<<<<<<Wendy>>>>>>>>>>>>>

Londres 1909

-¡Me harás mucha falta Wendy!

- ¡Voy a extrañarte mucho Sara! Me escribirás para contármelo todo ¿cierto? Me muero por saber cómo será tu nueva vida.

-Desde luego que les escribiremos si ustedes chicos prometen hacer lo mismo. Además, prometiste enviarme tu primer libro de cuentos cuando este publicado. Me muero por leerlo cuando esté listo ¡además lo quiero autografiado y con dedicatoria!

Mi mejor amiga en todo el mundo estaba a punto de mudarse a Edimburgo. Ella y su hermano mayor Edmond habían sido nuestros vecinos y amigos durante el último año y medio, en muchos aspectos de no ser por su amor, su apoyo y sus ocurrencias mis hermanos y yo no habríamos podido sobreponernos a la perdida de nuestros padres a causa de ese terrible incendio que destruyo nuestro hogar tanto física como emocionalmente y la posterior mudanza a casa de nuestra tía Abuela Millicent

Sara tenía mi edad e íbamos al mismo colegio, es una chica muy ocurrente con un gran sentido del humor, también es mi confidente y consejera, además de ser la fan número 1 (aparte de mis hermanos) de los cuentos e historia que me inventó para entretenerlos. Su hermano Edmon es 2 años mayor. Es muy alto y grande, algo intimidante al principio, pero cuando lo conoces vez que tiene un gran corazón, es como un gigante bondadoso que siempre está dispuesto a ayudar a los demás. Mis hermanos John y Michel desde el primer día que lo vieron lo siguieron como perritos falderos, él es su héroe en muchos aspectos. Edmon les enseño a pescar, acampar, trabajar la madera y hasta boxear, de hecho, trato también de enseñarme a mí pero obvio no soy buena.

Ahora todo eso se iba a acabar, se marchan muy lejos. Mis hermanos y yo nos hicimos el firme propósito de despedirlos con una gran sonrisa, aunque por dentro los tres nos caíamos a pedazos. Edmon, Jonh y Michael están en otro rincón de la casa despidiéndose también (cosas de hombres supongo). Le agradezco tanto a Edmon haber guiado a mis hermanos y ser tan buena influencia para ellos, es difícil para ellos tener ninguna influencia masculina positiva en su vida al no estar papá con nosotros. Al terminar de hablar con mis hermanos Edmon volteo a verme y me hizo una seña para que nos fuéramos a hablar a solas.

Estaba muy nervioso, se tocaba la nuca una y otra vez y humedecía sus labios sin parar. Al fin después de unos minutos por fin pudo hablar, usó una voz muy fuerte, de hecho, casi estaba gritando.

-Wendy, crees que sería posible que tú y yo...que tu y yo... ¿Podemos tener una correspondencia privada a parte de la que tendremos los cinco?

-¡Por supuesto que si Edmond! ¡Me encantará seguir conversado contigo! Después de todo eres mi mejor amigo también.

-¿Amigo?...ah...si, tu mejor amigo- bajó la cabeza y comenzó a patear ligeramente el suelo. Pobre Edmon estaba realmente triste por nuestra separación, siempre tan amable y atento conmigo, lo tomé de las manos y luego le di un gran abrazo que el también respondió.

-Estoy ansiosa por recibir tu primera carta y que me cuentes todo sobre ti, además sé que si sigues practicando pronto llegaras a ser campeón

-También cuídate mucho Wendy, eres una persona demasiado amable y me preocupa que la gente abuse de esa amabilidad, así que sigue practicando los golpes que te enseñe, no dejes que John flojeé con el entrenamiento ni que Michael baje de calificaciones en la escuela- Los dos reímos y regresamos hasta donde estaban nuestros hermanos, los tres tenían una mirada de decepción en sus rostros.

-¡Hay hermanita!-Me dijo John en voz baja-Tu sabes que te amo, pero eres muy despistada-No entendí de que estaba hablando

Unas lágrimas comenzaron a rodar por mis mejillas sin darme cuenta y me trajeron de nuevo al presente a bordo del Jolly Roger. Estaba organizando mis pertenecías en mi nueva habitación (que era la misma de la primera vez) cuando de pronto ese recuerdo sobre Londres, mis amigos y mis hermanos asalto mi corazón con fuerza, me limpie las lágrimas con el dorso de la mano y agradecí que nadie se diera cuenta de este arrebato emocional.

Tarde unos minutos en reponerme del todo y hacer cuenta de la posición en la que me encontraba ¡Nuevamente estaba encerrada! Smee me había traído a mi habitación y me dijo que me tenía que encerrar hasta que el Capitán diera alguna instrucción ¡¿Y si quiero ir al baño?! Obviamente que no pensaron en eso. La habitación está limpia, hay un espejo, una cama nueva, una cómoda en la esquina en lugar de los costales de papas que había antes y la venta ya se puede abrir, en suma, es una habitación agradable, el problema es que estoy encerrada otra vez, no importa donde este, parece que siempre voy a ser prisionera de Garfio ya sea por mi seguridad o por su capricho. ¡Esto de ser la princesa encerrada en la torre me tiene harta!

