Tabby estaba más que aburrida esperando en el auto, ya había pasado más de media hora hasta que Lincoln entró al vehículo. La rockera iba a quejarse hasta que vio un poco de sangre en su rostro y la ropa algo sucia — ¿Qué te paso? — pregunto algo intranquila.

— No pasó nada, me iba despidiendo de mi amigo cuando dos sujetos intentaron robarnos — saco su pañuelo y limpió los pequeños rastros de sangre.

— Como no me llamaste — dijo ella apretando los nudillos — les hubiera ayudado —

— Me hubiera encantado pero esquivar golpes y mandarte un mensaje no estaba en mis posibilidades — dijo entre una pequeña risa.

El auto arrancó y una agradable charla sobre el concierto inició, Tabby le comentó de sus trabajos antes que él llegara y su interesante momento con la banda, evitando los comentarios sobre ganarse un beso. Lincoln le contó la pelea, obviando ciertas cosas, Mientras los labios del albino relataban lo sucedido Tabby se perdía en ellos.

Lincoln no tardo mucho en llegar a la casa de la rockera — Bueno la estrella a llegado a su camerino — eso hizo sacar de su trance a Tabby.

— Que rápido — trató de parecer menos desorientada — gracias por traerme — empezó a pensar que hacer para no terminar ya con la cita, sintió el cd en su campera — Oh claro, se me olvido darte esto — le entrego el cd.

— Gracias — agarró el cd — sabes yo tengo una sorpresa para ti —

— ¿En serio? — Tabby se emocionó por esa sorpresa — ¿que es? —

— Si te digo no es una sorpresa, ve a la puerta de tu casa y cierra los ojos — le pidió Lincoln y ella salió del auto con mucha emoción.

Mientras esperaba en la puerta se percato que podría ser que le de un beso, por culpa de la banda era lo único en su cabeza, su buen oído le permitía saber que el albino se acercaba y no podía ocultar su nerviosismo. Cada paso ponía a Tabby más y más nerviosa, cuando lo sintió al frente por impulso preparo sus labios pero fue detenida por algo que se apoyaba en si abdomen.

— Aquí tienes — dijo Lincoln.

Tabby abrió los ojos y ante ella una nueva guitarra — ¿que es esto? — dijo ella algo atontada.

— Me extraña que no reconozcas una guitarra siendo una rockera — dijo Lincoln.

— Sabes que no me refiero a eso tonto — dijo ella dándole un golpe suave en el hombro y tomando la guitarra — esta guitarra es costosa y yo sólo te di un cd que fue gratis —

— Los regalos no se miden por el costo sino por la intención al darlos, se que esta guitarra la has querido desde hace mucho y hace poco te escuche decir que aún la querías — dijo Lincoln.

— No se que decir — dijo Tabby con las emociones alborotadas — gracias —

— No fue nada, ya nos juntaremos para tocar — dijo Lincoln — mejor me voy que ya es muy tarde, nos vemos en clases Tabby — se despidió Lincoln sin antes darle un beso en la mejilla dejando con la mente en blanco.

Tabby estaba en las nubes, su mano se movía de lado a lado por simple inercia y con guitarra en mano entro a su casa. Sus padres querían saber como le fue en el concierto pero sus preguntas no llegaban a ella, así que solo les quedo ver a su hija subir a su cuarto con una guitarra desconocida y su mirada perdida.

Lincoln no tardo nada en llegar a su casa, todo el lugar estaba en silencio y para no molestar a nadie ingresó sin hacer ruido. Llegando a su cuarto pudo ver como Lucy se dirigía al baño y no se le ocurrió mejor idea que saludarla — Hola Lucy — dijo él después de colocarse detrás de ella.

El grito de Lucy alertó a toda la casa y en unos segundos todos estaban rodeando a Lincoln y la aterrada gótica — ¿qué pasó aquí? — dijo Rita al ver la escena.

— Por lo que se puede apreciar tal parece que la unidad fraternal conocida como Lincoln a sorprendido a la unidad fraternal conocida como Lucy — dijo Lisa explicando.

— Nunca creí que vería eso — dijo Lana.

— Por esto interrumpieron mi noche de sueño — dijo algo molesta Lola y regresó a su cuarto.

— Me alegró que llegaras hijo pero para la próxima no mates de un susto a nadie — dijo Lynn Sr.

