El barco grande Azul se había alejado un poco de la costa, donde tenia una importante misión, llevar obsequios de parte del rey a todos los reinos cercanos, ya que era una costumbre de agradecimiento, por haber asistido a la fiesta real de su hijo.

El rey lobo, era muy imponente y quería que todo se hiciera a sus deseos, habían despedido a sus visitas y el príncipe Hoseok, beso su mano en forma de agradecimiento por verlo aceptado como su futuro llerno...

-Su majestad, es para mi un honor haberme aceptado, como su futuro llerno, me da tristeza no haber podido ver a mi futuro rey, es una lástima que no estuviera presente en la cena real...

-Esta un poco indispuesto, tu sabes como son los lobos difíciles, no me agrada mucho la idea que mi hijo sea anormal, pero todo sea porque sea el próximo rey de mi imperio, la manada estará muy feliz de tomar pronto a su líder y ese serás tu príncipe Hoseok, ya que eres un Beta y sabrás como manejar el liderazgo...

-No le fallare rey, estoy seguro que seremos muy felices, sabe que me estoy enamorando como un loco de su hijo Omega, aun no huelo su esencia, pero tan solo con verlo me atrae demasiado...

-Entonces no se hable más, solo concluimos la fecha exacta de la boda...

-Así será, mañana vendré a visitar a su hijo, si no tiene ningún inconveniente...

-Por supuesto que no y donde piensas quedarte...

-Mis padres regresarán a su reino y volverán el día de la boda, yo me quedaré en una posada qué esta cercas de aquí...

-Por supuesto que no, jamás permitiría qué el futuro esposo de mi hijo durmiera ahí, mandare a prepararte una habitación para ti...

-No es necesario rey, de verdad estaré bien en la posada...

-Yo insisto...

-Muchas gracias, se lo agradezco mucho, le prometo respetar y alagar a su hijo hasta que sea la boda...

-Eso espero, ahora ve con mi sirviente, para que descanses...

-Buenas noches rey-haciendo una reverencia, uno de los soldados entro por la puerta principal del trono muy angustiado...

-Su majestad, encontraron el caballo del príncipe Taehyung, a las afueras del reino...

-Pero si estaba encerrado en las caballerizas, hay no...Hoseok corre a la alcoba del príncipe, tiene que estar durmiendo-el príncipe Hoseok muy angustiado, trataba de abrir la puerta de madera, pero era inútil, estaba cerrada, la patio con varios intentos y por fin la tumbo, la comoda y elegante cama del príncipe estaba vacia.

Corrió hasta el rey, dándole la peor de las noticias...

-No esta, ¡se ha ido!-grito desesperado el príncipe...

-Hay que encontrarlo, puede haberle pasado algo malo...

-Yo lo encontrare por usted rey, déjeme demostrarle qué se lo traere de nuevo y nunca más se desprendera de su lado...

-Muy bien, ya el caballo esta listo con mis guardias, para que lo busquen...

-Así será rey-tomando su espada, cabalgo con los guardias, teniendo la esperanza de encontrar a su príncipe.

Mientras tanto a lo lejos del mar infinito, se encontraba a bordo el capitán del barco Azul con destino al norte, donde habían muchos regalos por entregar, aquel capitán era viejo y con pocas fuerzas de seguir a flote, tenía muchos marinos a su disposición, pero entre todos ellos, había uno muy especial, llamado Kim SeokJin, era un marino licantropo de sangre Alfa pura, huérfano de padres, pero le gustaba mucho leer y escribir, soñaba con algún día ser un gran capital, pero aun le falta mucho camino por recorrer y todo lo qué aprendía, era gracias a su maestro Han...

-Capitán Han, no se le ofrece nada más me iré a dormir, la noche es un poco fría-pregunto el licantropo, aun con la esperanza de tener un rato libre para el...

-Por supuesto, por el día de hoy fue todo, haz hecho muy bien tu trabajo SeokJin y no dudes en que avanzarás muy pronto...

-Eso es lo que anhelo capitán Han...

-Pero estas consciente que para ser capitán, tienes que afrontar un duro entrenamiento...

-Lo se y me estoy preparando para ello, cuando cumpla la mayor edad, me iré a mi duro entrenamiento...

-Muy bien, ahora ve a descansar Kim SeokJin...

-Gracias capitán, ¡con permiso!-se retiro a las afueras del vagon y llego del otro lado del barco, fumando un cigarrillo, para calmar un poco el frio...