La primera vez que estuve en Nunca Jamás también era prisionera solo que no había dado cuenta. Desde el momento en que llegue a la guarida de los niños perdidos se me dio la tarea ser la madre de una docena de niños salvajes, a la gran mayoría les urgía un poco de amor y compresión (y un baño). No me dejaban salir a divertirme con ellos, ni con los indios, ni con las hadas, solo querían que estuviera en casa encerrada contándoles cuentos. ¡Estúpido Peter Pan! a veces, quisiera no haberlo conocido en absoluto.

Mis mejillas se sonrojaron al recordarlo, por dios estaba tan enamorada de él cuando era niña, hacía años que no pensaba tan detenidamente en él, en sus ojos verdes, su cabello rubio revuelto, su risa, su traje hecho de hojas y ese espíritu tan salvaje y caótico que me encantaba y me saca de quicio al mismo tiempo.

Él había sido mi primer amor y también mi primer desamor, era un amor condenado al fracaso, después de todo él es niño que nunca crece, no se puede tener una relación con alguien que se niega a crecer...un momento... ¿eso quiere decir que sigue siendo un niño todavía? Recordé mi conversación con James, digo Garfio, él tampoco ha crecido o envejecido o lo que sea que deba ocurrir. Yo cambie, pero ellos no y sin embargo todo es tan diferente ahora. ¡Hay dios que confuso es todo esto!

Cerré los ojos y me tiré a la cama abrazando una almohada. Al cerrarlos lo primero que vi fue a James, dándome esa hermosa sonrisa que me regalo horas antes. Ese pensamiento me hizo suspirar y abrazar más fuerte mi almohada. Está claro que el único interés que tiene en mi es que quiere que le diga cómo es que llegue a Nunca Jamás y que lo ayude a encontrar a Peter, no me quiere para nada más, le sobra el dinero y le sobran mujeres. Además, tiene mal genio y saca su espada o su garfio para todo, no es seguro estar a su lado y sin embargo mientras elegía mi atuendo esta mañana solo podía pensar en si a él le iba a gustar o no... ¡Que estúpida soy! ¡No debe de interesarme un hombre como él! es muy peligroso y me aterra que me vaya a sacar las tripas un día que este de mal humor, pero...aun así él es tan...y se ve tan... ¡ahhh! ¿Qué rayos pasa conmigo?

Mis pensamientos y berrinches fueron interrumpidos por alguien que llamaba a la puerta, era Smee, pidió permiso para abrir la puerta y me pidió que lo acompañara al camarote del capitán, quería hablar conmigo. Ciertamente no era muy buen momento para verlo cara a cara, sobre todo después de lo que estuve pensado los últimos minutos, pero tampoco me podía negar, así que lo seguí.

<<<<<<<Garfio>>>>>>>>>>>>>

Por fin abordo en mi barco y en mi camarote a donde pertenezco. Toda la mañana había sido un total suplicio, pero ya vamos en marcha a nuestro destino y una vez ahí las cosas serán diferentes (eso espero). Aun hay detalles que arreglar como la indisciplina de Jackson y el asunto de la seguridad y las ocupaciones de Wendy dentro del barco, pero eso se puede arreglar fácilmente. Aunque el escote que traía el día de hoy puede llegar a ser una situación difícil, en tierra no hay ningún problema muchas mujeres llevan ese tipo de ropa y hasta más reveladora, pero en alta mar rodeada de tantos hombres, es como poner una bandeja con comida frente a un perro hambriento. Además, estaba el problema de su aspecto, ahora resalta mucho, el primer día que subió aquí parecía una mujer común y corriente, ahora se ve...diferente, y eso nuevamente me pone en problemas a mí y a ella.

Antes de hoy, pensé que podía tenerla en mi camarote la mayor parte del tiempo, bajo mi vigilancia, tal vez copiando mapas ya que parece ser buena en ello y hace falta actualizar algunos de ellos. Pero al estar con ella toda la mañana paseando en la plaza del faro, ahora dudo poder estar más de una hora a su lado en la misma habitación sin intentar hacerle algo. Todo en ella es tan tentador, como se ve, como se mueve y ese maldito olor a rosas con romero es demasiado para soportarlo. ¡Estoy jodido!

Smee toco la puerta, venia con Wendy. Por más que quisiera posponer esta reunión con ella era un asunto que no podía esperar hasta mañana.

