- Celebremos al próximo Rey muñeca -dijo Nayara hacia la "población" de esa tribu cuyo nombre se me olvidó. Alzó sus manos al cielo y las demás hicieron lo mismo.

Las bien hijas de puta lograron amarrarme mientras dormía y como era de día, no tuvieron problema en cargarme en modo muñeca hasta el puto mueble.

- ¿Me pueden desamarrar? -negaron.

- Vos mataste a dos de las nuestras, tenés que pagar las consecuencias -contestó Agustina, yo rodé los ojos.

- Si dejaran de ser tan perras y acosadoras, tal vez sea más amoroso... ¿qué pasaría si no hubiera matado a Débora...?

- Serías una muñeca más de la tribu, ahora, estás obligado ser nuestro Rey o te sacrificamos a los dioses -aclaró mi duda Fernanda, la primera muñeca de porcelana negra que he visto en mi puta vida.

- En los dos casos sería una mierda, algún día me aburriré en la noche y las romperé a todas.

- Podemos reconstruirnos.

- ¿Qué?

- Los pedazos rotos pueden unirse con pegamento. Revivir a alguien de la tribu Rehab Doll es fácil, el problema es que después de la muerte éstas ya no razonan más y son esclavas nuestras -las señaló, eran muchas-, Kirk cree que bastantes han muerto y es mentira, reviven no obstante él no las puede ver.

- Puto Kirk... -suspiré, aburrido.

Y hablando del Rey de Roma... él ha entrado a la habitación y todas las muñecas vivas se hicieron las muertas y las que supuestamente revivieron, lograron esconderse a tiempo.

Joder...

- ¿Cómo llegaste hasta arriba de nuevo? ¿Y por qué estás amarrado?

- Ni un puto beso de buenos días me das, marica -bufé-. Joder, éstas perras me secuestraron mientras dormía.

- Oh... ¿buenos días?

Azoté mi cara contra la madera de la repisa -que al parecer, fue reconstruida hoy en la mañana-.

- Sálvame, negro, sálvame.

- ¿Qué quieres que haga?

- Llévame a un lugar en donde las muñecas no puedan violarme, plz.

- Ok -sonrió.

De un cajón del estante, sacó lo que parecía ser un bikini en miniatura, justo de mi talla...

Me desamarró para luego levantarme el vestido y...

- ¡¡AHHH DEGENERADO, SUÉLTAMEEEE!! -grité de forma marica.

- Cállate, joder, la idea era que nadie supiera que eres una muñeca.

- ¡¡SI, SI, SI!! ¡¡PERO NO ME DESVISTAS, COCHINO!!

- Te voy a poner un bikini, no seas marica, ya, quédate quieto.

Empecé a revolcarme.

- Quieto, coño, que no puedo...

- ¡¡ESE BIKINI NO COMBINA CON MI COLOR DE PIEL!!

- Ah, ya, ya... muñequita macho experta en moda, ¿cuál te pongo entonces?

Del mismo cajón sacó un traje de baño rosaito' y otro celestito.

- El rosa me queda divino.

Hizo un facepalm.

Volvió a levantarme el vestido y seguí chillando.

- Ya, cállate, que me vas a dejar sordo.

- Cochino, ordinario, roto, picante -crucé los brazos.

- Joder, si te visto con el traje de baño estando de ojos cerrados me vas a dejar ponértelo.

- Uyy, picarón, pa' eso otro invítame a cenar primero y ahí veo -le guiñé el ojo.

- ¡¡AHHH EL TRAJE DE BAÑO, LO OTRO NO!!

A ojos medios cerrados me desnudó hasta ponerme el traje de baño, abrí los ojos y yo le vi completamente desnudo.

- OMAIGÁÁH -me tapé los ojitos- ¡¡COCHINOOON!!

- AHHHHH -gritó igual de marica que yo- ¡QUIÉN TE MANDA A MIRAR! ¡MIRA PA' OTRO LADO!

Esperé a que se pusiera un traje de baño.

- ¿Y por qué tú puedes ponerte ropa de hombre y yo soy el transvestido acá?

- No tengo más ropa de muñeca de verano, yo tengo más dignidad que tú, aparte... es verdad, si no fuera por el puto bulto que se te ve, juro que te ves divino de rosaito.

Hice un facepalm.