Jin..

Que opaca se ve la luna hoy, no hay estrellas y el cielo más oscuro qué otras noches.

Esta vez no aprecio a nuestra diosa la luna, como si estuviera triste por algo, será porque pronto se acerca una tormenta o quisas debemos esperar su voluntad.

Tomo su hoja blanca y una pluma con tinta clara y empezó a dibujar el cielo sin brillo y el mar con mucha oscuridad, cuando miraba hacia abajo, vio aun lobo transformado de color blanco, estaba inconsciente y con las patas sin fuerzas sobre un tronco lleno de algas y su cuerpo sangraba, qué no podían desprenderse, asi qué grito y pidió ayuda, bajo y se aventó al mar, tomando aquel lobo entre sus brazos, tratando de que respirara, temiendo qué no pudiera estar vivo, tomo su osico de aquel lobo blanco, besandolo para darle un poco de aire, la transformación desapareció convirtiéndose en todo un príncipe, sus brazos apretó con fuerza y vieron sus ojos aquel licantropo hermoso qué tenia en su poder, su aroma desprendió, oliendolo tan agradable qué aquel marino, no dejaba de ver lo hermoso que era...

-Que fue lo que te trajo hasta mi...bello licantropo, de donde has salido, eres el ser más hermoso que nunca antes había visto-expulso el agua que tenia por su boca, abriendo sus ojitos, estando descontrolado, no sabiendo ni siquiera donde se encontraba.

Esa silueta era la que veía por primera vez, era perfecta, se sentía seguro y vio aquel licantropo qué lo tenia entre sus brazos fuertes, con trabajos duros de un marino...

-¿Quien eres tu?-pregunto el príncipe algo confuso, siendo interrumpido por toda la tripulación al ver aquel Omega recién despertando...

-¿Que fue lo que paso marino? quien es este licantropo...

-Capitán, lo encontré en el mar inconsciente...

-Vamos, lleven lo abajo, veremos si se encuentra bien...

-Yo lo llevo capitán, es mi deber porque yo lo halle-asistiendo el capitán, mando llamar a su curandero, mientras el Alfa lo recostaba en su humilde cama...

-Capitán, no se ha dado cuenta...es el hijo de nuestro rey-mirándolo ambos, se habían dado cuenta que era el hijo de su majestad...

-Por favor, no me lleven con el...se los suplico-estaba muy alterado y no sabía como responderle al príncipe...

-Como es que estaba usted a la deriva del mar, su majestad, pudo haber muerto...

-Por favor, no me lleven ahora, si quieren pueden llevarme cuando me sienta mejor, ¿donde estoy?-exclamó el príncipe Omega, estando en un lugar muy pequeño y oscuro...

-Esta en el barco Azul de su padre, vamos rumbo al norte, para la entrega de obsequios qué nos envio el rey, para sus distinguidos invitados..

-Llevenme con ustedes-añadió insistente el Omega...

-Pero príncipe, su padre el rey a de estar muy preocupado por usted...

-Obedezcan a mis deseos o yo sere quien los heche a todos de sus empleos-sus ojos se notaron carmín y su expresión era de un lobo salvaje al estar dispuesto a todo si lo desobedecian, así que Jin el Alfa, no pretendió qué fuera tan imponente y con un rugido intimidante, le regreso al príncipe...

Tae...

Me miro con una profunda mirada y sus ojos estaban de color azul agua, su rostro me miro cobijandome para que no exigiera más, ordenes a los empleados de mi padre.

Que me erice por primera vez, sintiéndome inofenso ante un lobo tan lindo, pero a la vez intimidante y salvaje...

-Capitán, deje qué yo calme al príncipe...

-Muy bien, dejenlos solos-asistiendo con la cabeza, el marino Alfa le expreso...

-No porque seas el príncipe, tienes el derecho de humillar al capitán de la envarcacion...

-No es para tanto, al fin y al cabo... son empleados de mi padre...

-Si tienes razón en eso, pero enfrente de mi, no lo trataras de ese modo, además tu me debes la vida, yo te salve de que te comiera un tiburón u otro reptil marino...

-No me vieras salvado, no me vieras visto...me vieras dejado morir...

-Yo no podría hacer eso y menos verte asi inconsciente, he inofenso-se acerco el Alfa, mostrando humildad al ver el perfecto rostro de su príncipe...