Smee se retiró rápido porque la cena para los marinos seria en menos de una hora y los horarios de comida y descanso son estrictos en el mar, Wendy tomó asiento al otro lado de la mesa, su cabello estaba un poco alborotado y sus ojos algo rojos, tal vez estaba dormida.

-Toma, esto es tuyo ahora -le deslice la llave de su habitación sobre la mesa -Por más que quisiera tenerte encerrada como un canario para que no se meta en problemas creo que lo mejor es que usted también sea responsable de su propia seguridad. Hay solo 2 llaves, una la tienes tú y otra la tendré yo solo para emergencias, claro. No se preocupe no entrare a su habitación si su permiso.

Wendy estaba extrañada viendo la llave, parecía que era la primera vez que veía una en toda su vida- ¿algún problema señorita Darling?

-No ninguno, es solo que me alegra y me sorprende que me haga responsable de mi propia libertad.

- Como le dije la última vez que nos vimos, aquí en mi oficina con el incidente de los mapas. Nunca Jamás es muy grande y la mayoría es de ella está cubierta de agua, es casi imposible llegar a algún sitio sin un barco aun conociendo los mapas de memoria. Así que no veo caso el tenerla encerrada.

-Muchas gracias, James, digo Capitán- sus ojos chispearon al decirlo y comenzó a juguetear con la llave entre sus dedos. Me encantaba la idea de que me llamara por mi nombre, pero no me parece prudente tener esa confianza entre nosotros.

-Ahora bien, la otra cuestión es ¿qué voy a hacer contigo?

-¿Hacer conmigo?- sus ojos se abrieron como platos y dejo caer la llave

-No me malentiendas, quiero decir ¿En qué te voy a ocupar? ¿Qué vas a hacer? -si supieras lo que quiero hacer contigo y sobre todo con esa boquita de color durazno...

- Bueno, ya que lo pregunta, lo he estado pensado en estos días y sobre todo las últimas horas, quiero aprender a navegar.-Esa respuesta no me la esperaba

-Estoy cansada de ser la damisela en desgracia que tiene que depender de todos para salir adelante ¿Me entiende? Quiero la posibilidad de poder moverme por mi cuenta.

Un silencio incomodo se formo entre ambos. Su petición no era del todo descabellada, pero me preocupaba si esa era la verdadera razón por lo que quería aprender a navegar. Tal vez después de todo si quería escapar, tomar control de mi barco y escapar lejos de mí. Un sinfín de escenarios alocados comenzaron a desfilar por mi cabeza, era obvio que ningún de ellos era factible a ocurrir. Así que decidí jugar las cartas a mi favor para tener más o menos cubierto cualquier posible escenario.

-Me parece justo, yo mismo le enseñare a navegar si eso es lo que desea, después de todo y modestia aparte soy un excelente navegante, pero a cambio le pediré dos cosas Señorita Darling: La primera es que no escapará y seguirá todas mis órdenes mientras este bajo mi custodia y la segunda es que a partir de ahora deberá ser totalmente sincera conmigo y ya sabe a lo que me refiero. Sé que nos mintió a mí y Jackson la primera vez que nos reencontramos, desconozco sus motivos para haberlo hecho y sinceramente tampoco me importan, pero de ahora en adelante quiero la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad ¿trato?-extendí la mano en señal fraterna, pero ella comenzó a fruncir el ceño y hacer un puchero con la boca.

-¡No es justo! si tu pides dos condiciones, entonces yo también quiero algo más. Quiero que también me enseñes a pelear con la espada- El breve recuerdo de la Wendy homicida con un puñal en la mano pasó por mi mente ¿será que ella podría llegar a matarme? Ciertamente es una posibilidad, pero esa posibilidad siempre está presente en mi vida y para ser justos es probable que aun si lo intenta no tenga éxito.

-Está bien; obediencia y sinceridad a cambio de aprender a navegar y a luchar con la espada ¿tenemos un trato? -esta vez me pare junto a ella y extendími mano para que ambos las estrecháramos, ella se puso de pie y acepto estrechándola también. Nos quedamos mirándonos un rato a los ojos mientras aun sosteníamos nuestras manos, un breve escalofrío recorrió mi espina, como si se tratara de un mal presentimiento sobre este trato que acabamos de hacer.

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^_^ Por fin ya ha iniciado el viaje . Y nuestros dos chicos estarán juntos por 2 semanas. Noche y día. Les guste o no.
😏😏😏

¿Pasará algo entre ellos? ❤️‍🔥
¿O por el contrario los malos presentimientos de Garfio se harán realidad? 🔪

Nos vemos el martes.

👋Psss psss. Estamos haciendo algunos bocetos generales ya que hay la posibilidad de hacer un web cómic de esta historia. Si la idea te gusta y quieres apoyarla puedes dejarnos tus ideas, comentarios y donaciones en mi Instagram, Facebook o patrocinarme en ko-fi