JUNHUI

Wonwoo es el único que se gradúa cuando yo lo hago.

Seokmin y Soonyoung vitorean y aplauden cuando nos dan nuestros diplomas y siento mis orejas calentarse ante la atención. Mi amigo,  que está a mi lado, no se encuentra mejor que yo.

Seungkwan le lleva una especie de flores que no conozco a Wonwoo, pero son de color lila y son muy bonitas. Cuando se encuentran se las entrega y lo besa. Desvío la mirada de inmediato.

Minghao no se atreve a decir palabra alguna hasta que le toco el hombro. "Cuando termines vendré también a tu graduación", le prometo aunque no esté seguro de poder cumplir aquel voto.

"Tendría que haberte dado algo", dice apenado. "Lo lamento".

Le digo que está bien.

Acaricio su mejilla aunque estemos en público y por un momento parece no inmutarse. Cuando se da cuenta traga duro.

"¿Te puedo besar?", pregunto como la primera vez, en un susurro que se pierde entre mis labios. Porque no estamos él y yo sólos, y es imposible que no nos vean aquí.

Minghao niega tan suavemente que me pregunto qué pasaría si finjo no haberlo visto. Aún así siento un golpecito sobre el pecho.

Aparto la mano y le sonrío.

"¿Qué haremos para celebrar?", cuestiona un entusiasmado Soonyoung abriéndose paso entre nosotros.

"¡Vayamos al karaoke!", sugiere Seungkwan alzando la mano que mantiene entrelazada con Wonwoo.

"¡Seungkwan, eres un genio!", Seokmin le besa la frente y él se ríe cuando Wonwoo los mira de mala forma.

"¿Qué opinas?", volteo a ver a Minghao esperando por su respuesta.

"Suena bien", dice.