Lloré toda la noche hasta dormir. Miré el reloj y eran las cuatro de la mañana, no pretendía levantarme de la cama, el cuerpo lo sentía golpeado, como si ayer hubiera tenido una pelea de boxeo y hubiera perdido, los ojos me ardían y la cabeza me palpitaba deprisa, me cubrí con las sabanas, cerré los ojos con fuerza y volví a llorar una vez más. No estaba lista para salir al mundo exterior y enfrentarme al mismo problema de ayer.

Tres golpes en la puerta hicieron que levantara la cabeza.

-Adelante – mencioné

-Buenos días, ¿Cómo estás? – Papá cerró la puerta.

-Nada bien. – sonreí a medias - ¿A qué se debe esta visita? es de madrugada.

-No he podido dormir y antes de que tu madre se levantara decidí venir a verte, sé que esto se está tornando difícil.

-Me lo imaginaba cuando la abuela me prohibió tener una relación a escondidas con James, pero no pensé que fuese tan mal. ¿Qué debo hacer papá? – Me senté en la cama.

-Mi niña – se sentó a mi lado y me abrazó – sé que esto es mucho para ti y no sabes cómo daría lo que fuera para que ahora mismo todo se arreglará y pudieses vivir tu vida fuera del palacio.

-¿Por qué ella no lo acepta? ¿Por qué se opone tanto?

-Te diré un secreto. Cuando era joven como tú también me fui en contra del sistema, porque tu madre y yo no podíamos estar juntos, ella por ser de otro país y ser de una familia de un nivel socio económico mas bajo que el nuestro, la abuela en aquel entonces no era reina, estaba bajo el mando de tu bisabuelo y así como tú yo también tuve que luchar por mi amor, cuando mi abuelo comprendió que debía casarme o sino dejaría todo, lo aceptó, pero para tu madre no fue fácil le pusieron muchos obstáculos para según demostrarme que no era la indicada, pero tu madre siempre supo como sobrellevarlo, el compromiso estaba en puerta y había sido anunciado, pero por azares del destino mi abuelo murió y tuvimos que posponerlo, tu madre me había pedido tiempo y tu abuela, mi madre había dicho que era lo mejor porque estábamos pasando el duelo de perder a mi abuelo, acepté nos dimos el tiempo, fue el peor de todos, tanto tu madre como yo sufríamos cada día, recuerdo que al pasar seis meses decidí que era momento que regresar por tu madre y así fue, tu abuela no estaba de acuerdo diciendo que todo se podría mal interpretar porque el duelo en la realeza es de un año o máximo ocho meses.

>>pero me negué a que ella decidiera mi vida por segunda ocasión, esta vez los príncipes principales éramos mi hermano y yo y si yo dejaba todo esto, había una fuerte responsabilidad en tu tío a pesar de que él es el primogénito, ahora la casa real lo debía cuidar aun mas porque si yo renunciaba y el moría, hasta aquí terminaba la familia real de Italia. En aquel momento el servicio de la reina dijo que era mejor aceptar mi compromiso y darle un poco de felicidad al pueblo porque también ellos estaban sufriendo con al perdida del rey, mi padre casi no se metía en los problemas personales de la familia porque siempre decía que mientras las cosas se hicieran por el bien de la monarquía todos debíamos ser felices, nunca se opuso a mi matrimonio con tu madre y tampoco lo acepto al inicio, pero cuando tu madre comenzó a desarrollar un buen papel ambos se volvieron muy buenos amigos, pero mi madre no le parecía lo mejor, hasta que anunciamos que tu hermano venia en camino, la abuela comenzó a doblegar su orgullo y mantuvo buenas relaciones con tu madre porque al estar lejos de su familia tu madre se sentía devastada en el embarazo y a pesar de que mi madre no tenía mucho tiempo libre se las arreglaba y apoyaba a tu madre.

>>Cuando todo se arregló recuerdo que éramos una familia muy unida, poco tiempo después se caso tu tío y también fue una discusión porque el acuerdo matrimonial se estaba llevando a cabo fuera de los lineamientos de la monarquía pero para suerte de mi hermano se arregló, después nacieron tus dos primos y por último tú y ella siempre había soñado con tener una niña corriendo por estos pasillos y al llegar tu no lo sabes, pero el país, el palacio y hasta los turistas se alegraron por tener una princesa que apostaban seria la viva imagen de la reina. Es cierto, tienes su carácter, orgullosa y testaruda. Mi madre desde el día que naciste siempre fuiste su prioridad no había nadie que decidiera sobre tu, se prometió velar por tu seguridad, eras su vena del corazón, a pesar de que eras muy traviesa y te gustaba estar con tu hermano y primos ella siempre te perdonaba todo y en algún punto te volviste su hija que no pudo tener.

-Entonces, si me amaba tanto, ¿Por qué no aceptar mi feliz compromiso?

-Porque ya te perdió una vez y aunque le cueste aceptarlo le dolió, esa también fue otra discusión en donde yo renuncie absolutamente a todo, menos a los títulos, la casa real ya no nos mantenía, tu y tu hermano no entraban en ese acuerdo porque ella sabía que ustedes algún día tal vez quisieran regresar de donde son. Y mírate aquí estas, y tu hermano también paso por aquí, así que se puede decir que ahora que has regresado le da miedo que seas como yo y después del matrimonio te plantees alejarte, ella desea que todos estemos a su lado para siempre.

-Pero padre, no me iré y la dejaré sola, amo mis obligaciones, amo hacer esto, amo tener una voz dentro de la institución.

-Lo se Charlotte, y tu mamá también lo sabe, pero a tu abuela es difícil de entenderlo. Es un hecho que quiere tu felicidad al igual que todos, tal vez solo no esta lista para dejarte ir de nuevo.

-¿Y por qué no lo habla conmigo? ¿Por qué no podemos discutir sobre el futuro juntas? ¿Por qué no me dice que le da miedo?

-Porque siempre ha sido orgullosa y prefiere hacer las cosas a su manera Charlotte.

-¿Entonces crees que acepte mi compromiso y por el momento solo me tortura?

-No te puedo asegurar nada hija, porque ella es incierta en sus decisiones. Lo que si te puedo afirmar es que ella te quiere mucho y verte así le parte el alma, pero antes de cualquier cosa como reina su deber es hacer lo mejor para la monarquía solo te pido que seas paciente porque no sabemos cuando esto termine.

-¿Me estas diciendo que debo seguir aquí con la incertidumbre y ser infeliz por el momento?

-No cariño, claro que no, te estoy diciendo que te lo tomes con calma y tengas paciencia, si el resultado es el no deseado, entonces te aconsejo que hagas lo que el corazón te mande, pero por el momento no corras por las puertas del palacio e intentes escapar porque puede ser peor.

-Pero papá.

-Todos estamos abrumados Charlotte por todo lo que esta pasando, debemos descansar y mantenernos serenos ¿Sí? – Me beso la frente.

-Haré lo que pueda padre.

-Esa es mi chica. – Me abrazo y beso por última vez, escuche la puerta cerrarse y mis ojos hicieron lo mismo.

-Alteza... alteza... - unos brazos sacudieron lentamente los míos.

Abrí los ojos con pereza y de poco a poco me incorporé al nuevo día.

-¿Sí? – pronuncie con voz ronca sentándome en la cama.

-La están esperando todos en el desayuno.

-No deseo bajar, pueden traerlo a mi habitación.

-Alteza, no podemos, han sido ordenes, la familia esta abajo.

-¡He dicho que no! Y puede venir quien sea.

-Alteza...

-Ya me encargo yo. – Nicolás se asomó por la puerta.

Leticia se despidió e hizo reverencias a ambos.

-¿Así que han llegado todos temprano?

-Hemos llegado no hace mucho.

-No debieron venir, creo que las cosas quedaron claras ayer.

-Son ordenes y sabes que no podemos hacer nada en contra. ¿Quieres bajar?

-No, estoy bien aquí además si no mal recuerdo tenía prohibido salir de este lugar.

-No lo hagas más difícil de lo que ya es, hazlo por tus padres y por mí, que ya estoy harto de escuchar todo esto.

-¿A alguien le importa lo que piense?

