiendo tanto apoyo de ellos si ni siquiera nos conocemos realmente, aunque agradezco todo esto, no se que sería de mi sin todo lo que hacen por mi.

En eso una duda viene a mi de golpe, algo que me viene rondando en la cabeza desde que hablé con Seth en la biblioteca, quizá la señora Mónica tenga alguna respuesta.

— Disculpe, ¿Usted me conoce?.

— Por supuesto, tontita — Suelta una risita — Eres Violeta, una chica que vive cerca de nuestro hogar.

— No, me refiero a si me conoce de antes, mucho antes de que vinieran aquí.

Noté claramente como su sonrisa se desvaneció de repente a través del espejo, me miró sorprendida y eso segundos después se tornó en enojo y lo peor es que empezó a sujetar mi cabello con más fuerza, algo de alertó cada parte de mi ser.

¡Alerta!.

— Seth y Mía mencionaron algo referente a que me conocían y me dio curiosidad — Murmuré asustada ante su mirada asesina — Yo no los conozco.

— Oh... — Soltó mi cabello, se ve apenada — Lo lamento linda, no quería hacerte eso, pero algo que si te voy a sugerir es que dejes ese tema de lado, ¿Entendido?.

Naturalmente puedo negarme a hacerlo pero su intensa mirada me consumió por completo.

— Si, lamento si causé alguna incomodidad.

— No es nada, sigamos que ya se hace tarde.

Otra mentira para agregar a mi lista, últimamente estoy llena de ellas pero creo que se con certeza de que no será la última que haga, o por lo menos no con ellos cerca y mucho peor si es que vuelven a sacar cualquier tema referido a esto.

¿Cómo es posible que me conozcan?, si supuestamente ellos estaban viajando por todo el desértico planeta.

— Listo, te ves hermosísima cariño — Sonríe viéndome — Cuanto desearía poder vestirte yo misma, ese uniforme es un desastre andante.

— Si, de hecho, a comparación de lo usted y Mía usan, todo mi closet es un desastre andante.

— Cuando tengamos tiempo te haré un cambio de look, después de toda este alboroto seguro te ayudará a tener un mejor animo — Sonríe mirándome — Ah casi me olvidaba, aquel muchacho llorón del tenedor está bien, mi esposo fue a ver su estado y dice que se recuperará rápido.

Eso es un gran alivio, saber que esta bien me calma un poco, si hubiese muerto estoy segura que todo estuviera mucho peor que ahora. Me levanté de mi asiento y tomé mi mochila, la cual mis padres habían dejando ayer con mis cosas para este día.

Bajé ya cambiada con la mamá de Seth siguiéndome por detrás, al entrar en la cocina encontré a todos comiendo pero apenas notaron mi presencia todas las miradas fueron hacia mi, saludé con educación y con vergüenza, ni sé que cara poner en este momento.

Tomé asiento en medio del padre de esta casa y Mía, lo malo de esto es que tengo a Seth enfrente quien no sé si está feliz de verme esta mañana o quiere que me desvanezca, algunas de sus miradas son muy difíciles de descifrar, sin embargo solo me miró un minuto y luego siguió concentrándose en su comida.

— ¿Cómo te sientes Violeta? — Menciona el padre de Seth, el señor Henry — ¿Dormiste bien?.

— Si, mucho mejor de lo que esperaba, gracias por lo de ese té, me ayudó a conciliar el sueño mejor de lo que pensé.

— No es nada, siempre es bueno ayudar — Sonríe ampliamente — Ahora come bien, lo vas a necesitar — Suspiré pesadamente, hoy será un día cansado — No te preocupes, mis hijos te cuidarán, además de que hace poco fui a hablar con los dirigentes, estás a salvo.

Asentí tratando de disimular mi asombro, mi mente tiene miles de preguntas pero decidí quedarme callada. Enfrente de mi se encontraba un jugo de frutas, tostadas y mermelada, comí unas cuantas y bebí todo el jugo el cual está exquisito.

¿Cómo es que todo lo que hacen siempre es así de perfecto?.

No voy a cuestionarlo ahora, tengo hambre y necesitaré las energías para enfrentar a todo el colegio hoy.

Una vez acabamos, todos nos fuimos a la escuela, pude sentir la mirada de casi todos los que nos encontramos en el camino, nadie parece estar feliz conmigo, pero aún así seguimos caminando hasta llegar a la gran institución de color verde claro, bien cuidado, con muros de concreto y estatuas del mismo material, todo de los fundadores.

— Vi, quédate a nuestro lado — Dice Caleb, tomando una postura más firme, pero de cerca puedo ver sus manos temblar — Veo muchos rostros enojados, no sabemos si se volverán salvajes.

— ¿Creen que traten de hacerme algo? — Mencioné viendo a los alrededores, nadie parece estar feliz de verme — Ellos son solo...

— Gente influenciable y fácil de manipular — Aumenta Seth, yo iba a decir que solo son adolescentes — Solo no confíes en nadie, ni en tus antiguos amigos.

— Seth, no exageres — Se enoja Mía — Pero no te confíes Vi, no sabemos si quizá cambiaron.

Mis amigos jamás harían eso, ellos saben como soy y además estuvieron cuando todo pasó, me defendieron, pero aún así no debo subestimar el poder de los padres sobre sus hijos, en esa parte Seth tiene razón.

Ante las personas que amamos somos completamente manipulables.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro