Lincoln salió con una sonrisa en su rostro, su hermana seguro lo reconoció pero se negó a aceptar esto lo que significaba que la sorpresa seria mayor cuando cayera en cuenta de la realidad, de momento el albino decidió darle un tiempo con su abuelo que ahora estaba nuevamente con su antiguo brillo. Al salir del lugar a un costado de la puerta principal Tabby lo esperaba, la roquera se encontraba altamente nerviosa muy opuesto a su relajado ser pero es que sabia que al esperar allí tarde o temprano se rencontraría con lo que deseaba no fuera un delirio de la tarde.

Al verla apoyada en la pared golpeando su talón contra esta no pudo evitar recordar la primera vez que la vio, se acerco a ella sacándola de sus pensamientos con un suave — Hola Tabby —

— Lincoln — dijo alegre — así que de verdad eres tú — sin dudarlo la chica salto para abrazar a su viejo amigo.

— Es bueno verte de nuevo — correspondió es gesto.

— ¿Que tal si hablamos en otro lado? — sugirió ella ilusionada.

— Me encantaría Tabby — a ella le brillaron los ojos — pero espero que salga mi hermana — su mirada se apagaron un poco — podemos hablar un rato por aquí cerca ya que no le dije que la esperaría.

Esto ultimo le devolvió la energía, de inmediato diviso a un pequeño parque a media cuadra del estacionamiento del hospital. Ya sentados en una banqueta a charlar, tener que contar nuevamente su historia hizo replantear juntar a todos de sus conocidos y acabar con esto pero se divertía al no contar siempre la misma.

— Eso es increíble — dijo Tabby al escuchar el final del relato de Lincoln — aunque no me responde como volviste —

— Esa es otra historia para otro día — dirijo su mirada a la puerta del hospital como si fuera un toc que acaba de adquirir.

Tabby notó esto — me sentiría herida sino supiera que no lo haces a propósito — le llamo la atención.

— Disculpa Tabby, es por instinto algo me dice que pasara un incidente —

— ¿Incidente? — pregunto extrañada.

— No te preocupes es cosa mía — concluyo el tema con una sonrisa.

Por un rato hablaron de varias cosas entre ellas el cambio de estilo musical de Luna, para Tabby que le agradaba la vieja música su nuevo estilo melancólico no eran de su agrado. Para la alegría de la chica el simple hecho que él volviera solo significaba un cambio, y Lincoln era la pieza que devolvería la explosiona al rock de la Loud.

Lincoln no prometió que la música de su hermana regresaria al ser explosibo que era de la noche a la mañana, pero si que Luna Loud volvería a rockear. Tabby le dio su numero esperando que le escribiera  pronto, ella estaba feliz de tener una alegría en este duro día.

Lori miraba molesta su celular con un mensaje que decia "Voy a estar ocupada, hoy no voy a casa" - diablos otra vez tendré que pedir comida, ya estoy cansada de comer tanta chatarra -

Entre las sombras un tipo, que a ya de lejos podías ver que era peligrpso, salia de su escondite aun relamiendose los labios y apesar de su tamaño se movía sigiloso en dirección a Lori. De la nada la rubia sintió como le tocaban el hombro bruscamente, el grado de desagrado junto al miedo fue tan alto que ella de inmediato lanzo un golpe en dirección al dueño de esa mano.

Los ojos de Lori estaban aterrados al ver como su puño era sostenido por un hombre desconocido, el tipo media un metro noventa sino que más pasándola por treinta centímetros, de aspecto mostraba ser alguien con quien tener cuidado con su barba frondosa, vestimenta de cuero y jean, y esa desagradable mirada llena de lujuria.

— ¡¿Que hace?! ¡Suélteme! — grito ella.

El tipo le tapó la boca con su sudada mano — tranquila preciosura, no tienes porque tener miedo — se acerco a su rostro y aspiro su aroma — solo estoy aquí para que pasemos un delicioso momento juntos, siempre y cuando te comportes —

Ella quiso forcejear pero él ya la tenia dominada con el peso de su cuerpo arriba obligando la a caer al suelo, ya en este él empezó a desabrochar la ropa de la chica mientras recibía golpes y gritos de ella.

De un fuerte golpe de la cabeza del tipo empezó a perder la fuerza en sus extremidades — y dije que cooperaras, mira lo que me hiciste hacer — un poco de sangre salía de la frente de Lori — ahora te quedaras quieta y pasaremos un lindo momento, por cierto son Terry — este ato las manos con su cinturón y le metió un trapo en la boca callándola.

Terry ya con los pantalones bajos le rompió la camisa de un tirón cansado de luchar con los botones de esta, las lagrimas salían de la pobre Lori y gritaba inútilmente por ayuda mirando a su alrededor no solo en búsqueda de alguien sino también para no ver la cara del tipo. Saliva salia de la boca de Terry al quitarle la falda a Lori y ver su ropa interior de encaje que eran de sus favoritas y se divertiría arrancándola con sus dientes.

Ya resignada Lori dejo de agitar sus piernas y solo esperaba que cuando el tipo termine la deje viva. Terry  prosiguió a sacarle el corpiño de golpe y a masajear bruscamente el pecho de la chica — Tienes un buen par encanto, muero por saborearlas — fue acercando su boca a los pesones de ella pero fue detenido por un fuerte crujido producido por su nariz al recibir un golpe de lleno en esta.

— Entonces muere — Terry rodó por el suelo debido al golpe y en el suelo se sostuvo la nariz que desde lejos se podía ver que estaba rota, Lori abrio los ojos para ver como una camisa naranja se posaba en sus hombros junto a las manos del joven que ayudaba a su abuelo — No te preocupes lo volvere un pretzel humano por ti — ella no caía en cuenta de que estaba pasando por el estres que tenia pero esa ultima palabra le retumbo en la cabeza.

Pretzel humano cuantas veces ella dijo esa palabra como amenaza, ella fue una adolecente bastante dominante y como no serlo con nueve hermanas — y un hermano — lo ultimo lo dijo en voz alta — vio como el joven la miro mientras caminaba a Terry y le dedico una sonrisa, esto ultimo sobrepaso su entendimiento de la realidad sobrecargando su cabeza obligando a esta apagarse por unos momentos.

Ya incorporado Terry se acomodo la nariz — basura como te atreves a arruinar nuestro momento — se acomodo el pantalón y del bolsillo saco una navaja — te cortare en pedazos —

Un sonido similar a un tren a vapor expulsando este, el cuerpo de Terry empezó a temblar y una gran cantidad de sudor frío humedeció su rostro — Si crees que das miedo con esa pequeña navaja deja que te muestre lo que de verdad da miedo — cada paso que el albino daba hacia retroceder a Terry, el pánico domino al hombre y se abalanzo contra Lincoln. De cerca Terry pudo ver por un instante los ojos del albino y muy en el fondo supo que cometió un terrible error.

Lori regreso en si a su alrededor reconoció su habitación, su cabeza aun le daba vueltas, por un momento pensó que todo fue un sueño pero al tocarse la frente noto vendas y vio en sus muñecas marcas rojas, empezó a recapitular lo sucedido desde el desagradable Terry hasta su salvador sus manos temblaron a recordar cuando fue la primera vez que lo vio.

Lori se veía en su mente con seis años ansiosa esperando a casa la llegada de sus padres junto al nuevo miembro de la familia, aunque no era la primera vez que ella se volvía la hermana mayor pero si de tener un hermanito. La niña ya tenia cuatro hermanas y claro las quería mucho pero siempre quiso un hermanito varón como algunas de sus amigas, para cuidarlo, jugar a cosas de niños, enseñarle su deporte favorito y todas las cosas que no podía hacer con sus hermanas. 

El momento llego y por la puerta llegaron sus padres con el pequeño en brazos, sus demás hermanas dormían la siesta por lo que era la única en la fila para ver al bebe — Lori te presento a tu hermanito Lincoln — dijo su madre a la vez que mostraba al bebe con un mechon de color blanco en la cabeza.

Ella lo admiro por un momento y exclamo — tiene el pelo como el abuelo — sonrió y miro como él la miraba con unos preciosos ojos azules — tiene los ojos como yo pero más — pensó por un momento la palabra que no recordaba.

Lynn Sr le sonrió — opacos — termino su oración —

— Eso, ¿lo puedo cargar? — pregunto Lori.

Rita le dio su aprobación pero primero debía sentarse en el sillón — asegúrate de agarrarlo bien, no como tu padre que casi se le cae —

— Ya me disculpe estaba tan emocionado que perdí fuerzas en mi brazo — dijo avergonzado.

— Lo sé cariño solo te molesto un poco, pero es gracias a los buenos reflejos del doctor que no ocurrió una desgracia —

— Papí manos de mantequilla — rió Lori.

— Mejor voy a preparar algo de té — dijo cabizbajo Lynn Sr.

Ya en el sillón tomo al pequeño — hola Lincoln soy tu hermana mayor Lori — él la vio y le agarro la mano mientra reía — mira mamá le agrado —

— Claro que si preciosa, él aunque hace poco que nació tiene un vinculo enorme contigo y con todos en casa un lazo de familia tan fuerte que con el trascurso del tiempo solo se hará más y más grande — dijo Rita a la vez que se levantaba para sacar un foto de ese precioso momento — ahora sonríe —

Lori agarro una de las tantas fotos que estaba en su mesita de noche de sus preciados momentos junto a su hermano, desde el primer momento que vio a Lincoln lo amo con todo su corazón y aunque no siempre lo trato de la mejor manera nunca lo dejo de querer. Un aroma la devolvió a la realidad y corrió a la cocina reconocía muy bien ese olor similar a la comida de su padre pero con un toque distinto. A la cocina la rubia llego con lagrimas en los ojos miro algo borroso a un joven preparando la cena, se limpio los ojos y se coloco los anteojos ante ella su salvador la esperaba con una buena comida.