-A todos, solo que las circunstancias son distintas. Y la abuela no esta preparada para afrontar un nuevo casamiento. Sé que la boda de tu hermano fue con consentimiento, pero tu eres la más pequeña de los cuatro.

-¡Pero es mi maldita felicidad!

-Entonces si deseas que todos entiendan eso, ve cámbiate y baja al desayuno, que dudo que sea un desayuno y defiende tus ideas, no te encierres aquí y dejes que el servicio de la reina junto con la reina tome una decisión.

-¿Y de que sirve presentarme si de todas formas no me escuchan?

-Hoy estamos mas serenos que ayer, puedo decirlo, creo que los ánimos han disminuido un poco.

Quince minutos después me encontraba cruzando la puerta de nuestra sala de reuniones, el desayuno había sido servido en mi ausencia y la única con el estomago vacío era yo. Vaya inicio de día.

Saludé a todos con una reverencia y me senté en el único sillón desocupado, al frente de la reina, su servicio, mis padres, mis tíos y primos.

-Eva, ¿Has reflexionado tu decisión?

-No majestad, mantengo mi postura firme y nada me hará retroceder.

-¿No te importa esta monarquía, el pueblo?

-Majestad usted conoce muy bien la importancia que la familia, el titulo y el pueblo tienen para mí, pero si renunciar a todo significa que así podré seguir mi camino feliz, que así sea.

El secretario de la abuela me mostró unas carpetas. Hice caso omiso.

-¿No lo abrirás?

-No me importa el contenido y viniendo de su servicio, puedo hacerme una idea de que se trata.

-Es sobre las noticias.

-¿Es un anuncio sin mi consentimiento de que el compromiso ha sido negado? ¿Es mi carta de renuncia?

-Si lo abres puedes conocer la respuesta.

Mis demás familiares tenían un semblante serio, hasta podría decir que ellos estaban sufriendo al igual que yo. El secretario les entregó a todos la misma carpeta y uno a uno fue abriéndola. Sus miradas de asombro me decían que yo también debía abrirlo.

Abrí la carpeta y no me creía lo que había adentro. En primera plana se encontraba una foto mía y de James mostrando el anillo de compromiso, ¿En qué momento? Y lo peor de todo era el título. <<LA PRINCESA ITALIANA ESTA COMPROMETIDA CON SU PROFESOR>> Me sentí mareada, no aquello, era una broma de mi abuela, de su servicio, para dar la cara y desmentir todo. Continué leyendo la nota y en cada párrafo me asombraba.

<<Según fuentes cercanas al palacio real, han declarado que la princesa se comprometió este fin de semana a las afueras de Francia y nada más y nada menos que ¡Con su profesor!>>

<<James Acker, prometido de la princesa trabajó en la universidad UBC en Canadá donde su alteza real llevaba a cabo sus últimos años estudiantiles, al parecer mantuvieron su romance en secreto.>>

<<¿Será que la princesa vio sus buenos sentimientos o le interesó algo más? La reputación de ahora prometido es diferente a los de los 'royals'. Se puede decir que es alarmante, ¿La casa real ha considerado esto? ¿Estarán enterados?>>

<<Los expertos reales han descifrado que el abrupto compromiso de la princesa se debe a que puede estar amenazada o solo ha sido un pequeño desliz fuera de control.>>

<<¿Qué ha pasado con las campanas en puerta sobre el príncipe Frederick y la princesa? ¿Acaso su relación fue rota por el profesor? ¿Cómo reaccionó la casa danesa? >>

Cerré la carpeta y no quise seguir leyendo ¿En verdad todo esto circulaba allá afuera? Mi corazón latió de prisa, no podía estar sucediendo esto, no en este preciso momento.

-¿Ha salido todo?

-Nos han notificado una hora después de que todos los periódicos hayan sido puestos a la venta, no podemos detener su producción y si el palacio no omite un comunicado lo antes posible esto seguirá. – El secretario respondió.

-Abuela, sabes que... esta no era mi intención, la fotografía no se de donde la han quitado. -Las lagrimas comenzaron a salir, me costaba respirar. – No puede estar pasando.

-¿Cómo pudo salirse esto de las manos? ¡Eva! Conocías el impacto que esto podría representar si no me lo decías antes.

-Abuela lo lamento, yo...

Mi madre se acercó a abrazarme y me balanceó sobre sus brazos. Mi familia se encontraba decepcionada y lo sabía. Las noticias eran falsas, no era como lo decían los tabloides. ¿Por qué todo parecía ser peor?

-Déjennos a solas. – Su voz fue autoritaria y grave.

Mis padres me abrazaron y cada uno me dio su apoyo de diferente manera, mis tíos y primos solo inclinaron la cabeza y me tocaron el hombro al pasar. El servicio de la reina se quedó y todo el ambiente quedó tenso.

-En las redes sociales, noticias y programas de farándula esta corriendo la noticia que hemos visto en los periódicos. Los comentarios no son mas que desagradables, solo se entiende que el compromiso es por beneficio propio del señor Acker, nuestra reputación esta en juego. – el encargado de comunicación habló.

-Tenemos en la línea al representante de la familia danesa, majestad. – Otro del servicio interrumpió.

-¿Han dicho que desean?

-Sus majestades desean hablar con usted.

-Pónganlos en la alta voz.

Mi cuerpo comenzó a temblar.

-Hemos leído las noticias. – Los reyes de Dinamarca hablaron.

-Lamento mucho que se enteraran así, estamos tomando cartas en el asunto. – La abuela me miró.

-Deseamos que se nos deslinde de cualquier noticia alrededor suyo, creemos que es lo mejor, no queremos vernos involucrados en una relación de mala reputación.

-Creo que necesitan una explicación.

-No hace falta, comprendimos por las noticias que todo esto fue a beneficio, pensaron que podrían comprometer a uno de los suyos con el nuestro solo por lazos diplomáticos y económicos.

-Majestad, eso no fue así... - intervine.

-No nos importa alteza. Nos ha quedado claro que clase de personas son con las que estamos tratando. Solo hemos llamado para deslindarnos de cualquier noticia, si volvemos a leer que estamos relacionados, nos veremos a emitir un comunicado y contar la otra cara de la moneda. No es una amenaza, solo aviso.

-No habrá daños colaterales. – la abuela respondió.

-Lo esperamos, por el momento nuestros lazos se encuentran en brecha, difícilmente podrán ser restaurados y los proyectos se han pausado. Es todo de nuestra parte.

-Majestades. – Fue la despedida.

-Esto no puede ser así, todo esta saliendo mal... - Me levanté y comencé a caminar por el salón. – Abuela por favor no me pidas que...

La puerta se abrió y un preocupado James entró corrí a sus brazos al verlo.

-Tranquila pequeña, estoy aquí para protegerte.

Me envolvió en sus brazos que sentí estar segura, el peso sobre mis hombros desapareció. Nos quedamos abrazos así por segundos, minutos, hasta que él de poco en poco se separó y me miró a la cara. Tomó mi rostro entre sus manos y con los pulgares limpió las lágrimas.

En medio de mi tristeza sonreí al mirarlo y me hundí en su cuello, me daba vergüenza verlo con la cara hinchada y además necesitaba todo su amor.

-¿Podemos continuar?

La abuela rompió nuestra burbuja.

-Majestad. – James agacho la cabeza en reverencia.

Ambos agarrados de la mano nos sentamos en el sillón frente a mi abuela, ambos escucharíamos la decisión final.

-Lo he citado señor Acker porque me parece que se ha involucrado en una relación con mi nieta su alteza real la princesa Eva y no ha pasado por mi aprobación. La situación fue de sorpresa para toda la familia real.

-Majestad, lo lamento, no hice las cosas como lo dicta el protocolo y me hago responsable de todos los daños, Charlotte... - Mi abuela lo fulminó. – Su alteza real no es la responsable, fui quien le pidió mantener todo en secreto y de alguna manera la seguí a espaldas propias todo el tiempo.

-Acepto sus disculpas, es lo menos que podía esperar de usted. Pero ahora mismo ese tema no importa. – Su voz era de enfado. - ¿Se han dado cuenta por lo que estamos pasando ahora mismo?

-Abuela... - Dije entre sollozos.

-¿Qué desea ahora majestad? – James me interrumpió y me abrazó.

-¿Disculpe?

-Si, cual es su decisión, no he venido solo para alargar esto. – tragó. – Estoy dispuesto a hacerme cargo con todas las acusaciones, cargar el peso de esto, pero no pretendo alejarme de Char... su alteza real. Soy consciente si usted pone una orden de alejamiento o me desaparece, pero tenga por seguro que regresaré me cueste lo que me cueste.

-Ha llegado muy entusiasma señor Acker. – Dijo con sarcasmo.

-He dicho la verdad y he querido ir al punto.

-Entonces si eso desean... - Se levantó. – Les diré que al punto por el cual nos han llevado las circunstancias. Se ha decidido dar un comunicado. – Mi corazón se detuvo. – donde se haga oficial el compromiso y se establezca una fecha para el anuncio de manera extraoficial.

Mi alma cayó a los pies y comencé a llorar de alegría. No lo creía, mi abuela por fin había aceptado mi destino y estaba de acuerdo en ello o por lo menos lo demostraba. Me levanté rápido y la abracé, no reacciono, pero respondió al abrazó después.

-Gracias, gracias, gracias. – Pronuncié una y otra vez. – Muchas gracias abuela no tengo como pagártelo.

Nos separamos y aunque su mirada era suave sabía que no estaba contenta del todo.

-Todo es por la corona. – Me tomó de las manos y regresé a mi lugar con James.

-Gracias majestad. – Pronunció al tenerme a su lado. E hizo una reverencia.

-Se harán los preparativos correspondientes.

Fue la ultima frase de la abuela y salió de la sala.

-Pensé que te perdería.

-De eso nunca cariño. – Me besó.

Un beso lento y tierno, después de estos momentos de tortura que parecían nunca acabarse, aquí estábamos, disfrutando lo que nos merecíamos.

Mi familia entro a la sala y solo asentí con la cabeza. Todos se acercaron para abrazarme y felicitarme por ser fuerte. Así mismo le dieron la bienvenida a James a la familia. Papá pidió el típico Champagne familiar y todos brindamos por mi próxima boda y el triunfo del amor.

-¿Qué pasará ahora? – James y yo no teníamos respuesta.

La única preocupación que nos había invadido los últimos días era la aprobación y ahora que lo teníamos no sabíamos que seguía.

-¿Qué pasará ahora? – James y yo no teníamos respuesta.

La única preocupación que nos había invadido los últimos días era la aprobación y ahora que lo teníamos no sabíamos que seguía.

-Debemos esperar indicaciones. – Mi padre tomó la palabra. – Por el momento James no debes ser visto y después de todos los tabloides de hoy es mejor que nadie sepa de ti por estos días. El protocolo dice que la pareja comprometida deberá vivir junta, pero a la vez separada. Me refiero a que deberán estar en el mismo techo, pero no podrán dormir juntos y mucho menos ser visto juntos. Por la situación que se ha propiciado con mi madre, pienso que esto cambiará y tal vez James serás trasladado a la residencia de mi hermano o a otra que tenemos a las afueras del país. Deben ser fuertes.

-Lo seremos señor, hemos llegado hasta aquí que nada nos podrá detener.

-Me agrada que lo tengas claro, ambos entraran en una fase de entrenamiento, sí, aunque parezca que la vida matrimonial es solo miel sobre hojuelas, aquí es un poco diferentes, ambos tendrán que someterse a pruebas de defensa, protocolo en su caso señor Acker por todo lo del formalismo y también se les darán cosas explicitas sobre lo que pueden o no hacer.

Me toqué las sienes.

-Pensaba que lo que venia era mas fácil.

-Puede parecerlo hija, solo que necesitan tener mucha paciencia porque es algo que cansa.

-¿Y entonces cuando viene la boda? ¡Necesito embriagarme y conocer señoritas del nuevo continente! – Nicolas interrumpió.

-Dependerá de la fecha que se fije en estos días o en este caso el tiempo que decida la reina.

-¿Ustedes estarán aquí cierto? – Pronuncié asustada.

-Todo el tiempo que sea necesario hija. Debemos estar para cuando el anuncio sea oficial y si se requiere nos podremos instalar hasta que la boda se lleve a cabo.

-Muchas gracias. Los amo tanto. – Les aventé besos con las manos. Y apreté con mayor fuerza la de James.

-Bueno, creo que nosotros nos despedimos Eva. Los deberes nos esperan en la residencia.

Mis tíos junto con sus hijos se despidieron y me dieron todo el animo posible, mi tío amenazó a James por si se le ocurría dejarme sola en el proceso y después lo felicitó por tenerme a su lado. Carlos a pesar de no entrometerse en otros asuntos, me aseguró que tenía su apoyo y que necesitaba algo se lo pidiera, a James le dio una bienvenida más y le dijo que si algo necesitaba él podría ayudarlo, aunque deberían pasar tiempos juntos porque se conocían poco caso contrario que con Nicolás. La pequeña familia heredera se fue y mis padres los acompañaron. James y yo volvíamos a estar solos. 

-Te dije que todo se solucionaría.

-Estaba al borde del abismo. Sentí como si nunca pudiésemos estar felices.

-Te prometí que estaríamos juntos siempre.

-No lo dudé, pero la corona tiene mucho poder que la intriga me mataba por dentro. Me sentía muy abrumada.

-Tendrían que matarme para no estar cerca.

-Una noche anterior dije que estaba dispuesta a renunciar a todo si mi felicidad no era contigo.

Me abrazó y beso mi frente.

-Me sentiría culpable si te hubieses separado de tus padres y de tu mundo. Pero sería cada día mejor para demostrarte que todo ha valido la pena.

-Estar contigo vale la pena. 

-Alteza, señor Acker.

Ambos nos separamos. Leticia entro acompañada de cinco hombres.

-¿Si? – respondí.

-Asignaré el equipo personal que será quien acompañe al señor Acker en este proceso.

-¿Ahora? Pensé que esperaríamos un poco.

-Son ordenes y no podemos atrasarnos.

-El señor Alonzo es quien se encargará de todos sus asuntos y mantendrá su agenda al día. - Alonzo se presentó y James le estrechó la mano. – Mateo es su nuevo guardia de seguridad, por el momento no será necesario ya que permanecerá dentro del palacio, pero cuando la visita sea al exterior él lo acompañará. – Ambos estrecharon manos. – Leonardo se encargará de su nuevo guardarropa, al igual que Pedro, quien le proporcionará el corte de cabello y peinado adecuado para lo que se avecina. – James les hizo el mismo saludo. – Y no menos importante Sergio. – Sonreí al verlo y el me devolvió la sonrisa con una reverencia. – Es quien lo ayudara a comprender el papel que tiene dentro de la monarquía y cuales son los protocolos que ahora serán parte de su nueva vida. – Ambos estrecharon manos.

-Un gusto conocerlos a todos. – James hizo su primera presentación.

-Bien, ahora que ya todos han sido presentados, señores pueden retirarse. – Los hombres dieron media vuelta y desaparecieron, menos Sergio. – Alteza, señor. Debemos establecer fechas para poder dar marcha a lo que será su entrevista oficial como pareja.

-¿Tan rápido?

-Mientras nos apresuremos a lo que está por venir, mejor princesa. – Sergio respondió.

-Alteza, señor Acker. Lamento interrumpir, pero la reina los espera en su despacho. – Un mensajero entro en la sala.

-Enseguida.

Ambos nos levantamos y nos despedimos de Leticia y Sergio, podía sentir una nueva presión acumularse en mis hombros. 

Llegamos al despacho de la reina y el ambiente se sentía tenso.

-Debemos fijar la fecha del anuncio oficial. A ser mejor esperemos sea lanzado mañana a primera hora.

-¿Podemos decidir que debe llevar?

-Estamos aquí para llegar a un acuerdo. Será lanzado en mi nombre, y en el de tus padres. Aún se necesitan algunos detalles. ¿Dónde fue la propuesta de matrimonio?

-A principios de la semana pasada, en la finca de mis padres en Burdeos, Francia. – James respondió.

-¿Cuándo se enteraron tus padres Eva?

-Al día siguiente viajamos a Canadá para contárselos. Y de igual manera se lo conté a mi hermano antes de llegar a Italia.