- Bueno, llévame fuera de acá durante todo el día, ¿sí?

- Ok...

Sacó del cajón un par de flotadores en miniatura y un barquito de madera.

- ¿Y eso?

- Para que juegues en la piscina -sonrió de forma muy afeminada, más que yo.

- ¿P-piscina?

- Sí, ahí no pueden llegar las muñecas porque se ahogan, en cambio, si te dejo navegando, nadie te hará daño.

- Ya, puto, llévame a alta mar. Por cierto... ¿qué hora es?

- Las cuatro de la tarde.

- ¿Qué? ¡Pero si acababa de despertar!

Oh, claro, seguro debe ser lo que pensé anoche... el tiempo siendo muñeca pasa mucho más rápido, ya entiendo.

- No sé cuánto habrás dormido, pero vamos, no quiero que de la nada las muñecas esas se levanten y quieran violarte, porque juro que como vea otra muñeca en vida, me cago entero.

No hacía tanto calor la verdad, era un día perfecto para estar aquí.

- ¿Prefieres nadar o navegar primero?

- Nadar, puto, que quiero estrenar mi trajecito varonil.

Me puso el flotador y con delicadeza me dejó sobre el agua, muy cerca de la orilla.

- AHHHH ESTÁ HELADA WEONAAA.

- Obvio, recién la llenamos y...

- Kirk, ¿con quién hablas? -era James que se acercaba a la piscina, mierda.

Me tumbé boca abajo sobre el agua, flotando pero sin revelar mi rostro, dejando a la vista mi enorme culo de porcelana.

- Ehh... -hizo como que sostenía un teléfono en la mano y seguía hablando- Más tarde te llamo, linda... -le miró- Con mi novia.

- ¿Ah?

- ¿Algún problema?

- ¿Te vienes a bañar en la piscina con tus muñecas?

- Es que son como mis bebés, me encanta mimarlas mucho -forzó una risa-. ¿Podrías dejarme a solas con ésta con ratito?

- Ah... ¿bueno?

James se fue y Kirk me tiró del cabello.

- AYY QUE DUELE SUÉLTAME MARICÓN.

- Ok.

Me soltó y caí de cara al agua en un piquero P-E-R- F-E-C-T-O.

Como una modelo.

- No hay moros en la costa, puedes nadar tranquilo.

Él dio un chapusón y por poco hace un puto tsunami.

-AHHHHHHH -grité a su vez que me entraba agua por todas partes.

- Ups, disculpa.

Mantuvimos una muy agradable charla a su vez que yo nadaba como sirenita por el agua, ya cuando me aburrí, Kirk me subió al barco para ponerme a flotar. Fue muy gentil en llevarme comida, mi estómago rugía como oso mutante ya.

Con una simple cerecita pequeña ya quedé más que rellenito y satisfecho.

Nueve de la noche y caí de culo al fondo de las piscina... desnudo.

- AHHH PUTA MADRE -chillé escupiendo agua.

- AHHH COCHINO, TÁPATEEE.

- CÁLLATE NEGRO, TÚ NO QUISISTE TRAERME OTRA ROPA.

Así como Dios me trajo al mundo, soportando los regaños de la vecina, esa viejita que me lanzó hasta un bastón para que me tapara, corrí sintiendo como la fría brisa nocturna acariciaba mi culo humano de carne y hueso.

- ¿Lars? -Cliff me quedó mirando raro- ¿Qué haces desnudo corriendo por la casa?

- ¡BUSCO MI ROPA AHHHH!

Me puse lo primero que pillé de ropa y fui a la cocina a robar comida,lo toda la que encontré, la devoré en menos de un segundo.

Tomé mucho café para mantenerme despierto y no estar desprevenido en la noche modo humano, poder huir mientras soy muñeca y que Kirk me resguarde, yo duerma durante todo el día y ahí repetir proceso hasta ser humano de nuevo.

Fácil.

- Lars...

La horda de muñecas, otra vez NOOOO.

Putas zombies, fueraaa.

Todas las que encontré las tiré por la venta, así tipo YOLO.

Ya, ahora, a estar despierto toda la noche.

Sentí mi cuerpo pesado, como si quisiera dormir y no pudiera.

No, debo estar despierto.

Toda

La.

Puta.

Noche.

Y...

ZZzzzzZzzZzz.