— De verdad lo lamento Lucy — dijo Lincoln  ayudando a poner de pie a l gótica — no fue mi intención, fui demasiado sigiloso —

— Eso es genial — dijo fascinada Lily que nunca creyó que alguien pudiera asustar a su hermana Lucy.

Ya con todo arreglado y Lucy un poco más clamada cada quien fue a su habitación, Lincoln antes de entrar a la suya es detenido por Lily — Lincoln ¿te puedo pedir algo? —

— Ya es algo tarde para jugar — respondió Lincoln.

— No es eso — Lily dudo un segundo — la verdad me preguntaba si puedo dormir contigo —

— ¿A que se debe este repentina petición? — preguntó Lincoln.

— Es que las demás han compartido tanto contigo, la verdad me siento algo fuera de lugar — dijo en un tono algo triste, su forma de expresarse le mostraban a Lincoln que su pequeña hermanita era muy avispada para una niña de su edad.

— Oh pequeña — Lincoln la cargo como solía hacerlo — tu nunca estarás fuera de lugar eres una Loud, desde el primer momento que te tuve en mis brazos juré cuidarte y quererte con todo mi ser al igual que al resto en esta casa — le acarició la mejilla — se que un buen tiempo no pude cumplir con esa pero ahora tu hermano esta aquí para ti y nunca nadie se atreverá a lastimarte —

Lily estaba más que avergonzada ante la confesión de su hermano, ella en un principió quiso acercarse a él para descubrir sus misterios y ahora se sentía como una tonta — Soy una mala hermana, aunque Lincoln tenga esa mirada que da miedo él nunca nos haría nada malo — pensó la pequeña y no pudo evitar las lágrimas por su tonta forma de pensar.

Lincoln se conmovió por las lágrimas de su hermana, la llevo dentro de su cuarto y para ponerla de buen humor jugaron un poco a los videojuegos hasta que ella se quedo dormida.

Antes de acostarse a dormir revisó su celular, en este tenía unos mensajes, el primero era de Jeff que le contaba o más bien informaba de su paseo con lucy por pedido del mismo — la verdad dudaba que Lucy me diria de esto — se dijo a si mismo.

El segundo mensaje era de Clyde para saber si quería ir al viejo Arcade como en los viejos tiempos, Lincoln respondió que si pero que primero iba a confirmar con Luan sobre los planes de mañana.

Antes de que pudiera preguntar a su hermana el tercer mensaje era de ella, Luan le mando a decir que la reunión sería a la noche pero que no se preocupara que no lo retendria hasta tan tarde ya que al siguiente día tenía escuela. Ante esta nueva información Lincoln le mando un mensaje a su amigo para reunirse temprano y que pasaría por el en su auto.

Los otros mensajes eran de Haiku que preguntaba por la salida para elegir los disfraces, Lincoln decidió crear un grupo con todo sus amigos para hacer una salida entre todos para buscar sus disfraces a lo que todos accedieron sin problema. Liam pidió ingresar al grupo a su novia ya que si el salía a buscar disfraces sin ella no lo dejaría en paz.

El inspector Wiliam revisaba una nueva escena, a diferencia del caso de Terry las víctimas estaban vivas. Por las mandíbulas destrozadas y el daño en todo el cuerpo no esperaba poder tener una descripción del atacante muy pronto por parte de ellos, el instinto del inspector le decía que el mismo sujeto que destrozó al desagradable Terry.

— Oh diablos aquí no hay ningún cadáver ¿para que me trajiste? — dijo Victor molesto por la falta de uno.

— No te quejes es trabajo — dijo Wiliam mientras revisaba la escena — maldición no hay ni un solo rastro, este sujeto es muy listo habrá que ampliar la zona de búsqueda —

— No solo hay que buscar en los lugares, si buscamos las conexiones de las víctimas podremos atar cabos — dijo Víctor — también revisemos en el cuerpo de los heridos para encontrar huellas o rastros de piel muerta del atacante —

Wiliam sonrío y le dio una palmada en la espalda — por eso te traje, eres más útil como detective que forense —

— Nunca me darían un arma y estar en el frente desarmado en un tiroteo no gracias, además prefiero mínimo poder cortar cadáveres eso me deja hacer lo que me gusta de manera legal — dijo Víctor.

La noche pasó en un suspiró Lincoln se levantó antes que su alarma sonará, a su lado estaba Lily que dormía felizmente abrazada a su brazo. Con mucho cuidado se zafó del tierno abrazo de la niña y fue a darse un baño, ya revitalizado bajo para preparar algo de comer y como era domingo no despertaría a los demás.

En la cocina se encontraba su padre ya con un buen desayuno para su hijo — esta vez te gane yo hijo — dijo en tono victorioso.

Juntos pasaron una agradable mañana, para Lynn Sr era maravilloso y por muchos años sintió que esa enorme carga que llevó se aflojaba un poco.

— Sabes hijo es todo un sueño poder compartir este momento contigo, le agradezco a la vida y a tus esfuerzos que te trajeron de vuelta —

— Para mi también papá, estos momentos son una gran recompensa por todo — dijo Lincoln — espero que las chicas no se molesten que hoy saldré todo el día —

— Todos merecen tiempo para uno mismo, no temas tu padre tranquilizará a las chicas — dijo Lynn Sr, para Lincoln era otro hombre ya no era ese miedoso padre que recordaba y ahora es la verdadera cabeza de la familia Loud.

— Es grandioso verte tan seguro — dijo Lincoln.

— Eso es gracias a tus palabras, cuando te perdimos — dijo Lynn Sr — sentí desde el fondo de mi ser que no estaba dando todo de mi, pero juré volverme el padre que todos ustedes necesitaron siempre —

— Siempre diste mucho cariño y buenos valores, el destino nos dio un gran padre — dijo Lincoln — es genial que ahora tengas el fuego Loud que tanto nos caracteriza —

La charla fue terminado hasta que fue momento de salir para Lincoln, claro sin antes repasar algunas recetas para el gran día y contarle a su padre sus planes de domingo. Lincoln tomó las llaves del auto — ya me he acostumbrado a tener un medio de trasporte mejor, tendré que hablar con Lana— dijo para si mismo antes de entrar al auto.

Esos segundos pensando le dieron tiempo a Lily para abalanzarse contra su hermano — te atrape — dijo ella colgándose del cuello de Lincoln — ¿como es que vas al Arcade y no me llevas? —

— Primero buenos días, segundo es una salida con mi mejor amigo y tercero estabas dormida hasta hace unos minutos — la bajo de su cuello — aun estas en pijama —

— Pero quiero ir — dijo molesta Lily.

— Nosotras también — Lincoln se dio media vuelta y encontró a sus hermanas pequeñas una al lado de la otra.

En la ventana veía a su padre y al leer sus labios entendió "misión fallida, perdón campeón" lo que solo lo hizo resignarse y decirles — vayan a vestirse rápido que en cinco minutos me voy —

Lincoln llego a la casa de Clyde — hola Lincoln, te tardaste un poco — dijo el moreno entrando al auto.

— Hola Clyde — dijeron todas en el asiento trasero.

—¡Kya! — le salió un pequeño grito de niña a Clyde por el repentino saludo.

— ¿Ahora entiendes mi demora? — dijo Lincoln.

— Si — dijo Clyde con una mano en el corazón.

La nostalgia golpeo a Lincoln al ingresar al Arcade, las maquinas eran todas nuevas pero él podía sentir ese ambiente lleno de recuerdos. A Lincoln se le ocurrió algo, para evitar ser atosigado por sus hermanas les entrego a cada una algo de dinero y las dejo libre en el lugar. Una hora pasó volando entre risas y una competencia sana que Clyde perdió con creces.

Mientras esperaban para probar un nuevo juego de soccer que contaba en jugar a unos penales contra los mejores jugadores del mundo de manera virtual. A Lincoln le llaml la atención el jugador, la palabra alto le quedaba corta, parecía más bien jugador de baloncesto o de Fútbol por su musculatura definida pero el puntaje en el tablero marcaba su buen manejo del balón. Al lado del muchacho estaba una chica que parecía ser la novia ya que lo alentaba con mucho cariño, ella aparte de tener su encanto no se quedaba atrás en altura siendo tan alta como Lincoln.

El chico era de pelo oscuro y aparte de su altura como músculos tenía rasgos normales, se encontraba en una racha casi perfecta pero sin querer Lily apareció de la nada y choco con el chico. El choque de la pequeña no fue tan fuerte para mover mucho al chico pero si lo suficiente para entorpecer su último tiro.

— Oh perdón señor — dijo Lily muy apenada.

Lincoln ya estaba para intervenir pero eso no fue necesario — no pasa nada pequeña, solo es un juego — dijo el chico ayudándola a ponerse de pie — es cuestión de empezar de nuevo —

— Pero amor ese era tu última ficha — dijo su novia.

— Toma — dijo Lincoln arrojando una ficha a las manos — gracias por ser amable con mi hermana —

— No es nada — dijo el chico — un gusto me llamo Agustín y ella es mi novia Celeste — su novia se limito a saludar detrás de su novio.

— El gusto es mío, mi nombre es Lincoln — dijo Lincoln dándole la mano — ella es mi hermanita Lily y mi amigo Clyde — ambos saludaron.

La mañana fue más divertido con la nueva adición al grupo, Agus o como le gusta que digan sus amigos Phatoman, era un chico agradable aunque era algo difícil evitar que te contara alguna anécdota que recaudó en sus diecisiete años. Por su lado Celeste era una sombra de su novio pero poco a poco fue soltandose demostrando su dulce personalidad, en pocas palabras era lo opuesto a Clara.

Phatoman junto a su novia se despidieron cuando llegó el momento del almuerzo, pero antes de irse intercambiaron número ya que no les costó nada hacerse amigos.

Antes de ir a almorzar pasaron por el juego batalla de baile — Hermanote en ese juego eras muy bueno — dijo Lana — debes jugarlo —

— Es verdad Lincoln — dijo Clyde.

— No lo se, hace muchos años que no lo juego — dijo Lincoln, aunque la verdad esos muchos años eran más de lo que pensaba cualquiera.

— Yo quiero verte jugar Lincoln — dijo Lily — en este juego nunca fui buena y quiero verte jugar a ti — termino de decir mientras ponía ojos de perrito.

— Quien se podría negar a esos ojos — dijo Lincoln — esperemos a que esos dos terminen —

Los dos jugadores que estaban eran muy buenos con una sincronización perfecta, uno de sus amigos al vernos esperar dijo — será mejor que se larguen mis amigos estarán toda la tarde aquí —

— No se puede acaparar para siempre una máquina — dijo Lily.

— Tom y Paula si que pueden — dijo una de las chicas del grupo — son los mejores en todo Royal Woods —

— Para que sepas anciana — dijo Lola en tono prepotente — mi hermano es el mejor y esos dos no le llegan ni a los talones —

— Exacto, la probabilidad de la victoria de la unidad fraternal mayor es del cien por ciento — dijo Lisa mientras se acomodaba los lentes.

— Así que es muy bueno — dijo Tom que jugaba ya terminando su partida con un puntaje perfecto — ven y muéstranos —

Lincoln dio un suspiro — no me queda de otra ¿verdad? —

Sin que pudiera hacer nada Lincoln quedo metido en una pequeña batalla de baile, Tom hizo el primer turno. La batalla fue reñida de principio a fin y terminó en un empate — nada mal — dijo Tom — pero ahora te toca con la reina —

Paula fue mucho más difícil que su novio, la canción que eligió era extremadamente complicada ya que tenía múltiples saltos sin mencionar que era doble. Por un margen de diez puntos ella obtuvo la victoria — eres mejor que Tom pero nunca mejor que esta reina — dijo Paula con mucha soberbia en su voz.

— Estoy segura que Lincoln te dejo ganar — dijo Lola.

— No digas estupideces niña tu y la cuatro ojos son muy estúpidas — dijo Tom.

— Como te atreves a llamarme así — dijo Lola lista para saltar le a la yugular.

— Tranquila princesa — dijo Lincoln mientras sostenía a Lola y bajaba los brazos de Lisa que dirigía un arma extraña a Tom, pero la verdad no le gustó nada como se le habló a sus hermanas — mejor dejemos de hablar y pasemos al reto final, ustedes dos contra mi cada quien le elegirá la canción al otro —

— De verdad crees que puedes contra los dos, no me hagas reír — dijo Paula.

— ¿Qué acaso tienen miedo? — dijo Lincoln con una sonrisa petulante que enfureció a la pareja.