Le apreté la mano a James para darme fuerza.

-¿Desean agregar algo? – Nos tomó de sorpresa.

-No tengo una idea de cómo se deben hacer estos anuncios, pero me gustaría agregar que estamos felizmente enamorados y que daremos detalle del gran acontecimiento en fechas próximas.

-La regla de las bodas abarca que se deben llevar con cinco meses de preparación. Estamos en septiembre, así que la fecha podría ser en febrero, o si lo desean podemos alargarlo un poco más.

-No lo hemos pensado.

-Pueden considerar las estaciones del año, solo que debemos estar seguros en que fechas lo prefieren.

-¿Podemos decidirlo más tarde?

-Esta bien, si no se deciden, de todas formas, el palacio definirá una estación del año.

 -Buscaremos una fecha lo más pronto posible.

-Espero así sea, ¿Están de acuerdo que el anuncio sea publicado mañana?

-¿No es muy pronto?

-Así podemos evitar que los medios indaguen o hagan falsas suposiciones de sus antecedentes. Esto ayudará a neutral los tabloides. Si lo retrasamos puede ser algo contradictorio y sospechoso.

-¿Se dará una explicación?

-No será necesario, el comunicado será la explicación a todo.

-Entonces que sea mañana. – Inhalé y exhalé.

-Bien, eso es todo. Pueden retirarse.

Hicimos las reverencias y guie a James a mi lugar favorito, el jardín.

-Aunque todo parece abrumador, siento que podremos salir de esto.

-Lo lamento por traerte a este mundo. Tal vez en el tiempo de los preparativos reconsideres tu decisión.

-¿Qué dices? Cariño, deja de ser tan insegura, te lo he dicho antes, no te dejaré. Creo que es lo primero en lo que trabajaremos cuando nos casemos.

-¿Así que ya estás dándome ordenes?

-En sí creo que ellos nos están dando órdenes. – Hizo referencia al personal y reí.  

-¿Tu familia sabe donde estas?

-No, pero tal vez después del comunicado de mañana se hagan muchas preguntas, en especial por lo de la empresa.

-No te diré que el proceso será fácil porque como van las cosas creo que será imposible comunicarnos con el exterior.

-Tranquila ya encontraré una manera de hablar con mi familia. Por el momento enfoquémoslo, en la gran boda que nos espera.

-No pensé que algunas cosas ya deberían venir definas con la propuesta de mano, ¿Tienes alguna idea sobre la fecha?

-Soy muy malo con acertar fechas o creer que son las correctas. Pero como lo ha dicho tu abuela antes, ¿Alguna estación del año te parece bien?

-Pues tenemos cuatro estaciones, hagamos una pequeña lluvia de ideas de lo que nos puede gustar de cada una. Primero empecemos por las mas lejanas, verano y otoño. ¿No crees que esperaremos mucho para casarnos en esas estaciones y la abuela nos podrán mas cosas por hacer? O puede que no nos deje estar juntos.

-Lo pensé. Así que creo que las únicas que nos quedan disponibles son invierno y primavera. Ya que invierno termina en febrero y la primavera inicia en marzo.

-No me imaginé una boda en invierno, lo digo por la nieve y además creo que no podríamos hacer mucho.

-Si lo piensas desde otra perspectiva el invierno puede ser nuestro pase de salida para que la boda sea pequeña y sin tanta atención.

-Es un buen punto. Aunque la primavera puede ser una buena opción.

-¿Te estas inclinando más por la primavera verdad? – James me sonrió con complicidad.

-Lo aceptó, es algo que he tenido en mente, me gusta ver al país pintado de varios colores por su flora.

-Entonces no le demos mas vueltas, será en primavera, ¿Por qué no lo hacemos en marzo 25?

-¿Qué tiene de especial marzo 25?

-<<Facilis Descensus Averni.>> - Que fácil es descender al infierno.

-Espera eso lo he escuchado antes... o creo que leído. – Hice memoria. - ¡Dante! ¡Es el día de Dante! – Sonreí al recordar.

