Cuando ya era de mañana y todos estaban despiertos, decidieron reencontrarse con los demás y volver a estar juntos. Aunque Jiwoo tenía una pequeña broma arreglada.

—Te quiero, lo sabes, pero no pienso hacer eso. —dijo Jimin ante la insistencia de la chica.

—Vamos, solo será una pequeña broma, una muy inofensiva.

—¿Pero qué pasa si ellos no lo ven así?

—No nos hemos visto en cinco años, se alegrarán de vernos.

Sin más qué decir, Jimin aceptó la loca idea que Jiwoo tenía. La broma consistía en recrear el momento en el que se conocieron; ella casi matándolo. Los demás estaban enterados de la broma, y al igual que Jimin, pensaban que no era buena idea pero Jiwoo logró convencerlos sin problemas.

Guardaron todo lo que necesitaban pues no pensaban volver a necesitar de esa cabaña una vez todos estuvieran juntos. Llegaron hasta el pueblo y lo atravesaron encontrándose con muchas casas abandonadas; Jimin les enseñó el camino y pronto todos estaban a tan solo unos metros de la casa correcta. Jiwoo les indicó a todos que esperaran en aquel punto mientras ella y Jimin comenzaban con la broma. Ella cubrió su rostro lo más que pudo y tomó un arma que no estaba cargada, inmovilizó a Jimin rodeándole el cuello y, apuntándole en la cabeza, se acercaron hacia la puerta y la tocaron.

—¿Crees que alguien pueda disparar? —preguntó la chica.

—Esperemos que no.

Cuando la puerta fue abriera quienes aparecieron fueron Taehyung y Seokjin; Jiwoo no pudo contener su sonrisa.

—¡Jimin! —Seokjin exclamó.

—Suéltalo ya. —dijo Taehyung apuntándole con un arma a la chica.

—¿Y qué si no lo hago? —respondió ella haciendo que su voz sonara más aguda para que no la fueran a reconocer.

—Suéltalo, idiota —Jungkook se acercó a ella y y le apuntó en la cabeza—. No creo que te guste el final si no lo haces.

—Tranquilo, Kookie, no podría hacerle eso a Jimin —habló la chica usando su voz normal—. Al menos no otra vez. Hola, ¿me extrañaste?

Jungkook dejó caer el arma y Jiwoo soltó a Jimin; este último sonrió al ver cómo Jungkook se ponía pálido como si hubiera visto un fantasma, incluso no pudo evitar reír. Seokjin y Taehyung se acercaron y tampoco podían creer que ella estaba ahí.

—¿Ji-Jiwoo? —musitó Seokjin con los ojos abiertos en grande.

La chica asintió y no pudo resistir a comenzar a llorar. Seokjin la abrazó al igual que Taehyung y Jungkook.

—¿Pero cómo? —dijeron al unísono los chicos más jóvenes.

—Nos salvamos al igual que ustedes, por lo visto —contestó ella con una sonrisa—. Pero me alegro de volverlos a ver… Quiero ver a Minjae.

—Eso quiere decir que... tus hermanos, Hyunah y Yoongi… Ellos...

—Están vivos —Jimin habló—. Jin, todos están bien.

•     •     •

Todos se encontraban en la sala de la casa, bueno, al menos casi todos pues faltaban Shinhye y Minjae quienes se habían ido a buscar comida horas antes, y a Jimin, pues al no regresar el día anterior estaban muy preocupados.

—Vaya susto nos diste, Jimin. —Jungkook lo abrazó mientras le revolvía el cabello.

—Te creímos comida de zombie. —Taehyung rió.

—Eso dicen ahora —Seokjin habló—, ayer Jungkook no paraba de llorar.

—Lo entendemos —dijo Hyunah viendo a Yoongi—, nosotros estábamos igual cuando los creímos muertos.

—Pero estamos todos juntos —Jimin se apartó de Jungkook quien no paraba de molestarlo—, de nuevo somos una familia.

La puerta principal se abrió dejando ver a Shinhye y Minjae, que al ver que Jimin ya se encontraba en casa, dejaron caer todo lo que traían y fueron a abrazarlo para después darle un golpe en la cabeza.

—¡¿Acaso estás loco?! ¡¿En dónde te habías metido?! —Shinhye exclamó molesta.