Los dos eligieron la canción más complicada y con movimientos muy complicados, Lincoln antes de iniciar respiro profundo y soltó aire al igual que en anteriores momentos pero esta vez con otro objetivo. La música inició, el albino con movimientos fuera de lo normal fue marcando un gran ritmo que no dejaba de marcar sincronización perfecta, para los que lo rodeaban sus bocas mostraban puro asombro.

Lisa admiraba las capacidades de una de sus mayores creaciones y se detestaba por estar fascinada,Lincoln era su hermano querido aunque fuera un manojo de misterios pero para ella también un gran logro de la ciencia y todo eso se reflejaba en esos profundos ojos negros. Su molar gritaba pero era verdad que esa chispa de amor por el conocimiento la hacía temblar de la emoción.

Lincoln terminó con un salto en el aire y todos allí quedaron pasmados — bien eso fue un buen ejercicio — dijo el albino mientras se agitaba la camisa por el calor que sentía.

— Eso es prácticamente imposible — dijo Tom — esa canción está hecha para hacerse de a dos personas —

— Y tu la hiciste solo — termino de decir Paula —

— Bien les toca a ustedes — dijo Lincoln y seleccionó una canción de las más lentas — veamos si pueden con esta —

Ellos lo tomaron con un insulto se iban a quejar pero primero terminarían su ronda antes de decir algo, el resto de su grupo vio en un principió incrédulos pero sus rostros se pasmaron al ver como perdían puntos. Al final fue una derrota total — ¿como puede ser que perdieran? — dijo uno de los chicos.

— Mientras más bueno seas en las canciones rápidas cuando te toca una lenta tu sincronización se rompe — dijo Lincoln — bueno ya jugué como querian es momento de ir a comer —

— Ni creas — dijo Tom enojado — quiero la revancha — él se acerco y pecho a Lily que estaba en el medio tirando a la pequeña al suelo.

Lincoln lo agarro del cuello de su remera y lo levantó del suelo — escúchame bien idiota nadie lastima a mis hermanas — Tom intentó liberarse pero no lo logro, uno de sus amigos intentó golpear al albino pero este lo dejó en el piso de un solo golpe — ahora te voy a bajar y te disculparas con Lily sino tus piernas apuntaran para el lado equivocado — el rostro de Lincoln, en especial sus ojos que aún eran azules pero sin ningún brillo.

Paula vio como su novio era levantado por el cuello con una sola mano por ese extraño chico albino, por un lado le dio miedo pero por otro se sintió atraída a la fuerza de Lincoln.

Tom se disculpo y se fue del lugar como un cobarde, el resto de sus amigos lo siguieron pero Paula se quedó a ver como Lincoln se alejaba.

A lo lejos un joven observaba a Lincoln y grababa sus notas en una pequeña grabadora — el sujeto veintiocho cuenta con una fuerza sobre lo normal junto a una capacidad de combate aceptable, aún es temprano para marcarlo como el objetivo pero seguiré mi vigilancia.

Tras la comida Lincoln se encontró con su madre y le cedió a sus hermanas, las chicas intentaron objetar ya que querían seguir con su hermano pero él les dijo que tenía algo muy importante que hacer dejándolas sin alternativa. Ya de camino pasaron por la casa de Haiku y de Tabby, ambas iban a ayudar a Lincoln con una pequeña misión de reconocimiento.

— Bueno Lincoln ¿para que nos necesitas? — dijo Haiku.

— Si, por mensaje solo nos preguntaste si estábamos libre y que pasarías a buscarnos — dijo Tabby.

— Voy a necesitar su ayuda para una pequeña misión encubierto — dijo Lincoln.

— ¿A que te refieres con eso? — pregunto Clyde.

Mientras les explicaba la misión llegaron a su primer objetivo un negocio punk, allí las chicas se dedicaron a comprar algo de ropa junto a unas cuantas cajas de tintura de fantasía con su experiencia en ese estilo de moda. Ya con las compras hechas fueron a la casa Loud, con la ayuda de Haiku y Tabby le pasaron el tinte. Entre la ropa comprada se eligió un conjunto de una remera negra con un cráneo estampado, un chaleco de cuero, unos jean azules oscuros algo rasgados, borcegos negros y algunos accesorios.