— Al fin despertaste Lori — se acerco a ella — ¿como están tu cabeza? — la miro preocupado.

— Lincoln — fue lo único que logro decir antes de abrazarlo con toda su fuerza y llorar euforicamente en su pecho — Lincoln, Lincoln — solo repetía su nombre a la vez que su cuerpo cedía por lo reconfortante que era ese abrazo, tan cálido y tan familiar aunque los papeles estén algo invertido.

Ya tranquila Lincoln le limpio las lagrimas — ya que me déjate en visto la primera vez te lo repetiré estoy en casa Lori —

Comieron un poco en silencio por un momento hasta que ella le pidió que le contara que paso, Lincoln le comento todo a la vez que se saltaba varias cosas y fue a la primera que le dijo — pero ese solo fue el primero de muchos universos que visite, puede que ahora tengo dieciséis pero la realidad es más compleja que eso porque para mi pasaron más de cinco años desde la ultima vez que estoy aquí — Lori no comprendía muy bien lo que decía pero sabia que hablaba muy en serio y lo mejor que debía hacer es ser su hermana mayor para brindarle todo su apoyo.

— Bueno ya es tarde y le prometí a cierta científica que hablaría con ella — Lincoln tomo su mochila — la próxima vez responde a mis mensajes.

— Ya me disculpe, literalmente era imposible que tu mensaje pudiera ser de ti —

— Pues vine a hacer lo imposible — la abrazo de nuevo — es agradable poder abrazarte de nuevo, ya nos veremos y necesito que me hagas un favor —

— ¿Cual? — pregunto insolita.

— No le digas nada de mi aparición a Lynn —

— ¿Por qué? — se sorprendió ella.

Saco de su mochila un papel — porque la veré aquí para bajar ese enorme ego que la esta consumiendo —

Ella tomo el papel y antes que pudiera decir algo Lincoln había salido por la puerta — ahora te crees Lucy o que — Lori entendía a que se refería con eso y esperaba de corazón que su regreso reconstruyera a la familia que Lynn Jr y ella separaron — espero que cuando llegue el momento pueda sincerarme mejor por lo que hice y recibir tu perdón —

Lori predio el televisor que siempre la ayudo a dormir y se preparo porque la semana recién empezaba, ya lista en cama vio aterrada como una noticia explotaba con el titulo "¿terrible asesinato o justicia a mano propia?"

El regreso a casa para Lincoln fue tranquilo ya era bastante tarde por lo que decidió ir en taxi, no temía ninguna represaria ya que les había mandado un mensaje para explicar donde estaba. El conductor inicio una pequeña charla para pasar el momento lo que hizo el viaje más fugaz y en poco tiempo llego a su hogar.

Al entrar fue recibido por Lily — Te espere toda la tarde para jugar — dijo haciendo un puchero.

— Lo lamento pero fui a ver al abuelo y a Lori — le mostró una foto de el con Albert y ella sonrió.

Le quito el teléfono a Lincoln sin pensar — Mamá, mira el abuelo esta sonriendo — se fue corriendo a la cocina dejando al albino sin celular.

Cerro la puerta — hola Lucy — dijo tranquilo.

— De vedad me puedes detectar siempre — dijo algo desilusionada por perder el elemento sorpresa ante su hermano.

— Que te puedo decir — se encogió de hombros — la costumbre de estar siempre alerta —

Saludo al resto en casa y se ofreció a peinar a Lola que luchaba por peinarse culpa de la humedad, ya antes de ir a dormir su madre le hablo — gracias cielo — lo abrazo.

— ¿Por qué me agradeces? —

— Por devolverle la sonrisa a mi padre — le devolvió su teléfono — tu regreso solo nos trae dicha y felicidad —

— Exageras mamá, solo hago lo que esta a mi alcance para ayudar — ella se despidió y el por lo bajo susurro — es lo menos que puedo hacer después de todas las veces que he fallado —

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Hola, hola, hola he aquí el nuevo capítulo espero que lo disfrutarán tanto como yo lo hice escribiendo lo. Estoy facinado ya que he pasado los 100 seguidores eso me motiva a siempre dar lo mejor. Gracias por sus comentarios y sus estrellas, espero que mi historia llegue a más gente porque tenemos para rato.

Me despido hasta el próximo capítulo bye

Una risa para terminar bien jeje
Jake :3