—No sabes el trauma que me causaste al dejarte ir solo y que no regresaras. —Minjae se cruzó de brazos.

—Lo siento en verdad… Pero no podía volver, no después de haberlos encontrado.

Shinhye y Minjae no entendían nada hasta que vieron el lugar por completo, cubriéndose sus bocas al ver a todos de nuevo. Minjae se acercó a sus hermanos, llorando, pues creía que los había perdido para siempre. Pero el encuentro solo duró unos minutos, pues incontable cantidad de zombies se habían acercado a la casa comenzando a golpear a los alrededores.

—Ay no... —Shinhye musitó.

—No se preocupen —dijo Seokjin—, no volveremos a separarnos.

—¿Cómo nos libraremos de ellos? Nuestro auto es más pequeño.

—El pueblo. —interfirió Namjoon.

—Es verdad, vimos una tienda de campers —dijo Hyojong—. Si logramos llegar hasta ahí podremos irnos de una buena vez.

—Ese es el plan —Seokjin concordó—. Shinhye, Yeri, Hyunah; tomen las provisiones. Taehyung, Jungkook, Hyojong; revisen el perímetro. Jiwoo, Minjae, Jimin, Yoongi; estén atentos, cuando todos estemos cubran a los demás y no se alejen. Namjoon, tú vienes conmigo, dirígenos hasta el pueblo.

Los más jóvenes hicieron caso a lo ordenado procurando de no hacer ningún ruido.

—Tenemos todo. —dijo Shinhye al bajar de las escaleras.

—El camino hacia el pueblo está despejado. —Hyojong avisó luego de haber subido al techo.

—Andando. —Namjoon cargó su arma e hizo que todos salieran de la casa.

Tres zombies se les acercaban; Hyojong mató a uno con su hacha, Namjoon utilizó el silenciador en el arma para matar a otro sin que llamaran la atención, y Jimin le disparó una flecha al último. Todos corrían lo más rápido que podían para salir de la urbanización y poder encontrar el pueblo.

—La tienda está en la primera calle. —dijo Namjoon.

—Tú nos guías. —contestó Seokjin viendo que todos estuvieran bien.

Namjoon se adelantó junto a Taehyung y Jungkook para asegurar el camino. 

Segundos después cuando los demás avanzaron pudieron divisar la entrada al pueblo, y a Taehyung y Jungkook en la entrada aniquilando a cuatro zombies.

—Por aquí. —Namjoon avisó yendo hacia el lado derecho de la calle.

Corrieron hasta llegar a aquel lugar y encontraron cuatro campers que parecían estar intactas.

—Hyojong y Jiwoo, revisen el primero —Namjoon señaló el de más cerca—. Minjae, Taehyung —señaló con su cabeza el siguiente—. Hyunah, Shinhye, Yoongi y Jimin, revisen los últimos. Seokjin, ven conmigo, hay que ir por las llaves. Jungkook y Yeri, cuiden la entrada.

Todos se apresuraron para poder irse de una buena vez.

Yoongi y Jimin fueron hasta el último camper, parecía no tener ningún imperfecto, sin embargo, cuando Jimin revisó la parte de atrás un zombie le saltó encima haciéndole soltar su arco.

—¡¡Yoongi!! —gritó, tratando de que el zombie no lo mordiera.

Yoongi rápidamente fue hacia él y con dos disparos en la cabeza del zombie logró salvarlo. Sintiendo aún su corazón latir con fuerza ayudó a Jimin a ponerse de pie, y este lo sorprendió abrazándolo.

—No quiero volver a perderte. —musitó el chico escondiendo su rostro en el cuello contrario.

—Calma, estoy aquí… Siempre estaré aquí —dijo Yoongi acariciándole la espalda—. No dejaría que te pasara algo.

Ambos habían pasado mucho tiempo separados, no soportarían perderse otra vez. Ahora sabían que para sobrevivir necesitaban del otro. Sabían que no serviría de nada vivir si el otro no estaba; eran su complemento.

Cuando revisaron y se aseguraron de que los campers estuvieran en buen estado, partieron. En el primero iban Seokjin, Namjoon, Minjae y Jiwoo, seguidos de Hyojong, Hyunah, Shinhye y Taehyung, y por último Jungkook, Yeri, Jimin y Yoongi. No sabían hora a dónde se dirigían pero estaban seguros de que lo harían juntos, como una familia de nuevo.