Después de unos momentos Lincoln salió su nuevo look, que hizo latir un poco rápido el corazón de ambas, por su parte Clyde elogió lo diferente que se veía. Ya con todo listo se encaminaron a su destino final el gimnasio más conocido de la ciudad y los principales patrocinadores del torneo de lucha que se realizaría el gimnasio titán.

Al llegar al lugar se toparon con un edificio enorme, más que un gimnasio desde afuera parecía un estadio de fútbol, hablaron con la recepcionista que les facilitó unos pases de invitados para conocer las instalaciones, que Clyde pidió por internet antes de llegar, el lugar hacia honor a su nombre lo gigante y imponente que eran todas sus instalaciones dejaban a los chicos impresionados. Desde piscina, Spa, cancha de tenis, entre otras cosas el gimnasio tenía de todo, casi una hora y varios pisos recorridos llegaron al sector de lucha. En esa zona estaba todo dedicado a la práctica de múltiples estilos de combate, no solo se centraba en MMA o boxeo sino que cualquier arte marcial tenía su inclusión.

Al entrar por completo en la zona de lucha fueron recibidos por un instructor — hola sean bienvenidos a titán — este era un hombre como de unos cuarenta años, su aspecto era de persona dedicada al ejercicio con su cuerpo bien tonificado y ese bronceado natural que se obtiene por entrenar bajo el sol — soy Rolando ¿en que puedo ayudarlos? — dijo con una enorme sonrisa.

— Hola mi nombre es Jake y junto a mis amigos vinimos a ver el lugar — dijo Lincoln, le estrecho la mano al hombre.

— Veo que tu si estás en forma — dijo Rolando.

— Lo intento — dijo Jake — yo soy nuevo en la ciudad, vine para el torneo pero como he llegado demasiado antes pensaba inscribirme para prepararme mejor y que mejor que titán —

— Tienes buen gusto Jake — dijo Rolando.

— Hey Rolando — dijo un joven que se acercaba al grupo — has visto mis... — el joven notó al grupo — veo que estas acompañado —

— Si, él es Jake y sus amigos — dijo Rolando — Jake va a participar en el torneo y viene a inscribirse aquí para entrenar hasta que llegue el día —

— Ya veo, un gusto soy Marcus — se presento, aquel joven estaba cubierto de heridas como si no hace mucho lo hubieran apaleado.

— Ten cuidado Jake — dijo Rolando — mira que Marcus es uno de tus contrincantes a vencer y uno muy bueno —

— Es verdad — dijo Marcus — pero no más que nuestra estrella y tu mayor contrincante a vencer, y me refiero — dijo apuntando a una joven a lo lejos — a ella... —

— Lynn Loud — dijo Lincoln interumpiendo a lo lejos se podía ver a Lynn, ella estaba muy concentrada viéndose al espejo o más bien estaba perdida en sus pensamientos frente al espejo.

— Porque no vas a conocerla — dijo Rolando.

Lincoln fue hacia ella sin pensarlo dos veces — de verdad eres diabólico — dijo Marcus, se puso la mano al cuello — me parece que vamos a tener que llamar a una ambulancia para su amigo —

Lincoln llego justo detrás de Lynn, este le tocó el hombro para hablarle pero sin previó aviso ella se dio vuelta y lanzó un fuerte golpe al cuerpo del albino.

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Hola, hola, hola aquí Jake. Si que a pasado mucho desde que escribía esto, he estado algo ausente pero si que no estaba con la inspiración. Si lo sé, hice que Lincoln usara mi apodo no me juzguen jejeje.

Es momento de preparar el siguiente capítulo y los nuevos proyectos.

Este capítulo esta dedicado a mis diez primeros seguidores que comentaron primero en el capítulo anterior:

Rarity_belle
plal55
Raginhard
CamiloPastenFuenzali
Hades_the_Devil
Zerberus205
057horrorAnthony045
JulioCesarVillagomez
jhony-loud

Y otra mención a @Auntlupa y @JosethRicardoAlvarez que no logré etiquetar por una o otra razón.

Imágenes Random:

Con esto último me despido hasta el próximo capítulo.

PD: si les interesa saber de mis próximos proyectos los dejaré al final del nuevo capítulo de Este es mi pecado (obra spin off de este fic)

Nos vemos.

JAKE :3