-Así es y por su icónica frase creo que no podríamos elegir mejor día. Que fácil fue enamorarme de ti y casi perderte por todo esto. Fuiste la misma fruta prohibida por la cual a Adán y Eva desterraron del paraíso, aunque esta vez puedo decir que estuve desterrado mucho tiempo y ese castigo lo pagué muy caro, fuiste mi fruta prohibida que hoy se ha convertido en mi bendición.

Nos envolvimos en un beso apasionado.

-<<Apparuit iam beatitudo vestra>> - Ahora aparece tu bendición. Recité.

Al día siguiente James y yo despertamos en habitaciones completamente distintas, el día anterior lo habían trasladado a la residencia de mis tíos, se quedaba cerca de Nicolas, por lo menos alguien a quien conocía, nos mantuvimos en contacto toda la noche, el insomnio se había apoderado de ambos y era de una manera algo bueno, él me contaba sobre lo raro que era todo aquello, ¿Por qué se empeñaban todos a tratarlo como si no pudiese hacer nada? Me reí ante su pregunta, si tan solo supiera que hasta te pueden la comida en la boca y tu no hacer esfuerzo alguno. Por primera vez sentí que tenia a alguien que me apoyaba.

Él decía que había corrido a todos de su habitación cuando comenzaron a invadir su privacidad y a llenarle la tina del baño. En pocos minutos de su llegada a la residencia de mis tíos y al entrar en su habitación tenia unas diez personas, según su conteo, haciendo cosas innecesarias. Me reí ante su loca idea de querer escapar de ahí y llegar a mi lado, el juraba tener los poderes de Superman y poder volar. Le aconsejé que primero mirará detrás de su puerta y me dijera que tan eficaz era su plan ahora que la corona sabia quien era. Maldijo a los guardias detrás de su puerta y se juro idear un plan para escaparse otro día.

Mis padres se habían quedado en el palacio y según mi madre mi papa estaba haciendo llamadas para establecerse en Italia hasta la boda. Los amaba por mucho, a pesar de que no fui la hija correcta que debió avisarles de todo lo que hacía debido a su papel de princesa, ellos estaban aquí para apoyarme. Bien dice, el amor incondicional de los padres lo es todo.

El día había comenzado y la reina pidió que todos estuviéramos en el desayuno. Y así fue, mis padres, la reina y yo tratamos de hacer que todo funcionara, los desayunos nunca eran silenciosos pero esta vez parecía que nuestras voces estaban ausentes. Mi papa intentaba cualquier tema, menos la boda y sobre lo que pasaba hoy en día, pero era en vano. La abuela apenas y le prestaba atención.

Al terminar de desayunar todos nos fuimos a la sala de recreación o bueno donde solo había un televisor. La abuela nos hizo sentarnos en lugares distintos, minutos después la puerta se volvió a abrir y apareció un James serio, en mi interior juraba que estaba molesto, pues cuatro hombres más lo seguían a sus espaldas y esa podría ser la razón.

-Hola cariño. – me besó.

Lo miré estupefacta.

-Primero ella. – Incliné la cabeza en dirección de la abuela.

-Majestad, lo lamento. Buenos días. – Inclinó la cabeza. – Altezas buenos días. – Saludo a mis padres con la misma reverencia.

-Siéntanse. – La abuela habló.

El televisor iba en marcha, se comenzaron a anunciar las noticias del país y alguna internacional, no le encontraba sentido a aquella junta, ¿Acaso era una prueba de muchas?

De repente todo pareció ir en cámara lenta. Las noticias estaban hablando de nuestro compromiso y del comunicado que se lanzó a primera hora de la mañana.

<<Su alteza real la princesa Eva y el señor James Acker están comprometidos>>

Sus altezas reales el príncipe Louis y la princesa Ella, están entusiasmados de compartir las nupcias de su hija la princesa Eva con el señor Acker.

La pareja se ha comprometido a inicios de la semana pasada en Burdeos, Francia. La familia fue avisada horas posteriores del 'Si quiero'. La reina y los demás miembros de la familia están contentos por el anuncio.

La boda esta programada para la primavera, los detalles se darán a conocer más adelante.

La pareja agradece todas las muestras de cariño y compartirán la felicidad en los próximos días.

No me creía lo que la presentadora acababa de leer. Oficialmente el compromiso estaba en boca de todos.