-Porque me miraste hace unos segundos como un lobo al acecho y después me miras como un tierno cachorro-se alejo el Alfa y sin respuesta para el príncipe...

-No me cambies el tema príncipe, solo se que si quieres estar aquí, te quedaras, pero no permitiré qué seas un lobo berrinchudo y caprichoso...

-Lo soy...siempre lo he sido, porque nadie me ha negado nada hasta ahora, por eso maldigo qué me hayas salvado-un quejido profundo empezó a escucharse, notando qué tenia muchas heridas en su ropa, estaba rota y la sangre no dejaba de correrse...

-Estas herido, ahora entiendo porque estabas transformado en lobo, vi tus heridas, pero no creí que fueran tan profundas, me llenas de preocupacion...

-Me duele mucho auchhh...me duele, seguro porque me forceje...

-Tranquilo, yo se de primeros auxilios...

-Trae mejor al curandero, no confío en un simple marino...

-Esta bien, iré por el...

-No espera, serias tan amable de convencer al capitán de que navegue con ustedes todo el viaje...

-Esta bien, solo que será la última vez que seas arrogante con cualquiera de los miembros del barco...

-Esta bien, tratare de no serlo-vi como subía arriba y el dolor era constante, cuando note mis heridas, eran muy profundas y estaba perdido en ese momento.

La angustia me atormentaba y no quería sufrir más, al estar inconsciente había corrido peligro y empezaba a temblar de frio, notando qué mi temperatura había subido mucho, así que me tape con aquella cobija delgada y mi cuerpo tendí hasta que llego el curandero y actuó enseguida, me desvistio y seco mi cuerpo desnudo, sentía vergüenza con aquel chico que no dejaba de mirarme, pero sentía más dolor qué otra cosa.

SeokJin...

Aquel licantropo tan fino y elegante sufria de dolor, mientras yo solo lo miraba de modo que era tanto que no podía creer cuanta belleza existia en el palacio real, era un príncipe único y mis ojos se impecnaron totalmente con su belleza, aun no lo conocía, pero sabía que era necio y déspota, por ser quien era ser, el hijo del rey, no se de que raza era, porque no lograba oler su esencia, tal vez porque siente vergüenza o timidez, pero mi vista lo estaba disfrutando mucho...

-SeokJin, ayúdame a sujetarlo, esta moviéndose mucho, porque se queja mucho-mis nervios empezaron a invadirme al tocar su bella espalda pálida y fina que solo invadía esas heridas que curaba con hierbas, mis manos se notaron delicadamente y suavemente, al no tratar de lastimarlo, aun pensaba en como lo había tenído en mis brazos, reprochandome con tanta exigencia de saber que no lo viera salvado.

Para mi fue un alago y placer haberlo tenido tan cercas, conocerlo fue una sensación qué nunca antes había sentido, fue un momento de amar con el alma, pero pude entender, que no todo era belleza ni perfección, qué como todo licantropo, tenia sus defectos.

Trataba de sujetarlo y apreté mis dedos para que no se moviera más, el curandero lo vendo por su espalda y torax, cuando lo volteo, su carita estaba llena de sudor y aun se quejaba de dolor, le dio de beber un te, para calmar la molestia y me pidió el capitán, una importante misión...

-Marino, te quedaras a cuidarlo y limpiaras el resto de su cuerpo, hasta que deje de quejarse, ¡entendido!

-Si capitán, ¡entendido!

-Cuando este más tranquilo, subirás por algo de comer, es el dueño del barco y nuestro huésped especial desde la realeza y debemos tratarlo muy bien...

-No se preocupe capitán, yo lo cuidare, respecto a quedarse al viaje, lo dejara quedar...

-Se quedara, porque no esta en condiciones de levantarse ahora, pero en cuanto terminemos la ruta, regresará a su reinado-lo mire con tristeza, porque en el fondo, no quería que llegara ese momento.

Woooauuu...Tae conoció a ese Alfa🐺 tan lindo y sincero, será que el marino, tuvo un sentimiento único por el príncipe.😍

Que emoción, lo sabremos en los siguientes capítulos😍.

Gracias por leer🙏📖mis lindas taejiniess y dejar tan lindos comentarios que me motivan a seguir escribiendo esta historia🌟.

Cuídense mucho y hasta pronto.😊💕💖💞🌹💕💖💞🌹🌹💕💖💞🌹💕💖